🔥Nota: todos los personajes ficticios son mayores de edad.
Capitulo 5
"¡Creo que estoy embarazada!". Saltó contra mí y me echó los brazos al cuello para darme un largo beso.
¡¿Embarazada?! ¡Mierda! Mi cabeza daba vueltas y mis rodillas temblaban. Me senté con fuerza en un banco cercano y mamá bajó conmigo.
"¡Sabía que estarías emocionado!" se rió, malinterpretando terriblemente mi reacción.
"¿T-tú no estás en control de la natalidad?" pregunté lastimosamente.
Ella rió. "Obviamente no, tonto. Mark se hizo una vasectomía después de que me embaracé de ti. Nunca he usado un método anticonceptivo en mi vida".
"¿Por qué no me avisaste?"
Mamá se encogió de hombros. "Estaba tan entusiasmado la primera vez que no pensé en eso, y después de eso simplemente no parecía importante, ¿sabes? Además, sabía que estarías tan feliz como yo". Ella me besó de nuevo.
"¿Está seguro?" Pregunté, esperando que no lo fuera.
"No, pero me sentí de la misma manera cuando Mark me dejó embarazada". Una mirada lejana y soñadora pasó por su rostro. "Sabes que me casé con tu padre cuando tenía 16 años porque estaba embarazada. Él tenía 20 años y aceptó la responsabilidad como un hombre, y nos cuidó a mí y a ti. Estás listo para hacer lo mismo, ¿no, Gary? Quiero decir, seguiremos casados, ¿verdad?".
"Pero en realidad no estamos casados", argumenté.
Ella sonrió dulcemente. "Para mí lo estamos. Hemos estado casados toda la semana y esta ha sido la mejor semana de mi vida. Por primera vez en mi vida estoy enamorada. Me abriste los ojos, cariño. Te amo tanto". " De nuevo me besó.
Oh Dios, oh Dios, oh Dios. ¡Mi mamá se había vuelto loca! ¡Ella quería que yo fuera su esposo y el padre de nuestro hijo incestuoso! ¡Mierda, mierda, mierda! Intentando frenéticamente que viera la realidad, le pregunté: "¿Qué hay de papá?".
"Le encontraré otra mujer", dijo alegremente. "No será difícil. A mi amiga Tina le gusta mucho, y creo que su secretaria ya está enamorada de él".
"Mamá", le susurré desesperadamente al oído, "¡no podemos tener un bebé!"
Ella se rió. "Demasiado tarde. Estoy bastante seguro de que tenemos uno en camino".
"Pero está mal", gemí.
"Lo sé", se rió de nuevo y empujó su coño contra mi pierna. "¡Es tan pervertido y caliente! Llévame de vuelta al hotel. Quiero celebrar".
Dejé que me ayudara a ponerme de pie y me llevara de vuelta al hotel. Estaba demasiado aturdido y confundido para resistir.
Cuando llegamos a nuestra habitación, Jessica y Brad se estaban vistiendo. "¿Por qué regresaste tan pronto?" preguntó Jess.
"Decidimos volver para celebrar", respondió mamá.
"¿Celebrar qué?"
"Podría estar embarazada".
Jess chilló y abrazó a mamá. Saltaron arriba y abajo juntas con entusiasmo.
"¡No sabía que estabas tratando de tener un bebé!" dijo Jessica. "No es de extrañar que follen como conejos". Ella y mamá se rieron.
Brad me estrechó la mano. "Buen trabajo, amigo", me felicitó con una sonrisa. "Debes estar feliz."
Aterrorizado era más bien. Pero mamá me necesitaba. No podía esperar que papá fuera padre de un bebé que no era suyo. Tuve que asumir la responsabilidad como lo hizo él 18 años antes. "Estoy extasiado", mentí.
Mamá escuchó eso y saltó sobre mí. Me besó una y otra vez mientras nuestros amigos se reían.
Me rendí y me fui a la tierra de los locos con mamá. Plantar un bebé en su vientre fue definitivamente una emoción perversa. Una emoción rizada súper caliente. Me quité los jeans y me puse encima de ella. "Asegurémonos de que estés embarazada", gruñí con lujuria.
Mamá se rió y asintió. "Hazlo, Gary. Sé mi semental".
Follar para procrear parecía totalmente diferente a follar por diversión. La intención me electrizó. Tuve una visión de la barriga de mamá creciendo y sus tetas hinchadas con leche. Si preñaba a mi hermosa mamá, significaba que yo era su macho alfa. Yo. La sensación de poder era embriagadora.
Pasamos el resto de la tarde en la cama, haciendo todo lo posible para asegurarnos de que mamá quedara embarazada de mi bebé.
Cuando Jessica y Brad regresaron de la cena a las 7:00 p. m., ella arrugó la nariz y se rió: "Aquí huele a puro sexo".
Mamá y yo estábamos descansando, tirados desnudos en nuestra cama. Nuestros cuerpos estaban resbaladizos por el sudor y el coño de mamá goteaba semen. Su mano acarició lentamente mi cansada polla, tratando de persuadirla para que permaneciera de nuevo. No tratamos de encubrirnos. Nuestros amigos ya habían visto todo esta semana. "Perdón por el mal olor," me disculpé.
No hay problema", respondió Jess. "Me gusta el olor. Me pone cachondo. Oye, todavía iremos al club esta noche, ¿no?"
Quería quedarme en la cama, pero sabiamente miré a mamá antes de responder. "Prometiste llevarme de vuelta a ese gran club de baile lento, Gary", me recordó.
Suspiré. "Si, lo hice."
"Y tenemos nuevos vestidos para usar", le recordó Jessica emocionada a mamá. Eso lo resolvió. Íbamos al club de baile.
Mamá estaba deslumbrante con su minivestido dorado. Llamó aún más la atención que cuando llevaba su vestidito negro la primera vez que fuimos allí. "¿Vas a dejar que otros hombres bailen conmigo esta noche?" ella se burló de mí.
"Diablos, no", respondí. "Eres mía."
Ella se rió. "Sí, lo soy."
No me arriesgué. Cuando no estábamos bailando le tomaba la mano. Cuando fue al baño, esperé afuera de la puerta. Cuando fui al baño, hice que Brad la vigilara. Llámame paranoico, no me importa. Sabía lo buena que era mamá y no dejaría que nadie se le acercara.
"Cariño, me encanta la forma en que me proteges", me dijo mamá mientras bailábamos. "Esta noche eres el hombre que siempre supe que podías ser". Bailamos hasta la medianoche y regresamos al hotel.
SÁBADO
A mamá le encantaba ir a museos y galerías de arte en cualquier ciudad que visitara. Así que hicimos eso el sábado mientras Jessica y Brad iban de gira por los Everglades.
Mamá tomó mi mano mientras me guiaba de galería en galería en el moderno distrito de las artes. Charló sobre el arte y me convenció para que hablara sobre lo que me gustaba y lo que no me gustaba. "Esto es muy divertido", gorjeó. "Me siento como una chica de secundaria en una cita con un chico del que está muy enamorada".
No se limitó a mirar el arte y seguir adelante. Discutió las piezas que le gustaban con el personal de la galería. Ella era estudiante de historia del arte y me impresionó la aparente profundidad de su conocimiento. Los empleados de la galería también parecían impresionados, pero eso puede deberse en parte a su belleza. Llevaba un vestidito rojo de su estilo favorito: ceñido y corto.
Había una empleada lesbiana en una galería que mantuvo a mamá hablando durante media hora. Era una chica hispana sensual con el pelo corto y negro y un culo redondo espectacular. Les di mucho espacio y mamá coqueteó escandalosamente. La niña se lo devolvió y miró a mamá de arriba abajo con hambre. Fue emocionante de ver y me puse caliente. Eventualmente me compadecí de la pobre lesbiana enamorada y le dije a mamá: "Tenemos que irnos, Amy". La chica me dio una mirada fea y garabateó su número en el reverso de una tarjeta de presentación para mamá antes de que nos fuéramos.
Afuera de la galería, mamá se aferró a mi brazo y se rió, "Te gustó eso".
"Sí, lo hice," admití. "Pero dijiste que no coquetearías más".
"Dije que no coquetearía con más hombres", corrigió y se rió de nuevo.
"Parecías estar en ello. ¿Alguna vez has pensado en chicas?"
"No, pero siempre hay una primera vez", respondió ella con una sonrisa.
Me reí. "Maldita".
Ella se rió conmigo. "Solo coqueteé con ella porque pensé que te excitarías. Eres un chico pervertido, Gary Moore".
Rodé los ojos. "La olla llama negra a la tetera".
Mamá juguetonamente me empujó en las costillas. "Gracias por ser tan paciente, cariño. Sé que recorrer galerías no es tu idea de un día divertido".
Me encogí de hombros. "Me gusta estar solo contigo".
Ella sonrió y me besó. "Con razón te amo tanto. Eres un encanto".
Esa noche, mamá me acomodó boca arriba y se subió encima. "Quiero hacer el amor, no follar", dijo suavemente. Nos besamos y nos exploramos con nuestras manos. Quería tocar cada centímetro de su piel. Cuando finalmente alineó mi polla palpitante con su coño mojado, me susurró al oído: "Sé que es muy tarde para preguntar, pero ¿quieres usar un condón, Gary? Puede que aún no esté embarazada".
No dudé. "Sin condón."
"¿Está seguro?"
"Sí. Cierto". Sostuve sus caderas para empalarla lentamente en mi polla desnuda. Quería plantar un bebé en el vientre de mamá. Esa era la forma de conquistarla. Primero papá, y ahora yo.
Ella sonrió pero las lágrimas se formaron en sus ojos.
"¿Por qué estás llorando?" Yo pregunté. Odio las lágrimas.
"Lágrimas de alegría, tonto", me dijo. "Realmente me amas y quieres a nuestro bebé".
Besé sus lágrimas. "Por supuesto que sí."
Mamá prácticamente resplandecía de alegría mientras muy lenta y amorosamente cabalgaba arriba y abajo de mi polla. Hizo pausas frecuentes para besar. Esta tierna forma de hacer el amor fue un mundo aparte de nuestras frenéticas folladas de los últimos días. Me gustó.
La observé en la oscuridad casi total de esa habitación de hotel, y me di cuenta de que esta hermosa criatura iba a ser mi esposa y la madre de mi bebé. El orgullo que sentí fue estimulante.
DOMINGO
Salíamos de Fort Lauderdale muy temprano para emprender el largo viaje de regreso a Memphis. Salí de la cama y llevé a mamá a la ducha conmigo.
No teníamos tiempo para el sexo, pero los besos y las caricias nos abrieron los ojos.
Mientras Brad y Jess se duchaban, mamá y yo nos pusimos jeans y camisetas. Suspiré, "No quiero ir a casa, Amy. Estoy feliz aquí".
"Yo también, Gary, pero tenemos cosas de las que ocuparnos en Tennessee. Tienes que terminar la escuela y yo tengo que divorciarme de Mark".
Gruñí. "Pobre papá. Apesta que lo estemos jodiendo en todo esto".
Mamá negó con la cabeza. "Mark no es inocente. No olvides que me dejó embarazada cuando yo tenía 16 años y él 20. ¡16! Es bueno que se haya casado conmigo, pero no fue exactamente una dificultad ya que vine con el dinero de mi herencia y la mitad los muchachos de Memphis estaban calientes conmigo. Consiguió un buen trato, pero ahora es el momento de que siga adelante".
Sonreí. Ella tenía razón. Consiguió un buen trato. "18 años contigo es un gran trato, diría yo".
Mamá sonrió, "Y voy a encontrarle a Mark una nueva mujer. Ya he pensado en tres para hacerle una cita. Mi amiga Tina, su secretaria Sarah y Becky Boardman".
"¿Becky? Tiene como 25 años", le dije. Becky era la hija de uno de los amigos mayores de mamá.
"Lo sé, pero es una cazafortunas y una puta", explicó mamá. "Ella se lo follará. Te lo garantizo".
Me reí. "La vida amorosa de papá se trata de volverse loca y la mía se ha detenido bruscamente. Algo no está bien en eso".
Mamá me rodeó el cuello con los brazos y me preguntó: "¿Quieres salir con otras mujeres, Gary?".
"No, no. Eso fue una broma", le aseguré. "Sólo hay una mujer para mí".
"Buena respuesta", dijo y me besó. "Somos tú y yo para siempre, cariño".
"Soy el hombre más afortunado del mundo".
SIETE MESES DESPUÉS
Mamá y yo conseguimos un departamento muy lindo en Knoxville, a casi 400 millas de distancia de las personas que nos conocían en Memphis, y todos los que conocíamos en nuestra nueva ciudad natal pensaban que estábamos casados. El apartamento estaba cerca de la Universidad de Tennessee, donde estudiaba. Mamá no trabajaba ni iba a la escuela. Su herencia era más que suficiente para vivir, y quería ser ama de casa y cuidar de nuestra hija.
Mamá yacía desnuda boca arriba en nuestra cama. Froté suavemente manteca de cacao en su gran barriga redonda. "Gracias, cariño. Eso se siente tan bien", ronroneó.
"Un placer", respondí. "Me encanta cuidar de ti, Amy".
Su rostro brilló. "Sé que lo haces. Eres el mejor esposo y también serás el mejor padre".
"Eso espero."
Cubrió mis manos con las suyas y me miró a los ojos. "Trata de no preocuparte tanto, cariño. El doctor Gale dice que el bebé es fuerte, saludable y normal. Será un bebé hermoso, sé que lo será, y tú serás un gran papá".
Suspiré. "Espero que no sea tan hermosa como tú. No quiero que todos los chicos la persigan". Deslicé una mano hacia abajo para jugar con su coño.
Mamá se rió. "No te preocupes, le enseñaré a defenderse de los chicos. No quiero que la dejen embarazada a los 16 como yo".
"Creo que la mantendré encerrada hasta que tenga 20 años", respondí.
Ella se rió de nuevo. "Tu papá llamó hoy", me dijo.
Me dio celos que mamá y papá hablaran por teléfono dos o tres veces por semana. ¡Se divorciaron por el amor de Dios! Pero siguieron siendo amigos y no pude objetar exactamente. Quiero decir, le robé la esposa al tipo y ellos son mis padres. Debería estar feliz de que sigan siendo amigos. "¿Han vuelto de la luna de miel?" pregunté cortésmente.
Ella asintió. "Regresaron ayer. Mark dice que Hawái es increíble. También hablé con Tina. Todavía se siente un poco incómoda conmigo porque se casó con Mark poco tiempo después de nuestro divorcio, pero se está abriendo mas conmigo".
"Eso es bueno", le dije. La nueva esposa de papá, Tina, era una de las mejores amigas de mamá. Mamá los empujó juntos mientras se estaba divorciando de papá. Tina era un par de años mayor que papá y no tan buena como mamá, pero era muy agradable. Y estaba loca por papá. Me alegré de que fueran felices, me hizo sentir menos culpable.
Papá no sabía sobre mí y mamá, por supuesto. Pensó que yo era un hijo obediente que ayudaba a su madre a superar un embarazo no deseado. No se enteró del embarazo hasta que el divorcio estaba en marcha. Es comprensible que lo enojara porque demostró que mamá lo engañó, pero no supuso que yo era el padre. Mamá lo suavizó conectando astutamente a papá con algunas mujeres, incluida Tina. Papá se distrajo tanto con el nuevo coño que se olvidó de enfadarse con mamá.
Mis celos por mamá y papá me vencieron, así que le di la vuelta a mamá y la ayudé a ponerse de manos y rodillas.
Me puse detrás de ella y la llené de mi polla. "¡Uff!" ella gruñó. Pero luego se rió. "Cada vez que menciono a tu papá, me follas, Gary. Es lindo, pero no tienes que estar celoso. Te amo a ti y solo a ti".
Me sonrojé pero no dejé de follarla, y también apreté sus senos que habían crecido de copa D a DD debido al embarazo. "No sabía que era tan obvio".
Me miró por encima del hombro con una sonrisa maliciosa. "No soy la rubia tonta que crees que soy, cariño".
Negué con la cabeza y sonreí. Ella era tan linda "¿No lo eres?" bromeé. "¿Cómo te las arreglaste para quedarte embarazada de tu propio hijo entonces?"
Mamá se rió. "Planificación cuidadosa."
EL FIN 🔥🔥
Capitulo 5
"¡Creo que estoy embarazada!". Saltó contra mí y me echó los brazos al cuello para darme un largo beso.
¡¿Embarazada?! ¡Mierda! Mi cabeza daba vueltas y mis rodillas temblaban. Me senté con fuerza en un banco cercano y mamá bajó conmigo.
"¡Sabía que estarías emocionado!" se rió, malinterpretando terriblemente mi reacción.
"¿T-tú no estás en control de la natalidad?" pregunté lastimosamente.
Ella rió. "Obviamente no, tonto. Mark se hizo una vasectomía después de que me embaracé de ti. Nunca he usado un método anticonceptivo en mi vida".
"¿Por qué no me avisaste?"
Mamá se encogió de hombros. "Estaba tan entusiasmado la primera vez que no pensé en eso, y después de eso simplemente no parecía importante, ¿sabes? Además, sabía que estarías tan feliz como yo". Ella me besó de nuevo.
"¿Está seguro?" Pregunté, esperando que no lo fuera.
"No, pero me sentí de la misma manera cuando Mark me dejó embarazada". Una mirada lejana y soñadora pasó por su rostro. "Sabes que me casé con tu padre cuando tenía 16 años porque estaba embarazada. Él tenía 20 años y aceptó la responsabilidad como un hombre, y nos cuidó a mí y a ti. Estás listo para hacer lo mismo, ¿no, Gary? Quiero decir, seguiremos casados, ¿verdad?".
"Pero en realidad no estamos casados", argumenté.
Ella sonrió dulcemente. "Para mí lo estamos. Hemos estado casados toda la semana y esta ha sido la mejor semana de mi vida. Por primera vez en mi vida estoy enamorada. Me abriste los ojos, cariño. Te amo tanto". " De nuevo me besó.
Oh Dios, oh Dios, oh Dios. ¡Mi mamá se había vuelto loca! ¡Ella quería que yo fuera su esposo y el padre de nuestro hijo incestuoso! ¡Mierda, mierda, mierda! Intentando frenéticamente que viera la realidad, le pregunté: "¿Qué hay de papá?".
"Le encontraré otra mujer", dijo alegremente. "No será difícil. A mi amiga Tina le gusta mucho, y creo que su secretaria ya está enamorada de él".
"Mamá", le susurré desesperadamente al oído, "¡no podemos tener un bebé!"
Ella se rió. "Demasiado tarde. Estoy bastante seguro de que tenemos uno en camino".
"Pero está mal", gemí.
"Lo sé", se rió de nuevo y empujó su coño contra mi pierna. "¡Es tan pervertido y caliente! Llévame de vuelta al hotel. Quiero celebrar".
Dejé que me ayudara a ponerme de pie y me llevara de vuelta al hotel. Estaba demasiado aturdido y confundido para resistir.
Cuando llegamos a nuestra habitación, Jessica y Brad se estaban vistiendo. "¿Por qué regresaste tan pronto?" preguntó Jess.
"Decidimos volver para celebrar", respondió mamá.
"¿Celebrar qué?"
"Podría estar embarazada".
Jess chilló y abrazó a mamá. Saltaron arriba y abajo juntas con entusiasmo.
"¡No sabía que estabas tratando de tener un bebé!" dijo Jessica. "No es de extrañar que follen como conejos". Ella y mamá se rieron.
Brad me estrechó la mano. "Buen trabajo, amigo", me felicitó con una sonrisa. "Debes estar feliz."
Aterrorizado era más bien. Pero mamá me necesitaba. No podía esperar que papá fuera padre de un bebé que no era suyo. Tuve que asumir la responsabilidad como lo hizo él 18 años antes. "Estoy extasiado", mentí.
Mamá escuchó eso y saltó sobre mí. Me besó una y otra vez mientras nuestros amigos se reían.
Me rendí y me fui a la tierra de los locos con mamá. Plantar un bebé en su vientre fue definitivamente una emoción perversa. Una emoción rizada súper caliente. Me quité los jeans y me puse encima de ella. "Asegurémonos de que estés embarazada", gruñí con lujuria.
Mamá se rió y asintió. "Hazlo, Gary. Sé mi semental".
Follar para procrear parecía totalmente diferente a follar por diversión. La intención me electrizó. Tuve una visión de la barriga de mamá creciendo y sus tetas hinchadas con leche. Si preñaba a mi hermosa mamá, significaba que yo era su macho alfa. Yo. La sensación de poder era embriagadora.
Pasamos el resto de la tarde en la cama, haciendo todo lo posible para asegurarnos de que mamá quedara embarazada de mi bebé.
Cuando Jessica y Brad regresaron de la cena a las 7:00 p. m., ella arrugó la nariz y se rió: "Aquí huele a puro sexo".
Mamá y yo estábamos descansando, tirados desnudos en nuestra cama. Nuestros cuerpos estaban resbaladizos por el sudor y el coño de mamá goteaba semen. Su mano acarició lentamente mi cansada polla, tratando de persuadirla para que permaneciera de nuevo. No tratamos de encubrirnos. Nuestros amigos ya habían visto todo esta semana. "Perdón por el mal olor," me disculpé.
No hay problema", respondió Jess. "Me gusta el olor. Me pone cachondo. Oye, todavía iremos al club esta noche, ¿no?"
Quería quedarme en la cama, pero sabiamente miré a mamá antes de responder. "Prometiste llevarme de vuelta a ese gran club de baile lento, Gary", me recordó.
Suspiré. "Si, lo hice."
"Y tenemos nuevos vestidos para usar", le recordó Jessica emocionada a mamá. Eso lo resolvió. Íbamos al club de baile.
Mamá estaba deslumbrante con su minivestido dorado. Llamó aún más la atención que cuando llevaba su vestidito negro la primera vez que fuimos allí. "¿Vas a dejar que otros hombres bailen conmigo esta noche?" ella se burló de mí.
"Diablos, no", respondí. "Eres mía."
Ella se rió. "Sí, lo soy."
No me arriesgué. Cuando no estábamos bailando le tomaba la mano. Cuando fue al baño, esperé afuera de la puerta. Cuando fui al baño, hice que Brad la vigilara. Llámame paranoico, no me importa. Sabía lo buena que era mamá y no dejaría que nadie se le acercara.
"Cariño, me encanta la forma en que me proteges", me dijo mamá mientras bailábamos. "Esta noche eres el hombre que siempre supe que podías ser". Bailamos hasta la medianoche y regresamos al hotel.
SÁBADO
A mamá le encantaba ir a museos y galerías de arte en cualquier ciudad que visitara. Así que hicimos eso el sábado mientras Jessica y Brad iban de gira por los Everglades.
Mamá tomó mi mano mientras me guiaba de galería en galería en el moderno distrito de las artes. Charló sobre el arte y me convenció para que hablara sobre lo que me gustaba y lo que no me gustaba. "Esto es muy divertido", gorjeó. "Me siento como una chica de secundaria en una cita con un chico del que está muy enamorada".
No se limitó a mirar el arte y seguir adelante. Discutió las piezas que le gustaban con el personal de la galería. Ella era estudiante de historia del arte y me impresionó la aparente profundidad de su conocimiento. Los empleados de la galería también parecían impresionados, pero eso puede deberse en parte a su belleza. Llevaba un vestidito rojo de su estilo favorito: ceñido y corto.
Había una empleada lesbiana en una galería que mantuvo a mamá hablando durante media hora. Era una chica hispana sensual con el pelo corto y negro y un culo redondo espectacular. Les di mucho espacio y mamá coqueteó escandalosamente. La niña se lo devolvió y miró a mamá de arriba abajo con hambre. Fue emocionante de ver y me puse caliente. Eventualmente me compadecí de la pobre lesbiana enamorada y le dije a mamá: "Tenemos que irnos, Amy". La chica me dio una mirada fea y garabateó su número en el reverso de una tarjeta de presentación para mamá antes de que nos fuéramos.
Afuera de la galería, mamá se aferró a mi brazo y se rió, "Te gustó eso".
"Sí, lo hice," admití. "Pero dijiste que no coquetearías más".
"Dije que no coquetearía con más hombres", corrigió y se rió de nuevo.
"Parecías estar en ello. ¿Alguna vez has pensado en chicas?"
"No, pero siempre hay una primera vez", respondió ella con una sonrisa.
Me reí. "Maldita".
Ella se rió conmigo. "Solo coqueteé con ella porque pensé que te excitarías. Eres un chico pervertido, Gary Moore".
Rodé los ojos. "La olla llama negra a la tetera".
Mamá juguetonamente me empujó en las costillas. "Gracias por ser tan paciente, cariño. Sé que recorrer galerías no es tu idea de un día divertido".
Me encogí de hombros. "Me gusta estar solo contigo".
Ella sonrió y me besó. "Con razón te amo tanto. Eres un encanto".
Esa noche, mamá me acomodó boca arriba y se subió encima. "Quiero hacer el amor, no follar", dijo suavemente. Nos besamos y nos exploramos con nuestras manos. Quería tocar cada centímetro de su piel. Cuando finalmente alineó mi polla palpitante con su coño mojado, me susurró al oído: "Sé que es muy tarde para preguntar, pero ¿quieres usar un condón, Gary? Puede que aún no esté embarazada".
No dudé. "Sin condón."
"¿Está seguro?"
"Sí. Cierto". Sostuve sus caderas para empalarla lentamente en mi polla desnuda. Quería plantar un bebé en el vientre de mamá. Esa era la forma de conquistarla. Primero papá, y ahora yo.
Ella sonrió pero las lágrimas se formaron en sus ojos.
"¿Por qué estás llorando?" Yo pregunté. Odio las lágrimas.
"Lágrimas de alegría, tonto", me dijo. "Realmente me amas y quieres a nuestro bebé".
Besé sus lágrimas. "Por supuesto que sí."
Mamá prácticamente resplandecía de alegría mientras muy lenta y amorosamente cabalgaba arriba y abajo de mi polla. Hizo pausas frecuentes para besar. Esta tierna forma de hacer el amor fue un mundo aparte de nuestras frenéticas folladas de los últimos días. Me gustó.
La observé en la oscuridad casi total de esa habitación de hotel, y me di cuenta de que esta hermosa criatura iba a ser mi esposa y la madre de mi bebé. El orgullo que sentí fue estimulante.
DOMINGO
Salíamos de Fort Lauderdale muy temprano para emprender el largo viaje de regreso a Memphis. Salí de la cama y llevé a mamá a la ducha conmigo.
No teníamos tiempo para el sexo, pero los besos y las caricias nos abrieron los ojos.
Mientras Brad y Jess se duchaban, mamá y yo nos pusimos jeans y camisetas. Suspiré, "No quiero ir a casa, Amy. Estoy feliz aquí".
"Yo también, Gary, pero tenemos cosas de las que ocuparnos en Tennessee. Tienes que terminar la escuela y yo tengo que divorciarme de Mark".
Gruñí. "Pobre papá. Apesta que lo estemos jodiendo en todo esto".
Mamá negó con la cabeza. "Mark no es inocente. No olvides que me dejó embarazada cuando yo tenía 16 años y él 20. ¡16! Es bueno que se haya casado conmigo, pero no fue exactamente una dificultad ya que vine con el dinero de mi herencia y la mitad los muchachos de Memphis estaban calientes conmigo. Consiguió un buen trato, pero ahora es el momento de que siga adelante".
Sonreí. Ella tenía razón. Consiguió un buen trato. "18 años contigo es un gran trato, diría yo".
Mamá sonrió, "Y voy a encontrarle a Mark una nueva mujer. Ya he pensado en tres para hacerle una cita. Mi amiga Tina, su secretaria Sarah y Becky Boardman".
"¿Becky? Tiene como 25 años", le dije. Becky era la hija de uno de los amigos mayores de mamá.
"Lo sé, pero es una cazafortunas y una puta", explicó mamá. "Ella se lo follará. Te lo garantizo".
Me reí. "La vida amorosa de papá se trata de volverse loca y la mía se ha detenido bruscamente. Algo no está bien en eso".
Mamá me rodeó el cuello con los brazos y me preguntó: "¿Quieres salir con otras mujeres, Gary?".
"No, no. Eso fue una broma", le aseguré. "Sólo hay una mujer para mí".
"Buena respuesta", dijo y me besó. "Somos tú y yo para siempre, cariño".
"Soy el hombre más afortunado del mundo".
SIETE MESES DESPUÉS
Mamá y yo conseguimos un departamento muy lindo en Knoxville, a casi 400 millas de distancia de las personas que nos conocían en Memphis, y todos los que conocíamos en nuestra nueva ciudad natal pensaban que estábamos casados. El apartamento estaba cerca de la Universidad de Tennessee, donde estudiaba. Mamá no trabajaba ni iba a la escuela. Su herencia era más que suficiente para vivir, y quería ser ama de casa y cuidar de nuestra hija.
Mamá yacía desnuda boca arriba en nuestra cama. Froté suavemente manteca de cacao en su gran barriga redonda. "Gracias, cariño. Eso se siente tan bien", ronroneó.
"Un placer", respondí. "Me encanta cuidar de ti, Amy".
Su rostro brilló. "Sé que lo haces. Eres el mejor esposo y también serás el mejor padre".
"Eso espero."
Cubrió mis manos con las suyas y me miró a los ojos. "Trata de no preocuparte tanto, cariño. El doctor Gale dice que el bebé es fuerte, saludable y normal. Será un bebé hermoso, sé que lo será, y tú serás un gran papá".
Suspiré. "Espero que no sea tan hermosa como tú. No quiero que todos los chicos la persigan". Deslicé una mano hacia abajo para jugar con su coño.
Mamá se rió. "No te preocupes, le enseñaré a defenderse de los chicos. No quiero que la dejen embarazada a los 16 como yo".
"Creo que la mantendré encerrada hasta que tenga 20 años", respondí.
Ella se rió de nuevo. "Tu papá llamó hoy", me dijo.
Me dio celos que mamá y papá hablaran por teléfono dos o tres veces por semana. ¡Se divorciaron por el amor de Dios! Pero siguieron siendo amigos y no pude objetar exactamente. Quiero decir, le robé la esposa al tipo y ellos son mis padres. Debería estar feliz de que sigan siendo amigos. "¿Han vuelto de la luna de miel?" pregunté cortésmente.
Ella asintió. "Regresaron ayer. Mark dice que Hawái es increíble. También hablé con Tina. Todavía se siente un poco incómoda conmigo porque se casó con Mark poco tiempo después de nuestro divorcio, pero se está abriendo mas conmigo".
"Eso es bueno", le dije. La nueva esposa de papá, Tina, era una de las mejores amigas de mamá. Mamá los empujó juntos mientras se estaba divorciando de papá. Tina era un par de años mayor que papá y no tan buena como mamá, pero era muy agradable. Y estaba loca por papá. Me alegré de que fueran felices, me hizo sentir menos culpable.
Papá no sabía sobre mí y mamá, por supuesto. Pensó que yo era un hijo obediente que ayudaba a su madre a superar un embarazo no deseado. No se enteró del embarazo hasta que el divorcio estaba en marcha. Es comprensible que lo enojara porque demostró que mamá lo engañó, pero no supuso que yo era el padre. Mamá lo suavizó conectando astutamente a papá con algunas mujeres, incluida Tina. Papá se distrajo tanto con el nuevo coño que se olvidó de enfadarse con mamá.
Mis celos por mamá y papá me vencieron, así que le di la vuelta a mamá y la ayudé a ponerse de manos y rodillas.
Me puse detrás de ella y la llené de mi polla. "¡Uff!" ella gruñó. Pero luego se rió. "Cada vez que menciono a tu papá, me follas, Gary. Es lindo, pero no tienes que estar celoso. Te amo a ti y solo a ti".
Me sonrojé pero no dejé de follarla, y también apreté sus senos que habían crecido de copa D a DD debido al embarazo. "No sabía que era tan obvio".
Me miró por encima del hombro con una sonrisa maliciosa. "No soy la rubia tonta que crees que soy, cariño".
Negué con la cabeza y sonreí. Ella era tan linda "¿No lo eres?" bromeé. "¿Cómo te las arreglaste para quedarte embarazada de tu propio hijo entonces?"
Mamá se rió. "Planificación cuidadosa."
EL FIN 🔥🔥
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