Bueno, está es mi primer historia y así que espero y les guste.
Soy de México y bueno, como muchos saben nos encanta la fiesta y el desmadre y con tal de seguir tomando somos capaces de todo, en una fiesta muy loca de la preparatoria queríamos seguir tomando pero ya no teníamos dinero, así que como soy muy aventada en algunas cosas, ya estando peda me acerque el señor de la tienda que tenía entre unos 35 o 40 años, le dije que pues ya sabía que me veía las tetas cada que yo iba a comprar, que si el quería podía cogerme y hacerme lo que quisiera pero que nos tenía que regalar un cartón de caguamas cada que mis amigos fueran, el señor no estaba muy convencido, pero cuando vio que me empecé a encuerar se me dejó ir con todo.
Sentí su boca caliente recorrer y morder mis chichis y estando peda soy la más caliente de todas, baje sus manos hasta mi vaginita mojada, entre jadeos le pedía que me cogiera, que quería su vergota en mi culito, quería que me lo rompiera, el señor se sentó y yo me abrí de piernas para masturbarme enfrente de él. Cuando entra un amigo a ver qué show con el alcohol, cuando me ve gimiendo y gozando enfrente del señor, solo ví que se empezó a reír y se quedó fijo al señor, tal parece que tenían todo planeado, se me fue directo a la panocha, me la empezó a chupar tan rico que mis gritos parecían de putita tal como me gusta que me llamen.
Parte 2.
1 comentarios - Mi chochito por unas caguamas