Mi esposa y sus hermanas

Hola, soy casado con una vida casi normal y entre las cosas perversas que pasan en mi vida les contaré la siguiente. Mi esposa tiene dos hermanas y las tres son de un cuerpo delgado con tetas redondas y firmes y culo paradito, por lo regular las tres son muy deseadas por donde pasen pero en esta ocasión todo sucedió dentro de casa, yo ya sabía que mi mujer y una de sus hermanas se bañaban juntas desde que eran chicas y para mi era algo normal, incluso a estas fechas se siguen bañando juntas cuando hace mucho calor y el pretexto es que así ahorran agua, un día de estos como siempre se metieron a bañar juntas pero a mi me gano el morbo y me acerqué un poco a la puerta para ver si alcanzaba a ver algo del cuerpo de mi cuñada desnuda en la bañera ya que en ocasiones la he visto casi desnuda y la verdad me encanta, bueno pues cuando me acerqué a la puerta grande fue mi sorpresa y mi ereccion casi inmediata cuando escuché unos pequeños gemidos que venían de adentro del baño, los gemidos eran de mi mujer y yo me quedé muy sorprendido, mi esposa estaba dentro del baño con su hermana y al parecer la estaba pasando bien sexualmente con ella, me agache a ver si alcanzaba a ver por debajo de la puerta y vi como estaban paradas una frente a la otra con las piernas abiertas y semiflexionadas, se veía como se movían de arriba hacia abajo como que las dos se estaban tocando su vagina, en unos instantes las dos ya estaban gimiendo, lo más excitante era ver que estaban desnudas una frente a la otra y más que son hermanas, siguieron así un rato hasta que sus gemidos se apagaron pero sus movimientos seguían, vi que se acercó la una a la otra y pude deducir que se estaban besando porque ya no alcanzaba a ver hacia arriba ya que la apertura de la puerta por abajo era muy pequeña, la mano de su hermana subió me imagino que para tocarle las tetas, de repente comenzaron a gemir de nuevo cuando escuché que mi cuñada le dijo a mi esposa “me toca a mi porque la ves pasada yo te lo hice a ti” yo me quedé esperando exitadisimo con la vrga ya de fuera cuando vi que mi cuñada se sentó en la tasa y comenzó a abrir las piernas lentamente y vi como mi mujer comenzó a ponerse de rodillas y a meter la cabeza en medio de sus piernas, efectivamente comenzó a hacerle sexo oral a su hermana, mi cuñada comenzó a gemir suave pero cada ves sus gemidos subieron de intensidad cada ves más y más hasta que le dijo a mi esposa “ya abre la regadera porque se va a escuchar” el baño está en el piso de arriba y es baño privado de una habitación y como nunca nadie está en esa habitación cuando alguien se baña pues se explayaban en sus gemidos sin precaución alguna, mi esposa rápidamente abrió la regadera y regreso a lo suyo en medio de las piernas de su hermana, mi cuñada ya estaba gimiendo demasiado y yo obviamente me estaba haciendo una al ver ese espectáculo, vi como mi mujer dirigió su mano hacia donde estaba chupando y supe que en ese momento la comenzó a dedear, mi cuñada la agarro de su cabeza y comenzó a hacer movimientos con ella y escuché que cada ves le pedía más y más y mi mujer comenzó a mover más rápido su mano cuando escuché que mi cuñada estaba experimentando un orgasmo al momento que lanzaba un gemido tras otro cuando vi que por el brazo de mi mujer comenzaba a escurrir el fluido proveniente de dentro del sexo de mi cuñada, parece que tuvo un orgasmo espectacular que terminó con un abrazo de mi cuñada hacia mi esposa bajando de a poco la respiración acelerada que tenía. A los pocos momentos escuché a mi mujer que le dijo a su hermana “ya vamos a bañarnos cochina, me dejaste toda mojada del brazo” a lo qué mi cuñada replicó “hay cálmate que tú me dejas igual” me sorprendí más cuando escuché a mi esposa decir “ashhhh a ver cuando se mete también Yadira con nosotras” Yadira es su otra hermana y comenzaron a reír cuando mi cuñada dijo “pero ella es más escandalosa y nos van a oír” termino mi esposa diciéndole “ashhh pues ya vamos a un hotel como la otra ves” , acto seguido entraron al área de la regadera y cerraron la puerta de cancel para continuar con su platica que ya no pude escuchar por el ruido de la regadera. Yo me quede pensando cuantas veces lo han echo y yo ni enterado de esa faceta de mi esposa y sus hermanas. Quede exitadisimo y bien deslechado por esa experiencia que acababa de pasar, regrese al piso de abajo y a los minutos bajaron ellas bien bañaditas y platicando de banalidades del día a día.