Mi mujer me había pedido permiso para follar con uno de sus compañeros de trabajo. La noche que salió con él, me hizo una video llamada y pude ver como ese hombre la hacía gritar de placer metiendole su verga por el culo , viniendose dentro de ella e inundándoselo de leche... Yo en casa la esperaba ansioso que llegara para abrirle las nalgas y tambien cogerla por detras como poco antes lo habia hecho él.
Cuando por fin llegó a casa mi mujer nos dimos un beso, le di vuelta, le levanté la falda, casi le arranqué la braga y se la metí de una sola en el culo,
"Papi hermoso, sí, comele el culo a tu negra, dame verga, dame verga", me gritaba, agachada y dejando que le folle el culo bien fuerte.
Estaba tan caliente que me corrí enseguida dentro de su culo,
"Si papi, si, llena de leche el culo de tu negrita", me decía moviendo sus nalgas contra mi cuerpo y mi polla toda mojada con el semen del otro hombre que antes se la había follado le entraba bien adentro.
Cuando termine de correrme dentro del culo de mi mujer, le saco la polla y ella se agacha y se la mete en la boca, limpiando mi polla con su lengua,
"A tu amigo se la limpiaste con la boca también"?, le dije, acariciando su cabeza,
"Claro papi, la leche no hay que desperdiciarla", me dijo, y se fue a la ducha.
Mientras mi mujer se duchaba, yo no dejaba de pensar en lo que había visto, como su amigo la follaba, estaba muy cachondo, con la polla dura de nuevo, y cuando sale del baño la cojo de un brazo y la llevo a la cama donde follamos como locos
"Hay mi papi, estas loco, como me coges, así papi, no pares sigue cogiendo a tu negra que le encanta tu verga", me decía con las piernas bien abiertas y dejando que le folle el coño como un desesperado.
"Mi papi lindo, que linda cogida me distes, me haz dejado completamente satisfecha", me dijo cerrando sus ojos y respirando agitada.
"Papi, los chicos del trabajo quieren hacer una orgía y me invitaron, me dejas ir?", me dijo toda mimosa.
"Y cuantos son?", le dije,
"Bueno, mujeres solo yo, y los chicos son cinco", me dijo.
"Y cuando sería?", le dije,
"Bueno, por ahora quedamos el sábado para el domingo", me dijo,
"Pero tú ya les dijiste que ibas a ir sin consultarlo conmigo?", le dije un poco molesto,
"Hay papi lindo, no te enojes, vamos a grabar todo, y como se que me quieres mucho y sabes que tu negrita no hace nada sin que lo sepas, les dije que si, que yo iba", me dijo besuqueando mis labios,
"Pero cinco tipos para ti sola, y no va ninguna otra chica de tu trabajo?", le dije un poco desconcertado,
"Mira papi, te voy a decir la verdad, puede que sean mas chicos y la única mujer que va a ir voy a ser yo sola, yo les dije que no le digan a ninguna, que yo sola me hago cargo de todas las vergas que vengan", me dijo, metiendo una de sus tetas en mi boca,
"Y si te hacen daño mi cielo?", le dije preocupado,
"Mira papi, que me hagan lo que quieran, que me destrocen con sus vergas que tu mujer va a dejar muy bien parado a su maridito, que le da permiso para hacer lo que ella quiera, por eso lo amo tanto. Y si vienes conmigo, y así ves en directo como se cogen a tu mujer?", me dijo. Yo le dije que si, que eso me gustaba más.
La semana la paso tranquila, hasta que llegó el sábado, me llevé la máquina para grabar vídeos y nos fuimos.
Ella iba radiante, bien maquillada, con una falda bien corta, una camiseta que apenas le tapaba las tetas y descalza.
Cuando llegamos a la casa de su amigo, habían como ocho hombres, todos la miraron y silbaron de admiración al verla, yo me sentí orgulloso de mi mujer en ese momento,
"Hola chicos, acá esta su negra puta, a ver esas vergas, vamos a coger", les grito, quitándose en nada su ropa y caminando desnuda por entre los hombres dejando que la manosearan y ríendo feliz.
Cogió a uno de los hombres que estaba parado y lo sentó en el sillón, sacando su polla y se la empezó a chupar levantando el culo y lo movía para todos lados.
Otro de los hombres que estaban ahí se ubicó detrás de ella y se la metió por el culo.
"Así, así, denle verga a esta negra puta", grito y siguió chupando la polla del que estaba sentado y el otro le seguía follando el culo.
Yo grababa todo sin perder detalle, ya estaban todos desnudos, uno coge del brazo a mi esposa y la hace sentar sobre la polla de otro que ni el nombre de ninguno sabía y se la empiezan a follar por el coño.
Otro se la mete por detrás y un tercero en la boca, vino un cuarto e intentaba meter su polla dentro del culo también, le querían meter dos pollas por el culo, y ella gemía de dolor pero aguantaba como le metían la segunda polla.
Apareció uno, pasando lubricante por sus manos y sacando a los que le estaban follando el culo a mi mujer, empieza a meterle los dedos e intentaba meter su mano dentro, ella levantaba la cabeza con gesto de dolor, pero aguantaba que le metieran la mano dentro, hasta que desapareció por completo toda la mano dentro del culo de mi esposa, y todos aplaudían y victoreaban como mi mujer aguantaba una mano dentro su culo.
El tío ese metió un poco mas su mano dentro, casi hasta la muñeca y la empezó a mover, yo escuchaba como mi mujer se quejaba de dolor, hasta que le sacó la mano, me quedé sorprendido al ver el tamaño que le habia quedado el ojete .
Enseguida otros la volvieron a seguir follando, por su coño, por su ojete que estaba tan abierto que seguro no sentía nada por atrás y otro se la metió en la boca.
Así la estuvieron follando toda la noche.
Luego la hicieron poner de rodillas y todos, uno a uno se fue corriendo en su boca, yo grababa la boca llena de leche de mi mujer y como tragaba y volvía a abrir la boca para que se siguieran corriendo dentro.
Ella tragaba, yo no dejaba de grabar, no se cuanta leche habrá tragado, pero por lo menos unas doce corridas habrán sido. Cuando ya todos se habían corrido mi esposa tenía toda la cara cubierta de semen, Ella entonces se levantó del piso y viniedo hacia mí se colgó en mi cuello y me besó en la boca , el sabor a semen que tenía era insoportable.
Cuando todos se fueron me felicitaron por la mujer que tenía, y eso me llenó de orgullo. En ese momento me sentí mucho mas enamorado de mi esposa.
Su amigo luego me dio un fajo de billetes en agradecimiento y me dijo si podíamos contar con ella para otra orgía, a lo que le dije que si, que no había problemas.
Luego la ayudé a vestir y nos fuimos a casa a que ella descansara, ya que la habían follado a gusto y ganas, le hicieron todo lo que quisieron a mi negrita y tantas vergas la dejaron exhausta.
1 comentarios - Mi mujer folla con ocho hombres a la vez