Capítulo I http://www.poringa.net/posts/relatos/3909564/Supervivencia-al-desnudo.html
Capítulo II http://www.poringa.net/posts/relatos/3912588/Supervivencia-al-desnudo-II.html
Capítulo III http://www.poringa.net/posts/relatos/3998339/Supervivencia-al-desnudo-III.html
SUPERVICENCIA AL DESNUDO IV
Me acerqué a mi prima que estaba increíblemente provocativa con ese uniforme de colegio. Y es que no era cualquier uniforme. Era una puti colegiala.
Dani? Susan? No se cual de las dos pero de inmediato me le lancé.
Ya le estaba agarrando el culo con las dos manos, comiéndole el cuello y la erección se la apoyaba en el abdomen. Estaba poseído. Estaba endemoniado. Estaba caliente y frente a mi tenía la encarnación de todo aquello que por días me había tenido así.
Subí para comerle la boca pero reaccioné. Iba a besar a mi prima pensando que era otra persona (o tal vez por eso mismo estaba tan caliente, porque era mi prima). Me detuve. Le susurré casi rozando su boca con la mía.
- Me vas a volver loco
- sabía que te ibas a calentar cuando vieras a Susan como una lolita -dijo
- Vas a tener que poner cuidado porque me pongo bruto y después no respondo ni por la familia
- La semana pasada estaba más ligerita y no me hiciste nada -dijo mirándome desafiante
- La semana pasada no tenía esta calentura encima -respondí mientras la giraba para apoyarla en el culo y mirar entre los botones de su blusa.
Guardé bien esa imagen en mi cabeza. Entré al baño para refrescarme la cara y bajar un poco el calentón. Al salir encontré el uniforme de Dani tirado en el suelo y a ella esperándome en la cama boca abajo mientras revisaba el celular.
Que cinturita
Que culito
Que concha hermosa se le adivinaba entre el huequito que dejaba el pliegue entre sus nalgas
Por supuesto que me seguía provocando y por supuesto que lo estaba logrando. No quería cometer locuras y decidí meterme a la cama yo también. Desnudo para ir practicando dos cosas, aguantar frío y aguantar las ganas de partir a una pendeja hermosa.
- Hasta mañana prima
- Y mi besito de besito de buenas noches? -respondió sin despegar la mirada del teléfono
- Volteate -respondí
- Hoy lo quiero en los labios -respondió todavía boca abajo y con la mirada en el teléfono- lo que sí hizo fue levantar el culo. Arquear la espalda y separa un poco las piernas
- Ahora sí me puedes dar las buenas noches en los labios -remató con sorna
HIJA DE PUTA
Me estaba volviendo loco. Pero qué son esta vistas Dios mío? Mi prima en cuatro, arqueando la espalda y abriendo las piernas mientras inocentemente me invita a besarle los labios. Esa pendeja lo que quería era pija, pija pija y más pija por puta. Aggggggh. Estaba loco, no sabía qué hacer. Quería cogérmela, comerle la concha, romperle el culo. Quería todo y toda la tenía a mi disposición.
Respiré profundo. Despejé la mente y le di una pequeña palmada en culo.
- Cuando te desocupes te despides -dije aguantándome todo lo que en realidad sentía y quería hacer.
Dani se sorprendió porque de inmediato se volteó con cara de circunstancias, no podía dejar de mirarme mientras yo actuaba como si no estuviera agitado, simulando calma total y acomodándome junto a ella en la cama.
No sé cómo. Tal vez estaba muy cansando. Tal vez sólo quería despejarme un poco de todo eso. Lo cierto es que me dormí.
El tranquilo sonido de un río acompañaba mi noche. Que relajante. El fluir del agua se sentía por todas partes. El río estaba crecido, se sentía chispotear. Estaba soñando con el viaje y era bastante relajante. Se sentía bien, cómodo, rico, delicioso, excitante. Húmedo.
Húmedo?
Abrí los ojos y el liquido preseminal se sentía bajar suavemente mientras el chispoteo del río llegaba hasta mi habitación. Me giré en la cama y me encontré con Dani en la cama. Piernas abiertas, ojos cerrados. Una mano en las tetas y la otra en la concha.
Más líquido preseminal. Dani seguía entregada y yo sin saberlo ya estaba a punto de correrme. Ni cuenta me di de cuándo había empezado a masturbarme yo también pero esto era demasiado para mi. Acabé sobre mi mano llenándola por completo.
Por la intensidad de sus convulsiones adivinaba que mi prima estaba alcanzando su propio placer. Acerqué dos dedos a su boca. Ella aún con los ojos cerrados sintió el olor que desprendía mi mano y al reconocerlo abrió su boca con placer. Un pequeño pase con la lengua para saborear y de apoco se iba metiendo cada uno de sus dedos para saborear el líquido y gemía mientras lo hacía. No dejó ni una sola gota. Abrí la mano por completo y se la planté en cara llenándole el rostro del semen que quedaba sobre la palma de mi mano y ella no había alcanzado a tragar.
dani seguía en lo suyo y un fuerte gemido inundó la habitación, supe que había acabado, se relamió hasta donde alcanzaba su pequeña lengua y me regaló una sonrisa. Con la cara llena de lecha se acercó a mi pecho, acomodó su cabeza y soltó un “hasta mañana primito”. Cayó profunda y profunda adivinaba yo su concha.
Al despertar estaba solo. Seguramente Dani había salido temprano porque era viernes y debía trabajar. Yo no tenía pendientes para esa mañana así que estuve mirando tiquetes para lo que podría ser el viaje de mi vida.
El spam del coreo electrónica me recordaba que justo hoy era BlackFriday. Si las cosas iban bien con la visita de Susan y sus padres, este mismo domingo empezaríamos la travesía. Las ofertas se extendían hasta el medio día así que no aguanté la tentación de reservar dos tiquetes con rebaja. No conocía los datos personales de ella pero daba igual, después se cambiaba al pasajero.
El resto del día lo dediqué a ver un par de capítulos de Supervivencia al desnudo y a releer los apuntes de mi siempre confiable libro del Manual de supervivencia de SAS. Todo estaba listo. Un par de mudas para el viaje, artículos de aseo personal. Un único par de Tenis, y básicamente lo necesario para los viajes de ida y regreso.
No había llegado a pensar en esto, pero en el programa una camioneta lleva a los participantes hasta el punto de inicio y ellos se despojan de sus cosas y las vuelven a dejar en la camioneta. Nosotros no íbamos a contar con esas comodidades, así que fui a la tienda y compré dos candados de clave.
Ahora sí estaba todo preparado, tanto así que no me lo alcanzaba ni a creer. Llevaba hora y media mirando hacia el techo sin conciliar el sueño.
Pajita y a dormir? Definitivamente no. Sabía que por la calentura de la noche anterior estaba bien cargado. De esas cosas que no quieres desperdiciar lo que sabes que será una buena corrida en una solitaria paja y prefieres guardarla para disfrutarla en compañía.
Otra vez KFC para el almuerzo. Faltaba poco para la llegada de Susan y sus padres y no quería ensuciar la casa cocinando solo para mí. Una buena ducha con agua fría para despejarme un poco de tanto pensamiento sexual y después a matar el tiempo con las redes sociales
Entretenido estaba en el computador cuando suena el timbre. Era Susan…
Continuará
Capítulo II http://www.poringa.net/posts/relatos/3912588/Supervivencia-al-desnudo-II.html
Capítulo III http://www.poringa.net/posts/relatos/3998339/Supervivencia-al-desnudo-III.html
SUPERVICENCIA AL DESNUDO IV
Me acerqué a mi prima que estaba increíblemente provocativa con ese uniforme de colegio. Y es que no era cualquier uniforme. Era una puti colegiala.
Dani? Susan? No se cual de las dos pero de inmediato me le lancé.
Ya le estaba agarrando el culo con las dos manos, comiéndole el cuello y la erección se la apoyaba en el abdomen. Estaba poseído. Estaba endemoniado. Estaba caliente y frente a mi tenía la encarnación de todo aquello que por días me había tenido así.
Subí para comerle la boca pero reaccioné. Iba a besar a mi prima pensando que era otra persona (o tal vez por eso mismo estaba tan caliente, porque era mi prima). Me detuve. Le susurré casi rozando su boca con la mía.
- Me vas a volver loco
- sabía que te ibas a calentar cuando vieras a Susan como una lolita -dijo
- Vas a tener que poner cuidado porque me pongo bruto y después no respondo ni por la familia
- La semana pasada estaba más ligerita y no me hiciste nada -dijo mirándome desafiante
- La semana pasada no tenía esta calentura encima -respondí mientras la giraba para apoyarla en el culo y mirar entre los botones de su blusa.
Guardé bien esa imagen en mi cabeza. Entré al baño para refrescarme la cara y bajar un poco el calentón. Al salir encontré el uniforme de Dani tirado en el suelo y a ella esperándome en la cama boca abajo mientras revisaba el celular.
Que cinturita
Que culito
Que concha hermosa se le adivinaba entre el huequito que dejaba el pliegue entre sus nalgas
Por supuesto que me seguía provocando y por supuesto que lo estaba logrando. No quería cometer locuras y decidí meterme a la cama yo también. Desnudo para ir practicando dos cosas, aguantar frío y aguantar las ganas de partir a una pendeja hermosa.
- Hasta mañana prima
- Y mi besito de besito de buenas noches? -respondió sin despegar la mirada del teléfono
- Volteate -respondí
- Hoy lo quiero en los labios -respondió todavía boca abajo y con la mirada en el teléfono- lo que sí hizo fue levantar el culo. Arquear la espalda y separa un poco las piernas
- Ahora sí me puedes dar las buenas noches en los labios -remató con sorna
HIJA DE PUTA
Me estaba volviendo loco. Pero qué son esta vistas Dios mío? Mi prima en cuatro, arqueando la espalda y abriendo las piernas mientras inocentemente me invita a besarle los labios. Esa pendeja lo que quería era pija, pija pija y más pija por puta. Aggggggh. Estaba loco, no sabía qué hacer. Quería cogérmela, comerle la concha, romperle el culo. Quería todo y toda la tenía a mi disposición.
Respiré profundo. Despejé la mente y le di una pequeña palmada en culo.
- Cuando te desocupes te despides -dije aguantándome todo lo que en realidad sentía y quería hacer.
Dani se sorprendió porque de inmediato se volteó con cara de circunstancias, no podía dejar de mirarme mientras yo actuaba como si no estuviera agitado, simulando calma total y acomodándome junto a ella en la cama.
No sé cómo. Tal vez estaba muy cansando. Tal vez sólo quería despejarme un poco de todo eso. Lo cierto es que me dormí.
El tranquilo sonido de un río acompañaba mi noche. Que relajante. El fluir del agua se sentía por todas partes. El río estaba crecido, se sentía chispotear. Estaba soñando con el viaje y era bastante relajante. Se sentía bien, cómodo, rico, delicioso, excitante. Húmedo.
Húmedo?
Abrí los ojos y el liquido preseminal se sentía bajar suavemente mientras el chispoteo del río llegaba hasta mi habitación. Me giré en la cama y me encontré con Dani en la cama. Piernas abiertas, ojos cerrados. Una mano en las tetas y la otra en la concha.
Más líquido preseminal. Dani seguía entregada y yo sin saberlo ya estaba a punto de correrme. Ni cuenta me di de cuándo había empezado a masturbarme yo también pero esto era demasiado para mi. Acabé sobre mi mano llenándola por completo.
Por la intensidad de sus convulsiones adivinaba que mi prima estaba alcanzando su propio placer. Acerqué dos dedos a su boca. Ella aún con los ojos cerrados sintió el olor que desprendía mi mano y al reconocerlo abrió su boca con placer. Un pequeño pase con la lengua para saborear y de apoco se iba metiendo cada uno de sus dedos para saborear el líquido y gemía mientras lo hacía. No dejó ni una sola gota. Abrí la mano por completo y se la planté en cara llenándole el rostro del semen que quedaba sobre la palma de mi mano y ella no había alcanzado a tragar.
dani seguía en lo suyo y un fuerte gemido inundó la habitación, supe que había acabado, se relamió hasta donde alcanzaba su pequeña lengua y me regaló una sonrisa. Con la cara llena de lecha se acercó a mi pecho, acomodó su cabeza y soltó un “hasta mañana primito”. Cayó profunda y profunda adivinaba yo su concha.
Al despertar estaba solo. Seguramente Dani había salido temprano porque era viernes y debía trabajar. Yo no tenía pendientes para esa mañana así que estuve mirando tiquetes para lo que podría ser el viaje de mi vida.
El spam del coreo electrónica me recordaba que justo hoy era BlackFriday. Si las cosas iban bien con la visita de Susan y sus padres, este mismo domingo empezaríamos la travesía. Las ofertas se extendían hasta el medio día así que no aguanté la tentación de reservar dos tiquetes con rebaja. No conocía los datos personales de ella pero daba igual, después se cambiaba al pasajero.
El resto del día lo dediqué a ver un par de capítulos de Supervivencia al desnudo y a releer los apuntes de mi siempre confiable libro del Manual de supervivencia de SAS. Todo estaba listo. Un par de mudas para el viaje, artículos de aseo personal. Un único par de Tenis, y básicamente lo necesario para los viajes de ida y regreso.
No había llegado a pensar en esto, pero en el programa una camioneta lleva a los participantes hasta el punto de inicio y ellos se despojan de sus cosas y las vuelven a dejar en la camioneta. Nosotros no íbamos a contar con esas comodidades, así que fui a la tienda y compré dos candados de clave.
Ahora sí estaba todo preparado, tanto así que no me lo alcanzaba ni a creer. Llevaba hora y media mirando hacia el techo sin conciliar el sueño.
Pajita y a dormir? Definitivamente no. Sabía que por la calentura de la noche anterior estaba bien cargado. De esas cosas que no quieres desperdiciar lo que sabes que será una buena corrida en una solitaria paja y prefieres guardarla para disfrutarla en compañía.
Otra vez KFC para el almuerzo. Faltaba poco para la llegada de Susan y sus padres y no quería ensuciar la casa cocinando solo para mí. Una buena ducha con agua fría para despejarme un poco de tanto pensamiento sexual y después a matar el tiempo con las redes sociales
Entretenido estaba en el computador cuando suena el timbre. Era Susan…
Continuará
3 comentarios - Supervivencia al desnudo IV