Después de la enfiestada que nos pegamos mi mama, su amiga y yo, la relación que teníamos con mama empezó a cambiar bastante, ella ya había perdido todo tipo de verguenza o pudor para con nuestra relación y la verdad la cosa estaba mas caliente día a día.
Ya era costumbre garchar casi todos los días, a cualquier hora y en cualquier lugar de la casa, solo era necesario que alguno de los dos prendiera una chispa para hacer explotar un sexo salvaje y descontrolado.
Mi mama ya se había convertido en mi puta y yo era su juguete, nos usábamos mutuamente. Había días en que yo la dominaba y la hacía mía por completo y días en los que ella me usaba para su satisfacción. Por lo general esos días en que me "usaba" ella me calentaba y se hacía rogar después, pero siempre terminaba con una buena garchada.
Si bien no es la historia principal del relato, sí grafica la locura sexual en la que se había convertido la cosa. Un domingo almorzando el típico asado, y después de varias botellas de vino entre los tres, mi papa se fue a acostar la siesta. Estábamos los 3 bastante borrachos y yo me quedé a "ayudar" a mama a levantar la mesa y demás.
Obvio los manoseos eran constantes entre ambos, nos besábamos y la cosa ya se estaba poniendo muy caliente. En una de esas mama se arrodilló frente a mi, me bajo los pantalones y me empezó a pegar una mamada tremenda, me devoraba la pija de una forma exquisita.
Yo ya estaba re caliente mal, si me seguía peteando unos minutos era seguro que la iba a llenar de leche, y ella lo sabía, pero frenó, tenía un plan bastante mas morboso que tomarse mi leche en la cocina.
Ella se paró, y ante mi mirada se empezó a desnudar. Primero se quedó en tetas y después muy lentamente se sacó la calza que llevaba ese día y quedó en tanga frente a mi, que me la comía con los ojos.
Yo me le acerqué para obviamente pegarle una furiosa garchada pero ella me frenó en seco.
Mama: no no, si queres esta colita va a tener que ser en la cama.
Yo: uhhh, bueno ma, vamos a mi cuarto y te hago la cola como a vos te gusta... (amagué a llevarla a mi habitación).
Mama: no.... en mi cama tiene que ser (ella se mordía los labios).
Yo: Que?!?! Esta papa ahí?!? Sos loca vos?
Mama: Bueno si no querés anda a hacerte una pajita al baño, yo cuando el se despierte le pido que me coja ya que vos no querés....
Yo: jaaaaa vos queres una buena verga, no esa de juguete (la agarré con intenciones de tomar el control de la situación y garcharmela ahí nomás, pero ella de forma brusca me freno)
Mama: que haces?!?! me volves a desafiar y te quedar sin mi culo para siempre pendejo.... está claro?
Yo: (con un poco de verguenza) si perdón....
Mama: bueno... yo me voy a mi habitación, si querés ir todo bien, sino nos vemos mañana, chau
Yo me quedé ahí parado viendo como mama se iba meneando ese hermoso orto entangado mientras subía lentamente la escalera. Me quedé un rato cortado y pensando, no sabía que hacer. Por un lado me daba vergüenza, miedo de que papa se despertara, y por otro tenía una calentura tremenda, no solo el pete que me había hecho me había calentado, sino que la situación de que sea tan trola me ponía como loco.
Decidí subir y pegar un vistazo. Cuando llegué a la puerta de la habitación de ellos la puerta estaba abierta. Miré el panorama y mi papa estaba de costado durmiendo (parecía desmayado) y mama estaba acostada boca arriba, con las piernas abiertas y masturbándose frenéticamente con los ojos cerrados.
Yo pase de estar caliente a prenderme fuego con esa situación y decidí acercarme sin hacer ruido y sorprender a mama de alguna forma. Estando ya muy cerca de ella y pensando no se había dado cuenta de que estaba ahí, ella me sorprendió. Abrió los ojos y me miró fijo, primero a los ojos y después directo a mi pija, se mordió los labios y me hizo señas de que me acueste encima de ella (onda pose del misionero digamos).
Yo dudé unos segundos pero la calentura era mucha. Muy suave para no despertar a papa me acosté encima de ella, que abrió mas las piernas para dejarme entrar, y la penetré sin más, lento pero profundo me fui como deslizando dentro de su concha que estaba mojadisima. Ella solo atinó a abrir un poco mas las piernas para que la penetración sea mas profunda y empezó a transarme con ganas.
Estuvimos un rato garchando de esa forma hasta que ella me dijo al oído "haceme la cola amor".... Yo en esa posición y rápido saque mi pija de su concha y la enfile hacia su culo pero me freno y murmurando me dijo "así no, en 4 quiero".
Me levanté, ella se acomodó en 4 sobre la cama y quedando su culo hacia el costado en donde estaba yo digamos, le di una lamida rápida para lubricar un poquito y enseguida enfile mi pija hacia su culito, se la apoyé y ejercí presión. Como siempre que tiene muchas ganas de que le haga el culo, mi pija entró muy fácil, el culo de mama se dilata rápido cuando tiene ganas.
Ya con toda mi pija adentro de su culo la empecé a penetrar con ganas y hasta el fondo. Yo notaba que ella todo el tiempo miraba a papa mientras yo le pegaba una linda enculada, como que se calentaba mirándolo a el, y la verdad a mi me empezó a calentar también la situación de estar haciéndole el culo a mama frente a él (aunque estuviera dormido).
Agarré a mama de los pelos, la hice levantar y dimos la vuelta a la cama, ahora habíamos quedado del lado de la cama hacia donde "miraba" papa. La hice arrodillar en el piso, y teniéndola aún agarrada del pelo, dirigí su cara lo mas cerca de la de mi papa (tampoco muy pagadas para que no se despertara, pero si lo suficiente para que mama lo vea fijo mientras yo la enculaba de lo lindo).
Ella arrodillada y yo casi parado y agarrándola de los pelos, me fui agachando a la altura de su culo y me dejé caer. Le pegué una penetrada anal bastante fuerte y rápida mientras mama trataba de aguantar los gemidos y lo miraba fijo a papa.
En esa posición bombee su culo unos minutos, con ganas, fuerza y locura, hasta que llegó lo inevitable y empecé a llenarle el culo de leche mal. Me quedé dentro de ella un rato y se la saqué rápido para que el culo no se le cierre enseguida. Aprecié unos segundos como le había dejado el orto y la hice parar y mientras ella seguía mirando a papa dormir le empecé a decir al oído "te gusta que te rompa el orto frente al cornudo? (ella movía la cabeza contestando que si) "queres que te vuelva a garchar con el presente algún día?" (con mas ganas movía la cabeza diciendo que si)... "bueno puta, organiza vos cuando quieras y vengo a garcharte adelante de el... ahhh y otra cosa, hoy no te bañas, quiero que te quedé el olor a mi pija y mi leche en el culo todo el día".... (ella solo decía que si a todo lo que le decía). Agarré la tanga de ella que estaba tirada en la cama y se la metí en el culo como haciendo un tapón digamos, le di una linda transada y le dije "vas a dormir así, espero mañana siga estando en su lugar". Ella no dijo nada y yo me fui a mi cuarto.
A la mañana siguiente ni bien se fue papa a trabajar ella fue a despertarme y mientras me despabilaba un poco se bajó el pijama, poniéndose de espaldas me mostró la tanga aún metida en el culo como le había ordenado y me dijo "ya me la puedo sacar?" Yo me reí un poco y le dije que si, ni me acordaba ya de ese delirio que le había hecho hacer, pero se ve que a ella le había gustado ese nivel de perversión.
Cuando terminó de sacarse la tanga del culo dio un suspiro de alivio y me dijo que iba al baño, que después me preparaba el desayuno.
Esa semana solo nos echamos un polvo, yo estaba con muchas actividades de la facultad y la verdad no encontrábamos los momentos. Por suerte a la siguiente semana entraba en receso, eran las vacaciones de invierno, asique esperaba garcharme a mama todos los días, pero había algo que no tenía en mente, papa también tenía vacaciones y 2 semanas encima, es decir que mis chances de estar a solas con mama se diluían mal.
La primer semana de vacaciones fue un garrón mal, mi papa estaba todo el día en casa y no encontraba un solo momento para abordar a mama, que también se la notaba bastante desesperada por sexo pero no podíamos, era jugarnos demasiado.
Llegado el viernes de esa semana, y mientras estudiaba en mi dormitorio, escucho que papa y mama hablaban en su habitación. Paré un poco la oreja y alcancé a escuchar un poco
Mama: foooo, me vas a dejar sola toda la semana?
Papa: Bueno, nose, si queres no voy, pero viste que hace mucho no vamos a pescar con Martín y estuvo insistiendo mucho estos días. (Martín es el marido de Lucía la amiga de mama con la que nos enfiestamos).
Mama: Si es verdad... bueno anda, pero portate bien...
Papa: pero siiiiii... y vos también (lo dijo ya bajando un poco la voz).
Mama: pero si... además está Andy que voy a hacer.
La charla terminó ahí y yo me quedé intrigado, aunque algo me imaginaba y cuando pude la "increpé" a mama.
Yo: ma, que es eso de que papa se va a pescar? Es cierto?
Mama: y a vos que te importa...
Yo: me importa porque no doy mas de las ganas de hacerte la cola ma.... y lo sabes...
Mama: jajaja... bueno si, se va toda la semana que viene con Martín.
Yo: eso quiere decir que vas a ser mía toda la semana?
Mama: tuya?!?! anda a estudiar para adelantar un poco si tenes intenciones de hacer algo la semana que viene, porque ya se vienen tus exámenes.
Yo: (con cara de felicidad y murmurando le dije) Como te voy a garchar la semana que viene!!!
Me fui a estudiar como ella dijo y a pesar de pensar a cada rato en la semana siguiente algo pude estudiar.
El lunes a la mañana papa se fue con Martín a unas cabañas a "pescar" según dijeron, aunque mucho no me interesaba, lo único que quería era tener a mama a solas. Ni bien se fueron yo abordé a mama y me la transe como loco mientras la manoseaba entera, estaba con abstinencia mal.
Mama: para nene!!!!
Yo: no doy mas ma... quiero comerte toda ya.
Mama: no, mas tarde, ahora acompáñame al supermercado así compramos cosas para la semana, porque no te vamos a dejar salir de acá pendejito (y se reía a carcajadas).
Yo no había entendido bien que me había dicho ella, pero había deslizado una frase que no tuve en cuenta "no te vamos" era plural la cosa.
Como de costumbre cuando anda en trola, se puso una de esas calzas asesinas que le dibujan a la perfección el culo y una remera, sweater y campera que no le llegaban a tapar el culo, lo iba a exhibir bien, quería que la miren.
Cuando estábamos por salir me dijo que agarre las llaves del auto que me tocaba manejar, y ante mi pregunta de porque en auto me dijo que íbamos a compara muchas cosas y no podíamos cargar todo sino. Mientras ibamos en camino al supermercado ella se iba mensajeando con alguien, pero no me dijo con quien.
Ya en el supermercado ella llevaba el changuito y era objeto de miradas de todos, sobre todo cuando se apoyaba en el carro y dejaba ver en plenitud ese hermoso orto partido al medio por la calza que tenía puesta. Mientras estabamos terminando la provista (que era en su mayoría comida, chocolates, y cosas de ese estilo), aparece frente a nosotros Lucía la amiga de mama.
Lucía: Hola!!!!!! (nos da un beso a cada uno en la mejilla).
Mama: nosotros ya casi terminamos, vos tenés todo ya?
Lucía: si creo ya estoy.
Yo miré el chango de Lucía y estaba repleto de bebidas, sobre todo vino y champagne, caros todos, buenas marcas, algunos incluso que nunca había tomado yo porque eran muy caros para mi presupuesto, aunque a Lucía la plata le sobraba.
Yo que todavía no había caído en la cuenta de que pasaba dije
Yo: a la mierda tía!!! Vas a hacer una fiesta? jajaja
Lucía: (la miró medio desconcertada a mama y dijo) que? no sabe nada?
Mama: no, no le dije nada (con cara de pícara).
Lucía: hay pendejito.... a vos te vamos a enfiestar
(ellas se empezaron a reir a carcajadas mientras yo, seguro con cara de boludo, caía en la cuenta de lo que pasaba).
Yo: jodeme!!! 1 semana con ustedes dos?!?!?!
Mama: si por? tenés miedo?
Yo: un poco si, son muy fogosas las dos juntas jajaja (obvio era en chiste ya).
Mama: te vamos a tratar bien, no tengas miedo mi amor....
Yo: seguro que si... bueno, lleven analgésicos porque las voy a dejar de cama a las dos
Lucía: miralo vos al pendejito jajajaj... no sabes con quienes tratas...
Yo: hay que descubrirlo... bueno, vamos porque lo que quiero hacer aca no podemos.
Pagaron las compras y los 3 nos fuimos en nuestro auto (Lucía había ido en taxi) rumbo a casa. El trayecto fue normal, pero cuando llegamos las empecé a tratar como mis perras, mis putitas, mis esclavas (ese día por lo menos).
Mientras ellas bajaban las compras yo estaba en la cocina sin pantalones y cada vez que ellas traían una bolsa con compras las hacía chuparme la pija un rato, como si fuera un premio a su trabajo de bajar las cosas.
Después y mientras ellas ordenaban un poco las compras yo me ponía atrás de ellas y las manoseaba, las dedeaba masturbándolas un rato a cada una y me las transaba todo el tiempo.
La cosa se estaba descontrolando y recién era lunes al medio día.
Por culpa de la franeleada se demoraron un poco en ordenar las compras, pero cuando terminaron les dije "bueno putitas, ahora vamos al dormitorio que les quiero comer la conchita".
Ellas salieron disparadas como dos adolescentes calientes, y yo atrás de ellas obvio desesperado mal.
Ya en el dormitorio se tiraron en la cama y mientras jugaban entre ellas me acerque y las empecé a desvestir.
Ya desnudas las dos empecé a comerle la concha a Lucía. Nose si estaba muy necesitado de sexo o que pero me deleitaba comiéndola. Después fue el turno de mama, y la cosa seguía igual, estaba sacado. Creo que nunca le había metido la lengua tan adentro de la concha. De a ratos tenía que frenar para poder respirar un poco y después seguía y seguía comiéndome un rato a cada una.
Ya sacado mal y seguro con cara de degenerado, me agarré la pija y apuntando hacia ellas les dije "quien me la chupa". Obvio las dos se abalanzaron a comerme la verga. Las notaba tan desesperadas comiendome la pija como cuando yo comía sus conchas... era hermoso, sublime, increíble el pedazo de mamada que me estaban dando.
Ya estabamos sacados los 3, y Lucía fue la primera en pedir que la cogiera. Se puso en 4 y al grito de "metemela" meneaba el culo y onda como si ronroneara. Yo me acerque y se la enterré de una y hasta el fondo, ante el gemido fuerte de ella, que pedía mas y mas.
Después de un rato empecé a alternar entre Lucía y mama. Las cogía en distintas posiciones pero siempre con ganas, con pasión, con locura.
Ya estando al borde de acabar las hice poner cara a cara y que ellas me saquen la leche con un buen pete, cosa que hicieron de forma maravillosa.
Nose si de la calentura o por haber estado una semana sin coger, pero la cantidad de semen que derrame en sus bocas y cara era mucha. Ellas se deleitaban y jugaban con la leche fresquita y caliente que recién me habían exprimido. Sonreían, jugaban, se transaban, era un delirio ver a esas dos hembras juntas.
Yo me quedé acostado en la cama recuperando energías y mientras ellas se vestían un poco, empezó la "planificación" de la semana digamos. Ellas me pusieron sus condiciones.
Mama: voy a preparar el almuerzo, vos nena explicale como va a ser esto queres?
Lucía: si dale, yo le explico.
Mama se fue a la cocina y Lucía empezó a explicar y poner las condiciones. Resulta que la que insistió con que los maridos vayan a pescar fue ella (obvio sin que los otros dos se dieran cuenta de sus intensiones y además siempre coordinado con mi mama).
Me dijo que si bien el polvito de bienvenida había sido free style, es decir que me dejaron hacer lo que yo quisiera, la semana no iba a ser así, sino que yo iba a ser el juguete sexual de ellas dos, ya sea por separado o los 3 juntos, que todo el tiempo iba a tener que estar disponible para ellas y para lo que ellas quisieran y como quisieran. Y remató con un "si no te va la idea me voy con tu mama a mi casa y buscamos a otro".
Yo pensé, son mas trolas de lo que pensé, pero me encantó la idea y acepté rendirme a sus condiciones.
Después de almorzar ya empezó el juego de ellas. Mientras estaban de sobre mesa me hicieron meterme abajo de la mesa y darles sexo oral un rato a cada una "para hacer mejor la digestión" según dijeron ellas.
Ese día la pasamos casi todo el tiempo en pelotas los 3 (a mi obvio me lo pusieron como condición) y ellas de a ratos se me acercaban y me ordenaban algo, ya sea darles sexo oral, cogerlas, mirarlas como se tocaban o tenían sexo entre ellas, etc etc, Estaban sacadas las dos y estuve casi la tarde entera cogiendo un rato a cada una y por orden de ellas.
Al final el que iba a necesitar analgésicos era yo, me estaban matando las dos veteranas. A las 9 de la noche de ese día no daba mas, estaba desecho de tanto coger y me fui a dormir, pero a las 4 de la mañana me desperté con mama chupandome la pija para ponerla dura (un poco le costó no lo voy a negar, estaba medio dormido y cansado) y después me cabalgó un rato largo hasta que se cansó y se acostó a dormir al lado mío. Yo volví a "desmayarme" del sueño hasta la mañana siguiente en que siguió la joda (por suerte me dejaron dormir hasta pasadas las 11 para recuperar energías). Ellas parecían estar frescas y sin cansancio aparente y para dejarme reponer fuerzas fuimos a un shoping así se compraban ropa (la mayoría era ropa interior) y me dejaron sentado en un banquito observando como calentaban a todos los que pasaban, ya que las dos estaban vestidas con esas calzas que les marcan el culo de forma zarpada.
En otro relato cuento como siguió la semana, que fue un delirio total, una maratón de sexo descontrolado y perversión que jamás imagine vivir.
Ya era costumbre garchar casi todos los días, a cualquier hora y en cualquier lugar de la casa, solo era necesario que alguno de los dos prendiera una chispa para hacer explotar un sexo salvaje y descontrolado.
Mi mama ya se había convertido en mi puta y yo era su juguete, nos usábamos mutuamente. Había días en que yo la dominaba y la hacía mía por completo y días en los que ella me usaba para su satisfacción. Por lo general esos días en que me "usaba" ella me calentaba y se hacía rogar después, pero siempre terminaba con una buena garchada.
Si bien no es la historia principal del relato, sí grafica la locura sexual en la que se había convertido la cosa. Un domingo almorzando el típico asado, y después de varias botellas de vino entre los tres, mi papa se fue a acostar la siesta. Estábamos los 3 bastante borrachos y yo me quedé a "ayudar" a mama a levantar la mesa y demás.
Obvio los manoseos eran constantes entre ambos, nos besábamos y la cosa ya se estaba poniendo muy caliente. En una de esas mama se arrodilló frente a mi, me bajo los pantalones y me empezó a pegar una mamada tremenda, me devoraba la pija de una forma exquisita.
Yo ya estaba re caliente mal, si me seguía peteando unos minutos era seguro que la iba a llenar de leche, y ella lo sabía, pero frenó, tenía un plan bastante mas morboso que tomarse mi leche en la cocina.
Ella se paró, y ante mi mirada se empezó a desnudar. Primero se quedó en tetas y después muy lentamente se sacó la calza que llevaba ese día y quedó en tanga frente a mi, que me la comía con los ojos.
Yo me le acerqué para obviamente pegarle una furiosa garchada pero ella me frenó en seco.
Mama: no no, si queres esta colita va a tener que ser en la cama.
Yo: uhhh, bueno ma, vamos a mi cuarto y te hago la cola como a vos te gusta... (amagué a llevarla a mi habitación).
Mama: no.... en mi cama tiene que ser (ella se mordía los labios).
Yo: Que?!?! Esta papa ahí?!? Sos loca vos?
Mama: Bueno si no querés anda a hacerte una pajita al baño, yo cuando el se despierte le pido que me coja ya que vos no querés....
Yo: jaaaaa vos queres una buena verga, no esa de juguete (la agarré con intenciones de tomar el control de la situación y garcharmela ahí nomás, pero ella de forma brusca me freno)
Mama: que haces?!?! me volves a desafiar y te quedar sin mi culo para siempre pendejo.... está claro?
Yo: (con un poco de verguenza) si perdón....
Mama: bueno... yo me voy a mi habitación, si querés ir todo bien, sino nos vemos mañana, chau
Yo me quedé ahí parado viendo como mama se iba meneando ese hermoso orto entangado mientras subía lentamente la escalera. Me quedé un rato cortado y pensando, no sabía que hacer. Por un lado me daba vergüenza, miedo de que papa se despertara, y por otro tenía una calentura tremenda, no solo el pete que me había hecho me había calentado, sino que la situación de que sea tan trola me ponía como loco.
Decidí subir y pegar un vistazo. Cuando llegué a la puerta de la habitación de ellos la puerta estaba abierta. Miré el panorama y mi papa estaba de costado durmiendo (parecía desmayado) y mama estaba acostada boca arriba, con las piernas abiertas y masturbándose frenéticamente con los ojos cerrados.
Yo pase de estar caliente a prenderme fuego con esa situación y decidí acercarme sin hacer ruido y sorprender a mama de alguna forma. Estando ya muy cerca de ella y pensando no se había dado cuenta de que estaba ahí, ella me sorprendió. Abrió los ojos y me miró fijo, primero a los ojos y después directo a mi pija, se mordió los labios y me hizo señas de que me acueste encima de ella (onda pose del misionero digamos).
Yo dudé unos segundos pero la calentura era mucha. Muy suave para no despertar a papa me acosté encima de ella, que abrió mas las piernas para dejarme entrar, y la penetré sin más, lento pero profundo me fui como deslizando dentro de su concha que estaba mojadisima. Ella solo atinó a abrir un poco mas las piernas para que la penetración sea mas profunda y empezó a transarme con ganas.
Estuvimos un rato garchando de esa forma hasta que ella me dijo al oído "haceme la cola amor".... Yo en esa posición y rápido saque mi pija de su concha y la enfile hacia su culo pero me freno y murmurando me dijo "así no, en 4 quiero".
Me levanté, ella se acomodó en 4 sobre la cama y quedando su culo hacia el costado en donde estaba yo digamos, le di una lamida rápida para lubricar un poquito y enseguida enfile mi pija hacia su culito, se la apoyé y ejercí presión. Como siempre que tiene muchas ganas de que le haga el culo, mi pija entró muy fácil, el culo de mama se dilata rápido cuando tiene ganas.
Ya con toda mi pija adentro de su culo la empecé a penetrar con ganas y hasta el fondo. Yo notaba que ella todo el tiempo miraba a papa mientras yo le pegaba una linda enculada, como que se calentaba mirándolo a el, y la verdad a mi me empezó a calentar también la situación de estar haciéndole el culo a mama frente a él (aunque estuviera dormido).
Agarré a mama de los pelos, la hice levantar y dimos la vuelta a la cama, ahora habíamos quedado del lado de la cama hacia donde "miraba" papa. La hice arrodillar en el piso, y teniéndola aún agarrada del pelo, dirigí su cara lo mas cerca de la de mi papa (tampoco muy pagadas para que no se despertara, pero si lo suficiente para que mama lo vea fijo mientras yo la enculaba de lo lindo).
Ella arrodillada y yo casi parado y agarrándola de los pelos, me fui agachando a la altura de su culo y me dejé caer. Le pegué una penetrada anal bastante fuerte y rápida mientras mama trataba de aguantar los gemidos y lo miraba fijo a papa.
En esa posición bombee su culo unos minutos, con ganas, fuerza y locura, hasta que llegó lo inevitable y empecé a llenarle el culo de leche mal. Me quedé dentro de ella un rato y se la saqué rápido para que el culo no se le cierre enseguida. Aprecié unos segundos como le había dejado el orto y la hice parar y mientras ella seguía mirando a papa dormir le empecé a decir al oído "te gusta que te rompa el orto frente al cornudo? (ella movía la cabeza contestando que si) "queres que te vuelva a garchar con el presente algún día?" (con mas ganas movía la cabeza diciendo que si)... "bueno puta, organiza vos cuando quieras y vengo a garcharte adelante de el... ahhh y otra cosa, hoy no te bañas, quiero que te quedé el olor a mi pija y mi leche en el culo todo el día".... (ella solo decía que si a todo lo que le decía). Agarré la tanga de ella que estaba tirada en la cama y se la metí en el culo como haciendo un tapón digamos, le di una linda transada y le dije "vas a dormir así, espero mañana siga estando en su lugar". Ella no dijo nada y yo me fui a mi cuarto.
A la mañana siguiente ni bien se fue papa a trabajar ella fue a despertarme y mientras me despabilaba un poco se bajó el pijama, poniéndose de espaldas me mostró la tanga aún metida en el culo como le había ordenado y me dijo "ya me la puedo sacar?" Yo me reí un poco y le dije que si, ni me acordaba ya de ese delirio que le había hecho hacer, pero se ve que a ella le había gustado ese nivel de perversión.
Cuando terminó de sacarse la tanga del culo dio un suspiro de alivio y me dijo que iba al baño, que después me preparaba el desayuno.
Esa semana solo nos echamos un polvo, yo estaba con muchas actividades de la facultad y la verdad no encontrábamos los momentos. Por suerte a la siguiente semana entraba en receso, eran las vacaciones de invierno, asique esperaba garcharme a mama todos los días, pero había algo que no tenía en mente, papa también tenía vacaciones y 2 semanas encima, es decir que mis chances de estar a solas con mama se diluían mal.
La primer semana de vacaciones fue un garrón mal, mi papa estaba todo el día en casa y no encontraba un solo momento para abordar a mama, que también se la notaba bastante desesperada por sexo pero no podíamos, era jugarnos demasiado.
Llegado el viernes de esa semana, y mientras estudiaba en mi dormitorio, escucho que papa y mama hablaban en su habitación. Paré un poco la oreja y alcancé a escuchar un poco
Mama: foooo, me vas a dejar sola toda la semana?
Papa: Bueno, nose, si queres no voy, pero viste que hace mucho no vamos a pescar con Martín y estuvo insistiendo mucho estos días. (Martín es el marido de Lucía la amiga de mama con la que nos enfiestamos).
Mama: Si es verdad... bueno anda, pero portate bien...
Papa: pero siiiiii... y vos también (lo dijo ya bajando un poco la voz).
Mama: pero si... además está Andy que voy a hacer.
La charla terminó ahí y yo me quedé intrigado, aunque algo me imaginaba y cuando pude la "increpé" a mama.
Yo: ma, que es eso de que papa se va a pescar? Es cierto?
Mama: y a vos que te importa...
Yo: me importa porque no doy mas de las ganas de hacerte la cola ma.... y lo sabes...
Mama: jajaja... bueno si, se va toda la semana que viene con Martín.
Yo: eso quiere decir que vas a ser mía toda la semana?
Mama: tuya?!?! anda a estudiar para adelantar un poco si tenes intenciones de hacer algo la semana que viene, porque ya se vienen tus exámenes.
Yo: (con cara de felicidad y murmurando le dije) Como te voy a garchar la semana que viene!!!
Me fui a estudiar como ella dijo y a pesar de pensar a cada rato en la semana siguiente algo pude estudiar.
El lunes a la mañana papa se fue con Martín a unas cabañas a "pescar" según dijeron, aunque mucho no me interesaba, lo único que quería era tener a mama a solas. Ni bien se fueron yo abordé a mama y me la transe como loco mientras la manoseaba entera, estaba con abstinencia mal.
Mama: para nene!!!!
Yo: no doy mas ma... quiero comerte toda ya.
Mama: no, mas tarde, ahora acompáñame al supermercado así compramos cosas para la semana, porque no te vamos a dejar salir de acá pendejito (y se reía a carcajadas).
Yo no había entendido bien que me había dicho ella, pero había deslizado una frase que no tuve en cuenta "no te vamos" era plural la cosa.
Como de costumbre cuando anda en trola, se puso una de esas calzas asesinas que le dibujan a la perfección el culo y una remera, sweater y campera que no le llegaban a tapar el culo, lo iba a exhibir bien, quería que la miren.
Cuando estábamos por salir me dijo que agarre las llaves del auto que me tocaba manejar, y ante mi pregunta de porque en auto me dijo que íbamos a compara muchas cosas y no podíamos cargar todo sino. Mientras ibamos en camino al supermercado ella se iba mensajeando con alguien, pero no me dijo con quien.
Ya en el supermercado ella llevaba el changuito y era objeto de miradas de todos, sobre todo cuando se apoyaba en el carro y dejaba ver en plenitud ese hermoso orto partido al medio por la calza que tenía puesta. Mientras estabamos terminando la provista (que era en su mayoría comida, chocolates, y cosas de ese estilo), aparece frente a nosotros Lucía la amiga de mama.
Lucía: Hola!!!!!! (nos da un beso a cada uno en la mejilla).
Mama: nosotros ya casi terminamos, vos tenés todo ya?
Lucía: si creo ya estoy.
Yo miré el chango de Lucía y estaba repleto de bebidas, sobre todo vino y champagne, caros todos, buenas marcas, algunos incluso que nunca había tomado yo porque eran muy caros para mi presupuesto, aunque a Lucía la plata le sobraba.
Yo que todavía no había caído en la cuenta de que pasaba dije
Yo: a la mierda tía!!! Vas a hacer una fiesta? jajaja
Lucía: (la miró medio desconcertada a mama y dijo) que? no sabe nada?
Mama: no, no le dije nada (con cara de pícara).
Lucía: hay pendejito.... a vos te vamos a enfiestar
(ellas se empezaron a reir a carcajadas mientras yo, seguro con cara de boludo, caía en la cuenta de lo que pasaba).
Yo: jodeme!!! 1 semana con ustedes dos?!?!?!
Mama: si por? tenés miedo?
Yo: un poco si, son muy fogosas las dos juntas jajaja (obvio era en chiste ya).
Mama: te vamos a tratar bien, no tengas miedo mi amor....
Yo: seguro que si... bueno, lleven analgésicos porque las voy a dejar de cama a las dos
Lucía: miralo vos al pendejito jajajaj... no sabes con quienes tratas...
Yo: hay que descubrirlo... bueno, vamos porque lo que quiero hacer aca no podemos.
Pagaron las compras y los 3 nos fuimos en nuestro auto (Lucía había ido en taxi) rumbo a casa. El trayecto fue normal, pero cuando llegamos las empecé a tratar como mis perras, mis putitas, mis esclavas (ese día por lo menos).
Mientras ellas bajaban las compras yo estaba en la cocina sin pantalones y cada vez que ellas traían una bolsa con compras las hacía chuparme la pija un rato, como si fuera un premio a su trabajo de bajar las cosas.
Después y mientras ellas ordenaban un poco las compras yo me ponía atrás de ellas y las manoseaba, las dedeaba masturbándolas un rato a cada una y me las transaba todo el tiempo.
La cosa se estaba descontrolando y recién era lunes al medio día.
Por culpa de la franeleada se demoraron un poco en ordenar las compras, pero cuando terminaron les dije "bueno putitas, ahora vamos al dormitorio que les quiero comer la conchita".
Ellas salieron disparadas como dos adolescentes calientes, y yo atrás de ellas obvio desesperado mal.
Ya en el dormitorio se tiraron en la cama y mientras jugaban entre ellas me acerque y las empecé a desvestir.
Ya desnudas las dos empecé a comerle la concha a Lucía. Nose si estaba muy necesitado de sexo o que pero me deleitaba comiéndola. Después fue el turno de mama, y la cosa seguía igual, estaba sacado. Creo que nunca le había metido la lengua tan adentro de la concha. De a ratos tenía que frenar para poder respirar un poco y después seguía y seguía comiéndome un rato a cada una.
Ya sacado mal y seguro con cara de degenerado, me agarré la pija y apuntando hacia ellas les dije "quien me la chupa". Obvio las dos se abalanzaron a comerme la verga. Las notaba tan desesperadas comiendome la pija como cuando yo comía sus conchas... era hermoso, sublime, increíble el pedazo de mamada que me estaban dando.
Ya estabamos sacados los 3, y Lucía fue la primera en pedir que la cogiera. Se puso en 4 y al grito de "metemela" meneaba el culo y onda como si ronroneara. Yo me acerque y se la enterré de una y hasta el fondo, ante el gemido fuerte de ella, que pedía mas y mas.
Después de un rato empecé a alternar entre Lucía y mama. Las cogía en distintas posiciones pero siempre con ganas, con pasión, con locura.
Ya estando al borde de acabar las hice poner cara a cara y que ellas me saquen la leche con un buen pete, cosa que hicieron de forma maravillosa.
Nose si de la calentura o por haber estado una semana sin coger, pero la cantidad de semen que derrame en sus bocas y cara era mucha. Ellas se deleitaban y jugaban con la leche fresquita y caliente que recién me habían exprimido. Sonreían, jugaban, se transaban, era un delirio ver a esas dos hembras juntas.
Yo me quedé acostado en la cama recuperando energías y mientras ellas se vestían un poco, empezó la "planificación" de la semana digamos. Ellas me pusieron sus condiciones.
Mama: voy a preparar el almuerzo, vos nena explicale como va a ser esto queres?
Lucía: si dale, yo le explico.
Mama se fue a la cocina y Lucía empezó a explicar y poner las condiciones. Resulta que la que insistió con que los maridos vayan a pescar fue ella (obvio sin que los otros dos se dieran cuenta de sus intensiones y además siempre coordinado con mi mama).
Me dijo que si bien el polvito de bienvenida había sido free style, es decir que me dejaron hacer lo que yo quisiera, la semana no iba a ser así, sino que yo iba a ser el juguete sexual de ellas dos, ya sea por separado o los 3 juntos, que todo el tiempo iba a tener que estar disponible para ellas y para lo que ellas quisieran y como quisieran. Y remató con un "si no te va la idea me voy con tu mama a mi casa y buscamos a otro".
Yo pensé, son mas trolas de lo que pensé, pero me encantó la idea y acepté rendirme a sus condiciones.
Después de almorzar ya empezó el juego de ellas. Mientras estaban de sobre mesa me hicieron meterme abajo de la mesa y darles sexo oral un rato a cada una "para hacer mejor la digestión" según dijeron ellas.
Ese día la pasamos casi todo el tiempo en pelotas los 3 (a mi obvio me lo pusieron como condición) y ellas de a ratos se me acercaban y me ordenaban algo, ya sea darles sexo oral, cogerlas, mirarlas como se tocaban o tenían sexo entre ellas, etc etc, Estaban sacadas las dos y estuve casi la tarde entera cogiendo un rato a cada una y por orden de ellas.
Al final el que iba a necesitar analgésicos era yo, me estaban matando las dos veteranas. A las 9 de la noche de ese día no daba mas, estaba desecho de tanto coger y me fui a dormir, pero a las 4 de la mañana me desperté con mama chupandome la pija para ponerla dura (un poco le costó no lo voy a negar, estaba medio dormido y cansado) y después me cabalgó un rato largo hasta que se cansó y se acostó a dormir al lado mío. Yo volví a "desmayarme" del sueño hasta la mañana siguiente en que siguió la joda (por suerte me dejaron dormir hasta pasadas las 11 para recuperar energías). Ellas parecían estar frescas y sin cansancio aparente y para dejarme reponer fuerzas fuimos a un shoping así se compraban ropa (la mayoría era ropa interior) y me dejaron sentado en un banquito observando como calentaban a todos los que pasaban, ya que las dos estaban vestidas con esas calzas que les marcan el culo de forma zarpada.
En otro relato cuento como siguió la semana, que fue un delirio total, una maratón de sexo descontrolado y perversión que jamás imagine vivir.
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