Desde aquella primera en que cogí con mi papa, ahora andaba siempre por la casa en ropa interior pues se habia borrado de mi cualquier rastro de pudor hacia él. Pero no habiamos vuelto a hacerlo, ya que yo quería dejar pasar un poco de tiempo, no tengo intenciones de convertirme en su mujer, solo coger cada tanto para bajar la calentura. Pero bueno, dos semanas vuelan.
Estabamos desayunando, yo estaba a la mesa con una blusa, sin corpiño y con mi cachetero azul. Llegó mi hermana, a devolverme un saco azul que le habia prestado el dia anterior. En la cocina y frente a mi padre empezó a regañarme por mi vestimenta, diciendo "no podes estar así frente a papá, desvergonzada." Yo no le preste atención, solo agarre el abrigo y me dí vuelta. Antes de sentir el ardor en mi nalga derecha, oí como la mano de mi hermana surcaba el aire para estamparme una nalgada tremenda. Me di vuelta sorprendida, y la mire a los ojos mientras me decía despectiva "Algunas nunca aprenden".
Me quede helada, viendo como saludaba a mi padre y se marchaba. Mi padre me preguntó si me habia dolido mucho a lo que respondí que un poco. me dijo que me acerque para que pueda ver si me habia dejado alguna marca. Se acomodo mejor en la silla y yo me puse sacando pompas frente a él. Con sus dedos gruesos agarró mi cachetero y lo hundió entre mis nalgas mientras lo subía, transformandolo en una tanga improvisada. Comenzo a acariciarme donde me habia nalgueado mi hermana, pero rapidamente me estaba sobando todo el culito. Yo estaba empezando a excitarme y saque un poco mas de trasero, pero rapidamente me alejé. "Ya es suficiente" le dije, y me fui muy caliente a mi habitación, pensando si debia o no estar de nuevo con él. Me fui a bañar poco después y ya estaba depilandome, mientras me tocaba y pensaba como podía tentarlo para hacerlo de nuevo con él.
Se me ocurrió mientras me secaba. Se me vino a la mente un estudio fotográfico, y yo posando muy sexy para él. Entre a mi habitación y me puse unicamente una tanga blanca y el abrigo que me habia devuelto mi hermana. Lo llame y le dije que viniera. Le dije que queria que me saque algunas fotos, le di mi celular y empecé a posar sugerentemente para él. Estaba sentado en mi cama y yo frente a él levantandome de a poco el abrigo entre foto y foto, para que pudiera apreciar mi culo y como me calzaba la tanga desde adelante. Despues de algunas fotos me dijo que me pusiera mis lentes para estar mas sexy, y obedeci. mientras tanto yo ya podia ver el relieve de su verga dura en su pantalon. Tomo algunas más, pero se ve que el jueguito que le propuse generó el efecto deseado, pues despues de la quinta foto soltó el celular y me agarró de las nalgas acercandome hacia él.
Me quitó el buzo dejando mis tetas al aire y me bajo la tanga. por mi parte le quite el pantalon y el boxer, para despues empujarlo levemente dejandolo acostado en mi cama. Más rapido que inmediatamente me trepe arriba suyo e introduje su verga en mi de una sentada. Esta vez no fue como la primera, empecé a cabalgarlo salvajemente, desatando mi perra interna. estaba como loca y lo unico que me iba a apaciguar era ese pene que se adentraba en mi ya empapada vagina. Él estaba gozando mucho, lanzando gemidos roncos y por mi parte estaba muy a gusto ensartandome sola con su falo. Se incorporó para quedar sentado y lo abrace mientras lo seguia montando. Me agarraba de las nalgas y me llevaba hacia él, penetrandome todo lo profundo que podía. Pude ver en su cara el extasis y un instante despues sentí como palpitaba en mi interior, rellenandome de su semen. Me quede un instante asi, sintiendo como perdia rigidez dentro mio, hasta que me acostó, me dio un beso y se fue diciendo que iba a bañarse. Me quede acostada como estaba, mientras su leche escurria hacia afuera. Habia disfrutado bastante, pero no habia llegado a acabar, pero igualmente no me masturbe. Habia disfrutado unos buenos vergazos, y eso era todo lo queria ese domingo.
Estabamos desayunando, yo estaba a la mesa con una blusa, sin corpiño y con mi cachetero azul. Llegó mi hermana, a devolverme un saco azul que le habia prestado el dia anterior. En la cocina y frente a mi padre empezó a regañarme por mi vestimenta, diciendo "no podes estar así frente a papá, desvergonzada." Yo no le preste atención, solo agarre el abrigo y me dí vuelta. Antes de sentir el ardor en mi nalga derecha, oí como la mano de mi hermana surcaba el aire para estamparme una nalgada tremenda. Me di vuelta sorprendida, y la mire a los ojos mientras me decía despectiva "Algunas nunca aprenden".
Me quede helada, viendo como saludaba a mi padre y se marchaba. Mi padre me preguntó si me habia dolido mucho a lo que respondí que un poco. me dijo que me acerque para que pueda ver si me habia dejado alguna marca. Se acomodo mejor en la silla y yo me puse sacando pompas frente a él. Con sus dedos gruesos agarró mi cachetero y lo hundió entre mis nalgas mientras lo subía, transformandolo en una tanga improvisada. Comenzo a acariciarme donde me habia nalgueado mi hermana, pero rapidamente me estaba sobando todo el culito. Yo estaba empezando a excitarme y saque un poco mas de trasero, pero rapidamente me alejé. "Ya es suficiente" le dije, y me fui muy caliente a mi habitación, pensando si debia o no estar de nuevo con él. Me fui a bañar poco después y ya estaba depilandome, mientras me tocaba y pensaba como podía tentarlo para hacerlo de nuevo con él.
Se me ocurrió mientras me secaba. Se me vino a la mente un estudio fotográfico, y yo posando muy sexy para él. Entre a mi habitación y me puse unicamente una tanga blanca y el abrigo que me habia devuelto mi hermana. Lo llame y le dije que viniera. Le dije que queria que me saque algunas fotos, le di mi celular y empecé a posar sugerentemente para él. Estaba sentado en mi cama y yo frente a él levantandome de a poco el abrigo entre foto y foto, para que pudiera apreciar mi culo y como me calzaba la tanga desde adelante. Despues de algunas fotos me dijo que me pusiera mis lentes para estar mas sexy, y obedeci. mientras tanto yo ya podia ver el relieve de su verga dura en su pantalon. Tomo algunas más, pero se ve que el jueguito que le propuse generó el efecto deseado, pues despues de la quinta foto soltó el celular y me agarró de las nalgas acercandome hacia él.
Me quitó el buzo dejando mis tetas al aire y me bajo la tanga. por mi parte le quite el pantalon y el boxer, para despues empujarlo levemente dejandolo acostado en mi cama. Más rapido que inmediatamente me trepe arriba suyo e introduje su verga en mi de una sentada. Esta vez no fue como la primera, empecé a cabalgarlo salvajemente, desatando mi perra interna. estaba como loca y lo unico que me iba a apaciguar era ese pene que se adentraba en mi ya empapada vagina. Él estaba gozando mucho, lanzando gemidos roncos y por mi parte estaba muy a gusto ensartandome sola con su falo. Se incorporó para quedar sentado y lo abrace mientras lo seguia montando. Me agarraba de las nalgas y me llevaba hacia él, penetrandome todo lo profundo que podía. Pude ver en su cara el extasis y un instante despues sentí como palpitaba en mi interior, rellenandome de su semen. Me quede un instante asi, sintiendo como perdia rigidez dentro mio, hasta que me acostó, me dio un beso y se fue diciendo que iba a bañarse. Me quede acostada como estaba, mientras su leche escurria hacia afuera. Habia disfrutado bastante, pero no habia llegado a acabar, pero igualmente no me masturbe. Habia disfrutado unos buenos vergazos, y eso era todo lo queria ese domingo.
5 comentarios - Un domingo con papá