Hola a todos otra vez!
Vuelvo a escribir despues de un tiempito...
Esta historia, transcurre de casualidad y en parte, por accidente.
Todo empieza un domingo al mediodia, conmigo en otra ciudad (no importa cual).
Generalmente, por trabajo, viajo seguido entre dos ciudades que estan cerca.
Suelo moverme en auto, y eventualmente en colectivo.
Ese fin de semana, estaba en la ciudad vecina, en casa de un amiga.
Almorzamos juntas, en una típica comida de amigas.
Todo muy lindo, hasta que me empecé a ir.
Mi auto, de repente, decidió no arrancar, haciendo un ruido raro.
Obviamente, como toda mujer, no entiendo absolutamente nada de mecánica.
Por suerte tengo un mecánico que siempre me salva las papas en momentos como estos.
Ante esa situación, lo llamé explicándole lo que pasó, y llorándole un poco (y beboteándolo otro poquito, jiji).
Como siempre, vino hasta donde estaba yo, acompañado por su hijo, que trabaja con él.
Toqueteó no se qué, y por suerte lo pudo hacer arrancar.
Igualmente, tenía que revisarlo porque el ruido que hacía, claramente no era normal.
Mucho menos, iba a animarme a viajar con el auto en esa situación.
Coordinamos para que se lo lleve, y pasar a buscarlo durante la semana.
Pensé que ese finde, me iba a tocar volver en colectivo, como lo hice muchas otras veces antes.
Mi amiga me acompañó a la terminal, para sacar el pasaje para esa misma tarde, y aguantarme hasta que sea la hora de subirme al cole.
El problema fue cuando me dijeron en la boletería, que no habia más boletos.
(hay menos viajes, y con menos asientos disponibles, dado el contexto actual).
Al día siguiente tenía que estar a la mañana temprano, de vuelta si o si.
y sin auto, todo se me complicaba bastante...
No sabía qué hacer.
Estaba empezado a ponerme nerviosa, hasta que mi amiga me dice:
- Ya sé! Tengo un amigo que a veces viaja los fines de semana. Vamos a llamarlo!
Por unos instantes, bajé un poco los nervios que tenía.
Llamamos al amigo en cuestión, y nos tiró una mala y una buena...
La mala es que viajaba, pero no tenia más lugar en el auto.
Resulta que suele viajar seguido, y aprovecha a sumar gente para el viaje, y amortizar así un poco los gastos.
La buena, fue que nos dijo lo que terminó siendo la solución: una app en la que personas publican viajes y los interesados pueden reservar un lugar!
Mi teléfono está siempre que explota, por lo que mi amiga fue la que incursionó en este experimiento.
Instalo la app en cuestión y nos pusimos las dos a explorar.
La logica de la app, es indicar el lugar de origen y destino, y una fecha.
Despues de eso, salen conductores y los datos de contacto, como para coordinar.
La primera opción, fue una mujer, cuarentaypico, pero no fue posible.
La segunda opción, fue un pendejo, veinteañero/casi treinta.
Le escribimos, en realidad mi amiga desde su celular. Nos dijo el precio y hasta dónde iba.
El lugar al que iba me quedaba relativamente cerca asi que me pareció perfecto.
Le reservamos el lugar, y coordinamos el horario y punto de salida al que me terminaría llevando mi amiga.
También me pasó el número de teléfono del chico en cuestión, como para definir directamente entre nosotros cualquier detalle del viaje.
Hasta ahí, agradecida de que exista esto, y poder encontrar una solución y poder viajar!
Faltaba un buen rato todavia para la hora de salida.
Agendé su numero en mi teléfono como "Viaje" y le escribí un mensajito de whatsapp para que sepa que era yo, y que tenga mi celu por cualquier cosa que pudiera surgir:
- Hola! Soy Pame!
Hace un ratito mi amiga te escribió para que yo pueda viajar con vos!
Hasta ahi, era un contacto de esos que solo ves la carita gris, sin fotito de perfil ni nada.
El mensaje me marcaba como enviado, pero todavía no visto.
Pasaron unos minutos, y me respondió:
- Hola! Como estas?
Si, me dijo. Soy Fede. Viajo con una amiga tambien.
Salimos a las 19.30 de (cerca de la terminal). Te parece ?
Me pareció muy bien (fue lo que acordaron previamente), y también me pareció muy bien la foto de perfil: un pendejo veinteañero / treintañero, barbita, tirando a rubio. Mucho mas de eso no se podía ver.
En broma, le hice un comentario a mi amiga:
- Mirá el chofer que tengo! jaja
Lo miró con cara de "apaa" y nos reímos las dos.
Todo en tono de chiste, obviamente. Lo único que quería, era llegar.
La situación de nervios e incertidumbre de cómo viajar, ya se me habían ido.
Igualmente, estaba nerviosa por no saber con quién iba a viajar, dejándome llevar por la "app recomendada por un amigo de una amiga".
Se acercaba la hora del viaje, y me preparé para partir.
Le dije a mi amiga que esté atenta, y nos mensajeabamos durante el camino.
Llegamos al lugar de partida, y la primera impresión fue buena:
El pibe muy simpatico, a priori buena onda.
La amiga tambien parecia simpatica, mas o menos de su edad.
El auto bien (ni idea qué auto, pero era lindo),
Saludé a mi amiga y le dije que esté atenta al celu, tal como hablamos antes.
Empezamos el viaje, con charla como para romper el hielo, y con música tranqui.
Ellos sentados adelante, y yo tranquila y cómoda atrás.
Todo muy bien.
Durante el viaje, me dijeron que ella se bajaba en (la ciudad que está entre medio).
Ya nos lo habia dicho en el chat de la app, así que estabamos de acuerdo.
Mandé mi primer mensajito a mi amiga, diciendo que estaba todo ok, asi se quedaba mas tranquila.
Viajamos unos cuantos kilometros más, y nos acercamos al desvío para dejar a Agostina, su amiga.
Llegamos al lugar de destino de ella, y se saludaron:
- Gracias Fede! Nos vemos, despues nos hablamos,
Se dijeron y se dieron un beso y abrazo, mientras ella descargaba el bolso que llevaba.
Aparentemente eran solo amigos.
- Querés pasarte adelante, Pame ?
- Dale, ahora me cambio.
Yo estaba vestida con un jean y una camperita hasta ese entonces cerrada, porque estaba algo fresco, aunque adentro del auto estaba bastante bien la temperatura.
Me acomodé en el asiento de adelante, principalmente para que no parezca un taxi.
Me hubiese parecido rara la situación de viajar asi, sabiendo además que faltaba un rato todavía.
Aproveché para desabrocharme el cierre de la campera, ya que no hacia para nada de frío adentro.
Ya me sentía bastante cómoda y suelta, sobre todo porque "Fede" era bastante simpático.
Charla fluida, aunque se notaba que cada tanto alguna mirada se le escapaba.
Obviamente me gusta que me miren, y darme cuenta que me miraba no fue para nada dificil.
Eso me hizo sentir más cómoda todavía, y de a poquito el morbo empezaba a ocupar un lugar en mi cabecita...
Los kilómetros iban pasando y las miradas continuaban.
Envié otro mensajito a mi amiga: "todo perfecto! quedate tranqui!"
Creo que no fui la única al que los ratones le usurpaban la cabeza.
Disimuladamente me acomodé el cinturón entre las dos tetas, dejándo notar mi principal atributo....
Poco tardó Fede en darse cuenta, por lo que sus miradas, aunque hacia fuerza por disimularlas, eran ya muy obvias..
Los ratones ya caminaban libremente por mi cabeza y mi imaginación empezaba a volar...
Cuando me hablaba y giraba un poquito para mi lado, le miraba la boca, un poco por tentacion, y otro poco por calientapijas y provocadora que soy.... (lo admito).
Me sentía como un pez en el agua, jugando a ese jueguito.
Creo que ya se estaba poniendo incómoda la situación para él, manejando.
Intenté mirarle disimuladamente el bulto, pero con la poca luz que había me quedé con las ganas de ver...
Pensé por dentro mio "pará un poco, degenerada!".
Ya estabamos solo a un rato de llegar, todavía viajando.
Honestamente quería llegar a mi casa, pero la situación se podia dar para cualquier final.
Decidí dejar que fuese lo que él quisiese que sea.
Debemos haber seguido unos dos minutos aprox, sin hablar, pensando por dentro qué podría pasar.
De repente, el destino quiso que a esa altura del viaje, al costado de la ruta, empiecen a verse las tipicas luces de "hoteles" que hay en las entradas de muchas ciudades.
Los dos nos dimos cuenta de eso.
Creo que no nos quisimos mirar, pero igual nos dimos cuenta que el otro tambien lo había notado, y nos sacó una sonrisa de "seguro que pensás lo mismo que yo..."
- Dejá de mirarme así, porque doblo en la proxima salida...
Intenté poner mi mejor cara de poker, pero sin dudas la sonrisa se me debe haber escapado.
Seguí en silencio, sin pronunciar una palabra.
- Te digo en serio, mirá que ganas no me faltan...
Noté como bajó un par de cambios, y también un poco la velocidad.
Evidentemente él estaba dispuesto a doblar para ir a coger.
Nos miramos una vez mas, y sin decir una palabra le debo haber dado a entender lo mismo.
Sonreímos los dos, asumiendo lo que nos esperaba.
El angelito de mi hombro derecho me decía "Pame, no podes ser tan trola".
El diablito de mi hombro izquierdo me decía "Pame, cogete este pendejo, por favor!"
Mientras debatía internamente el futuro de mi próxima hora, llegamos y entramos al hotel.
Una habitación nada del otro mundo. con lo necesario para poder pasar un muy lindo rato.
Una cama a priori linda, alta, como me suelen gustar.
No habia hidro, pero sí una muy linda ducha vidriada.
Entré primero, me saqué la campera y me acosté en la cama mirando hacia arriba.
Con un tono claramente en broma:
- Yo acá me quedo dormida, no me despertas mas!
- Lo que menos vamos a hacer, va a ser dormir...
Apenas sonreí, y con mi mejor tono de bebota, y haciéndome la inocentona:
-No? Qué vamos a hacer acá?
- No te das una idea la cogida que te voy a dar...
Te quiero coger desde que te sentaste al lado mío.
Se acostó arriba mío, manoseándome las tetas, y comiéndome la boca de un beso, el cual obviamente seguí.
Me abrí un poquito de piernas, dejándolo acomodarse entre medio, todavía vestidos.
Pude sentir con el jean puesto la dureza de su pija, y ver una importante carpa en su pantalón de joggin.
Arrodillado él entre mis piernas, sacó su remera, quedando con su cuerpo desnudo.
Dejó ver un cuerpo que claramente tenía gym encima, tal como podía suponer.
Yo hice lo mismo, quedando en corpi, mientras nos ayudabamos a sacar lo que quedaba de ropa.
Apretamos y franeleamos así acostados unos minutos más.
Desprendí mi corpiño desde atrás, y mientras Fede me lo bajaba de adelante, empezó a recorrer mis pezones con su boca.
Qué ganas que tenía de comerte las tetas...
Yo seguía sin emitir palabras, solamente jadeaba por las lamidas que me estaba dando y me dedicaba a disfrutar.
Estaba tan caliente, que si hubiese querido hablar, en ese momento no hubiese podido.
Mientras disfrutaba su boca en mis tetas, acaricié su boxer todavía puesto.
Pude tocar un paquete de muy buen tamaño y una erección incuestionable.
Lo bajé como pude, y agarré con toda mi mano, el tronco de su pija.
Pude comprobar lo evidente: una pija de buen tamaño, con una dureza lista para entrar...
La tentación de ver desde la cama, esa ducha vidriada, me impidió resistirme:
- Vamos a la ducha, -dije, casi como una órden.-
Fede terminó de desnudarse, mientras yo abría el agua de la ducha.
De espaldas a él, puedo ver cómo se acercaba totalmente desnudo, y con la pija bien dura.
Me tomó de la cintura con sus dos manos, mientras nos metimos los dos juntos bajo el agua ya con la temperatura justa.
Su pija dura y parada, ya se apoyaba sobre el tatuaje arriba de mi cola, mientras yo quebraba la cintura para parar levemente mi cola, y sentir su cuerpo bien pegado al mío.
Sus manos subieron, dejando mi cadera, para acariciar y manosear mis tetas.
Su boca besó mi espalda, desviándose hasta mi cuello.
Yo seguía de espaldas a Fede, con mi cuerpo (y mis tetas) apoyadas contra la pared de la ducha.
Una de mis manos recorrió su abdomen y buscó su entrepierna, encontrando otra vez su pija ya bien dura, para pajearlo suavemente.
Los besos en la nuca y cuello, estaban comenzando a hacerme perder el control...
Fede tomo su pija desde el tronco, buscando el ingreso a mi concha.
Pude sentir perfectamente el pinceleo, haciendo que lo ayude a entrar...
Quebré un poco mas mi cintura, parando bien la cola, facilitándole la tarea.
Sentí cómo su cabeza, comenzó a entrar lentamente, para que luego siguiera la totalidad de su tronco.
Mis jadeos se convirtieron en los primeros gemidos.
- AhhhhHHHH
Su pija entró entera, lentamente, hasta el fondo.
El ritmo se aceleraba cada vez más, al igual que mis gemidos y sus jadeos.
Comenzaba a sentirse el choque de mi cola contra su pelvis, mientras el agua caía sobre nosotros.
Sus manos dejaron por un momento mis tetas, para agarrarme de la cintura y poder cogerme con más fuerza.
Mi cintura se arqueaba al ritmo de su bombeo, para sentir más todavía la integridad de su pija adentro mío.
- Ahhh! Ahhh! Ahhh!
- AHHHH! AHHH! AHHH!
La calentura era tal, que los dos queríamos seguir así, cogiendo de parados en la ducha.
El plaff! plaff! podia escucharse cada vez más fuerte, durante unos minutos.
El hecho de estar en un hotel, me liberó de cualquier contención.
Jadeaba y gemía como una prostituta, a la que se estaban cogiendo en un telo al costado de la ruta.
- AHHHH! AHHH! AHHH!
Pocas veces el morbo de la situación me había calentado tanto.
Tanto así, que asumí el papel de prostituta,
Me dejé llevar por mi pendejo conductor, y complacerlo a su gusto.
Yo estaba disfrutando plenamente la cogida que me estaban dando, y evidentemente Fede también.
Sus manos estaban firmes en mi cintura, casi tanto como su pija adentro mío.
- Ahhh! Ahhh! Ahhh!
- AH! AHH! AHHH!
Sus bombazos se aceleraron todavía mas, hasta el límite.
Yo estaba a punto de acabar, cuando sus jadeos comenzaron a aumentar el ritmo, y sus últimas embestidas comenzaron a parar, hasta terminar él primero.
- AAAHHHHHH!
Una de sus manos acarició mi entrepierna, mientras que la otra, volvió a mis tetas.
Suavemente salió de adentro mío, con la pija todavía dura, pero ya no parada como antes.
Todavía seguía agitado, por el polvo de unos segundos antes.
- Qué perra que sos, por dios!
Nos miramos y sonreímos los dos.
Aprovechando la situación, y con una buena voz de trola, le pregunté:
- Te sacaste las ganas ? Mirá que yo todavía no...
Al parecer mi comentario ayudó a que esa pija dura, empezara a volver a pararse.
Todavía los dos adentro de la ducha, y sin esperar su respuesta, me agaché para empezar a chupársela y terminar de pararla.
Pude notar cómo su pija se ponía más dura adentro de mi boca.
Mi lengua estaba haciendo efecto, tanto así que me agarró del pelo y suavemente me cogió la boca, hasta casi ahogarme y decirme ahora él a mí:
- Vamos a la cama...
Con los cuerpos todavía mojados, y la habitación calefaccionada, volvimos a la cama.
Yo seguía con ganas de sentir el choque de su pelvis en mi cola, por lo que sin consultar, me arrodille en el borde de la cama, poniéndome en cuatro patas.
El mensaje fue inequívoco, por lo que sin dudarlo se Fede se puso detrás mío, metiendo nuevamente su pija dentro mío, entrando muy fácilmente esta vez.
- AAAHHHHHH!
- Ahhh!
Otra vez los bombazos empezaron suavemente, aunque enseguida se aceleraron, aunque no tanto como el polvo anterior.
La puta interior, estaba a flor de piel, con los gemidos otra vez cada vez mas fuerte.
Claramente Fede se había recuperado porque las embestidas tenían prácticamente la misma intensidad que en la ducha.
- AAAHHHHHH!
- Ahhh!
Sinceramente, de a ratos se me iba el nombre de la cabeza.
Poco me importaba.
-AHH! Cogeme pendejo!
- AAAHHHHHH!
El ritmo era cada vez mas intenso.
Sus manos otra vez en mi cintura, para empujar su pija hasta más adentro en cada bombazo.
- AAAHHHHHH!
- Ahhh!
-AHH! Cogeme pendejo! Cogeme asi!
- Ahhh!
- Si! Si! Asi! Seguí asi que me haces acabar!!
Su pija entraba y salía sin parar, mientras yo suplicaba que no frenara.
Empecé a sentir ese cosquilleo hasta que pude acabar y caí rendida en la cama.
- AH! AHH! AHHHHHHH!
Quedamos unos minutos más asi, recobrando las fuerzas que nos quitamos mutuamente.
Nos miramos y volvimos a sonreírnos sin decirnos una palabra.
Antes de que finalizara el turno, nos vestimos y nos dispusimos a seguir el viaje que parecía habiamos comenzado días atrás...
Afuera hacia un frío, que parecía otro mundo.
Para esa instancia, ya habia olvidado escribirle a mi amiga, por lo que aproveché:
- Llegando! Todo Ok!
- Me alegro que hayas podido llegar. Te quiero amiga!
Subimos al auto, y continuamos lo que quedaba.
Al llegar, me acercó como favor, hasta la esquina de casa.
Nos despedimos con un beso en el cachete y una linda sonrisa cómplice, como dos buenos compañeros de viaje.
Obviamente, el contacto sigue en mi agenda...
13 comentarios - Viaje improvisado
alto viaje rico 😍
+10
"El angelito de mi hombro derecho me decía "Pame, no podes ser tan trola"." eso a mi me lo dijo una amiga una ves 😂
me re calentó todo.... muy bueno!