Tía Fabiana 7

Tía Fabiana 7.
Esta ves les contare algo que me ocurrió con uno de mis primos, es decir, los hijos de mi tía Fabiana.
Como mencione antes, mi tía tuvo cinco hijos, dos mujeres y tres hombres, que por cierto, mis dos primas, Paola y Neli eran como mi tía, pero con culos mas grandes y mas jóvenes, de mas esta decir que también me las quería coger.
Pero esta historia no tiene que ver con ellas, si no con mi primo Pablo, un negro flaco, como su padre, tampoco servía para nada, sin trabajos, sin estudios, solo fumaba y tomaba.
Resulta que me compre un celular nuevo, y el que tenia antes estaba como nuevo, por lo que lo formatie y quería venderlo.
Un día me llega un mensaje de un numero que no tenia agendado, era Pablo preguntándome si aun tenia mi celular para vender, le dije que si y el precio, a lo cual el acepto comprármelo, pero que enviaría la plata a mi casa, ya que el no iba para no ver a mi tía, debido a que cuando se separo, mi tía fue odiada por todos sus hijos, una ves escuche que mi primo Pablo dijo “Pelada chupa verga esa” refiriéndose a mi tía, si el supiera lo que le hago…
Pero en fin, acordamos que el me enviaría la plata con un amigo, el día llego y el amigo me entrego mi pago, pero al contarlo note que faltaba casi la mitad, le escribí a mi primo y me dijo que el resto me lo pagaría mas adelante, cosa que yo sabia que no ocurriría, le insistí pero al final me bloqueo, estaba furioso, pero fue mi error por confiar en ese tipo de gente, pensando que el lazo familiar lo obligaría a no cagarme.
No le dije nada a nadie, solo quería agarrar al negro ese y meterle una paliza, pero al ver a mi tía, se me ocurrió que a lo mejor podría vengarme de otra forma, seguro en la cabeza de mi primo el pensaba que mi tía los había traicionado para irse con alguien mas, y se que esto lo ponía furioso, por lo que lo aprovecharía.
Espere a estar solo con mi tía, me dirigí a su habitación, estaba mirando tv acostada en su cama con ropa ligera.
Me acosté a su lado y comencé a desnudarla.
-Tía Fabiana cada ves que este con vos te quiero en pelotas- 
Al terminar de quitarle su ropa, la coloque boca abajo y yo me recosté boca abajo usando su culo como almohada e inhalando ese olor a orto.


También le mordía sus nalgas, las chupaba, las lamia, hacia de todo con sus carnes.
La puse de costado, me coloque detrás de ella y se la metí en la concha, pero no me moví, solo me quede ahí haciendo cucharita con esa negra mugrosa.
Nos quedamos así unos treinta minutos sin decir nada, yo la manoseaba completamente y sentía como su respiración se aceleraba, entonces se la saque y me coloque sobre ella.
-Conoces el sabor de tu concha?- le pregunte, y se la metí en la boca casi hasta la base, quedándome ahí quieto.
-Ponete cómoda, no te pienso sacar la verga de la boca en una hora-
Dicho y hecho, así estuvimos una hora entera, la cara de la negra me miraba, de ves en cuando le lloraban un poco los ojos y largaba una que otra arcada por que se ahogaba un poco.
En cierto punto saque mi celular nuevo y encendí mi cámara.
Ella hizo el gesto de no con la cara.
-Cállate mugrienta, si te quiero grabar te grabo, no te preocupes que nadie lo va a ver- mentí.
Le saque la verga, me pajie un poco y le acabe toda la cara, ella cerro los ojos y la boca, pero con un dedo junte la leche que caía por su cara y se la lleve a la boca varias veces, luego le restregué la cabeza de mi verga por toda su cara, desparramando mas la leche y le escupí.
Al terminar el video, me acosté a su lado y veía como quedo, me gusto el resultado, entonces guarde mi celular.
-Ey negra, ponete en cuatro así te chupo la concha- lo cual obedeció y chupe esa concha negra hasta que acabo.
-Jaja te gusta eh trolita- le dije y le di una cachetada suave en la cara.
Al hacer esto ella me dio una mirada fija, como desafiándome, me tuve que ir o la terminába garchando todo el día, que negra hija de puta como me deja la verga.
Pero tenia mis prioridades, recorte el video y le deje solo la mitad de la cara a mi tía Fabiana, que no se vieran sus ojos, pero sabia que su hijo lograría reconocerla.
Me compre otro chip y le envié el video a Pablo de su madre con la cara toda lecheada, cuando marco el visto, al minuto me llego un audio de el furioso e insultando y amenazándome con su lenguaje de barrio, le envié una carita riendo y lo bloquee.
Bueno, me había vengado, pero aun seguía caliente debido a la cara de mi tía, así que volví a cogerla por una hora mas, negrita trola.