Salimos a la terraza, nos sentamos en una mesa apartada, apenas había gente ocupándolas, alguna pareja apoyada en la barandilla, besándose y algunos fumando y poco más.
¿Qué queréis tomar, preguntó Bruno?
Otro margarita, contestó Andre, rápidamente.
¿No crees que ya has tomado bastante alcohol, querida? luego caerás a plomo en la cama, le sonreí.
Quizá tengas razón, mejor tomaré un agua con gas, respondió sonriéndome con esa sonrisa pícara que solo ella sabía poner para provocarme.
Yo tomaré lo que toméis vosotros.
Como estamos en México qué mejor que una botella de tequila. Perfecto respondí
El mesero nos trajo el pedido y comenzamos con el ritual de la sal, el tequila y el limón. A Andre se le iban los ojos y al ir a ver el segundo chupito, me lo quito y se lo tomó ella, solo uno, dijo con cara de niña buena.
¿Así que amantes preguntó Valeria?
Sí, respondió Andre, nos conocimos hace pocos días en la playa y desde entonces no paramos de...
estar juntos, interrumpí yo, sabiendo que Andre iba a decir, "coger" con el desparpajo que la caracteriza de por sí y más ahora que iba algo borrachita,
Yo estaba discutiendo por teléfono con mi ex y Andre, que estaba cerca no pudo evitar escucharme
-cómo también te he escuchado a ti decir, que estarías dispuesta a un intercambio de parejas siempre que dieras con la pareja adecuada- soltó Andre de sopetón
Por favor, tendréis que disculparla, creo que el alcohol...
No pasa nada dijo Valeria, la culpa fue nuestra por ser tan indiscretos, pero sí, tiene razón. Llevamos tiempo hablando de probar cosas nuevas. Nos queremos y mucho, pero eso no tiene nada que ver con el sexo, nosotros pensamos que no tiene por qué ser incompatible el sexo fuera de la pareja con la estabilidad de la misma, pero eso no significa que Bruno se acueste con las que le de y la gana y yo haga lo propio, queremos algo consensuado.
Exactamente pensáis como yo. Además qué mayor muestra de amor puede haber que permitir que tu pareja disfrute del sexo con otra persona.
Pues yo ahora mismo solo quiero coger con Antonio, dijo Andre, menuda polla -como dicen ellos en España, tiene y lo bien que sabe usarla.
Ja ja ja! se rieron, ya se habían acostumbrado a lo directa que era y no se lo tomaron a mal
¿Argentinos? pregunté. Por el acento me ha dado la impresión que sois de allá, dije.
Si, de Buenos Aires, respondió Bruno.
Querida, dijo Valeria, dirigiéndose a Andre, a mí al principio me pasaba igual, solo quería la verga de Bruno y bajo ningún concepto habría consentido que cogiera con otras mujeres, pero con el paso de los años, el sexo se va haciendo cada vez más rutinario y va perdiendo parte de su encanto, se va perdiendo el morbo y la chispa por eso nos estábamos planteando tener sexo con otras personas e incluso...
¿qué? interrumpió Valeria impaciente
Incluso me estaba planteando la posibilidad de tener sexo con otra mujer. Por eso me tiene que gustar ella también y no solo él.
Andre, no contestó se quedó pensativa.
El resto de la velada transcurrió entre risas ayudadas por el tequila y cuando nos quisimos dar cuenta casi estaba amaneciendo.
Creo que es hora de retirarnos dijo Bruno, encantado de haberos conocido, seguro que nos volveremos a ver.
Claro ¿estaréis muchos días alojados, pregunté? aún nos quedan 4 días dijo Valeria.
Como a nosotros respondí.
LLegamos a la habitación y como era de esperar Andre cayó a plomo sobre la cama, la quité el vestido y la arropé.
¿Qué queréis tomar, preguntó Bruno?
Otro margarita, contestó Andre, rápidamente.
¿No crees que ya has tomado bastante alcohol, querida? luego caerás a plomo en la cama, le sonreí.
Quizá tengas razón, mejor tomaré un agua con gas, respondió sonriéndome con esa sonrisa pícara que solo ella sabía poner para provocarme.
Yo tomaré lo que toméis vosotros.
Como estamos en México qué mejor que una botella de tequila. Perfecto respondí
El mesero nos trajo el pedido y comenzamos con el ritual de la sal, el tequila y el limón. A Andre se le iban los ojos y al ir a ver el segundo chupito, me lo quito y se lo tomó ella, solo uno, dijo con cara de niña buena.
¿Así que amantes preguntó Valeria?
Sí, respondió Andre, nos conocimos hace pocos días en la playa y desde entonces no paramos de...
estar juntos, interrumpí yo, sabiendo que Andre iba a decir, "coger" con el desparpajo que la caracteriza de por sí y más ahora que iba algo borrachita,
Yo estaba discutiendo por teléfono con mi ex y Andre, que estaba cerca no pudo evitar escucharme
-cómo también te he escuchado a ti decir, que estarías dispuesta a un intercambio de parejas siempre que dieras con la pareja adecuada- soltó Andre de sopetón
Por favor, tendréis que disculparla, creo que el alcohol...
No pasa nada dijo Valeria, la culpa fue nuestra por ser tan indiscretos, pero sí, tiene razón. Llevamos tiempo hablando de probar cosas nuevas. Nos queremos y mucho, pero eso no tiene nada que ver con el sexo, nosotros pensamos que no tiene por qué ser incompatible el sexo fuera de la pareja con la estabilidad de la misma, pero eso no significa que Bruno se acueste con las que le de y la gana y yo haga lo propio, queremos algo consensuado.
Exactamente pensáis como yo. Además qué mayor muestra de amor puede haber que permitir que tu pareja disfrute del sexo con otra persona.
Pues yo ahora mismo solo quiero coger con Antonio, dijo Andre, menuda polla -como dicen ellos en España, tiene y lo bien que sabe usarla.
Ja ja ja! se rieron, ya se habían acostumbrado a lo directa que era y no se lo tomaron a mal
¿Argentinos? pregunté. Por el acento me ha dado la impresión que sois de allá, dije.
Si, de Buenos Aires, respondió Bruno.
Querida, dijo Valeria, dirigiéndose a Andre, a mí al principio me pasaba igual, solo quería la verga de Bruno y bajo ningún concepto habría consentido que cogiera con otras mujeres, pero con el paso de los años, el sexo se va haciendo cada vez más rutinario y va perdiendo parte de su encanto, se va perdiendo el morbo y la chispa por eso nos estábamos planteando tener sexo con otras personas e incluso...
¿qué? interrumpió Valeria impaciente
Incluso me estaba planteando la posibilidad de tener sexo con otra mujer. Por eso me tiene que gustar ella también y no solo él.
Andre, no contestó se quedó pensativa.
El resto de la velada transcurrió entre risas ayudadas por el tequila y cuando nos quisimos dar cuenta casi estaba amaneciendo.
Creo que es hora de retirarnos dijo Bruno, encantado de haberos conocido, seguro que nos volveremos a ver.
Claro ¿estaréis muchos días alojados, pregunté? aún nos quedan 4 días dijo Valeria.
Como a nosotros respondí.
LLegamos a la habitación y como era de esperar Andre cayó a plomo sobre la cama, la quité el vestido y la arropé.
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