Hola, vuelvo a escribir un relato despues de bastante tiempo ya. Los que ya han leido algun relato mío saben que principalmente hago relatos sobre mi madre en situaciones morbosas. Muchas de ellas inspiradas en la realidad y eso para mí los hacen mas excitantes. Sin mas preambulos dejo el relato.
----------------------Mi madre y el viaje al campo para pasar las pascuas--------
Era jueves al mediodía y el auto estaba llegando a aquel pueblo ubicado a 100 kilometros de la ciudad de santiago del estero. Mi padre quería aprovechar los feriados y pasar las pascuas en su lugar natal claro que mi madre lo acompaño. Hacía mucho que no iba a ningun lado y aunque no le gustaba demasiado el campo quería aprovechar los ultimos dias soleados de abril. Ademas el calor ya no sería tan agobiante como en otras epocas del año.
Mi hermano y yo decidimos quedarnos por lo cual ellos fueron solos. Después de varias horas llegaron y pudieron ver en el frente de la casa a los sobrinos de mi padre, era una familia numerosa,a muchos ella no los conocía o los había visto de pequeños nada mas. Estaban allí entretenidos, tomando cerveza y jugando a las cartas.
No se les paso de vista la figura de mi madre. Estando en ese estado y sin abundar las mujeres allí cobraba notoriedad. Vestía una musculosa blanca, un short de jean y unas sandalias.
Mi madre se llama Ana. Apenas pasa los cincuenta años. Es blanca y de estatura baja. Su cuerpo es como el de tipica mujer baja, asi que ya se imaginaran que es caderona con una cola que resalta.
Saludaron y fueron especialmente amables con ella.
"Hola tia, como esta?" Le dijo Leo, uno de los sobrinos "lejanos" de mi padre.
"Hola tanto tiempo, no te veia desde que eras un niño, como creciste".
"Bien, cansada por el viaje". Respondió a las tipicas preguntas.
Saludo a todos y fue adentro de la casa a descansar. Se desplomó en la cama quedando dormida.
Uno de los chicos, el mas joven estaba pateando una pelota al costado de la casa. Cuando la fue a buscar miró por la ventana y le llamó la atención ver a mi madre acostada en la cama.
El pendejo la miraba impunemente, recorría con curiosidad el cuerpo de la mujer madura. En un momento ella se gira dormida lentamente permitiendole sus nalgas. No perdió detalle de su culo. Ya tenía una erección y si fuese por él se habria hecho una paja ahí mismo pero tuvo que guardar aquello en su mente y hacerlo luego.
Al cabo de unas pocas horas mama salio de la casa, estaba fresca por haberse tomado una siesta. Afuera estaban los muchachos, que la llevaron a conocer la granja.
oh que lindo, decía al ver a todos los animales. Pero se estremeció al ver a un caballo montando una yegua.
"oh dios mio!"
Ellos se rien y hacen comentarios machistas.
"Jajaj, dicen que el Leo la tiene como ese caballo.
Ella se sorprendio al ver el pene del caballo y miraba de reojo aquel pedazo.
Leo le invito a andar a caballo, primero ella iba atras, y luego tomo las riendas y fue delante. sentia en ocasiones el roce con el bulto de Leo.
Los demas comentaban entre ellos. Al no haber tantas mujeres llamaba mucho la atencion.
"Alguna vez te cogiste una mujer de ciudad?"
"No, nunca, son putitas delicadas esas. jajaja"
"Que buen culo que tiene."
"Si, una delicia, se la terminara cogiendo Leo?".
"Seguro que sí."
Mi madre se divirtió mucho esa tarde, llego a la casa y fue a darse un baño.
A la noche mientras dormía pensaba en todo lo que hizo en el día, por un momento se le vino a la mente lo que dijo uno de los chicos. Que Leo la tenia como el caballo. sin querer se imaginó eso y no pudo evitar sentirse incomoda.
Al otro día siguiente, Marta, una cuñada de mi padre le comento que no podía ordeñar las vacas. Tenia que hacerlo mi madre, no había nadie mas que pudiese hacer eso. Mi madre no pudo negarse, quería colaborar y dar una mano.
Entonces ante la atenta mirada de aquellos muchachos veían como ella hacia que salga leche de las ubres de la vaca. Mas de uno no pudo evitar empalmarse al ver las manos de mi madre presionando y haciendo que salga la leche. Se la imaginaban ordeñando sus vergas.
Ese mismo día mi padre se tuvo que ir a hacer algo a la ciudad, dejando a mi madre sola alli. Ella ya estaba acostumbrada a esas cosas. Así paso ese día, con el tiempo fue construyendo mas confianza con Leo y los chicos. La temperatura era elevada y los pensamientos seguían estando en la mente de mi madre.
Ya era de noche y mi padre no habia vuelto. Ella estaba afuera de la casa, sentada cuando ve pasar a uno de los chicos en una motito. Tenia puesto un vestido floreado.
"Ana, que hace aquí sola. Venga con nosotros que estamos divirtiéndonos allá en el fondo."
"No, yo estoy bien.." Dijo ella disimulando. Pero no fue muy difícil convencerla ya que estaba realmente aburrida. Así que abrió las piernas y se subió a la moto.
Los demás chicos están alrededor de una mesa, tomando y jugando a las cartas. Festejan cuando ven llegar a mi madre en la moto.
Ya estaban un poco tomados y la convencen para que juegue.
"¿Queres vino Ana?"
"No, yo no tomo."
"Vamos, tomá." Le dijeron hasta que la convencieron y empezo a tomar un poco de vino.
"Y Leo no esta?" Pregunto ella.
"Aun no ha venido. Ya va a venir."
Mas de uno ya miraba a mi madre con cariño, se veía linda en ese vestido y el estado de ebriedad en el que estaban la hacia aun mas cogible.
Después de un rato uno propuso un nuevo juego para que mi madre pueda jugar. Este juego incluía prendas. Ella acepto. La estaba pasando bien, divirtiéndose con los jóvenes. La prenda incluía que los jugadores se quiten las prendas de ropa cuando pierdan sus apuestas.
Todos querían que mi madre se sacase ese vestido, estaban esperando eso. Pero primero otros deberían perder, la suerte de principiante. Los dos que estaban alrededor de mama ya no tenían sus remeras. Ella observaba el buen físico que tenían los jóvenes. Hasta que llego el momento en que mama perdió y se escuchaba a todo aullando como lobos. Aplaudiendo y coreando el nombre de mama. Esto llamó la atención del chico mas jóven, el que la había espiado por la ventana, que se acerco y miraba de lejos. Nadie se había percatado de su presencia.
Quizás por efecto del alcohol y el calor no reparó mucho en eso. Así que se puso de pie y lentamente se fue subiendo el vestido y se lo sacó, quedando en ropa interior, para luego sentarse.
Se tapaba un poco las tetas, algo de pudor le había quedado. Aunque había ido demasiado lejos, ni ella se creía lo que estaba haciendo. Siguió el alcohol y siguió el juego y a mama le toco perder de nuevo. Afuera el corpiño, esas tetas estaban libres a la vista de aquellos tipos que se deleitaban. Los que estaban en ropa interior ya la tenían dura. Ella logro zafar hasta que le toco perder de nuevo. Se saco la bombacha estando sentada. Con un brazo se tapaba un poco las tetas y con el otro la vagina.
Ahora todos empezaban a perder, uno a uno se iban sacando la ropa interior.
"Uh!" Exclamaba ella, sin poder creer que estaba viendo tantas porongas
duras por ella. Estaba totalmente desinhibida, se sentía bien estar desnuda con ese calor.
"Anita, ordeñame como a la vaca." Le decía uno mientras ella reía. Hizo que lleve su mano hasta su verga erecta y lo empiece a pajear lentamente, con sus suaves manos.
"Yo también quiero, tenes dos manos Ana." Le decía el que estaba al lado. Ella ya borracha no podía coordinar la masturbación a las dos pollas, sobria tampoco podría seguramente. Así que ahí estaba ella, en el campo, en el medio de la nada masturbando a sus sobrinos lejanos o lo que fuesen.
"Todos la tienen tan grande en el campo?" decía ella mientras los pajeaba. Todo era pura carcajada.
Uno tiro el vestido de mama en el suelo e hicieron que ella se acostase allí, era hora de que empezase la acción.
Ella se acostó con una sonrisa como nunca había tenido en la vida. Probablemente por la ebriedad. Uno de los que estaba siendo masturbado le abrió las piernas e intrudujo su pene lentamente.
"Ohhh". Jadeaba ella, con voz de putita.
"Ahhhh si, que conchita apretada." Decía mientras le hundía la verga en dandole despacio
"Uhhh, ahhh." Solo jadeaba ella. Los demás se pajeaban sin perderse detalle del espectáculo.
El tipo fue acelerando el ritmo de a poco, hundiendo la verga cada vez mas, la cual era un poco mas grande que el promedio.
"Ahhh siii sii." Gemía ella como hembra en celo.
Una luz ilumino el espectáculo, se escuchaba el sonido de un motor acercándose.
"Vaya me estaba perdiendo la fiesta y que fiesta!" Decía Leo bajándose de su moto.
"La noche es larga y la tía Anita nos esta entreteniendo a todos."
Mama estaba allí abierta de piernas siendo garchada por uno de los chicos. Cuando se percato de su presencia le agarro algo de pudor.
"Nooo. no me veas. Ahhhh." PLAF PLAF PLAF. Estaba aumentando el ritmo de las embestidas.
"ohh, voy a acabar. No aguanto mas. ahhhhh." Jadeo acabandole dentro. Vaciándose las pelotas en la vagina de mi mama.
El semen le brotaba de la concha, chorreando y manchando el vestido que estaba debajo. Mama estaba abierta de piernas frente a todos. se tapó con las manos la vagina.
"Pero Ana siya te vimos todo!"
Leo se estaba desabrochando el pantalón dejando ver si la leyenda era cierta o no.
"Oh dios mio". Dijo mama. Lo mismo que dijo al ver el caballo montando a la yegua. Ella seria su hembra, su yegua.
Era grande y aun estaba flácida. Se acerco a mama y ella aun sin salir del asombro agarro su pene. La meneaba suavemente, admirándola. Era la pija mas grande que había visto en su vida. El le sobaba las tetas mientras mama lo masturbaba, no sabría como haría para tener ese pedazo dentro de ella. Sentada sobre el vestido se llevo aquel monstruo a la boca. Recorría el glande con la lengua para luego succionar toda la verga. Cerraba los ojos para saborearlo.
"Ohh si tía. sii." Después de haber hecho tantas mamadas ella ya sabia bien como volver loco a un hombre.
"Dejá de llamarme así". Decía ella sacándose el pedazo de la boca para volver a mamar. Al mismo tiempo le masajeaba los huevos. Los demás sentían un poco de envidia del pedazo que cargaba Leo y de la devoción con la que ella se la chupaba. La lamia, la chupaba, la besaba, adoraba aquella verga.
Ya estaba bien dura. Lista para ser enterrada en la concha de mi madre. Ella tomo su bombacha y se limpio como pudo la leche que salia de su vagina. El se sentó en la tierra e hizo que mama bajara lentamente, hundiendo la concha en su verga. Al principo solo hacia que entre la puntita, hasta que fue bajando mas y mas.
"ohhh si, ohhhh." Jadeaba como loca ella, con un poco de dolor. Ahhhh. Que grande es! ohhh. El le frotaba el clitoris haciendo que explote de placer.
"ohhh ohhh ahhhhh." Gemia mama, teniendo espasmos, moviendo sus piernas, estaba teniendo un orgasmo. Arqueaba su cuerpo, con una gran expresión de placer en su cara.No se detendria alli, queria mas de su verga. Paro solo un rato y de nuevo se subio a cabalgar esa polla, esta vez de espalda a el y de frente a aquellos pervertidos. Bajaba despacio hasta que ya estaba casi toda dentro de mi madre. Las tetitas de mi madre se movian al ritmo de la cogida. Todos se pajeaban como mandriles.
"Ohhh si dame esa pija nene. AHhhh"
"Ahhhhhh, Jadeaba ella". Casi poseida. Leo la puso sobre el vestido, en posición de cucharita y le daba verga a su gusto hasta que no pudo contenerse mas. La saco y le acabo encima, enchastrando sus tetas y su abdomen.
"Ahhhh si Ana. Sos increible."
"Quiero mas." Decia ella tirada en el suelo. Abriendo bien sus piernas, invitando a otro chico. Inmediatamente otro se hizo cargo del pedido, le levantaba una pierna tomandola de la pantorrilla mientras le daba sin piedad. No la tenia tan grande pero llegaba hasta el fondo y le daba con mas vigor.
"ohh si. dame mas. Cuantos machos tengo para mi."
"ohh si tia" Decía el, que apenas la conocía, pero le daba morbo.
Ella le seguia el juego. "Si nene, follate a tu tia. Ahh mas. así, uhhh."
"No aguanto mas!"
"Dame la lechita nene." Decía ella que estaba mas puta que nunca, sacando la lengua para recibir la descarga. ella mientras el la sacaba y le apuntaba a la cara largando chorros de leche. Al acercarle el miembro a la boca no se nego a chuparlo, para el era el cielo.
Recupero un poco el aliento mientras habia mas pijas apuntando hacia ella. La tomaron suavemente de los brazos para que se ponga de pie y la pusieron en cuatro agarrandose de la mesa. Alli se turnarían para gozar con mi madre.
-Ahhh, valió la pena la espera. ahhh si Ana.
PLAF PLAF PLAF. Ninguno atenuaba el ritmo, todos la querían coger duro.
Todos querian disfrutar de su concha.
El pendejo que estaba espiando finalmente decidió aparecer en escena. Todos rieron al verlo. Estaba con su verga dura y se había estado pajeando viendo la escena porno en vivo.
Ellos mientras tanto se iban turnando a mama, que alternava entre las vergas restantes. Estaba de espaldas en cuatro patas por lo que no podía ver nada.
Mira lo que te vas a coger. Le decían al pendejo. Que sin duda alguna era afortunado. Le cedieron el lugar y no se acobardó. Ella no sabia nada, pero ahora era el quien la penetraba. Como podía, a su manera. Dando su mejor esfuerzo.
Mi madre gemia tambien al ser garchada por él sin sospechar de quien se trataba. Su verga juvenil entraba y salia de su concha. Dominaba y penetraba bastante bien a su hembra. Luego de un rato otro lo saco reclamando su turno y asi siguieron bombeando a mi madre. Dandole entre todos, continuaron con el mete saca.
Ya estaba por amanecer, pasaron horas desde que empezaron a jugar con las cartas.
"Anita, ordeñame como a la vaca." Dijo uno sentandola, apoyandola contra el respaldo de un aciento y acercando su verga hacia ella. Ella lo pajeaba despacio, suavemente, con las dos manos hasta que el empezo a bramar como un toro tirandole toda la leche arriba, liberando toda su excitacion, manchando su cara y sus tetas de semen.
Luego se acerco otro al cual le hizo lo mismo, meneo su pija hasta que saco toda la leche. La estaban llenando de semen.
Por ultimo pero no menos importante se acercó el pendejo. Ella casi se sorprendió al verlo pero a esta altura ya no le importaba y casi ni reconocía nada. El sin embargo no queria ser ordeñado, acerco su verga hacia la boca de mi madre e hizo que se la mame. En realidad era el quien tomaba la cabeza de mama y hacia que la chupe. Los demás ya se habían vaciado los huevos pero de no ser asi seguramente les hubiese excitando tremendamente ver el chico se cogía a mi madre por la boca.
El no queria acabar en la boca ni en la cara de mama. Se habia quedado con ganas de mas. Asi que la dio vuelta, mama ya parecia una muñeca y apunto a su culo. Era el unico que se habia atrevido a reclamar el ano de mi madre. De todas formas era dificil imaginar a Leo follando por el culo a mi madre. La verga del chico fue entrando de a poco. Ella volvía a jadear, quejándose. No se sabia si lo estaba disfrutando o no, pero el mocoso si lo hacia.
-ohh si pendejo, dame esa verga en el culo. Dijo ella volviendo a ser una zorra.
El no aguanto mas y largo todo en el culo de mi madre, que chorreaba de semen.
Ya habia amanecido, la fiesta había acabado. Todos habían acabado. Mi madre había tenido varios orgasmos. Le pusieron el vestido, que estaba manchado de semen y de tierra. El que la había traído la volvio a llevar a la casa, ella se sujetaba, con la mano derecha bajaba hacia su bulto. Estaba hecha una viciosa.
Ya en la casa el se dio cuenta de que seria difícil disimular lo que había ocurrido, una de sus hermanas tuvo que ayudarlo.
"Se han cogido a la tia! Que barbaridad." Decía incrédula, pero era de fiar.
La metieron a la casa, mama se veia fatal. La chica se encargaría de todo. Asi que los tipos se fueron a descansar, sumamente satisfechos. Ella por su parte le saco el vestido a mama, ella estaba casi dormida.
"Que cuerpo tenes tia..."
No lo penso dos veces, el pecho tenia rastros de semen, se ve que eran todos morbosos en aquel campo. Le lamio la teta, recorriendo con su lengua el pezon, probando la leche que quizas era de su hermano. Ella tambien iba a divertirse un poco con mi madre.
"Te gustó como te cogieron los chicos putita? eh?" Estaba bastante caliente la chica.
"Que buena concha tenes. A ver a que sabe la concha de una mujer fina." Decía al contemplar sus labios que tenian rastros de leche.
Acerco su lengua y probo la concha de mama. Todos la habian penetrado, pero solo su hermano habia acabado alli, eran sus rastros de leche los que tenia. Una mujer sabe como complacer a otra mucho mas que un hombre, asi que en cuestion de segundos hizo que tenga otro orgasmo.
"uff tia ¿Tuviste bastante por hoy no? Ya probaste todas las vergas. Solo falta que se la chupes al caballo jajaj."
Decia mientras la llevaba al baño para bañarla. La lavó completamente, limpiando todos los restos de semen. Dejándola limpita, la llevo a la cama de nuevo.
No te duermas que no quiero qeu el tio te encuentre asi. Te tenemos que vestir con algo. Revisó las pertenencias de mama y le puso un corpiño y una bombacha. Antes contempló su cuerpo desnudo upor última vez. La vistió con un camison que encontro y la dejó dormir plácidamente. Agotada por la garchada que le habian dado. Se llevo el vestido para eliminar la evidencia.
Mi madre durmió hasta tarde porque recien me contesto un mensaje que le había mandado despues del mediodia. Charlamos un rato y me dijo que despues seguíamos hablando porque era hora de la siesta y quería descansar ya que luego iba a pasear al cerro con Leo y los chicos.
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Espero que les haya gustado. Comenten que siempre motiva leer comentarios y digan si quieren algun capitulo mas de este viaje al campo.
Saludos!
----------------------Mi madre y el viaje al campo para pasar las pascuas--------
Era jueves al mediodía y el auto estaba llegando a aquel pueblo ubicado a 100 kilometros de la ciudad de santiago del estero. Mi padre quería aprovechar los feriados y pasar las pascuas en su lugar natal claro que mi madre lo acompaño. Hacía mucho que no iba a ningun lado y aunque no le gustaba demasiado el campo quería aprovechar los ultimos dias soleados de abril. Ademas el calor ya no sería tan agobiante como en otras epocas del año.
Mi hermano y yo decidimos quedarnos por lo cual ellos fueron solos. Después de varias horas llegaron y pudieron ver en el frente de la casa a los sobrinos de mi padre, era una familia numerosa,a muchos ella no los conocía o los había visto de pequeños nada mas. Estaban allí entretenidos, tomando cerveza y jugando a las cartas.
No se les paso de vista la figura de mi madre. Estando en ese estado y sin abundar las mujeres allí cobraba notoriedad. Vestía una musculosa blanca, un short de jean y unas sandalias.
Mi madre se llama Ana. Apenas pasa los cincuenta años. Es blanca y de estatura baja. Su cuerpo es como el de tipica mujer baja, asi que ya se imaginaran que es caderona con una cola que resalta.
Saludaron y fueron especialmente amables con ella.
"Hola tia, como esta?" Le dijo Leo, uno de los sobrinos "lejanos" de mi padre.
"Hola tanto tiempo, no te veia desde que eras un niño, como creciste".
"Bien, cansada por el viaje". Respondió a las tipicas preguntas.
Saludo a todos y fue adentro de la casa a descansar. Se desplomó en la cama quedando dormida.
Uno de los chicos, el mas joven estaba pateando una pelota al costado de la casa. Cuando la fue a buscar miró por la ventana y le llamó la atención ver a mi madre acostada en la cama.
El pendejo la miraba impunemente, recorría con curiosidad el cuerpo de la mujer madura. En un momento ella se gira dormida lentamente permitiendole sus nalgas. No perdió detalle de su culo. Ya tenía una erección y si fuese por él se habria hecho una paja ahí mismo pero tuvo que guardar aquello en su mente y hacerlo luego.
Al cabo de unas pocas horas mama salio de la casa, estaba fresca por haberse tomado una siesta. Afuera estaban los muchachos, que la llevaron a conocer la granja.
oh que lindo, decía al ver a todos los animales. Pero se estremeció al ver a un caballo montando una yegua.
"oh dios mio!"
Ellos se rien y hacen comentarios machistas.
"Jajaj, dicen que el Leo la tiene como ese caballo.
Ella se sorprendio al ver el pene del caballo y miraba de reojo aquel pedazo.
Leo le invito a andar a caballo, primero ella iba atras, y luego tomo las riendas y fue delante. sentia en ocasiones el roce con el bulto de Leo.
Los demas comentaban entre ellos. Al no haber tantas mujeres llamaba mucho la atencion.
"Alguna vez te cogiste una mujer de ciudad?"
"No, nunca, son putitas delicadas esas. jajaja"
"Que buen culo que tiene."
"Si, una delicia, se la terminara cogiendo Leo?".
"Seguro que sí."
Mi madre se divirtió mucho esa tarde, llego a la casa y fue a darse un baño.
A la noche mientras dormía pensaba en todo lo que hizo en el día, por un momento se le vino a la mente lo que dijo uno de los chicos. Que Leo la tenia como el caballo. sin querer se imaginó eso y no pudo evitar sentirse incomoda.
Al otro día siguiente, Marta, una cuñada de mi padre le comento que no podía ordeñar las vacas. Tenia que hacerlo mi madre, no había nadie mas que pudiese hacer eso. Mi madre no pudo negarse, quería colaborar y dar una mano.
Entonces ante la atenta mirada de aquellos muchachos veían como ella hacia que salga leche de las ubres de la vaca. Mas de uno no pudo evitar empalmarse al ver las manos de mi madre presionando y haciendo que salga la leche. Se la imaginaban ordeñando sus vergas.
Ese mismo día mi padre se tuvo que ir a hacer algo a la ciudad, dejando a mi madre sola alli. Ella ya estaba acostumbrada a esas cosas. Así paso ese día, con el tiempo fue construyendo mas confianza con Leo y los chicos. La temperatura era elevada y los pensamientos seguían estando en la mente de mi madre.
Ya era de noche y mi padre no habia vuelto. Ella estaba afuera de la casa, sentada cuando ve pasar a uno de los chicos en una motito. Tenia puesto un vestido floreado.
"Ana, que hace aquí sola. Venga con nosotros que estamos divirtiéndonos allá en el fondo."
"No, yo estoy bien.." Dijo ella disimulando. Pero no fue muy difícil convencerla ya que estaba realmente aburrida. Así que abrió las piernas y se subió a la moto.
Los demás chicos están alrededor de una mesa, tomando y jugando a las cartas. Festejan cuando ven llegar a mi madre en la moto.
Ya estaban un poco tomados y la convencen para que juegue.
"¿Queres vino Ana?"
"No, yo no tomo."
"Vamos, tomá." Le dijeron hasta que la convencieron y empezo a tomar un poco de vino.
"Y Leo no esta?" Pregunto ella.
"Aun no ha venido. Ya va a venir."
Mas de uno ya miraba a mi madre con cariño, se veía linda en ese vestido y el estado de ebriedad en el que estaban la hacia aun mas cogible.
Después de un rato uno propuso un nuevo juego para que mi madre pueda jugar. Este juego incluía prendas. Ella acepto. La estaba pasando bien, divirtiéndose con los jóvenes. La prenda incluía que los jugadores se quiten las prendas de ropa cuando pierdan sus apuestas.
Todos querían que mi madre se sacase ese vestido, estaban esperando eso. Pero primero otros deberían perder, la suerte de principiante. Los dos que estaban alrededor de mama ya no tenían sus remeras. Ella observaba el buen físico que tenían los jóvenes. Hasta que llego el momento en que mama perdió y se escuchaba a todo aullando como lobos. Aplaudiendo y coreando el nombre de mama. Esto llamó la atención del chico mas jóven, el que la había espiado por la ventana, que se acerco y miraba de lejos. Nadie se había percatado de su presencia.
Quizás por efecto del alcohol y el calor no reparó mucho en eso. Así que se puso de pie y lentamente se fue subiendo el vestido y se lo sacó, quedando en ropa interior, para luego sentarse.
Se tapaba un poco las tetas, algo de pudor le había quedado. Aunque había ido demasiado lejos, ni ella se creía lo que estaba haciendo. Siguió el alcohol y siguió el juego y a mama le toco perder de nuevo. Afuera el corpiño, esas tetas estaban libres a la vista de aquellos tipos que se deleitaban. Los que estaban en ropa interior ya la tenían dura. Ella logro zafar hasta que le toco perder de nuevo. Se saco la bombacha estando sentada. Con un brazo se tapaba un poco las tetas y con el otro la vagina.
Ahora todos empezaban a perder, uno a uno se iban sacando la ropa interior.
"Uh!" Exclamaba ella, sin poder creer que estaba viendo tantas porongas
duras por ella. Estaba totalmente desinhibida, se sentía bien estar desnuda con ese calor.
"Anita, ordeñame como a la vaca." Le decía uno mientras ella reía. Hizo que lleve su mano hasta su verga erecta y lo empiece a pajear lentamente, con sus suaves manos.
"Yo también quiero, tenes dos manos Ana." Le decía el que estaba al lado. Ella ya borracha no podía coordinar la masturbación a las dos pollas, sobria tampoco podría seguramente. Así que ahí estaba ella, en el campo, en el medio de la nada masturbando a sus sobrinos lejanos o lo que fuesen.
"Todos la tienen tan grande en el campo?" decía ella mientras los pajeaba. Todo era pura carcajada.
Uno tiro el vestido de mama en el suelo e hicieron que ella se acostase allí, era hora de que empezase la acción.
Ella se acostó con una sonrisa como nunca había tenido en la vida. Probablemente por la ebriedad. Uno de los que estaba siendo masturbado le abrió las piernas e intrudujo su pene lentamente.
"Ohhh". Jadeaba ella, con voz de putita.
"Ahhhh si, que conchita apretada." Decía mientras le hundía la verga en dandole despacio
"Uhhh, ahhh." Solo jadeaba ella. Los demás se pajeaban sin perderse detalle del espectáculo.
El tipo fue acelerando el ritmo de a poco, hundiendo la verga cada vez mas, la cual era un poco mas grande que el promedio.
"Ahhh siii sii." Gemía ella como hembra en celo.
Una luz ilumino el espectáculo, se escuchaba el sonido de un motor acercándose.
"Vaya me estaba perdiendo la fiesta y que fiesta!" Decía Leo bajándose de su moto.
"La noche es larga y la tía Anita nos esta entreteniendo a todos."
Mama estaba allí abierta de piernas siendo garchada por uno de los chicos. Cuando se percato de su presencia le agarro algo de pudor.
"Nooo. no me veas. Ahhhh." PLAF PLAF PLAF. Estaba aumentando el ritmo de las embestidas.
"ohh, voy a acabar. No aguanto mas. ahhhhh." Jadeo acabandole dentro. Vaciándose las pelotas en la vagina de mi mama.
El semen le brotaba de la concha, chorreando y manchando el vestido que estaba debajo. Mama estaba abierta de piernas frente a todos. se tapó con las manos la vagina.
"Pero Ana siya te vimos todo!"
Leo se estaba desabrochando el pantalón dejando ver si la leyenda era cierta o no.
"Oh dios mio". Dijo mama. Lo mismo que dijo al ver el caballo montando a la yegua. Ella seria su hembra, su yegua.
Era grande y aun estaba flácida. Se acerco a mama y ella aun sin salir del asombro agarro su pene. La meneaba suavemente, admirándola. Era la pija mas grande que había visto en su vida. El le sobaba las tetas mientras mama lo masturbaba, no sabría como haría para tener ese pedazo dentro de ella. Sentada sobre el vestido se llevo aquel monstruo a la boca. Recorría el glande con la lengua para luego succionar toda la verga. Cerraba los ojos para saborearlo.
"Ohh si tía. sii." Después de haber hecho tantas mamadas ella ya sabia bien como volver loco a un hombre.
"Dejá de llamarme así". Decía ella sacándose el pedazo de la boca para volver a mamar. Al mismo tiempo le masajeaba los huevos. Los demás sentían un poco de envidia del pedazo que cargaba Leo y de la devoción con la que ella se la chupaba. La lamia, la chupaba, la besaba, adoraba aquella verga.
Ya estaba bien dura. Lista para ser enterrada en la concha de mi madre. Ella tomo su bombacha y se limpio como pudo la leche que salia de su vagina. El se sentó en la tierra e hizo que mama bajara lentamente, hundiendo la concha en su verga. Al principo solo hacia que entre la puntita, hasta que fue bajando mas y mas.
"ohhh si, ohhhh." Jadeaba como loca ella, con un poco de dolor. Ahhhh. Que grande es! ohhh. El le frotaba el clitoris haciendo que explote de placer.
"ohhh ohhh ahhhhh." Gemia mama, teniendo espasmos, moviendo sus piernas, estaba teniendo un orgasmo. Arqueaba su cuerpo, con una gran expresión de placer en su cara.No se detendria alli, queria mas de su verga. Paro solo un rato y de nuevo se subio a cabalgar esa polla, esta vez de espalda a el y de frente a aquellos pervertidos. Bajaba despacio hasta que ya estaba casi toda dentro de mi madre. Las tetitas de mi madre se movian al ritmo de la cogida. Todos se pajeaban como mandriles.
"Ohhh si dame esa pija nene. AHhhh"
"Ahhhhhh, Jadeaba ella". Casi poseida. Leo la puso sobre el vestido, en posición de cucharita y le daba verga a su gusto hasta que no pudo contenerse mas. La saco y le acabo encima, enchastrando sus tetas y su abdomen.
"Ahhhh si Ana. Sos increible."
"Quiero mas." Decia ella tirada en el suelo. Abriendo bien sus piernas, invitando a otro chico. Inmediatamente otro se hizo cargo del pedido, le levantaba una pierna tomandola de la pantorrilla mientras le daba sin piedad. No la tenia tan grande pero llegaba hasta el fondo y le daba con mas vigor.
"ohh si. dame mas. Cuantos machos tengo para mi."
"ohh si tia" Decía el, que apenas la conocía, pero le daba morbo.
Ella le seguia el juego. "Si nene, follate a tu tia. Ahh mas. así, uhhh."
"No aguanto mas!"
"Dame la lechita nene." Decía ella que estaba mas puta que nunca, sacando la lengua para recibir la descarga. ella mientras el la sacaba y le apuntaba a la cara largando chorros de leche. Al acercarle el miembro a la boca no se nego a chuparlo, para el era el cielo.
Recupero un poco el aliento mientras habia mas pijas apuntando hacia ella. La tomaron suavemente de los brazos para que se ponga de pie y la pusieron en cuatro agarrandose de la mesa. Alli se turnarían para gozar con mi madre.
-Ahhh, valió la pena la espera. ahhh si Ana.
PLAF PLAF PLAF. Ninguno atenuaba el ritmo, todos la querían coger duro.
Todos querian disfrutar de su concha.
El pendejo que estaba espiando finalmente decidió aparecer en escena. Todos rieron al verlo. Estaba con su verga dura y se había estado pajeando viendo la escena porno en vivo.
Ellos mientras tanto se iban turnando a mama, que alternava entre las vergas restantes. Estaba de espaldas en cuatro patas por lo que no podía ver nada.
Mira lo que te vas a coger. Le decían al pendejo. Que sin duda alguna era afortunado. Le cedieron el lugar y no se acobardó. Ella no sabia nada, pero ahora era el quien la penetraba. Como podía, a su manera. Dando su mejor esfuerzo.
Mi madre gemia tambien al ser garchada por él sin sospechar de quien se trataba. Su verga juvenil entraba y salia de su concha. Dominaba y penetraba bastante bien a su hembra. Luego de un rato otro lo saco reclamando su turno y asi siguieron bombeando a mi madre. Dandole entre todos, continuaron con el mete saca.
Ya estaba por amanecer, pasaron horas desde que empezaron a jugar con las cartas.
"Anita, ordeñame como a la vaca." Dijo uno sentandola, apoyandola contra el respaldo de un aciento y acercando su verga hacia ella. Ella lo pajeaba despacio, suavemente, con las dos manos hasta que el empezo a bramar como un toro tirandole toda la leche arriba, liberando toda su excitacion, manchando su cara y sus tetas de semen.
Luego se acerco otro al cual le hizo lo mismo, meneo su pija hasta que saco toda la leche. La estaban llenando de semen.
Por ultimo pero no menos importante se acercó el pendejo. Ella casi se sorprendió al verlo pero a esta altura ya no le importaba y casi ni reconocía nada. El sin embargo no queria ser ordeñado, acerco su verga hacia la boca de mi madre e hizo que se la mame. En realidad era el quien tomaba la cabeza de mama y hacia que la chupe. Los demás ya se habían vaciado los huevos pero de no ser asi seguramente les hubiese excitando tremendamente ver el chico se cogía a mi madre por la boca.
El no queria acabar en la boca ni en la cara de mama. Se habia quedado con ganas de mas. Asi que la dio vuelta, mama ya parecia una muñeca y apunto a su culo. Era el unico que se habia atrevido a reclamar el ano de mi madre. De todas formas era dificil imaginar a Leo follando por el culo a mi madre. La verga del chico fue entrando de a poco. Ella volvía a jadear, quejándose. No se sabia si lo estaba disfrutando o no, pero el mocoso si lo hacia.
-ohh si pendejo, dame esa verga en el culo. Dijo ella volviendo a ser una zorra.
El no aguanto mas y largo todo en el culo de mi madre, que chorreaba de semen.
Ya habia amanecido, la fiesta había acabado. Todos habían acabado. Mi madre había tenido varios orgasmos. Le pusieron el vestido, que estaba manchado de semen y de tierra. El que la había traído la volvio a llevar a la casa, ella se sujetaba, con la mano derecha bajaba hacia su bulto. Estaba hecha una viciosa.
Ya en la casa el se dio cuenta de que seria difícil disimular lo que había ocurrido, una de sus hermanas tuvo que ayudarlo.
"Se han cogido a la tia! Que barbaridad." Decía incrédula, pero era de fiar.
La metieron a la casa, mama se veia fatal. La chica se encargaría de todo. Asi que los tipos se fueron a descansar, sumamente satisfechos. Ella por su parte le saco el vestido a mama, ella estaba casi dormida.
"Que cuerpo tenes tia..."
No lo penso dos veces, el pecho tenia rastros de semen, se ve que eran todos morbosos en aquel campo. Le lamio la teta, recorriendo con su lengua el pezon, probando la leche que quizas era de su hermano. Ella tambien iba a divertirse un poco con mi madre.
"Te gustó como te cogieron los chicos putita? eh?" Estaba bastante caliente la chica.
"Que buena concha tenes. A ver a que sabe la concha de una mujer fina." Decía al contemplar sus labios que tenian rastros de leche.
Acerco su lengua y probo la concha de mama. Todos la habian penetrado, pero solo su hermano habia acabado alli, eran sus rastros de leche los que tenia. Una mujer sabe como complacer a otra mucho mas que un hombre, asi que en cuestion de segundos hizo que tenga otro orgasmo.
"uff tia ¿Tuviste bastante por hoy no? Ya probaste todas las vergas. Solo falta que se la chupes al caballo jajaj."
Decia mientras la llevaba al baño para bañarla. La lavó completamente, limpiando todos los restos de semen. Dejándola limpita, la llevo a la cama de nuevo.
No te duermas que no quiero qeu el tio te encuentre asi. Te tenemos que vestir con algo. Revisó las pertenencias de mama y le puso un corpiño y una bombacha. Antes contempló su cuerpo desnudo upor última vez. La vistió con un camison que encontro y la dejó dormir plácidamente. Agotada por la garchada que le habian dado. Se llevo el vestido para eliminar la evidencia.
Mi madre durmió hasta tarde porque recien me contesto un mensaje que le había mandado despues del mediodia. Charlamos un rato y me dijo que despues seguíamos hablando porque era hora de la siesta y quería descansar ya que luego iba a pasear al cerro con Leo y los chicos.
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Espero que les haya gustado. Comenten que siempre motiva leer comentarios y digan si quieren algun capitulo mas de este viaje al campo.
Saludos!
6 comentarios - (Relato) Mi madre y el viaje al campo para pasar las pascuas