Mi tia Sandra se convirtio en mi amante favorita (fotos)

Sandra, una tía caliente



En días pasados me encontraba en casa de mi novia y llegó de visita una prima de mi suegra, era una mujer contemporánea, a mi suegra de unos 46 para ser mas exactos, venia de visita desde el interior del país.

Nos presentaron y no paso la cosa de hay, a la mujer en cuestión la voy a llamar Sandra, sigo Sandra se estaba quedando en casa de una tía de mi novia y todo era normal, el fin de semana luego de la llagada de Sandra no reunimos en casa de mi novia para tomar unos tragos y pasarla bien, todo comenzó con unas cervezas bien frías y algo de música de fondo, todo iba bien contábamos chistes y la reunión estaba muy amena, pasaron las horas y se terminaron las cervezas y mi novia que estaba medio prendida dijo que sacáramos la botella de wisky que teníamos guardada.

Yo como estaba entrando en calor de inmediato la saque, en ese momento mi suegra se retiro porque no bebe licor fuerte y mi suegro hacia rato estaba durmiendo, nos quedamos mi novia Sandra y yo. como dije la cosa estaba entrando en calor y cambiamos la música y pusimos música bailable, todo estaba divino.

Esa noche Sandra llevaba una falda un poco mas arriba de las rodillas y con una pequeña abertura por los lados, nada descarado pero cuando se sentaba dejaba ver los bonitos muslos que tiene, para que se den una idea de cómo es Sandra, se las voy a describir, como dije tiene unos 42 años bien conservada, contextura mediana ni flaca ni gorda, ojos cafés claro, un pompis paradito y unos senos medianamente grandes, en fin una mujer madura y bien conservada capaz de hacer voltear a cualquiera.



Continuo los tragos comenzaron hacer efecto y la cosa se puso buena comenzamos a bailar primero saque a mi novia y luego a Sandra, hay que reconocer que baila muy bien, mi novia se canso de bailar y hay fue cuando comenzó todo.

Ahora les voy a contar como sucedieron los acontecimientos, mi trato con Sandra fue muy normal, al principio con respeto y ella misma rompió el hielo y comenzó a tutearme y me pidió que no la tratara de usted. en los días que pasaron nos la llevamos muy bien, y ese fin de semana cuando estábamos bailando ella me apretó y me dijo que mi colonia le encantaba y me pregunto el nombre, le respondí y seguíamos hay bailando apretaditos de manera involuntaria mi miembro comenzó a tomar tamaño, a mi me daba vergüenza que ella notara mi erección, así que trate de disimular y apartarme pero ella se dio cuenta, hubo un juego de miradas y Sandra me dio a entender que no le importaba, la canción se termino y de inmediato me pidió que bailáramos la otra, eso me dejo consternado, pero que se iba hacer mi novia en el sofá no se percataba de lo que sucedía, estaba casi dormitada por los tragos, así que tome la iniciativa de ver que sucedía y le comencé a decir halagos a Sandra, que era una mujer muy bonita que estaba bien conservada y todo ese tipo de cosas, ella aceptaba los halagos de muy buena manera , todo eso mientras bailamos se acabo el playlist y yo coloque un playlist de música salsa romántica, lo que ella le pareció super divino debido a que le encantaba la salsa, la tome por la cintura y ella paso sus brazos por encima de mis hombros y nos dedicamos a bailar muy apretaditos pegando ambas mejillas, la cosa se ponía coñor de rosa y ya para ese entonces tenia una erección muy poderosa, Sandra podía sentir por completo toda mi fortaleza.

Tome la decisión primero verificando que mi novia estuviera bien dormida, tome a Sandra una vez mas por la cintura ella se dejaba manera a mi antojo, le pedí que cerrara los ojos , sin titubear los cerro, la apreté contra mi cuerpo y fui dándoles besos muy cortos en su cuello, podía sentir como vibraba con cada beso, ya no podía aguantar mas pero hay no podíamos hacer nada así que le pedí que nos fuésemos de hay, Sandra acepto, llame a mi novia y le dije que me iba y que acompañaría a Sandra a coger un taxi, nos despedimos y salimos efectivamente agarramos un taxi pero no para la casa de la tía de mi novia donde se quedaba Sandra sino para un hotel.

Entramos y sin decir una palabra nos acoplamos en un solido beso, las lenguas buscaban el tacto de la otra con desesperación. de inmediato nos fuimos para la cama y comencé a acariciar los senos de Sandra por encima de la ropa, ella suspiraba nuestra respiración se aceleraba y ya la ropa comenzaba a ser despojada de los cuerpos, siempre en ningún momento se pronunciaba una palabra bastaba con los gesto, caricias y besos.


Cuando ya tenia en frente de mi los ricos senos de Sandra me abalancé sobre ellos dándoles unos apasionados besos y masajeando para darle mayor placer, Sandra se dejo tumbar hacia atrás para disfrutar mejor de todo las caricias que estaba recibiendo, seguí besando y comencé a bajar por el abdomen de Sandra hasta llegar ala falda que estaba ya toda arrugada, le di la vuelta desabroché el botón y volviéndole a dar la vuelta se la baje, dejando ver un prenda intima color negro de encajes, que gran suspiro deje salir de mis entrañas, un suspiro que estaba lleno de placer por lo que estaban viendo mis ojos.


Comencé a darle besos y a sentir su aroma, un aroma que ya dejaba notar el grado de excitación, con mucha delicadeza le retire la ropa interior y dejo ver a plenitud la grandeza de su sexo, tenia un sexo rasurado, de labios muy grueso y que dejaban ver un clítoris abultado por la excitación , sin pensarlo tome y con mis dedos temblorosos le abrí por completo los labios dela vulva y me sumergí en un largo y apasionado beso, cuando mi lengua entro en contacto con su sexo, Sandra soltó un quejido de placer, es indescriptible lo que sentí, el sabor de su sexo, déjeme decirles que todos los sexo tienen un sabor distinto y particular, Sandra tiene un sabor muy encantador, mi lengua estaba feliz por el banquete que se estaba comiendo y saboreando.

Sandra para ese entonces se retorcía y sin poder aguantar me pidió que ya la penetrara, yo le dije que todo a su debido tiempo, que me dejara seguir disfrutando, del dulce manjar que estaba disfrutando, continúe y déjenme decirle que ella tuvo un grandioso orgasmo el cual yo lo disfrute al máximo, fue entonces el momento en el que decidí que ya era hora de hacerla mía, me termine de quedar desnudo y tomando mi pene entre las manos lo lleve a la puerta del grandioso sexo de Sandra, sin muchos preámbulos la penetre sentí lo caliente del fondo de sus entraña, que sensación tan divina, comencé con movimientos suaves pero con cada acometida aumentaba la potencia de la embestida, al corto rato le estaba dando una de las mejores cogidas que le he podido dar a una hembra, estaba tan excitado que las dimensiones de mi falo no eran las normales, lo tenia mas erecto, eso solo me ha pasado pocas veces, pero es una experiencia increíble.


Cambiamos de posición y como sentía la proximidad de mi orgasmo, le pedí a Sandra que se sentara encima y ella se coloco en posición y comenzó con movimientos muy sensuales acariciándose los senos mientras se movía, en poco tiempo me estaba dando una galopada como pocas lo han hecho, de verdad sacio a relucir su experiencia, Sandra estaba super excitada y me percate que estaba disfrutando de otro orgasmo, se mordía los labio y se apretaba los senos con desesperación, una vez que termino le pedí que se colocara en posición de perrito y cuando estuvo puesta la penetre con muchas ganas y le pedí que se quedara quieta y me dejara hacer mi trabajo, la tome por la cintura y le di con todo lo que tenia en pocos segundos ya tenia en la puerta mi orgasmo, le avise que estaba próximo a acabar y ella me pidió que se lo depositara en sus entrañas, así que tome fuerza y tuve unos de las mejores eyaculaciones de los últimos tiempo, podía sentir el chorro de leche que me salía con fuerzas.

Me acosté al lado de Sandra y le dije lo mucho que me gusto, ella asintió con señales que también había quedado a gusto, estaba tan jadeante que no podía hablar, fue una experiencia muy grata la que tuve con Sandra, y le doy gracias a mi buena suerte y mas a la gracia que tengo con las mujeres maduras que me encantan tanto.