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Mi joven vecino 9

Mi joven vecino 9

Otra vez lo llamé a Hugo, delante de mi marido diciéndole que no lo podía ver en la semana que trabajaba con mi marido, no quería que se cruzara con el pendejo, la semana siguiente empezaba la facu y seguramente no se iban a cruzar, me dijo que el jueves a la noche pasaba por casa, toda una semana sin verme era mucho, que viera mi marido que hacía. Me encantó la situación, cuando corté con Hugo le dije a mi marido que él iba a venir el jueves a la noche, que era mucho tiempo sin vernos, enseguida note el bulto en el pantalón de mi marido…
-Te podes ir o quedarte, pero me parece que ya es tiempo que te empieces a quedar… a disfrutar de tus cuernos… eh… no te gusta papi… -le dije acercándome a él y apretando su bulto sobre el pantalón. – me encantaría que te quedes… que veas… y quizás te la dejo meter un poquito después que Hugui me llené… eh… te gustaría papi… eh…???
Lo llevé a la cama me desnude, me acosté boca arriba, le ordene ponerse un forro y venir a cogerme.
-Porque con forro…
-Porque se me canta… si preferís, sino te hago una buena paja… como gustes…
Totalmente desnudo, se puso el forro y vino a montarme, bien duro, como siempre estaba últimamente. Mientras el me bombeaba despacio le hablaba suavemente al oído.
-Estás siempre bien durito desde que sos cornudo… te gusta que me coja Hugo… hacía un montón que no te sentía tan duro… el jueves cuando él se vaya, me la vas a meter un poco… un par de viajecitos sin forro… me vas a sentir llena de su leche… sabés…
-No se si tengo ganas…
-No es cuestión de ganas… sino por un mes no me vas a tocar ni una mano… te vas a volver a pajear mirando videos… eh viejo pajero…
-Ah… que perra sos…
-Vos sos mi perro servicial… cada día tenes que ser más obediente y más dócil… eh perro viejo y cornudo… –le metí primero uno y después dos dedos en el culo, me pareció que se ponía más duro todavía.
-Vamos a tener que comprar algún juguetito para ese culo… está cada vez más goloso… eh…
-Que juguete… que decis…?
-Esos que usan las señoras que ves en tus videos… strapon les dicen no…?
Me miro no entendiendo nada, su cara estaba llena de asombro, como sabía yo que él miraba esas cosas?
-Seguro que eso te va a gustar eh… tenes ganas que te haga mi putita eh…
-Estoy muy cerca… -aviso.
-No llegues hasta que no me contestes, porque vas a estar en abstinencia sino… te preguntó de nuevo… tenes ganas que te haga mi putita…???
-Si… -dijo en un susurro.
-Si que…?
-Quiero que me hagas tu putita…
-Y llega perrita entonces… -dije metiéndole un tercer dedo en el culo, se corrió mucho más que lo habitual, que nunca es mucho. Nos quedamos un rato descansando en la cama.
Esa semana fue muy intensa con el pendejo, lo fui convenciendo que podíamos cruzarnos un día como por accidente cuando el saliera de la facultad con Martín, así veía la madura que se comía, todo esto se lo sugería cuando estaba caliente y de a poco le fue gustando la idea, yo le decía que era solo para que me viera, pero me gustaba jugar a seducir, me moría de ganas de ver como reaccionaba este Martín cuando me viera, sabiendo que el pendex le había contado lo que hacíamos. El pendex me aseguraba que él no le dijo nada que me había contado a mí que un día borracho se le había soltado la lengua, me encantaba la situación y no sabía hasta donde quería llegar, sólo sabía que me encantaba sentir lo calientes que estaban los hombres de mi entorno conmigo.
Accedió a este encuentro casual, me prepare para la ocasión, vistiendo bien ajustada pero tratando de no exagerar, me los cruce y el pendex me saludo,
-Hola vecina, como está…?
-Bien y vos… haciendo unos tramites… -lo miré al amigo era igual de musculoso que mi vecino pero más alto, mas cara de recio, de hombre diría. –
-El es Martín… un amigo de mi pueblo, la señora es mi vecina…
Me beso suavemente en la mejilla, ya me había mirado de arriba abajo, y su cara se ilumino cuando me recorrió con la vista.
-Que suerte tiene mi amigo… no habrá ningún departamento libre en su edificio… -dijo haciéndose el gracioso- da gusto tener semejantes vecinas…
Le sonreí y les dije que tenía que seguir con los trámites, me fui caminando cadenciosamente sintiendo como Martín me comía el culo con la mirada.
Al rato nos encontramos con el pendejo en su departamento, me desnudé del todo y lo monté sobre el sillón.
-Que te dijo tu amigo… -le dije
-No me cree que me coma semejante minón…
-Como no te va a creer… uds son dos pendejos preciosos, se pueden comer a quien quieran…
-Te gustó Martín? eh puta…
-Tiene unas manos fuertes… cara recia… bien de hombre…
Me dio un par de duros cachetazos en el culo
-Que puta sos…
-Sino queres saber… no preguntes…
Estuvimos haciéndolo después en silencio hasta que llegamos los dos, como siempre el pendejo seguía duro después de correrse. Fuimos a la cama y en cuatro me empezó a hacer el culo.
-Y le contaste que me hacés el culo.. eh…?
-No me acuerdo estaba borracho…
-Algo te debes acordar… decime que le dijiste… hoy me cogió con la mirada… -dije para que se calentara más.- no me vas a decir… malo…?
-Le dije que tenías un culazo y que te encantaba que te la metieran por ahí…
-Ah si que lindo… que más… pobre… debe querer probar…
-Y que te encantaba que te lo llenara bien de leche… y que eras una vieja puta que se tragaba mi leche cuando la chupaba…
-Pobre… debe tener ganas de probar…
-Que se quede con las ganas…
-Tendrías que compartir con tus amigos… para algo son los amigos…
Me empezó a cachetear la cola sin parar mientras me daba bien duro, yo volaba de caliente, me dio así bien duro hasta que llegó de nuevo ahora mucho más abundantemente.
Después de un largo rato de descanso nos fuimos a bañar juntos, otra vez me la metió como le encanta, contra los azulejos, mi pierna izquierda rodeándolo, suave, deleitándose con chuparme y besarme. Me pareció demasiada ternura.
-Me imagino que debe tener una buena pija Martín con las manos que tiene…
Otra vez cambió de ser suave a darme bien duro, con su mano derecha me apretaba el cuello como ahorcándome con la presión justa para disfrutar mientras me mordisqueaba los pezones y bombeaba bien duro.
-Que puta sos… -dijo acabando, y besándome después de su acabada mucho más suavemente.



3 comentarios - Mi joven vecino 9

pulporubio +1
Que capo!! Un relato espectacular. Para calentar a cualquiera. Van puntos.
pool360 +1
Vengo siguiendo la saga de relatos y cada uno supera al anterior. Un maestro.
Van 10!
Milferos
no hay más de esta historia??
sebirra +2
Algún capitulo más escribi, después lo subo