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Madre Argentina 14 (2021)

Autor original: http://www.poringa.net/BarcenaG



Comenzó otra semana semanal, por ende nos levantamos temprano con mi mamá y desayunamos juntos. Esa día mi vieja se había levantado con ganas de calentarme, me di cuenta porque estuvo toda la mañana en ropa interior, mostrándome el culo y las tetas descaradamente para que la vea. Pero no podía hacer nada ya que me abuela estaba despierta.

Sin poder hacer nada más que mirar, me fui a trabajar. Llegué temprano y me preparé un café fuerte. Al rato, se me acerca mi encargada para presentarme a nuestra nueva compañera. Era una pendeja de 20 años, que apenas vi, me gusto. Era petisa, no tenía una cola grande como a mi me gusta, pero era bonita de cara.

En el primer descanso, salí a fumar y afuera la veo a mi compañera, así que me le acerque y nos pusimos a charlar. Mientras hablaba con ella, empezó a sonar mi celular. Era mi mamá.

- Hoy estoy re caliente.- Decía el mensaje.- Todavía siento tu leche adentro mío... Querés hacer algo hoy?-
No le respondí y seguí con lo mío. A los diez minutos, suena otra vez mi celular.
- Te hacés el difícil?.. No me digas que no te calentó verme mover el culo para vos.-

Otra vez la ignore y seguí laburando. Me pareció eterno ese día de trabajo, pero salí contento porque había conseguido el número de mi compañera nueva. Cuando llegué a casa, salude a todos. Mi abuela y mi hermano me devolvieron el saludo, menos mi mamá que me miro con cara de culo.

- Cómo te fue, querido?- Me preguntó mi abuela
- Bien, fue un día cansador.- Le respondí.

Seguimos hablando hasta que mencioné lo mi nueva compañera. Entonces vi que mi mamá estaba en la computador, parando oreja. Quise ponerla celosa a mi mama, entonces le dije a mi abuela que era re linda y que quizás la invite a salir. Aunque no era mala idea salir con alguien de mi edad y tener algo serio. Total, ya tenía mi amante.

- Escuchaste, hija?- Mi abuela le hablo a mi mamá.- Por ahí el nene se ponga de novio jaja.-
- See... Ya escuché.- Contesto cortante mi vieja.- Estoy trabajando, no me molesten por boludeces...-

Seguí hablando con mi abuela y me contó que mi tío (el hijo mayor de ella), nos prestaba una casa que tenía para pasar el finde. Tenía pileta, parrilla y un patio amplio. Mi vieja había dicho que sí, así que acepté. El viernes de esa semana, después de trabajar y llegando a casa, partimos para pasar el finde en esa casa. Cerca de las 9pm llegamos a casa. Como no tenía que comer, fuimos mi mamá y yo a comprar algo para cocinar.

- Me podrías decir que te pasa?..- Le pregunté mientras caminaba concentrada con el celular.- No me digas que te pusiste celosa...- Como no respondía, volví a insistir.- Dale, no te portes como pendeja...-
- Bueno, querés hablar?- Hablo finalmente, después de pedir una pizza en una rosticería.- Primero: Como le dije a tu primo, te lo digo a vos... Yo no soy la segunda de nadie. Y tampoco quiero que vos engañes a tu pareja, porque yo no te eduque para que seas un infiel como tu padre. Respeta a la mujer con la que decidas estar...-
- Pero estaba jodiendo...- Le dije, al ver que se lo tomo muy enserio.- No iba a hacer nada...-
- Segundo: yo no soy ninguna pendeja para que me andes dando celos, porque no somos nada. Solo somos madre e hijo... Con algún que otro derecho de más, pero nada más. No soy tu novia, ni tu amante...- 

Después de ponerme los puntos tan energéticamente, recibimos la comida y nos fuimos a casa.

Al día siguiente, como me había ofrecido para limpiar la pileta, la limpie temprano a la mañana. Al terminar, me puse a tomar el sol. Mi vieja se me acerco ofreciéndome unos mates. Ella estaba con una malla de dos piezas. La parte de arriba de la malla parecía que era algo pequeña para mi mamá, ya que las tetas estaban a punto de salirse a cada rato y ella tenía que acomodárselas para que no se les escapen.

- Que rica que te ves, ma.- Le dije, mientras tomábamos mate.- Por qué no haces toples?-
- Cállate... Vos ya no las vas a ver más.- Respondió refiriéndose a sus tetas.
- Si no estoy con nadie...-
- Eso ya lo veremos...-

Al rato aparecieron mi hermano y mi abuela. Nos metimos a la pileta con mi hermano y empezamos a jugar con una pelota de playa. A los minutos se unió mi vieja y se puso a jugar con nosotros. Mi hermano y yo no parábamos de verle el culo mientras saltaba y se movía. En uno de esos saltos que hacía mi mamá, se le escapó una teta. No se había dado cuenta hasta que el boludo de mi hermano le aviso. Ella se la guardo riéndose de la vergüenza. 

- Te apuesto un fernet que le saco el top.- Le propuse jodiendo a mi hermano sin que nos escuche mamá.
- Jajaj... Dale boludo, es mamá. Sos un zarpado.- Contesto nervioso.
- Dale, o tenés miedo de perder?- Insistí.
- Jajaja... Bueno, dale. Pero cuando llegue, te vas a cagar... Y si no te pega un tortazo, hasta te compro la coco.-

Me sumergí y me acerque haciéndome el boludo  a mi vieja. Hasta que vi la oportunidad y le saqué el top. Ella se tapo las tetas rápidamente mientras yo salía disparado de la pileta.

- A ver como hace toples mamá? Jajaja.- Me burlaba mientras le mostraba el top.
- Dale, tarado...- Dijo muy seria.- Dame eso, antes de que te cague a palos...-
- Mostranos como quedan los pechos después de amamantar a dos chicos.-
- Dale, dáselo...- Dijo mi hermano que no aguanto la joda.- Ganaste.-
- Dale, mami... Pela esas tetas.- Le volví a insistir a mi vieja.
- Ya está, devolvéselo.- Dijo mi hermano, saliendo de la pileta para sacarme el top.- Ya ganaste, termino la joda...-

Se lo devolví antes de que se ponga más tensa la situación. Mi hermano le alcanzó una toalla a mi mamá para irse a cambiar al baño. En eso, mi abuela le pide a mi hermano que vaya a comprar algunas cosas. Yo aproveche para seguir a mi mamá hasta el baño.

- Qué hacés, pelotudo?..- Me reto al verme entrar.- Cómo me vas a exponer así delante de tu hermano?..-
- Jajajaj... Dale, decime que no te calentaste estando en tetas delante de tu otro hijo.- Le dije, tomándola de la cintura y apoyándole la pija dura en la cola.- Me re calenté ver como te tapabas al frente de Leo. Me la puso dura...-
- Salí, ya te dije que no...- Dijo, mientras le apretaba las tetas con fuerza.- Te dije que no cuando te hiciste el macho levanta minas... Y menos ahora con lo que me hiciste...-

Cuando le estaba por bajar la bombacha, escuché a mi abuela que se acercaba por la orilla de la pileta. Salí rápido de ahí y me tiré al agua hasta bajar la calentura.

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