Cuando estaba aun en etapa de colegio segundario, vivía una situación algo particular. Mis viejos nunca nos hicieron pasar necesidades ni mucho menos pero la estabilidad laboral no era lo de el; siempre con algún proyecto, lo que lo llevaba a pasarla super bien por época y en otra quizás ajustarnos el cinturón. Ese vértigo lo llevó a asociarse con un amigo y trabajar en una panadería. la cosa era sencilla, el tipo ponía la panadería y mi viejo el lomo. no eran horarios normales para trabajar pero parece que monetariamente era redituable.
este amigo de mi viejo era un compañero de la secundaria. tipo de la edad de mis viejos casado con una mujer algo mas joven, luego confirme que tenia 37 años, sin hijos.
la realidad es que yo estaba en una etapa plena de hormonas y esta señora llamémosla Rosa, era lejanamente para mi una señora grande pero estaba fuertísima, morocha, tes oscura culona en su punto justo, tenida de rubia, muy putona. no tenían hijos y eran muy amenos con nosotros y el resto de la gente que laburaba en dicha panadería.
salía del cole al mediodía y pasaba por ahí a verlo a mi viejo, lo esperaba y nos volvíamos juntos y a veces lo acompañaba a la noche, los findes, y me quedaba en la cuadra y veía como laburaban haciendo pan, facturas y demás.
un sábado, estaba ahí ayudando y cae Rosa, a buscar al marido, Juan Carlos, y no pude dejar de notar que debajo de la musculosa no tenia corpiño, tenia una remerita musculosa y un saquito pero a medida que se movía se le notaban los pezones. imposible no verlos, no notarlos. Termine matándome a pajas recordando esa imagen y dicha imagen de manera similar se fue dando toda esa primera y sobre todo en verano.
Cuando mi vieja se la cruzaba notaba como le hacia señas o comentarios de lo que hacia y ella se hacia la boluda y yo y los otros estábamos sin poder sacarle los ojos e los pechos.
Luego escuchando charla entre mis viejos, me enteré que se había ido a operar las gomas a Miami y se había cambiado el rodado 13 por un rodado 20. era una cosa de locos por favor.
la cosa decantó por su propio peso y un día, mi viejo haciendo reparto, y el marido de ella, quien sabe donde, estábamos ella, y yo en la panadería, y en el mostrador, la dos chicas que atendían. ella estaba cortando la miga para hacer sanguches de miga y yo le hacia de ayudante. muy pajero lo mío pero era imposible no mirarla.
Terminamos los sanguches, y se puso a acomodar todo, pasar la escoba, pasar un trapo por la cocina y a medida que hacia eso se agachaba y yo me ponía en posición justa para espiarles las gomas, y realmente estaba alzadisimo y en un toque se dio cuenta y me dijo te gustan Bebote, ni dije nada solo le confirme que si, moviendo la cabeza, se asomó en la cuadra, miró para adelante y se metió de nuevo en la cocina y cerró con llave y me hizo así con el dedo como llamándome y se saca la musculosa y me agarra las manos y me dice tócalas, te gustan. Yo casi que acababa ahí mismo, tocando unos pechos enormes siliconados, viendo unos pezones pequeños como dos botones pero parados maaaal. Toqué esos pechos, me dijo que los besara, luego me beso ella a mi, me metio la lengua hasta la garganta, bese de nuevo los pechos y me toco la pija sobre el pantalón y se arrodillo y me chupo la pija, obviamnte creo que dure segundos, y Rosita se llevo mi regalito en su boca, se trago todo y me dijo bebe, vamos a llevarnos bien porque me gustan los pendejos pajeros como vos. fue una experiencia divina, hermosa, imposible de borrar y la primeras de solo un par de veces hasta que mi viejo disolviera la socieda y cambiarla de laburo perdiendole el rastro pero dejando una huella imborrable en mi
este amigo de mi viejo era un compañero de la secundaria. tipo de la edad de mis viejos casado con una mujer algo mas joven, luego confirme que tenia 37 años, sin hijos.
la realidad es que yo estaba en una etapa plena de hormonas y esta señora llamémosla Rosa, era lejanamente para mi una señora grande pero estaba fuertísima, morocha, tes oscura culona en su punto justo, tenida de rubia, muy putona. no tenían hijos y eran muy amenos con nosotros y el resto de la gente que laburaba en dicha panadería.
salía del cole al mediodía y pasaba por ahí a verlo a mi viejo, lo esperaba y nos volvíamos juntos y a veces lo acompañaba a la noche, los findes, y me quedaba en la cuadra y veía como laburaban haciendo pan, facturas y demás.
un sábado, estaba ahí ayudando y cae Rosa, a buscar al marido, Juan Carlos, y no pude dejar de notar que debajo de la musculosa no tenia corpiño, tenia una remerita musculosa y un saquito pero a medida que se movía se le notaban los pezones. imposible no verlos, no notarlos. Termine matándome a pajas recordando esa imagen y dicha imagen de manera similar se fue dando toda esa primera y sobre todo en verano.
Cuando mi vieja se la cruzaba notaba como le hacia señas o comentarios de lo que hacia y ella se hacia la boluda y yo y los otros estábamos sin poder sacarle los ojos e los pechos.
Luego escuchando charla entre mis viejos, me enteré que se había ido a operar las gomas a Miami y se había cambiado el rodado 13 por un rodado 20. era una cosa de locos por favor.
la cosa decantó por su propio peso y un día, mi viejo haciendo reparto, y el marido de ella, quien sabe donde, estábamos ella, y yo en la panadería, y en el mostrador, la dos chicas que atendían. ella estaba cortando la miga para hacer sanguches de miga y yo le hacia de ayudante. muy pajero lo mío pero era imposible no mirarla.
Terminamos los sanguches, y se puso a acomodar todo, pasar la escoba, pasar un trapo por la cocina y a medida que hacia eso se agachaba y yo me ponía en posición justa para espiarles las gomas, y realmente estaba alzadisimo y en un toque se dio cuenta y me dijo te gustan Bebote, ni dije nada solo le confirme que si, moviendo la cabeza, se asomó en la cuadra, miró para adelante y se metió de nuevo en la cocina y cerró con llave y me hizo así con el dedo como llamándome y se saca la musculosa y me agarra las manos y me dice tócalas, te gustan. Yo casi que acababa ahí mismo, tocando unos pechos enormes siliconados, viendo unos pezones pequeños como dos botones pero parados maaaal. Toqué esos pechos, me dijo que los besara, luego me beso ella a mi, me metio la lengua hasta la garganta, bese de nuevo los pechos y me toco la pija sobre el pantalón y se arrodillo y me chupo la pija, obviamnte creo que dure segundos, y Rosita se llevo mi regalito en su boca, se trago todo y me dijo bebe, vamos a llevarnos bien porque me gustan los pendejos pajeros como vos. fue una experiencia divina, hermosa, imposible de borrar y la primeras de solo un par de veces hasta que mi viejo disolviera la socieda y cambiarla de laburo perdiendole el rastro pero dejando una huella imborrable en mi
4 comentarios - Pendejo con su primera experiencia MILF