Plena pandemia,me encontró trabajando de casa; tengo mi propio emprendimiento, pero aun soyparte de la gerencia de una multinacional, lo cual el año pasado durante plenapandemia tuve que ir a la planta un par de veces por semana.
Realmente era unadesolación ver todo parado, sin gente, casi nadie.
Los de seguridad, algúngerente que iba como yo y los muchachos de limpieza.
Siempre fuicurioso, morboso y nunca me juzgué por mis acciones y no había tenido unaexperiencia homosexual en años, creo que desde pendejo.
No sé porque,pero empecé a prestarle atención al pendejo que venía a limpiar la oficina.
Convengamos que un tipo como yo, 40 y pico de traje o al menos de pantalón yvestir y camisa mirando a un pendejito de no más de 20 es muy morboso.
Y Así era. El pibe venía a limpiar la oficina 3 vecespor día, muy educado siempre con su barbijo, no podía dejar de mirarlo eimaginarme cosas. Pibe de no mas de 20 años, eso de hogares humildes, pinta decumbiero, flaco, alto. -
Pasaron 2 semanasasí y de pronto pleno julio del año pasado, salía de la planta 6 de la tarde ylo veo ya caminando, saliendo de la planta como rumbo hacia la panamericana.
Letoco bocina, bajo el vidrio del lado del acompañante, lo saludo y me ofrezco aalcanzarlo, sube, se saca el barbijo, me da las gracias.
Se le sentía olora perfumito como recién duchado y estaba con un pantalón de jogging futbolero yno paraba de sobarse la verga, yo iba a 40 x hora y lo relojeaba como se lasobaba.
Yo le daba charla, el de a poco me iba contando cosas, soltero, salía mucho,jugaba mucho al futbol en un torneo con amigos del barrio y casa un min, seacomodaba la verga sobre el pantalón y yo lo relojeaba. Cuando agarro lacolectora, me mira y me engancha mirandolo y me pregunta, ¿te gusta esto nopapi?
Yo no dije nada,pero asentí con la cabeza, me dijo el pendejo, “seguí un poco más y dobla allápara adentro” y me metí en una calle de tierra, me detuve y el pendejo miro paralos dos costados y se bajó el pantalón y el bóxer y ya la tenía dura como unmástil.
Pendejo villerito todo depilado vergon, me miraba y me decía te gusta papi mirón y le dije que sí, empecè a pajearlo y me pidió $$ para dejarse mamar y acepte y se la chupe ahí mismo en el cochehasta que me llenó la boca de leche. -
Empezamos a haceralgo similar cada vez que iba a la planta y nos cruzábamos y siempre le daba algúnregalito y el me dejaba mamársela y tragarme todo. -
Un día en eltrabajo después de hora me quede, pleno invierno y se la iba a chupar en elvestuario, cuando entro lo veo desnudo, se había terminado de duchar y busco comerlela boca, el me corre la boca y me dice “con la boca es más regalito”, termineaceptando y cuando vio el billete me transo de manera hermosa y terminechupándosela en el baño.
También porintermedio de él y de $$ se la chupé a otro pendejo compañero de él. Ambos enmi coche, primero a uno y luego al otro
Fue el comienzode una linda amistad y los gustos hay que dárselos en vida, ¿no?
Realmente era unadesolación ver todo parado, sin gente, casi nadie.
Los de seguridad, algúngerente que iba como yo y los muchachos de limpieza.
Siempre fuicurioso, morboso y nunca me juzgué por mis acciones y no había tenido unaexperiencia homosexual en años, creo que desde pendejo.
No sé porque,pero empecé a prestarle atención al pendejo que venía a limpiar la oficina.
Convengamos que un tipo como yo, 40 y pico de traje o al menos de pantalón yvestir y camisa mirando a un pendejito de no más de 20 es muy morboso.
Y Así era. El pibe venía a limpiar la oficina 3 vecespor día, muy educado siempre con su barbijo, no podía dejar de mirarlo eimaginarme cosas. Pibe de no mas de 20 años, eso de hogares humildes, pinta decumbiero, flaco, alto. -
Pasaron 2 semanasasí y de pronto pleno julio del año pasado, salía de la planta 6 de la tarde ylo veo ya caminando, saliendo de la planta como rumbo hacia la panamericana.
Letoco bocina, bajo el vidrio del lado del acompañante, lo saludo y me ofrezco aalcanzarlo, sube, se saca el barbijo, me da las gracias.
Se le sentía olora perfumito como recién duchado y estaba con un pantalón de jogging futbolero yno paraba de sobarse la verga, yo iba a 40 x hora y lo relojeaba como se lasobaba.
Yo le daba charla, el de a poco me iba contando cosas, soltero, salía mucho,jugaba mucho al futbol en un torneo con amigos del barrio y casa un min, seacomodaba la verga sobre el pantalón y yo lo relojeaba. Cuando agarro lacolectora, me mira y me engancha mirandolo y me pregunta, ¿te gusta esto nopapi?
Yo no dije nada,pero asentí con la cabeza, me dijo el pendejo, “seguí un poco más y dobla allápara adentro” y me metí en una calle de tierra, me detuve y el pendejo miro paralos dos costados y se bajó el pantalón y el bóxer y ya la tenía dura como unmástil.
Pendejo villerito todo depilado vergon, me miraba y me decía te gusta papi mirón y le dije que sí, empecè a pajearlo y me pidió $$ para dejarse mamar y acepte y se la chupe ahí mismo en el cochehasta que me llenó la boca de leche. -
Empezamos a haceralgo similar cada vez que iba a la planta y nos cruzábamos y siempre le daba algúnregalito y el me dejaba mamársela y tragarme todo. -
Un día en eltrabajo después de hora me quede, pleno invierno y se la iba a chupar en elvestuario, cuando entro lo veo desnudo, se había terminado de duchar y busco comerlela boca, el me corre la boca y me dice “con la boca es más regalito”, termineaceptando y cuando vio el billete me transo de manera hermosa y terminechupándosela en el baño.
También porintermedio de él y de $$ se la chupé a otro pendejo compañero de él. Ambos enmi coche, primero a uno y luego al otro
Fue el comienzode una linda amistad y los gustos hay que dárselos en vida, ¿no?
2 comentarios - Mi Trabajo ( relato Gay)