Buenas noches amigos. Les paso a contar un poco cómo se fue dando todo, con lo que casi mi mujer termina cogiendo con otro flaco.
Antes que nada me presento, obviamente no me interesa dar a conocer mi nombre, ni el de mi mujer, pero somos una pareja de 38 años, estamos juntos hace 15 años aproximadamente.
Siempre fui bastante pajero es la verdad, pero bueno antes habia tenido otra novia y no tuve suerte o no lo supe activar, o no tenía experiencia, con lo cual el sexo lo sufríamos en lugar de disfrutarlo.
Pero bueno luego conocí a mi actual y desde el primer momento congeniamos, eramos uno a la medida del otro, el sexo fue todo nuevo para mi, con lo cual todos los lindos recuerdos los fuimos descubriendo juntos.
No iniciamos la pareja vírgenes pero bueno muchas de las cosas las hicimos juntos por primera vez.
Quizás para que entiendan como arrancó todo les tengo que aclarar que no somos una pareja sexualmente exagerada, es decir no somos una pareja de pelicula porno, sino más bien una pareja normal con peleas, ideas vueltas, No somos una pareja de hacer locuras o locuras en cualquier lado.
Allá por los ocho años de relación empezó todo este morbo y esta liberación mental de la pareja. Aunque debo confesarles que actualmente está bastante frío el asunto a lo que alguna vez fue. Pero bueno en honor a la verdad no tiene porque ser esto un relato pornográfico con final feliz. Sino más bien una historia más de las muchas que les suceden a personas que transitan lo mismo la calentura de salirse del 1 a 1.
Una tarde noche estabamos en la cama, yo en bolas completamente y ella solo con bombacha tirada sobre mi pecho viendo algo en la televisión, y de la nada me surgió preguntarle algo sexual (en mi cabeza o la de casi cualquier hombre el sexo es algo recurrente)
- ¿Cuántas pijas conocés y tocaste? - le pregunté
- Cómo - haciéndose la boluda para ganar tiempo.
- Si, cuantas pijas conocés o te comiste. -Acá aclaro que no es algo que hablaramos abiertamente era más bien tabú, no es un diálogo normal nuestro, además que ella es bastante tímida. Y para esas cosas siempre trato de medir las palabras.
- No sé, dos la tuya y la de mi primer novio. Y vos cuántas "chochas" -me respondió, si...las personas a veces le decimos chocha, que se le va a hacer...
- Yo también dos, la tuya y la de mi primer novia... - Y ahí fue el momento de oro... fue un antes y un después en mi cabeza. Porque se me vino a la mente un comentario q solía reprimir y en ese momento lo largué de mi boca casi sin pensarlo.
- Deberíamos antes de morirnos conocés más cada uno de nosotros. Yo concihtas y vos pijas, no te parece? - Silencio...cuánto más silencio más me empezaba a asustar de haber metido la pata con un comentario fuera de lugar.... Pasaron probablemente 3 segundos, pero en mi cabeza fueron 10 minutos.
- Si, no? Deberíamos hacerlo. - Acá amigos míos me explotó la cabeza, es como que te abren una puerta con millones de posibilidades, a su vez se te llena el culo de preguntas, no sabés si te estan haciendo un cazabobos o te están midiendo...
Mi reacción automática fue una erección, que a decir verdad cuando la mano de ella pasa a 2 centímetros de mi sexo ya me activo a media hasta o al palo mal, pero ahora fue la cabeza, mi pensamiento, mis proyecciones lo que me excitaron. No me excitaba el hecho de pensar en mi chica con otra pija, sino en conocer esa parte del cerebro de mi chica que durante ocho años creí ausente.
En ese momento no hice mucho, simplemente fue el puntapié para muchas cosas que luego pasaron y cosas que se frustraron y cosas que ahora parece ya no interesar.
Pero amigos la sensación de tener a tu pareja y poder confesarle tus fantasías, deseos es el mejor combustible sexual. Eliminar la represión mental que tenemos. Aunque sólo sea para jugar, pero me ha pasado de estar cogiéndola y ella decirme (esto ya avanzada todas las charlas que en algún momento contaré): "Sabés que yo podría conseguirme 2 o 3 pijas no?" ... Amigos te agarra un fuego en las pelotas que no sabés si estás flotando o en un eterno orgasmo mental.
Bueno por ahora nada más, era contarles un poco como había arrancado mi experiencia, no podría decir "cuckold" porque en realidad va mas por el morbo de los dos, de mi morbo cogiéndome alguna otra minita que veo y me caliente (obvio que me de bola) y el morbo de verla a ella también cogida y conociendo otras vergas.
Saludos para todos y el que quiera contactarme si tiene alguna experiencia similar no dude en hacerlo.
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Antes que nada me presento, obviamente no me interesa dar a conocer mi nombre, ni el de mi mujer, pero somos una pareja de 38 años, estamos juntos hace 15 años aproximadamente.
Siempre fui bastante pajero es la verdad, pero bueno antes habia tenido otra novia y no tuve suerte o no lo supe activar, o no tenía experiencia, con lo cual el sexo lo sufríamos en lugar de disfrutarlo.
Pero bueno luego conocí a mi actual y desde el primer momento congeniamos, eramos uno a la medida del otro, el sexo fue todo nuevo para mi, con lo cual todos los lindos recuerdos los fuimos descubriendo juntos.
No iniciamos la pareja vírgenes pero bueno muchas de las cosas las hicimos juntos por primera vez.
Quizás para que entiendan como arrancó todo les tengo que aclarar que no somos una pareja sexualmente exagerada, es decir no somos una pareja de pelicula porno, sino más bien una pareja normal con peleas, ideas vueltas, No somos una pareja de hacer locuras o locuras en cualquier lado.
Allá por los ocho años de relación empezó todo este morbo y esta liberación mental de la pareja. Aunque debo confesarles que actualmente está bastante frío el asunto a lo que alguna vez fue. Pero bueno en honor a la verdad no tiene porque ser esto un relato pornográfico con final feliz. Sino más bien una historia más de las muchas que les suceden a personas que transitan lo mismo la calentura de salirse del 1 a 1.
Una tarde noche estabamos en la cama, yo en bolas completamente y ella solo con bombacha tirada sobre mi pecho viendo algo en la televisión, y de la nada me surgió preguntarle algo sexual (en mi cabeza o la de casi cualquier hombre el sexo es algo recurrente)
- ¿Cuántas pijas conocés y tocaste? - le pregunté
- Cómo - haciéndose la boluda para ganar tiempo.
- Si, cuantas pijas conocés o te comiste. -Acá aclaro que no es algo que hablaramos abiertamente era más bien tabú, no es un diálogo normal nuestro, además que ella es bastante tímida. Y para esas cosas siempre trato de medir las palabras.
- No sé, dos la tuya y la de mi primer novio. Y vos cuántas "chochas" -me respondió, si...las personas a veces le decimos chocha, que se le va a hacer...
- Yo también dos, la tuya y la de mi primer novia... - Y ahí fue el momento de oro... fue un antes y un después en mi cabeza. Porque se me vino a la mente un comentario q solía reprimir y en ese momento lo largué de mi boca casi sin pensarlo.
- Deberíamos antes de morirnos conocés más cada uno de nosotros. Yo concihtas y vos pijas, no te parece? - Silencio...cuánto más silencio más me empezaba a asustar de haber metido la pata con un comentario fuera de lugar.... Pasaron probablemente 3 segundos, pero en mi cabeza fueron 10 minutos.
- Si, no? Deberíamos hacerlo. - Acá amigos míos me explotó la cabeza, es como que te abren una puerta con millones de posibilidades, a su vez se te llena el culo de preguntas, no sabés si te estan haciendo un cazabobos o te están midiendo...
Mi reacción automática fue una erección, que a decir verdad cuando la mano de ella pasa a 2 centímetros de mi sexo ya me activo a media hasta o al palo mal, pero ahora fue la cabeza, mi pensamiento, mis proyecciones lo que me excitaron. No me excitaba el hecho de pensar en mi chica con otra pija, sino en conocer esa parte del cerebro de mi chica que durante ocho años creí ausente.
En ese momento no hice mucho, simplemente fue el puntapié para muchas cosas que luego pasaron y cosas que se frustraron y cosas que ahora parece ya no interesar.
Pero amigos la sensación de tener a tu pareja y poder confesarle tus fantasías, deseos es el mejor combustible sexual. Eliminar la represión mental que tenemos. Aunque sólo sea para jugar, pero me ha pasado de estar cogiéndola y ella decirme (esto ya avanzada todas las charlas que en algún momento contaré): "Sabés que yo podría conseguirme 2 o 3 pijas no?" ... Amigos te agarra un fuego en las pelotas que no sabés si estás flotando o en un eterno orgasmo mental.
Bueno por ahora nada más, era contarles un poco como había arrancado mi experiencia, no podría decir "cuckold" porque en realidad va mas por el morbo de los dos, de mi morbo cogiéndome alguna otra minita que veo y me caliente (obvio que me de bola) y el morbo de verla a ella también cogida y conociendo otras vergas.
Saludos para todos y el que quiera contactarme si tiene alguna experiencia similar no dude en hacerlo.
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7 comentarios - Como se abrió mi relación
Tener esa confianza y disfrutar la vida sexual incorporando otras personas es lo mejor.