Anteriormente: dos meses antes de casarnos, nos damos con la noticia que el padre ya muerto de la novia tuvo aventuras del cual se gestó un hermano que resulto ser famoso y modelo. Este se presenta en la familia y quiere regalarnos el vestido de la novia, para esto pasan todo un día juntos, mi novia y su nuevo medio hermano.
Yo me las ingenié para escabullirme entre las sombras de un gran salón antiguo, donde hacen sesión de fotos. El hace fotos en ropa interior, luego ella se prueba el vestido de novia, el diseñador famoso también quien es contacto del nuevo hermano es el encargado de hacer la nueva prenda.
Se quedan solos, y en un momento lleno de erotismo, ella termina poniendo su mano en sus abdominales para una foto que será subida a la red social del famoso hermano.
Comienza a desmadrarse todo y termina ella palpando sus huevos por encima del bóxer, sintiendo el calor de su tronco, el grosor y el largo del mismo.
Ella de rodillas le da placer a su nuevo hermano, succionando el pulgar que jugaba anteriormente por sus labios. Tal situación logra que el miembro del hermano crezca hasta vencer la resistencia del elástico del bóxer, allí una cabeza enorme rosada brilla con el líquido preseminal, producto de la excitación.
Cuando ella comienza su ascenso, tanto desde sus rodillas, para acercar su cara, como de sus dedos y sus uñas escalando cada centímetro del tronco cubierto por el fino nylon del bóxer, se encienden las luces del pasillo. Esto alerta a los hermanos, ella se pone de pie rápidamente, se acomoda el vestido que estaba escandalosamente arriba, se sube el bretel que había caído dejando un pecho mostrando lo que el sol hace cuando se cubre la desnudez.
Se acomoda el pelo, se limpia la comisura de los labios, esperando que nada de maquillaje este corrido. Con sagacidad se pone sus tacos y tartamudea hacia su nuevo famoso hermano que se le hizo tarde y debe irse.
EL famoso nuevo hermano con toda la tranquilidad se acomoda la pija guardando el glande, busca su pantalón, y en la entrada del salón mi novia se cruza con el guardia, la vergüenza la invade, como si alguien la hubiera visto en esa situación. Cubriéndose la cara saluda por arriba y se va por el pasillo a paso apurado.
EL guardia entra y habla con el famoso hermano, él se coloca la remera, se pone los zapatos y salen juntos, apagan las luces, cierran con llave y los escucho alejarse.
Me quede encerrado en el salón.
Después de un tiempo me aventuro a abrir la puerta, es imposible está cerrada. Estoy en un 4to piso, los balcones son mi única salida. No hay nada que pueda hacer. Llame a mi novia y le dije que no fuera a casa, le dije que se rompió un caño de agua del baño y había materia fecal por todos lados. Lo más asqueroso que pude fue mi mentira para que ella ni siquiera pase a buscar ropa. Se fuera directamente a lo de sus padres. Yo le dije que me quedaría limpiando y esperando al plomero.
Por la mañana cuando abren el salón, y entra gente salgo así como entre, me miran algunos como no sabiendo de donde salí. Sigo mi camino, salgo por la puerta principal, los de seguridad me miran extrañados. Voy hacia mi auto y acelero hasta nuestra casa.
Inmediatamente llamo a un plomero, rompo uno de los caños del inodoro para justificar mi mentira.
Pido el día en el trabajo, tenía excusa.
Luego del arreglo, y de dejar unos buenos pesos al plomero, estoy listo para que vuelva mi novia.
Le aviso por whatsapp que ya puede volver a casa. Mientras me doy un baño, y me preparo para dormir, ya que no pegue un ojo en toda la noche y me pase la mañana hasta el mediodía con el plomero por mi mentira.
Mientras me ducho tengo las imágenes de mi novia con su nuevo y famoso hermano en mi mente. Recuerdo como sus muslos brillaban en ese estudio, como sus piernas dobladas hacían más sensual su cuerpo. Recuerdo como el vestidito azul se le subía con esa pose.
Lleno de bronca me pongo el shampoo y me lavo la cabeza, con fuerza, tratando de borrar la imagen de la puta de mi novia sintiendo el bulto de su hermano.
Por más excusas que busque, era claro que ella se había calentado y le había gustado lo que vivió.
En medio del baño me di cuenta que estaba caliente, estaba empalmado, y como era costumbre me pajee en la ducha, pero por primera vez, con la perversas imágenes de mi novia y su hermano. Largue chorros como nunca, me temblaron las piernas y tuve que sostenerme de la pared. Sin duda el morbo me había comido la cabeza.
Salgo, me seco y aun la tengo parada.
Ideas perversas rondan mi mente. Recuerdo a un amigo que vende artículos de computación, le pregunto por camaritas, le pido que me guarde algunas que inmediatamente pasaría a buscarlas.
Voy volando por la ciudad, casi que ni saludo a mi amigo, le digo que tengo miedo por la inseguridad. Salgo nuevamente en carrera a casa.
Al llegar veo que mi novia aun no llego, ni estuvo. Me pongo a colocar las cámaras estratégicamente, pequeñas cámaras, de las mismas que usan las computadoras y los celulares, miniaturas, escondidas en varios lugares. Alimentadas por su propia energía, configuradas en red. Y una aplicación celular.
Pasa la semana, llega el fin de semana. Mi novia jamás menciono nada acerca de lo que vivió con su hermano, eso sí, ya no comenta con emoción todo lo que hicieron como antes. Trata de evadir el tema, busca hablar de otras cosas.
No tenemos sexo con mi novia, le digo que estoy cansado, o me duele algo. En uno de los días, le muestro un nuevo bóxer que me compre, el de la marca que promociona su famoso nuevo hermano, elegí el mismo color incluso. Ella se pone pálida, sonríe nerviosa. Me lo pongo y cuando me ve se le escapa una sonrisa.
Era obvio que no me quedaba como a su hermano famoso. Sobraba mucho espacio. El bulto era mínimo. No era sexy en mí.
Ese viernes por la noche le dije que me iría a pescar con unos amigos. Por lo que tendría toda la noche libre.
En las redes sociales, el famoso hermano sigue con su vida, cenando en lugares bonitos, paseando, sacándose fotos. En campañas. Pero ese viernes dejo de publicar.
Puse cámara hasta en el baño, así que tenía para ver todo lo que hiciera mi novia de 22 años.
Llega la noche, ella se ducha, se pone una mini roja, con una remera del mismo color. Se pinta los labios de un rojo furioso, no usa corpiño. Se pone tacos rojos. No había duda que quería ser puta.
No pasa mucho tiempo cuando suena el timbre, ella sale a abrir y como se imaginaran, estaba el nuevo famoso medio hermano.
EL viene con una camisa al cuerpo, marca bien sus bíceps, marca bien sus pectorales. El pantalón calzado, mostrando el relieve de su musculoso culo respingón.
Se escucha que hablan de mí, ella le dice que yo sé que el vendría a cenar. Que le mandaba saludos.
El trae un vino caro, ella pidió comida hecha, solo debe calentarla y servirla.
Ella esta exquisita, sabe que cada paso que da muestra el largo de sus torneadas y jóvenes piernas. El vestido es tan fino que se puede apreciar la marca de la diminuta tanga que eligió para la ocasión.
Ella le sirve una entrada en una mesa ratona, mesa ideal para agacharse lo suficiente y ver un poco más arriba de la piel de sus muslos.
Todo el servicio es una muestra obscena de su cuerpo, camina, viene y va, se agacha, da la espalda, viene de frente, sirve por delante dejando que los pechos estén en línea directa a los ojos de su hermano.
Cenan, toman vino, comen muy poco, como es característico de quien tiene otros apetitos.
Ella le dice que quiere mostrarle algo, en nuestro cuarto.
Él la sigue por detrás.
Al llegar al cuarto ella le dice que pase, cierra la puerta tras de sí. Y se dirige al placard, allí abre uno de los cajones míos, y saca el bóxer que yo compre.
Se lo muestra sonriendo, le dice que a él le queda mejor. Le pide que se lo ponga.
Ella se sienta en el borde de la cama, el a un par de metros se saca la camisa, se saca el pantalón. Mi novia se cubre la cara, cierra los ojos, él toma el bóxer nuevo, y se saca el que traía.
Una vez colocado, le dice que ella ya puede ver.
Ella está en el borde de la cama, la mini roja escandalosamente se subió, él puede ver el corazón de tanga rosa que usa mi novia, ese triángulo que se hace cuando las chicas juntan las piernas pero no pueden cubrir su ropa interior.
El hermano se acerca, le dice que la foto con la mano en sus abdominales hizo explotar sus redes sociales. Se sigue acercando, obliga con sus piernas a abrir las de ella, mi novia no ofrece resistencia, Sus manos se ponen una en cada muslo de su hermano famoso. Sube despacio, los ojos de ella recorren el mismo camino que sus dedos.
Toca al fin el bóxer, va directo al bulto, nuevamente se infla, nuevamente crece exponencialmente, nuevamente la cabeza rosada enorme vence el elástico y sale a la superficie.
El vuelve a poner su dedo entre sus labios, ella lo chupa, su lengua lo rodea, sus manos siguen subiendo y se nota el calor del ambiente.
Llega hasta el glande brilloso de su incestuoso hermano. Por primera vez los dedos de su hermanita están tocando la punta de esa pija enorme.
Suavemente sus dedos recorren la cabeza, la agitación de ambos se intensifica. Los dedos de ella se llenan de líquido preseminal, al despegarse queda ese hilo sensual.
La otra mano celosa, tira el bóxer hacia abajo, haciendo que la pija de su hermano salte como un resorte hacia adelante.
El líquido preseminal que abundaba sale por la inercia hacia la cara angelical de su hermana. Cae en su pómulo, y el hilo baja hasta sus cachetes, sus labios y la barbilla.
Es tiempo de retirar el dedo, el hermano lo saca con pocas ganas, pero sabe que viene un placer mayor.
Ella usa su lengua para probar el líquido preseminal que quedo en sus labios.
Unos 22 centímetros de largo por unos 6 de diámetro apuntan su boca, ella se acerca, abre bien los ojos, y abre la boca como nunca antes.
La cabeza de la pija le queda grande, igual pasa la barrera de sus labios rojos. Cada centímetro lo saborea despacio, se puede notar como el rouge de buena calidad no puede con la saliva y el líquido preseminal y deja su estela en toda la pija.
Se escuchan gemiditos de ella, está disfrutando el momento, está gozando y solo de poder chupar la pija de su hermano famoso.
Chupa y chupa, va de arriba hasta abajo, trata de cubrirlo con su boca, sabe que es imposible pero se esfuerza. Tiene arcadas pero eso no le impide seguir. La saliva cae por la comisura de los labios, cae por la pija de su hermano, cae en las bolas, cae en el suelo, cae por su barbilla.
El sostiene su cabello, ella por su propia voluntad come todo lo que puede.
Recorre con su lengua todo el tronco, recorre los huevos, uno por uno, gime escandalosamente chupándolos, tiembla, está teniendo orgasmo solo por la situación prohibida.
Vuelve a meterse la pija en la boca, sus manos rodean sus piernas, le rasguña el culo, sube más frenéticamente. Los abdominales de su hermano son su obsesión, ella tiene la vista fija ahí, cada tanto se saca la poronga de la boca para besar y morder esos abdominales prohibidos. Todo esto sin dejar de darle placer a su hermano. Siempre pajeándolo.
Van como 20 minutos solo de ella hacerle sexo oral y parece no querer cambiar, quiere disfrutar al máximo.
El rouge en su cara esta corrido, por toda su boca, se le corrió el rimmel de los ojos por las lágrimas producto de las arcadas al ahogarse con la pija de su hermano.
Ella sigue usando su lengua para dominar a su hermano, y con la boca llena de la pija siente esos latidos previos a la eyaculación.
Hay una explosión en su boca, ella tose, se le sale la leche de su hermano por el costado de su boca, cae en sus tetas. Mucha leche, cantidades pocas veces vista.
La leche queda por todos lados, ella esta agitada, el también, se miran por donde hay leche, ella con la mano derecha en las bolas de su hermano, queda atónita, mirando el resultado de tanto morbo. Parece hipnotizada.
De repente mira el vestido manchado, la cama manchada, su pecho con leche de su hermano, mira su mano derecha con el anillo de compromiso lleno de leche y saliva sosteniendo las bolas y el tronco de la pija de su hermano y se horroriza.
Empieza a llorar, diciendo que esto no está bien. Y le pide a su hermano que se cambie y se vaya.
Pero esto no quedara así.
(Continuará)
Yo me las ingenié para escabullirme entre las sombras de un gran salón antiguo, donde hacen sesión de fotos. El hace fotos en ropa interior, luego ella se prueba el vestido de novia, el diseñador famoso también quien es contacto del nuevo hermano es el encargado de hacer la nueva prenda.
Se quedan solos, y en un momento lleno de erotismo, ella termina poniendo su mano en sus abdominales para una foto que será subida a la red social del famoso hermano.
Comienza a desmadrarse todo y termina ella palpando sus huevos por encima del bóxer, sintiendo el calor de su tronco, el grosor y el largo del mismo.
Ella de rodillas le da placer a su nuevo hermano, succionando el pulgar que jugaba anteriormente por sus labios. Tal situación logra que el miembro del hermano crezca hasta vencer la resistencia del elástico del bóxer, allí una cabeza enorme rosada brilla con el líquido preseminal, producto de la excitación.
Cuando ella comienza su ascenso, tanto desde sus rodillas, para acercar su cara, como de sus dedos y sus uñas escalando cada centímetro del tronco cubierto por el fino nylon del bóxer, se encienden las luces del pasillo. Esto alerta a los hermanos, ella se pone de pie rápidamente, se acomoda el vestido que estaba escandalosamente arriba, se sube el bretel que había caído dejando un pecho mostrando lo que el sol hace cuando se cubre la desnudez.
Se acomoda el pelo, se limpia la comisura de los labios, esperando que nada de maquillaje este corrido. Con sagacidad se pone sus tacos y tartamudea hacia su nuevo famoso hermano que se le hizo tarde y debe irse.
EL famoso nuevo hermano con toda la tranquilidad se acomoda la pija guardando el glande, busca su pantalón, y en la entrada del salón mi novia se cruza con el guardia, la vergüenza la invade, como si alguien la hubiera visto en esa situación. Cubriéndose la cara saluda por arriba y se va por el pasillo a paso apurado.
EL guardia entra y habla con el famoso hermano, él se coloca la remera, se pone los zapatos y salen juntos, apagan las luces, cierran con llave y los escucho alejarse.
Me quede encerrado en el salón.
Después de un tiempo me aventuro a abrir la puerta, es imposible está cerrada. Estoy en un 4to piso, los balcones son mi única salida. No hay nada que pueda hacer. Llame a mi novia y le dije que no fuera a casa, le dije que se rompió un caño de agua del baño y había materia fecal por todos lados. Lo más asqueroso que pude fue mi mentira para que ella ni siquiera pase a buscar ropa. Se fuera directamente a lo de sus padres. Yo le dije que me quedaría limpiando y esperando al plomero.
Por la mañana cuando abren el salón, y entra gente salgo así como entre, me miran algunos como no sabiendo de donde salí. Sigo mi camino, salgo por la puerta principal, los de seguridad me miran extrañados. Voy hacia mi auto y acelero hasta nuestra casa.
Inmediatamente llamo a un plomero, rompo uno de los caños del inodoro para justificar mi mentira.
Pido el día en el trabajo, tenía excusa.
Luego del arreglo, y de dejar unos buenos pesos al plomero, estoy listo para que vuelva mi novia.
Le aviso por whatsapp que ya puede volver a casa. Mientras me doy un baño, y me preparo para dormir, ya que no pegue un ojo en toda la noche y me pase la mañana hasta el mediodía con el plomero por mi mentira.
Mientras me ducho tengo las imágenes de mi novia con su nuevo y famoso hermano en mi mente. Recuerdo como sus muslos brillaban en ese estudio, como sus piernas dobladas hacían más sensual su cuerpo. Recuerdo como el vestidito azul se le subía con esa pose.
Lleno de bronca me pongo el shampoo y me lavo la cabeza, con fuerza, tratando de borrar la imagen de la puta de mi novia sintiendo el bulto de su hermano.
Por más excusas que busque, era claro que ella se había calentado y le había gustado lo que vivió.
En medio del baño me di cuenta que estaba caliente, estaba empalmado, y como era costumbre me pajee en la ducha, pero por primera vez, con la perversas imágenes de mi novia y su hermano. Largue chorros como nunca, me temblaron las piernas y tuve que sostenerme de la pared. Sin duda el morbo me había comido la cabeza.
Salgo, me seco y aun la tengo parada.
Ideas perversas rondan mi mente. Recuerdo a un amigo que vende artículos de computación, le pregunto por camaritas, le pido que me guarde algunas que inmediatamente pasaría a buscarlas.
Voy volando por la ciudad, casi que ni saludo a mi amigo, le digo que tengo miedo por la inseguridad. Salgo nuevamente en carrera a casa.
Al llegar veo que mi novia aun no llego, ni estuvo. Me pongo a colocar las cámaras estratégicamente, pequeñas cámaras, de las mismas que usan las computadoras y los celulares, miniaturas, escondidas en varios lugares. Alimentadas por su propia energía, configuradas en red. Y una aplicación celular.
Pasa la semana, llega el fin de semana. Mi novia jamás menciono nada acerca de lo que vivió con su hermano, eso sí, ya no comenta con emoción todo lo que hicieron como antes. Trata de evadir el tema, busca hablar de otras cosas.
No tenemos sexo con mi novia, le digo que estoy cansado, o me duele algo. En uno de los días, le muestro un nuevo bóxer que me compre, el de la marca que promociona su famoso nuevo hermano, elegí el mismo color incluso. Ella se pone pálida, sonríe nerviosa. Me lo pongo y cuando me ve se le escapa una sonrisa.
Era obvio que no me quedaba como a su hermano famoso. Sobraba mucho espacio. El bulto era mínimo. No era sexy en mí.
Ese viernes por la noche le dije que me iría a pescar con unos amigos. Por lo que tendría toda la noche libre.
En las redes sociales, el famoso hermano sigue con su vida, cenando en lugares bonitos, paseando, sacándose fotos. En campañas. Pero ese viernes dejo de publicar.
Puse cámara hasta en el baño, así que tenía para ver todo lo que hiciera mi novia de 22 años.
Llega la noche, ella se ducha, se pone una mini roja, con una remera del mismo color. Se pinta los labios de un rojo furioso, no usa corpiño. Se pone tacos rojos. No había duda que quería ser puta.
No pasa mucho tiempo cuando suena el timbre, ella sale a abrir y como se imaginaran, estaba el nuevo famoso medio hermano.
EL viene con una camisa al cuerpo, marca bien sus bíceps, marca bien sus pectorales. El pantalón calzado, mostrando el relieve de su musculoso culo respingón.
Se escucha que hablan de mí, ella le dice que yo sé que el vendría a cenar. Que le mandaba saludos.
El trae un vino caro, ella pidió comida hecha, solo debe calentarla y servirla.
Ella esta exquisita, sabe que cada paso que da muestra el largo de sus torneadas y jóvenes piernas. El vestido es tan fino que se puede apreciar la marca de la diminuta tanga que eligió para la ocasión.
Ella le sirve una entrada en una mesa ratona, mesa ideal para agacharse lo suficiente y ver un poco más arriba de la piel de sus muslos.
Todo el servicio es una muestra obscena de su cuerpo, camina, viene y va, se agacha, da la espalda, viene de frente, sirve por delante dejando que los pechos estén en línea directa a los ojos de su hermano.
Cenan, toman vino, comen muy poco, como es característico de quien tiene otros apetitos.
Ella le dice que quiere mostrarle algo, en nuestro cuarto.
Él la sigue por detrás.
Al llegar al cuarto ella le dice que pase, cierra la puerta tras de sí. Y se dirige al placard, allí abre uno de los cajones míos, y saca el bóxer que yo compre.
Se lo muestra sonriendo, le dice que a él le queda mejor. Le pide que se lo ponga.
Ella se sienta en el borde de la cama, el a un par de metros se saca la camisa, se saca el pantalón. Mi novia se cubre la cara, cierra los ojos, él toma el bóxer nuevo, y se saca el que traía.
Una vez colocado, le dice que ella ya puede ver.
Ella está en el borde de la cama, la mini roja escandalosamente se subió, él puede ver el corazón de tanga rosa que usa mi novia, ese triángulo que se hace cuando las chicas juntan las piernas pero no pueden cubrir su ropa interior.
El hermano se acerca, le dice que la foto con la mano en sus abdominales hizo explotar sus redes sociales. Se sigue acercando, obliga con sus piernas a abrir las de ella, mi novia no ofrece resistencia, Sus manos se ponen una en cada muslo de su hermano famoso. Sube despacio, los ojos de ella recorren el mismo camino que sus dedos.
Toca al fin el bóxer, va directo al bulto, nuevamente se infla, nuevamente crece exponencialmente, nuevamente la cabeza rosada enorme vence el elástico y sale a la superficie.
El vuelve a poner su dedo entre sus labios, ella lo chupa, su lengua lo rodea, sus manos siguen subiendo y se nota el calor del ambiente.
Llega hasta el glande brilloso de su incestuoso hermano. Por primera vez los dedos de su hermanita están tocando la punta de esa pija enorme.
Suavemente sus dedos recorren la cabeza, la agitación de ambos se intensifica. Los dedos de ella se llenan de líquido preseminal, al despegarse queda ese hilo sensual.
La otra mano celosa, tira el bóxer hacia abajo, haciendo que la pija de su hermano salte como un resorte hacia adelante.
El líquido preseminal que abundaba sale por la inercia hacia la cara angelical de su hermana. Cae en su pómulo, y el hilo baja hasta sus cachetes, sus labios y la barbilla.
Es tiempo de retirar el dedo, el hermano lo saca con pocas ganas, pero sabe que viene un placer mayor.
Ella usa su lengua para probar el líquido preseminal que quedo en sus labios.
Unos 22 centímetros de largo por unos 6 de diámetro apuntan su boca, ella se acerca, abre bien los ojos, y abre la boca como nunca antes.
La cabeza de la pija le queda grande, igual pasa la barrera de sus labios rojos. Cada centímetro lo saborea despacio, se puede notar como el rouge de buena calidad no puede con la saliva y el líquido preseminal y deja su estela en toda la pija.
Se escuchan gemiditos de ella, está disfrutando el momento, está gozando y solo de poder chupar la pija de su hermano famoso.
Chupa y chupa, va de arriba hasta abajo, trata de cubrirlo con su boca, sabe que es imposible pero se esfuerza. Tiene arcadas pero eso no le impide seguir. La saliva cae por la comisura de los labios, cae por la pija de su hermano, cae en las bolas, cae en el suelo, cae por su barbilla.
El sostiene su cabello, ella por su propia voluntad come todo lo que puede.
Recorre con su lengua todo el tronco, recorre los huevos, uno por uno, gime escandalosamente chupándolos, tiembla, está teniendo orgasmo solo por la situación prohibida.
Vuelve a meterse la pija en la boca, sus manos rodean sus piernas, le rasguña el culo, sube más frenéticamente. Los abdominales de su hermano son su obsesión, ella tiene la vista fija ahí, cada tanto se saca la poronga de la boca para besar y morder esos abdominales prohibidos. Todo esto sin dejar de darle placer a su hermano. Siempre pajeándolo.
Van como 20 minutos solo de ella hacerle sexo oral y parece no querer cambiar, quiere disfrutar al máximo.
El rouge en su cara esta corrido, por toda su boca, se le corrió el rimmel de los ojos por las lágrimas producto de las arcadas al ahogarse con la pija de su hermano.
Ella sigue usando su lengua para dominar a su hermano, y con la boca llena de la pija siente esos latidos previos a la eyaculación.
Hay una explosión en su boca, ella tose, se le sale la leche de su hermano por el costado de su boca, cae en sus tetas. Mucha leche, cantidades pocas veces vista.
La leche queda por todos lados, ella esta agitada, el también, se miran por donde hay leche, ella con la mano derecha en las bolas de su hermano, queda atónita, mirando el resultado de tanto morbo. Parece hipnotizada.
De repente mira el vestido manchado, la cama manchada, su pecho con leche de su hermano, mira su mano derecha con el anillo de compromiso lleno de leche y saliva sosteniendo las bolas y el tronco de la pija de su hermano y se horroriza.
Empieza a llorar, diciendo que esto no está bien. Y le pide a su hermano que se cambie y se vaya.
Pero esto no quedara así.
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