Hola amigos de Poringa, este relato ya lo había subido pero por alguna razón lo había eliminado, así que aquí va de nuevo para que puedan disfrutarlo.
Como saben, soy médico en México, soy alto, de cuerpo promedio y aquí cuento mis experiencias con compañeras y alumnas.
En una ocasión en el hospital, rotando por el área de urgencias, me tocó trabajar con una doctora igual muy joven, con una cara muy linda, cuerpo llenito, lo que definiría como una gordibuena, muy carismática, atractiva y con unas tetas riquísimas. Siempre que la veía intentaba coquetearle, ya había algo de roce entre nosotros pero esa noche todo se desató. Esa noche estuvo muy pegada a mi, la verdad me volvía loco, deseaba rotar con ella para poder verle esas tetas y honestamente el cansancio siempre me pone más caliente (si alguien de aquí es médico, entenderá lo caliente en la postguardia jajaja)
La primera parte del turno estuvo muy movida, hicimos el pase de visita, atendimos a unos pacientes que fueron llegando, muy pocos con cosas importantes, así que como a la media noche el turno empezó a ponerse tranquilo, así que aprovechamos para bajar al comedor por nuestra comida, ahí me encontré a la doctora, me invitó a sentarme en su mesa , estuvimos un rato platicando y la sentí más cercana que de costumbre, poco a poco intentaba rozar alguna parte de su cuerpo en la conversación, ella no decía nada así que cada vez me acercaba más a ella. No había nadie más en el comedor y por un momento sentí que nos besariamos ahí mismo, desafortunadamente tuvimos que subir de nuevo a la sala de urgencias. Mientras íbamos subiendo las escaleras aprovechaba para ver sus nalgas, que con el uniforme se veían muy bien.
Atendimos unos pacientes más y a las 4 AM no había nadie más (cosa rara en urgencias) por lo que propuse ir a dormir un rato, ella, inmediatamente me dijo que me acompañaba. En el pasillo nos acercamos más y terminamos besándonos, diooooos!!! Que bien besa esa mujer, fue un beso entre romántico y caliente. Escuchamos que alguien venía así que nos separamos y fuimos rumbo al cuarto para los médicos del hospital. Una vez ahí, le dije que entraría al baño a lavarme los dientes así que deje la puerta abierta, cuando termine ella entro al baño conmigo, me dijo que si quería continuar con lo que habíamos empezado, no lo dude y empezamos a besarnos de nuevo, está vez pide ir tocándole sus nalgas, ella me besaba cada vez con más intensidad, fui subiendo mis manos hasta tocar esas tetas tan ricas que tanto había deseado tocar, me causo una erección brutal.
Ambos estábamos muy calientes, comencé a besarle el cuello y ella soltó un pequeño gemido que me calentó aún más, le dije que cerraramos la puerta del baño por si alguien entraba al cuarto, le quite la blusa y ahí quedaron sus tetas, apretadas por un sosten deportivo que las levantaba haciendolas más apetecibles. No tarde en quitarlo para poder apreciar sus tetas, uuufff, duritas, jóvenes, grandes, con un pezón echo a la medida, no dude un segundo en lamerlos y ella gemía cada vez más fuerte mientras apretaba mi vrg que aún estaba metida en mis pantalones.
Asi estuve un rato hasta que ella decidió arrodillarse y por fin sacar mi vrg del pantalón, no dudo un segundo y se la metió todita a la boca, uufffff, esos.labios carnosos me tenían en el cielo, hasta el cansancio se me había olvidado. Así estuvo un rato mamando hasta que se levantó, se apoyo sobre el lavabo y me pidió que se la metiera. Obedecí al instante y le clave la vrg hasta el fondo, la muy puerca estaba súper mojada, entro con mucha facilidad. Sus gemidos me calentaban todavía más.
En un momento se escuchó la puerta del cuarto, era un médico interno que llegó a dormir, intentamos hacer menos ruido por su presencia pero después de unos minutos escuchamos que empezaba a roncar, así que arremetió con más fuerza contra ese culito
Ella empezó a ponerse más descarada, genia cada vez más fuerte sin importar que el doctor estuviera durmiendo afuera. Me calentaba todavía más escucharla gemir y sentirla toda mojada, me pedía que le diera más duro.
En un momento sentí que estaba por terminar, así que le avisé, la puta me pidió que terminara en sus tetas, le saque la vrg, ella se arrodilló inmediatamente poniendo sus tetas listas para llevarlas de leche, los disparos empezaron a llenar sus ricas tetas, una vez que termine, me dió una última chupada para sacar todo lo que quedaba, uuuffffff no hubiera imaginado lo rica que estaba esta mujer.
Ya cansados, fuimos a acostarnos un rato antes de terminar nuestros pendientes. Después de esa noche seguimos viéndonos para coger de vez en cuando. Siempre aprovecho para acabar en esas tetas de infarto. (Fotos reales mandadas por ella)
Espero que les haya gustado, un relato corto pero que quería compartir con ustedes. Dejen puntos y siganme para tener más relatos.
Como saben, soy médico en México, soy alto, de cuerpo promedio y aquí cuento mis experiencias con compañeras y alumnas.
En una ocasión en el hospital, rotando por el área de urgencias, me tocó trabajar con una doctora igual muy joven, con una cara muy linda, cuerpo llenito, lo que definiría como una gordibuena, muy carismática, atractiva y con unas tetas riquísimas. Siempre que la veía intentaba coquetearle, ya había algo de roce entre nosotros pero esa noche todo se desató. Esa noche estuvo muy pegada a mi, la verdad me volvía loco, deseaba rotar con ella para poder verle esas tetas y honestamente el cansancio siempre me pone más caliente (si alguien de aquí es médico, entenderá lo caliente en la postguardia jajaja)
La primera parte del turno estuvo muy movida, hicimos el pase de visita, atendimos a unos pacientes que fueron llegando, muy pocos con cosas importantes, así que como a la media noche el turno empezó a ponerse tranquilo, así que aprovechamos para bajar al comedor por nuestra comida, ahí me encontré a la doctora, me invitó a sentarme en su mesa , estuvimos un rato platicando y la sentí más cercana que de costumbre, poco a poco intentaba rozar alguna parte de su cuerpo en la conversación, ella no decía nada así que cada vez me acercaba más a ella. No había nadie más en el comedor y por un momento sentí que nos besariamos ahí mismo, desafortunadamente tuvimos que subir de nuevo a la sala de urgencias. Mientras íbamos subiendo las escaleras aprovechaba para ver sus nalgas, que con el uniforme se veían muy bien.
Atendimos unos pacientes más y a las 4 AM no había nadie más (cosa rara en urgencias) por lo que propuse ir a dormir un rato, ella, inmediatamente me dijo que me acompañaba. En el pasillo nos acercamos más y terminamos besándonos, diooooos!!! Que bien besa esa mujer, fue un beso entre romántico y caliente. Escuchamos que alguien venía así que nos separamos y fuimos rumbo al cuarto para los médicos del hospital. Una vez ahí, le dije que entraría al baño a lavarme los dientes así que deje la puerta abierta, cuando termine ella entro al baño conmigo, me dijo que si quería continuar con lo que habíamos empezado, no lo dude y empezamos a besarnos de nuevo, está vez pide ir tocándole sus nalgas, ella me besaba cada vez con más intensidad, fui subiendo mis manos hasta tocar esas tetas tan ricas que tanto había deseado tocar, me causo una erección brutal.
Ambos estábamos muy calientes, comencé a besarle el cuello y ella soltó un pequeño gemido que me calentó aún más, le dije que cerraramos la puerta del baño por si alguien entraba al cuarto, le quite la blusa y ahí quedaron sus tetas, apretadas por un sosten deportivo que las levantaba haciendolas más apetecibles. No tarde en quitarlo para poder apreciar sus tetas, uuufff, duritas, jóvenes, grandes, con un pezón echo a la medida, no dude un segundo en lamerlos y ella gemía cada vez más fuerte mientras apretaba mi vrg que aún estaba metida en mis pantalones.
Asi estuve un rato hasta que ella decidió arrodillarse y por fin sacar mi vrg del pantalón, no dudo un segundo y se la metió todita a la boca, uufffff, esos.labios carnosos me tenían en el cielo, hasta el cansancio se me había olvidado. Así estuvo un rato mamando hasta que se levantó, se apoyo sobre el lavabo y me pidió que se la metiera. Obedecí al instante y le clave la vrg hasta el fondo, la muy puerca estaba súper mojada, entro con mucha facilidad. Sus gemidos me calentaban todavía más.
En un momento se escuchó la puerta del cuarto, era un médico interno que llegó a dormir, intentamos hacer menos ruido por su presencia pero después de unos minutos escuchamos que empezaba a roncar, así que arremetió con más fuerza contra ese culito
Ella empezó a ponerse más descarada, genia cada vez más fuerte sin importar que el doctor estuviera durmiendo afuera. Me calentaba todavía más escucharla gemir y sentirla toda mojada, me pedía que le diera más duro.
En un momento sentí que estaba por terminar, así que le avisé, la puta me pidió que terminara en sus tetas, le saque la vrg, ella se arrodilló inmediatamente poniendo sus tetas listas para llevarlas de leche, los disparos empezaron a llenar sus ricas tetas, una vez que termine, me dió una última chupada para sacar todo lo que quedaba, uuuffffff no hubiera imaginado lo rica que estaba esta mujer.
Ya cansados, fuimos a acostarnos un rato antes de terminar nuestros pendientes. Después de esa noche seguimos viéndonos para coger de vez en cuando. Siempre aprovecho para acabar en esas tetas de infarto. (Fotos reales mandadas por ella)
Espero que les haya gustado, un relato corto pero que quería compartir con ustedes. Dejen puntos y siganme para tener más relatos.
1 comentarios - Cogiendo compañera del hospital (real con fotos)