You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Paula De Mora & Ingrid Grudke

Hola. Este relato es una fantasía que tengo hace muchos años con dos de mis 3 modelos favoritas. Paula de Mora e Ingrid Grudke. Parte de una fantasía de orgía hardcore en los bastidores de algún desfile de modas. Esa foto de un desfile me di la idea y en párticular Paulita en ese outfit me saca leche hace años.
PD: Si hay otros fans de Paulita please haganmelo saber para paja x chat.

***
EDITADO: Me decidi a hacer aunque asea una primera parte. Soy nuevo escribiendo relatos eróticos y me da bastante pudor jaja pero acá esta.
***

Paula De Mora & Ingrid Grudke

Fueron conducidas a nalgazos en sus culos hacia el sofá rojo del VIP. Los chasquidos se oían fuerte en en la habitación. Los hombres se masturbaban ansiosos por probar los culitos entangados de las modelos misioneras. Paula e Ingrid disfrutaban de este cambio. En la vida real, al otro lado del telón siempre eran recibidas con buenos tratos y gentilezas dada su fama. Pero acá todo eso dejaba de existir. La necesidad de actuar constantemente en su rol de chicas de tapa desaparecía y eso las excitaba. Podían ser cualquiera y hacer cualquier cosa.

Treparon al sofá rápidamente y quedaron en cuatro con sus culos hacia arriba. Las caras apoyadas contra el respaldo muy cerca la una de la otra. Tras recibir unas ultimas nalgadas (fuertes pero indoloras) uno de los hombres dijo:
- Tengo muchas ganas de probar el culito estrecho de una modelo hoy.

Acto seguido Paula de Mora sintió unos dedos gruesos correr a un costado su tanga roja y una lengua ensalivada pasar por los cachetes de su culo. Ingrid, quizás por ser más famosa, no tuvo esa gentileza. En la ansiedad por cojerse a la famosa Ingrid Grudke, el encargado de su culo paso a chuparlo de inmediato, metiendo la lengua en su interior y empujándola cada vez más adentro. Le apretaba los cachetes del culo con fuerza y deseo lujurioso. Ingrid lanzó un gemido fuerte que hizo su pecho temblar.

La idea de que sus culos estuvieran siendo chupados con hambriento deseo por un grupo de extraños era tan retorcida como excitante para ellas. Pero no habían pensado nunca que además de lamer sus orificios también los penetrarían de forma tan fime con sus lenguas. El fan de Ingrid hacía movimientos cada vez más directos y alternaba las acometidas con nalgadas. Sacaba la lengua, abría el culo de Ingrid para atestiguar su propia obra y volvía a chupar. El de Paula abandonó gentilezas y escupió dentro de su ano para empezar a dedearlo y pajearse cuando no estaba chupándolo.

Rápidamente los murmullos de placer empezaron a hacerse más constantes y fuertes. Se podía distinguir el acento misionero en sus grititos. Eran como un canto constante pero bajo. Paula miró a los ojos de Ingrid y se sintió excitada de estar con ella. Mientras gemían sus bocas empezaron a acercarse y finalmente se entregaron en un beso muy húmedo y largo. Ingrid sintió el gusto del labial de Paula de Mora, Paula percibió el perfume exquisito de la rubia de ascendencia Alemana.

- ¿Que están esperando? - Dijo Ingrid mirando atrás a los otros dos hombres que hasta ahora solo se pajeaban mirando todo, tan absortos como tímidos. - ¡Metannos esas Pijas adentro!

La mirada de Paula de Mora hacia los faltantes era sumamente invitante. En sus ojos quedaba claro que estaba regalada a lo que ellos quisieran hacerle. Pero en los ojos de Ingrid había algún tono imperativo, casi de desafió a su hombría. Los sujetos se aproximaron. Mientras le chupaban el culo frenéticamente Ingrid Grudke sintió una mano en el cuello que la aferró por la nuca. Una pija de tamaño enorme se clavó en su boca tan de improviso que la forzó a una arcada. Paula encontró otra ya dura que ingresó rosando su rostro hasta adentrarse en su boca desde el costado izquierdo.

- Abrí bien la boca morocha petera. - Dijo el sujeto. Saco la pija y con los dedos abrió bien grande las fauces rojas de Paula. Escupió dentro con ímpetu. - Así esta mejor. - Sentenció y volvió a meter su miembro grueso en la boca de Paula. Empujó su cabeza hacia el miembro y con un movimiento de caderas se dispuso a cojerle la cara mientras ella lo miraba a los ojos con sus bonitas cejas arqueadas fruncidas por el placer y la intriga de lo desconocido.
- Quiero cojerme la carita que sale en las revistas de moda. -Decía el hombre al cual le faltaba un diente. - Su pija empezó a acelerar entrando y saliendo de los labios de Paula con suma facilidad, provocando un ruido viscoso cada vez más fuerte.

En el cuarto VIP Paula e Ingrid tenían sus culos bajo el domino sediento de un hombre para cada una y en sus bocas las porongas duras se metían cada vez más rápido y más adentro de sus bocas, cosquilleando en sus gargantas. Quienes se ocupaban de sus culitos se pusieron de pie y comenzaron a nalgear con las puntas de sus vergas los cachetes del trasero como si se prepararan para penetrarlos. Comprendiendo, Paula e ingrid se pusieron de pie y dejaron que estos dos se sentaran en el sofá. Las tomaron por las caderas y tras otras nalgadas las sentaron sobre ellos penetrando sus culos. Cuando los primeros pijazos tomaron ritmo, la saliva acumulada en sus anos se deslizo fuera, abrillantando los miembros y formando hilos viscosos que se desvanecian con cada penetración.

Las modelos no estaban acostumbradas a cojidas así. Por lo que sus gritos iniciales fueron muy fuertes. La voz de Paula se quebró en un gemido largo cuando la pija que se ocupaba de su culo empezó a martillar desde abajo. Pasó de un murmullo calenturiento a un grito entrecortado por las rápidas penetraciones. Ahí, quien se encargaba de su boca retiró un poco el corpiño rojo dejando sus tetitas operadas a la vista de todos. Paula lo miró rogando que se la metiera en la boca de nuevo. Pero este soló se pajeo observando las tetas de la modelo ir de arriba abajo. No todos los días se veía a una chica de Ricardo Piñeyro siendo garchada como en unaporno más barata.

Ese outfit de Gente lo tenía loco. Cuando la vio en el desfile minutos atrás había fantaseado con oler y pajearse con esa tanguita colorada. Ahora empezaba a preguntarse si no podría enredarla en su miembro para meterla en la boca de Paula.

famosas

El penetrador, mientras, puso una mano en su teta derecha, apretó con fuerza y empezó a reventarle el culo con vergazos tan fuertes que hacían ese ruido clásico de rebote. El cuerpo flaquito de Paula temblaba con cada acometida y sus gemidos se interrumpían uno con el otro. El espectador disfruto pajearse viendo como la carita de Paula se transformaba en el momento de mayor acometida. Tenía el pelo oscuro un poco pegoteado en su cara inocente y los ojos miel bien abiertos como si intentara contener en ella la fuerza que la invadía por el culo sin parar. Contentó de ver esto el sujeto volvió a acercar la pija a la cara de Paula y ella, tomándola con una mano, se la enterró hasta la garganta y habría deseado que fuera hasta el esófago si era posible. El cabello púbico de las bolas le pico en la barbilla a la modelo. Tuvo una arcada fuerte y cuando retiró el miembro expulsó una saliva pegajosa mezclada con líquidos ajenos.

Ingrid Grudke parecía tener más resistencia que Paula. La pija de su cojedor anal daba estocadas constantes pero un poco más lentas que el de su compañero. No era la falta de ganas lo que lo detenía sino el deseo de gozar el momento. El culo de Ingrid Grudke se sentía muy estrecho. Penetrarlo constantemente pero a un ritmo moderado era como degustar un manjar que pone mejor a cada bocado. Nadie quería acabarse rápido esta noche, así que era mejor controlarse.

Ingrid gemía con voz más grave y respiraba como si hiciera ejercicio. Ella tampoco quería apresurarse y tenía los tacones sobre las piernas de su cojedor. Sentía esta poronga, no muy larga pero si ancha, abriéndola cada vez más y miraba la pija que había estado en su boca hace pocos segundos gotear su propia saliva. En su hombro derecho tenía rastros viscosos y brillantes de la misma.

Modelos Argentinas

A una señal que no fue capaz de percibir, la pija en el culo se retiró por completo y se volvió a meter más adentro que nunca. Ingrid gritó fuerte pero el gemido fue ahogado por la chota que estaba colgando cerca de su boca. Se metió por el costado haciendo sobresalir la cabeza en el cachete izquierdo. En una serie de movimientos precipitados (y con ayuda de la mano derecha) el que le cojia la boca parecía estar pajeándose con sus labios. La cabeza de la pija entraba y salia por el costado de su boca y con la mano del sujeto se mantenía firme en esa posición. Sintió ademas que le quitaban en parte el corpiño negro y le daban golpecitos indoloros en los pezones.

- ¡Vamos Putas! - Dijo uno - ¡Falta mucho todavía y Es hora de que se acostumbren a ser esclavas


relato erotico

Las dos ya tenían una pija clavada en el culo. Sus tangas promocionales de "gente" corridas a un costado no  podían evitar los pijazos cada vez mas contundentes que recibían en el sofá, boca arriba.  Otros dos se adueñaban de sus rostros, introduciendo sus vergas hasta la garganta mientra sus tetas subían y bajaban con los brasieres semiquitados. 

en el backstage sus gemidos se perdían con el retumbar de los parlantes en la pasarela delante. Los presentadores anunciaban tal y cual cosa al publico mientras detrás del talon y los reflectores cuatro tipos reventaban los culos de las famosas modelos sin cuidado.

¿Que más podría pasar?


Continuara (?)

2 comentarios - Paula De Mora & Ingrid Grudke

granate67
excelente fueron 10 puntos