Tras salir de trabajar en el bar, me fui a una fiesta en una nave, donde estaba mi novia. Al llegar me bese con ella y salude al resto de conocidos. Al ver a Carol me extraño que no estuviera su marido Alberto K y le pregunte por él. Esta me dijo que, hacia un rato, que había desaparecido con su hermano y alguien más, entre risas, por lo que supe que la desaparición suponía que algo de sexo habría detrás. Me tomé una cerveza rápida y tras coger otra me decidí a buscarlos.
En la planta baja no los encontré, así que subí a la de arriba, donde los encontré en un pequeño despacho. Allí estaba Alberto K, su hermano Carlos K, Carlos E y Mayte. Los tres estaban sin los pantalones, los hermanos sentados en un sofá, con Mayte de rodillas en el suelo, mamándosela a Carlos K y masturbando a Alberto K. Esta iba sin camiseta ni sujetador, que estaban tirados en el suelo, llevando solo una ancha falda negra, con estampado de flores blancas, tapando casi todo el negro y unas medias negras finas y transparentes, que la hacían unas ricas piernas. Carlos E estaba en una silla al lado de ellos masturbándose. Los tres tenían en la mano una copa de whisky con hielo, que levantaron como saludo al verme. Yo les devolví el saludo con mi cerveza.
Me reí y les dije que me parecía genial que aprovecharan el tiempo, a lo que Carlos K respondió que no quedaba más opción, ya el marido de Mayte no había salido. Mayte en ese momento, había cambiado y ahora se la comía a Alberto K y masturbaba a Carlos K. Me senté apoyado en el escritorio y seguí tomando la cerveza, mientras observaba. Al poco Mayte se levantó y se me acerco. No podía dejar de mirarla los pechos, cuyos pezones estaban durísimos. Me saludo y, tras un “que ganas de que vinieras”, nos empezamos a besar. Mayte agarro y acaricio mi paquete, mientras yo lo hacía con su culo. Esta me desabrocho y dejo caer mi pantalón. Agarro mi polla y me masturbo. Yo agaché la cabeza y la comí los pechitos, mordiendo esos duros pezones.
Mayte se arrodillo y comenzó a hacerme una mamada. Mi mano libre se posó en su cabeza, acompañando sus movimientos. Carlos K, Alberto K y Carlos E se vinieron con nosotros, la rodearon y, mientras brindábamos y bebíamos, Mayte nos la comía y masturbaba a todos.
Alberto K, despejo el escritorio de cosas y subió a Mayte. Esta se sentó, inclinada hacia atrás. Todos nos pusimos alrededor de la mesa, mientras Alberto K le subía la falda. Debajo de las medias, que la tapaban hasta la cintura, llevaba un tanga negro. Este acariciaba el coño tapado y nosotros el resto del cuerpo. Alberto rompió sus medias, se agacho y comenzó a comerla el coño, tras apartar el tanga. Carlos E y yo, nos agachamos para comerla las tetas, mientras acariciábamos sus piernas. Carlos K se besaba con ella.
Alberto K se levantó, se puso un condón y comenzó a follarla. Yo comencé a mordisquear su pezón, cada vez mas duro. Mayte se acabo tumbando para mamarnos y masturbarnos al resto. De vez en cuando golpeábamos su cara con las pollas. Una de mis manos seguía acariciando su pecho. Alberto se apartó y cogí yo su puesto. La comí un poco el coño, antes de colocar sus piernas en mis hombros y follarla su mojadísimo coño, tras ponerme el condón. Mayte seguía mamando y masturbando a los demás. Mis manos acariciaron sus piernas de arriba abajo. Carlos E y Carlos K también tuvieron su turno para follarla.
Carlos E se tumbó en el suelo. Bajamos a Mayte y la llevamos donde el, para que se sentara encima suya y cabalgara. Carlos K y yo nos pusimos a sus lados y volvió a comérnoslas y masturbarnos. Alberto K, se arrodillo y la comió los pechos. Carlos E se quito y Alberto K se tumbó. Mayte se sentó nuevamente y prosiguió la cabalgada y las mamadas a Carlos K y a mí. Carlos E se puso a su espalda, la inclino un poco y se echó sobre ella, metiéndosela en el culo. Mayte gemía de gusto con la doble penetración, pero nosotros metíamos enteras nuestras pollas en su boca, tapándosela entera y apretando su cabeza contra nosotros. Posteriormente Carlos K se tumbó, con Mayte cabalgándole, mientras yo la follaba el culo. En nuestra doble penetración, esta se comía las pollas de Alberto K y Carlos E.
Me tumbe lateralmente en el suelo y coloque igual a Mayte, dándome la espalda. Levante una de sus piernas y comencé a follarla el culo. Carlos E se tumbo al lado de su cara y Mayte le comió la polla, mientras mis manos acariciaban su pierna levantada y sus pechos. Alberto K, frente a ella, se agachaba de vez en cuando, para que se la comiera también. Carlos K se masturbaba mirando, hasta que cogió el sitio de su hermano Alberto K.
Colocamos a Mayte a gatas en el suelo y Carlos K la follo culo y coño, mientras se la comía a Alberto K. Carlos E y yo, mirábamos masturbándonos. Luego Alberto K la follo culo y coño, mientras se la comía a Carlos E y los demás mirábamos. Cuando le toco el turno de follar ambos agujeros a Carlos E, Mayte me comió la polla a mí. Por fin me toco a mí, mientras se la comía a Carlos K. Primero la folle el coño, para luego hacerlo con su culo, ambos de forma dura.
Nos levantamos todos y nos pusimos alrededor de Mayte, que se puso de rodillas y comenzó un bukkake, mamándonoslas y masturbándonos sin parar. Todos nos fuimos corriendo en su boca y esta tragó todo. No soltó nuestras pollas hasta que estuvimos bien secos.
Nos vestimos y limpiamos y volvimos a la fiesta a seguir pasándolo bien, aunque no tanto.
En la planta baja no los encontré, así que subí a la de arriba, donde los encontré en un pequeño despacho. Allí estaba Alberto K, su hermano Carlos K, Carlos E y Mayte. Los tres estaban sin los pantalones, los hermanos sentados en un sofá, con Mayte de rodillas en el suelo, mamándosela a Carlos K y masturbando a Alberto K. Esta iba sin camiseta ni sujetador, que estaban tirados en el suelo, llevando solo una ancha falda negra, con estampado de flores blancas, tapando casi todo el negro y unas medias negras finas y transparentes, que la hacían unas ricas piernas. Carlos E estaba en una silla al lado de ellos masturbándose. Los tres tenían en la mano una copa de whisky con hielo, que levantaron como saludo al verme. Yo les devolví el saludo con mi cerveza.
Me reí y les dije que me parecía genial que aprovecharan el tiempo, a lo que Carlos K respondió que no quedaba más opción, ya el marido de Mayte no había salido. Mayte en ese momento, había cambiado y ahora se la comía a Alberto K y masturbaba a Carlos K. Me senté apoyado en el escritorio y seguí tomando la cerveza, mientras observaba. Al poco Mayte se levantó y se me acerco. No podía dejar de mirarla los pechos, cuyos pezones estaban durísimos. Me saludo y, tras un “que ganas de que vinieras”, nos empezamos a besar. Mayte agarro y acaricio mi paquete, mientras yo lo hacía con su culo. Esta me desabrocho y dejo caer mi pantalón. Agarro mi polla y me masturbo. Yo agaché la cabeza y la comí los pechitos, mordiendo esos duros pezones.
Mayte se arrodillo y comenzó a hacerme una mamada. Mi mano libre se posó en su cabeza, acompañando sus movimientos. Carlos K, Alberto K y Carlos E se vinieron con nosotros, la rodearon y, mientras brindábamos y bebíamos, Mayte nos la comía y masturbaba a todos.
Alberto K, despejo el escritorio de cosas y subió a Mayte. Esta se sentó, inclinada hacia atrás. Todos nos pusimos alrededor de la mesa, mientras Alberto K le subía la falda. Debajo de las medias, que la tapaban hasta la cintura, llevaba un tanga negro. Este acariciaba el coño tapado y nosotros el resto del cuerpo. Alberto rompió sus medias, se agacho y comenzó a comerla el coño, tras apartar el tanga. Carlos E y yo, nos agachamos para comerla las tetas, mientras acariciábamos sus piernas. Carlos K se besaba con ella.
Alberto K se levantó, se puso un condón y comenzó a follarla. Yo comencé a mordisquear su pezón, cada vez mas duro. Mayte se acabo tumbando para mamarnos y masturbarnos al resto. De vez en cuando golpeábamos su cara con las pollas. Una de mis manos seguía acariciando su pecho. Alberto se apartó y cogí yo su puesto. La comí un poco el coño, antes de colocar sus piernas en mis hombros y follarla su mojadísimo coño, tras ponerme el condón. Mayte seguía mamando y masturbando a los demás. Mis manos acariciaron sus piernas de arriba abajo. Carlos E y Carlos K también tuvieron su turno para follarla.
Carlos E se tumbó en el suelo. Bajamos a Mayte y la llevamos donde el, para que se sentara encima suya y cabalgara. Carlos K y yo nos pusimos a sus lados y volvió a comérnoslas y masturbarnos. Alberto K, se arrodillo y la comió los pechos. Carlos E se quito y Alberto K se tumbó. Mayte se sentó nuevamente y prosiguió la cabalgada y las mamadas a Carlos K y a mí. Carlos E se puso a su espalda, la inclino un poco y se echó sobre ella, metiéndosela en el culo. Mayte gemía de gusto con la doble penetración, pero nosotros metíamos enteras nuestras pollas en su boca, tapándosela entera y apretando su cabeza contra nosotros. Posteriormente Carlos K se tumbó, con Mayte cabalgándole, mientras yo la follaba el culo. En nuestra doble penetración, esta se comía las pollas de Alberto K y Carlos E.
Me tumbe lateralmente en el suelo y coloque igual a Mayte, dándome la espalda. Levante una de sus piernas y comencé a follarla el culo. Carlos E se tumbo al lado de su cara y Mayte le comió la polla, mientras mis manos acariciaban su pierna levantada y sus pechos. Alberto K, frente a ella, se agachaba de vez en cuando, para que se la comiera también. Carlos K se masturbaba mirando, hasta que cogió el sitio de su hermano Alberto K.
Colocamos a Mayte a gatas en el suelo y Carlos K la follo culo y coño, mientras se la comía a Alberto K. Carlos E y yo, mirábamos masturbándonos. Luego Alberto K la follo culo y coño, mientras se la comía a Carlos E y los demás mirábamos. Cuando le toco el turno de follar ambos agujeros a Carlos E, Mayte me comió la polla a mí. Por fin me toco a mí, mientras se la comía a Carlos K. Primero la folle el coño, para luego hacerlo con su culo, ambos de forma dura.
Nos levantamos todos y nos pusimos alrededor de Mayte, que se puso de rodillas y comenzó un bukkake, mamándonoslas y masturbándonos sin parar. Todos nos fuimos corriendo en su boca y esta tragó todo. No soltó nuestras pollas hasta que estuvimos bien secos.
Nos vestimos y limpiamos y volvimos a la fiesta a seguir pasándolo bien, aunque no tanto.
0 comentarios - Mayte sale bien llena de la fiesta