Con Nélyda teniamos una calentura especial, creo que ella más conmigo que yo con ella. Así seguimos buscando la oportunidad para coger con gusto. A los pocos dias de aquella primera vez, nuestras hormonas pedian a gritos la concreción de un encuentro. Entre charlas y charlas me informa que un sábado a la tarde estaría solita en su casa, por lo cual concretamos que yo iria a visitarla. Habitualmente los dias sábado a la tarde yo no trabajaba y me quedaba en casa a hacer las cosas que no podia hacerlas en los otros dias.
Esa tarde le digo a mi vieja, que era muy controladora, que tenia que hacer un trabajo especial. A la hora indicado me encaminé hacia la cita. Estaba lejos, mientras viajaba en el colectivo, pensaba y elucubraba como lo haría. A las 17 hs. en punto toque la puerta de su casa, como lo habia prometido, esta se abrió y ella apareció de inmediato.
Como si hubieramos estados atados nos abrazamos y caminamos juntos, besandonos y agarrandonos, casi cayendonos, hasta que nos caimos, sobre una cama que habia en la pieza. Sin mas vuelta, meti la mano y le baje la bombacha hasta los pies, no me animé a mirarla (habrá sido por pudor o de apuro !!) sin su ropa interior, aunque seguia vestida para arriba. Me abalance con mis pantalones a medio bajar y mi pene bien erecto. Como la vez anterior se lo introduje de una, pero esta vez estuvimos culiando como media hora, yo trataba de no acabar, ya que me gustaba ver como gozaba y jadeaba. Cuando no pude mas hice un empujón a fondo, y con mi pija bien introducida en ese recinto caliente y humedo, dejé salir todo el semen. Se rebalsó !!!.
Nos relajamos y en seguida me dijo que debía irme por que su soledad no duraría mucho, siendo probable que aparezca su madre que habia salido a visitar una amiga.
Me fuí, sin mas palabras, ella quedó en la cama acostada de espalda, guardando tods mis jugos. Gracias Nélyda, que culiada que hicimos esa vez !!!
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