Buenas, soy Joa. En mis publicaciones anteriores ya les conté un poco de mi, de mi vida, de como soy. Lo importante es que después de la noche con Cyn y la Colo mi vida cambió para siempre. Para los nuevos, les dejo la historia acá:
http://www.poringa.net/posts/relatos/4159364/La-Cuarentona-de-Instagram.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/4167124/La-Cuarentona-de-Instagram---Parte-2.html
Cuestión que desde esas cogidas monumentales mi vida dio un giro de 180 grados. A las chicas las volví a ver un par de veces, hasta que la Colo decidió cuidar su relación y dejo de aparecer. Oh casualidad, 20 días después me enteré que estaba embaradaza, creo que nos va a quedar la duda de quién era el padre de ese chico por siempre. A su vez, Cyn empezó a salir con un chabón de su edad hasta que eventualmente dejamos de vernos.
La historia se adelanta hasta ayer, noche de febrero y show de Digweed en Niceto. Yo soy de ir constantemente a las jodas electrónicas, el MDMA es uno de esos placeres que me gusta darme. Los que la probaron saben que es lo que se siente, para los que no, es dificil de explicar. Las sensaciones de tu cuerpo comienzan a multiplicarse por 1000, querés tocar a la gente, un masaje se puede sentir orgásmico, queres comerle la boca a alguien y estar en eso por horas... y obviamente, coger así es como conocer a Dios.
Hicimos la previa con 2 amigos (sin mucho escabio, para no mezclar) y nos fuimos al boliche. Ahí, unos dedazos de MD para arrancar y a bailar. Estuvimos un rato largo, el efecto de la droga había empezado a hacer lo suyo, ya estábamos en esa etapa "ultrasensorial", cuando caminando un poco choco con alguien y al mirar era Cyn.
- Ah, mirá a quién me vengo a encontrar - le digo.
- Hola bonito, ¿cómo estás? - me dice.
Cabe aclarar que se podía ver que ella estaba tan en una como yo. Ya de por sí, estabámos ambos en medio de un boliche con lentes de sol y el cuerpo que se nos movía solo. Y al lado de ella, con un cuerpazo de gimnasio puro, unas tetas paraditas y un culo bien marcado, estaba una amiga que no conocía.
- Hola, ¿cómo estás? Soy Joa, un amigo de Cyn.
- Hola! Soy Fer, ¿todo bien?
Apenas nos acercamos cruzamos dos palabras más y nos quedamos bailando. Nuevamente, los que han probado MD me sabrán entender, cuando uno está en ese estado no se pone mucho a charlar. Esa sensación en el cuerpo pide bailar, moverse, tocarse, no ponerse a hablar. Las chicas se notaba que estaban en la misma porque dijimos 2 boludeces más y nos pusimos a bailar los 5.
Haciéndome el boludo, me puse al lado de Cyn y cada vez bailábamos más pegados. En una, empiezo a hacerle un masajito en el cuello que ella acepta de manera placentera inclinando un poco la cabeza hacia atrás y tirando su cuerpo contra el mío. Empiezo a masajearle el cuello un rato, subo por la cabeza, los hombros, voy bajando por el costado de su cuerpo, la cadera (haciendome el boludo y toqueteando un poco el culo), bajé hasta los muslos y ahí empecé a subir de a poquito, hasta que ella me pone la mano y me dice:
- Estoy de novia Joa, no seas boludo.
Así que seguimos en eso, yo le daba un masaje igual pero sin "pasarme" (total, con la droga yo ya estaba en un frenesí sexual indescriptible), después ella empezó a masajearme a mi, y estuvimos un rato en esa. Después de ponerle un poco más de power y estar ahí cerca de 1h, la droga de a poquito empezó a bajarme y quise darle otro toque. Aproveché el momento para ver que onda ellas:
- Che Cyn, ¿qué tomaron?
- Una pasti cada una, ¿ustedes?
- Los chicos se mandaron una pasta, yo estaba tomando MD. Estaba por ir a aplicarme el refuerzo, jajaj. ¿Querés un poquito?
- Uh, si, por favor.
- Acá no puedo igual porque no me queda mucho, no quiero darle a los chicos y disculpá pero tampoco a Fer. Si querés, venite conmigo un toque y tomamos allá al costado. - le digo.
Ella lo duda un rato antes de dejar a su amiga, hasta que se decide y arrancamos. Vamos hasta el otro sector de la pista, sacamos y tomamos un toque ahí, y nos quedamos bailando ya que quedamos cerca del parlante. Al rato empieza a subir la droga, cerca de los parlantes y en pleno "transe", empezamos a bailar apretados y empiezo a hacerle el masaje. Otra vez llego hasta sus muslos y empiezo a subir, otra vez me frenó pero esta vez me dijo como sin ganas.
- Dale Joa, no jodas.
Yo ahí me le río, le doy un beso en el cuello y empiezo a subir de a poquito. Puedo sentir ligeramente como ella empieza a separar las piernas para que mis manos lleguen más lejos. Sigo haciendo mi tarea, subiendo de a poco, hasta que con el borde de mis dedos puedo sentir la tanguita y los labios de esa conchita. Labios que estaban totalmente húmedos y mojados. De a poco empiezo a frotarle los labios mientras vuelvo a besarle el cuello y ya cuando tira su cabeza hacia atrás y deja escapar su primer respiración profunda, ahí supe que esa noche iba a ser larga.
Seguimos en esa situación un rato hasta que la doy vuelta y empiezo a comerle la boca. Mientras la deboraba (nos deborabamos) con las manos empiezo a toquetearle las tetas y ella empieza a dejar escapar gemidos en mi boca. Sus manos van directamente hasta mi pija y empieza a acariciarla con ganas. Estamos un rato franeleando hasta que ella se separa, se da vuelta y ve a su amiga.
- ¿Qué pasó Fer?
- Nada, me estaba aburriendo y vine a ver qué onda ustedes. Los agarré ocupados, jaja - tiró.
- ¡Vos estúpida no le vas a decir nada a Martín eh! - dijo con mirada cómplice.
- Jajaj, ya me parecía que estabas durando mucho sin hacer boludeces... che, ¿no les sobra algo para tomar, alguna puntita? - preguntó Fer
- No sé, ¿por qué no le preguntas a este? - le respondió Cyn señalándome.
Yo ya estaba en un estado de dulzura por la situación que le pasé un poco de MD y empezamos a bailar los 3. Cada tanto apretábamos con Cyn, ella se ponía para que la apoye un poco, yo le daba masajes que siempre terminaban con un manoseo de tetas. En un momento empiezo a ver y Fer ya estaba recontra puesta, te dabas cuenta que se empezaba a frotar consigo misma y se acercaba a otros chabones bailando, corriéndose los hombros de la remera como pidiendo por favor que la masageen, pero todos estaban en una que no la registraban.
- Está muy arriba Fer, ¿no? - le digo a Cyn. - Está desesperada buscando que la toquen un rato.
- No seas malo y andá a hacerle un masaje pendejo - respondió.
Con el visto bueno, me fui hasta donde estaba Fer, empecé soplándole el cuello lentamente y cuando noté que empezaba a acercar su espalda a mi cuerpo me adelante, empecé a masajearla y de a poco me fui arrimando. Cyn mientras tanto como quién no quiere se le fue arrimando y bailándole de frente. Ya cuando los masajes pasaron a la cabeza y de ahí bajando hacia su cintura, empecé a besarle el cuello y a apoyarla despacio. Podía sentir como empujaba su culo arriba de mi chota, pidiéndome pija a más no poder. Después de un rato así con mis manos aún en sus caderas la hago girar y empiezo a comerle la boca con unas ganas que no podía disimular desde que entramos. Es que Cyn me vuelve loca y me encanta, pero su amiga era incluso más perfecta. Cuerpo de gimnasio, culo parado bien firme, unas tetas paradas y puntiagudas que se notaban recién echas pero que pedían besos a lo locos.
Así que me zambullo con todo a esa boca. Al rato, sorprendiéndome, empiezo a sentir como alguien se me acerca por la espalda y apoya sus manos en mi cintura, moviéndolas hasta la parte de adelante de mi pantalón y metiéndose buscando directamente mi pija. En ese momento de climax máximo generado por el tremendo camión que me estaba comiendo, la tremenda bomba que me estaba pajeando y el efecto del MD burbujeando en mi cuerpo, dejo a Fer un poco y girándome para quedar de cara a ambas les digo:
- Está tremenda esta fiestita eh.
- Si... - responde Fer mordiéndose el labio mientras Cyn larga una risita, aún con su mano agarrándome la pija.
- ¿No les parece moverla a otro lugar? - tiro.
- ¿Vos decís? - pregunta Fer.
- Y, mientras Cyn tenga ganas - le respondo, mirándola a Cyn,
Ahí nomás, con otra risita, me saca la mano de la pija y agarrándome con la otra me arrastra a mi y a Flor, camino directo hacia la puerta. La pregunta sobre qué iba a pasar con mis amigos no tardó en llegar por parte de Fren, pero se la respondí comiéndole le boca un ratito más. Ellos eran dos empastillados en una linda jodita, mal no la iban a pasar.
Salimos de Niceto abrazados los 3, siendo alrededor de las 4.30h de la mañana. Entre unas risas y otros besos, directamente enfilamos para el telo Carvelle, que está a 2 cuadras del otro lado del puente. Entramos, fuimos por el mostrador y pedimos una Suite y una caja de forros.
- Espero que alcance eh porque este pendejo no se cansa de coger, jaja - tiró Cyn en voz alta, aún en un estado visiblemente puesta por la droga.
Subimos y fuimos a nuestra habitación. En cuanto entramos, Fer se fue para el baño, Cyn se fue a agarrar algo de su bolsito en un mueble que había y yo me fui directo a recostarme sobre la cama. En cuanto salió Fer, lo primero por lo que se preocupó fue:
- ¿Hay más MD?
- Hay... - le respondó - pero te lo vas a tener que ganar... - cierro, palpándome la pija por sobre el pantalón.
- Ah bueno... el pendejito me está chantajeando y quiere que le chupe la pija - decía mientras sus ojos de gata se clavaban directamente en mi bulto. - ¿Por qué no mostrás que tenés ahí?
Ahí nomás saco mi chota, que no será ni la más grande ni la más gruesa, pero que nunca me falló hasta ahora.
- Cuidado que esa es adictiva - tira Cyn desde atrás.
Fer arranco entonces con la mirada fija en mi pija directo a ella. Yo estaba sentado en el borde de la cama, ella colocó sus manos al los costados de mis piernas y con sólo abrir la boca se tragó mi pija de una. Así, arrodillada, vestida, la veterana de 43 años chupándome la pija a mi merced, es uno de los cuadros más bellos que vi en mi vida. Mientras tanto, Cyn estaba de fondo aún con las manos en el bolso y ahí pude ver que estaba haciendo... la hija de puta estaba sacando falopa. Se acomodó un tarjetazo, le entró de una y vino a donde estaba la fiestita.
- A ver a ver... ¿me dejan probar? - se acercó Cyn diciendo.
Ahí apenas le dejó lugar Fer me agarró la pija y empezó a comérsela desaforada. Mientras tanto, Fer fue a buscar un poco de falopa que había arriba de la mesa.
- Como les gusta esa porquería eh... - les tiro.
- Es tan rica... y aparte te dilata más todo, jajaj - me respondió Fer.
Una vez puesta, volvió a la cama y mientras Cyn seguía ocupada deborando mi pija puso su mano en mi pecho y me empujó haciéndome acostar. Acto seguido, se sacó la pollerita de jean que traía, la tanguita, puso sus piernas alrededor de mi cuerpo y comenzó a sentarse en mi cara dejándome esa conchita servida en el plato.
- A ver como tratas a una dama pendejo.
Empecé a comerle la concha como si no hubiera mañana. Tan rica, con ese gusto bien marcado mezclado con transpiración, una concha riquísima que largaba jugo como un balde que pierde agua. Al toque nomás Fer empezó a gemir y gemir y gemir, cada vez más alto, mientras yo le agarraba las piernas para que no se atreva a levantarse. En eso, siento como Cyn deja de chuparme la pija y de pronto la calidez inconfundible alrededor de mi chota que sólo podía significar que se me había sentado encima. Ella siguió saltando mientras yo seguía chupándole la concha a su amiga un rato largo, hasta que Fer se levantó con fuerza exclamando, casi implorando:
- Basta de vueltas pendejo, dale, cogeme.
Se puso en 4 en la cama y mientras Cyn se levantaba me di vuelta que no me había puesto ningún forro.
- Estás en confianza conmigo bonito - me dijo cuando se dio cuenta lo que estaba viendo. - Fijate si ella quiere.
- Cogeme nene, cogeme de una vez, así nomás, no importa - respondió inmediatamente.
Con su autorización, me le prendí y empecé a darle durísimo, mientras Cyn se colocaba encima de ella y me ponía las tetas en la cara, tetas con las que sueño todas las noches y amo comer más que a la comida misma. Nuevamente seguimos con este rito, pasamos después por un misionero mezclado (un par de cogidas para cada una) y fuimos variando más posiciones, hasta que me di cuenta que estaba por acabar y todavía no había ido por mi presa principal de esa noche.
- Bueno, hay un culito que ya conozco, pero hay otro que todavía no me presentaron... y lo vi hace un rato tomando merca así que ya debe estar listo para conocerme. - tiré.
Fer empezó a poner caras raras para hacerse desear, pero al toque Cyn empezó a comerle la boca así que yo aproveche, me le acerqué por la espalda y empecé a meterle uno y mas dedos. Después de un rato tanteando ese culo, efectivamente noté cuan dilatado estaba y sin poner más espera le puse la cabeza de mi pija adentro y empecé a empujar. Al ratito nomás, ya estaba prendido a ella, con mis manos en sus tetas apretando mientras bombeaba sin parar. Cyn se tiró entre sus piernas y empezó a chuparle la concha ahí con vis huevos cerca mientras le rompía el orto a su amiga... con la cara de satisfacción que tenía se notaba que andaba esperando un trío con ella hace rato.
Seguí haciendo ese culo un rato largo hasta que empecé a sentir que estaba por acabar. Quise sacar la pija pero Fer me puso las manos en el culo apretando y entre gemidos me imploraba:
- No bebé... no... seguí... seguí...
No tuve más opción. Aumente la fuerza con el único objetivo de llenar ese culito de leche. Y unos minutos después pude sentir como la pija se me hinchaba adentro mientras empezaba a largar leche a lo loco. Tanta leche acabé que en cuanto se la saqué del orto empezó a gotear, cayéndole un poco en la cara a Cyn.
- Ah sos un sorete, le dejaste toda la leche a ella y a mi nada.
- Todavía nos queda un rato largo eh. - contesté
- Ni me lo digas - respondió ella acercándose al bolso, sacando ahora un blister con una pastilla azul que todos conocemos. - Esto es un pernocte bebé y yo no me voy a dormir.
Y el resto luego de la pastilla será historia para otra ocasión...
http://www.poringa.net/posts/relatos/4159364/La-Cuarentona-de-Instagram.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/4167124/La-Cuarentona-de-Instagram---Parte-2.html
Cuestión que desde esas cogidas monumentales mi vida dio un giro de 180 grados. A las chicas las volví a ver un par de veces, hasta que la Colo decidió cuidar su relación y dejo de aparecer. Oh casualidad, 20 días después me enteré que estaba embaradaza, creo que nos va a quedar la duda de quién era el padre de ese chico por siempre. A su vez, Cyn empezó a salir con un chabón de su edad hasta que eventualmente dejamos de vernos.
La historia se adelanta hasta ayer, noche de febrero y show de Digweed en Niceto. Yo soy de ir constantemente a las jodas electrónicas, el MDMA es uno de esos placeres que me gusta darme. Los que la probaron saben que es lo que se siente, para los que no, es dificil de explicar. Las sensaciones de tu cuerpo comienzan a multiplicarse por 1000, querés tocar a la gente, un masaje se puede sentir orgásmico, queres comerle la boca a alguien y estar en eso por horas... y obviamente, coger así es como conocer a Dios.
Hicimos la previa con 2 amigos (sin mucho escabio, para no mezclar) y nos fuimos al boliche. Ahí, unos dedazos de MD para arrancar y a bailar. Estuvimos un rato largo, el efecto de la droga había empezado a hacer lo suyo, ya estábamos en esa etapa "ultrasensorial", cuando caminando un poco choco con alguien y al mirar era Cyn.
- Ah, mirá a quién me vengo a encontrar - le digo.
- Hola bonito, ¿cómo estás? - me dice.
Cabe aclarar que se podía ver que ella estaba tan en una como yo. Ya de por sí, estabámos ambos en medio de un boliche con lentes de sol y el cuerpo que se nos movía solo. Y al lado de ella, con un cuerpazo de gimnasio puro, unas tetas paraditas y un culo bien marcado, estaba una amiga que no conocía.
- Hola, ¿cómo estás? Soy Joa, un amigo de Cyn.
- Hola! Soy Fer, ¿todo bien?
Apenas nos acercamos cruzamos dos palabras más y nos quedamos bailando. Nuevamente, los que han probado MD me sabrán entender, cuando uno está en ese estado no se pone mucho a charlar. Esa sensación en el cuerpo pide bailar, moverse, tocarse, no ponerse a hablar. Las chicas se notaba que estaban en la misma porque dijimos 2 boludeces más y nos pusimos a bailar los 5.
Haciéndome el boludo, me puse al lado de Cyn y cada vez bailábamos más pegados. En una, empiezo a hacerle un masajito en el cuello que ella acepta de manera placentera inclinando un poco la cabeza hacia atrás y tirando su cuerpo contra el mío. Empiezo a masajearle el cuello un rato, subo por la cabeza, los hombros, voy bajando por el costado de su cuerpo, la cadera (haciendome el boludo y toqueteando un poco el culo), bajé hasta los muslos y ahí empecé a subir de a poquito, hasta que ella me pone la mano y me dice:
- Estoy de novia Joa, no seas boludo.
Así que seguimos en eso, yo le daba un masaje igual pero sin "pasarme" (total, con la droga yo ya estaba en un frenesí sexual indescriptible), después ella empezó a masajearme a mi, y estuvimos un rato en esa. Después de ponerle un poco más de power y estar ahí cerca de 1h, la droga de a poquito empezó a bajarme y quise darle otro toque. Aproveché el momento para ver que onda ellas:
- Che Cyn, ¿qué tomaron?
- Una pasti cada una, ¿ustedes?
- Los chicos se mandaron una pasta, yo estaba tomando MD. Estaba por ir a aplicarme el refuerzo, jajaj. ¿Querés un poquito?
- Uh, si, por favor.
- Acá no puedo igual porque no me queda mucho, no quiero darle a los chicos y disculpá pero tampoco a Fer. Si querés, venite conmigo un toque y tomamos allá al costado. - le digo.
Ella lo duda un rato antes de dejar a su amiga, hasta que se decide y arrancamos. Vamos hasta el otro sector de la pista, sacamos y tomamos un toque ahí, y nos quedamos bailando ya que quedamos cerca del parlante. Al rato empieza a subir la droga, cerca de los parlantes y en pleno "transe", empezamos a bailar apretados y empiezo a hacerle el masaje. Otra vez llego hasta sus muslos y empiezo a subir, otra vez me frenó pero esta vez me dijo como sin ganas.
- Dale Joa, no jodas.
Yo ahí me le río, le doy un beso en el cuello y empiezo a subir de a poquito. Puedo sentir ligeramente como ella empieza a separar las piernas para que mis manos lleguen más lejos. Sigo haciendo mi tarea, subiendo de a poco, hasta que con el borde de mis dedos puedo sentir la tanguita y los labios de esa conchita. Labios que estaban totalmente húmedos y mojados. De a poco empiezo a frotarle los labios mientras vuelvo a besarle el cuello y ya cuando tira su cabeza hacia atrás y deja escapar su primer respiración profunda, ahí supe que esa noche iba a ser larga.
Seguimos en esa situación un rato hasta que la doy vuelta y empiezo a comerle la boca. Mientras la deboraba (nos deborabamos) con las manos empiezo a toquetearle las tetas y ella empieza a dejar escapar gemidos en mi boca. Sus manos van directamente hasta mi pija y empieza a acariciarla con ganas. Estamos un rato franeleando hasta que ella se separa, se da vuelta y ve a su amiga.
- ¿Qué pasó Fer?
- Nada, me estaba aburriendo y vine a ver qué onda ustedes. Los agarré ocupados, jaja - tiró.
- ¡Vos estúpida no le vas a decir nada a Martín eh! - dijo con mirada cómplice.
- Jajaj, ya me parecía que estabas durando mucho sin hacer boludeces... che, ¿no les sobra algo para tomar, alguna puntita? - preguntó Fer
- No sé, ¿por qué no le preguntas a este? - le respondió Cyn señalándome.
Yo ya estaba en un estado de dulzura por la situación que le pasé un poco de MD y empezamos a bailar los 3. Cada tanto apretábamos con Cyn, ella se ponía para que la apoye un poco, yo le daba masajes que siempre terminaban con un manoseo de tetas. En un momento empiezo a ver y Fer ya estaba recontra puesta, te dabas cuenta que se empezaba a frotar consigo misma y se acercaba a otros chabones bailando, corriéndose los hombros de la remera como pidiendo por favor que la masageen, pero todos estaban en una que no la registraban.
- Está muy arriba Fer, ¿no? - le digo a Cyn. - Está desesperada buscando que la toquen un rato.
- No seas malo y andá a hacerle un masaje pendejo - respondió.
Con el visto bueno, me fui hasta donde estaba Fer, empecé soplándole el cuello lentamente y cuando noté que empezaba a acercar su espalda a mi cuerpo me adelante, empecé a masajearla y de a poco me fui arrimando. Cyn mientras tanto como quién no quiere se le fue arrimando y bailándole de frente. Ya cuando los masajes pasaron a la cabeza y de ahí bajando hacia su cintura, empecé a besarle el cuello y a apoyarla despacio. Podía sentir como empujaba su culo arriba de mi chota, pidiéndome pija a más no poder. Después de un rato así con mis manos aún en sus caderas la hago girar y empiezo a comerle la boca con unas ganas que no podía disimular desde que entramos. Es que Cyn me vuelve loca y me encanta, pero su amiga era incluso más perfecta. Cuerpo de gimnasio, culo parado bien firme, unas tetas paradas y puntiagudas que se notaban recién echas pero que pedían besos a lo locos.
Así que me zambullo con todo a esa boca. Al rato, sorprendiéndome, empiezo a sentir como alguien se me acerca por la espalda y apoya sus manos en mi cintura, moviéndolas hasta la parte de adelante de mi pantalón y metiéndose buscando directamente mi pija. En ese momento de climax máximo generado por el tremendo camión que me estaba comiendo, la tremenda bomba que me estaba pajeando y el efecto del MD burbujeando en mi cuerpo, dejo a Fer un poco y girándome para quedar de cara a ambas les digo:
- Está tremenda esta fiestita eh.
- Si... - responde Fer mordiéndose el labio mientras Cyn larga una risita, aún con su mano agarrándome la pija.
- ¿No les parece moverla a otro lugar? - tiro.
- ¿Vos decís? - pregunta Fer.
- Y, mientras Cyn tenga ganas - le respondo, mirándola a Cyn,
Ahí nomás, con otra risita, me saca la mano de la pija y agarrándome con la otra me arrastra a mi y a Flor, camino directo hacia la puerta. La pregunta sobre qué iba a pasar con mis amigos no tardó en llegar por parte de Fren, pero se la respondí comiéndole le boca un ratito más. Ellos eran dos empastillados en una linda jodita, mal no la iban a pasar.
Salimos de Niceto abrazados los 3, siendo alrededor de las 4.30h de la mañana. Entre unas risas y otros besos, directamente enfilamos para el telo Carvelle, que está a 2 cuadras del otro lado del puente. Entramos, fuimos por el mostrador y pedimos una Suite y una caja de forros.
- Espero que alcance eh porque este pendejo no se cansa de coger, jaja - tiró Cyn en voz alta, aún en un estado visiblemente puesta por la droga.
Subimos y fuimos a nuestra habitación. En cuanto entramos, Fer se fue para el baño, Cyn se fue a agarrar algo de su bolsito en un mueble que había y yo me fui directo a recostarme sobre la cama. En cuanto salió Fer, lo primero por lo que se preocupó fue:
- ¿Hay más MD?
- Hay... - le respondó - pero te lo vas a tener que ganar... - cierro, palpándome la pija por sobre el pantalón.
- Ah bueno... el pendejito me está chantajeando y quiere que le chupe la pija - decía mientras sus ojos de gata se clavaban directamente en mi bulto. - ¿Por qué no mostrás que tenés ahí?
Ahí nomás saco mi chota, que no será ni la más grande ni la más gruesa, pero que nunca me falló hasta ahora.
- Cuidado que esa es adictiva - tira Cyn desde atrás.
Fer arranco entonces con la mirada fija en mi pija directo a ella. Yo estaba sentado en el borde de la cama, ella colocó sus manos al los costados de mis piernas y con sólo abrir la boca se tragó mi pija de una. Así, arrodillada, vestida, la veterana de 43 años chupándome la pija a mi merced, es uno de los cuadros más bellos que vi en mi vida. Mientras tanto, Cyn estaba de fondo aún con las manos en el bolso y ahí pude ver que estaba haciendo... la hija de puta estaba sacando falopa. Se acomodó un tarjetazo, le entró de una y vino a donde estaba la fiestita.
- A ver a ver... ¿me dejan probar? - se acercó Cyn diciendo.
Ahí apenas le dejó lugar Fer me agarró la pija y empezó a comérsela desaforada. Mientras tanto, Fer fue a buscar un poco de falopa que había arriba de la mesa.
- Como les gusta esa porquería eh... - les tiro.
- Es tan rica... y aparte te dilata más todo, jajaj - me respondió Fer.
Una vez puesta, volvió a la cama y mientras Cyn seguía ocupada deborando mi pija puso su mano en mi pecho y me empujó haciéndome acostar. Acto seguido, se sacó la pollerita de jean que traía, la tanguita, puso sus piernas alrededor de mi cuerpo y comenzó a sentarse en mi cara dejándome esa conchita servida en el plato.
- A ver como tratas a una dama pendejo.
Empecé a comerle la concha como si no hubiera mañana. Tan rica, con ese gusto bien marcado mezclado con transpiración, una concha riquísima que largaba jugo como un balde que pierde agua. Al toque nomás Fer empezó a gemir y gemir y gemir, cada vez más alto, mientras yo le agarraba las piernas para que no se atreva a levantarse. En eso, siento como Cyn deja de chuparme la pija y de pronto la calidez inconfundible alrededor de mi chota que sólo podía significar que se me había sentado encima. Ella siguió saltando mientras yo seguía chupándole la concha a su amiga un rato largo, hasta que Fer se levantó con fuerza exclamando, casi implorando:
- Basta de vueltas pendejo, dale, cogeme.
Se puso en 4 en la cama y mientras Cyn se levantaba me di vuelta que no me había puesto ningún forro.
- Estás en confianza conmigo bonito - me dijo cuando se dio cuenta lo que estaba viendo. - Fijate si ella quiere.
- Cogeme nene, cogeme de una vez, así nomás, no importa - respondió inmediatamente.
Con su autorización, me le prendí y empecé a darle durísimo, mientras Cyn se colocaba encima de ella y me ponía las tetas en la cara, tetas con las que sueño todas las noches y amo comer más que a la comida misma. Nuevamente seguimos con este rito, pasamos después por un misionero mezclado (un par de cogidas para cada una) y fuimos variando más posiciones, hasta que me di cuenta que estaba por acabar y todavía no había ido por mi presa principal de esa noche.
- Bueno, hay un culito que ya conozco, pero hay otro que todavía no me presentaron... y lo vi hace un rato tomando merca así que ya debe estar listo para conocerme. - tiré.
Fer empezó a poner caras raras para hacerse desear, pero al toque Cyn empezó a comerle la boca así que yo aproveche, me le acerqué por la espalda y empecé a meterle uno y mas dedos. Después de un rato tanteando ese culo, efectivamente noté cuan dilatado estaba y sin poner más espera le puse la cabeza de mi pija adentro y empecé a empujar. Al ratito nomás, ya estaba prendido a ella, con mis manos en sus tetas apretando mientras bombeaba sin parar. Cyn se tiró entre sus piernas y empezó a chuparle la concha ahí con vis huevos cerca mientras le rompía el orto a su amiga... con la cara de satisfacción que tenía se notaba que andaba esperando un trío con ella hace rato.
Seguí haciendo ese culo un rato largo hasta que empecé a sentir que estaba por acabar. Quise sacar la pija pero Fer me puso las manos en el culo apretando y entre gemidos me imploraba:
- No bebé... no... seguí... seguí...
No tuve más opción. Aumente la fuerza con el único objetivo de llenar ese culito de leche. Y unos minutos después pude sentir como la pija se me hinchaba adentro mientras empezaba a largar leche a lo loco. Tanta leche acabé que en cuanto se la saqué del orto empezó a gotear, cayéndole un poco en la cara a Cyn.
- Ah sos un sorete, le dejaste toda la leche a ella y a mi nada.
- Todavía nos queda un rato largo eh. - contesté
- Ni me lo digas - respondió ella acercándose al bolso, sacando ahora un blister con una pastilla azul que todos conocemos. - Esto es un pernocte bebé y yo no me voy a dormir.
Y el resto luego de la pastilla será historia para otra ocasión...
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