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me calienta ser osada

Como de costumbre siempre visto muyyyy sexi para salir, y mas aun cuando voy a mi trabajo, lo que a mi esposo le produce celos r, un día me vestí con un pantalón blanco pegado, una tanga con pedrería y una blusa rosa escotada con un sostén muy delgado, fui al trabajo y como estaba muy caliente me agachaba para que me vieran mis compañeros, me encanta que los hombres me coman con la mirada me excita de sobre manera, estaba yo super empapada, hasta tenía miedo que se me transparentara en el pantalón, pero no fue así.

un día que me fui de compras con una amiga, me puse una minifalda super corta y una blusa sin mangas pegada lo que se marcaban perfectamente mis tetas paradas y grandes, siempre uso tacón por que realza mi figura y unas medias al muslo, me veía yo impresionante, el taxista era un tipo de 40 0 mas años, traía en la parte trasera unos trajes que dijo tenía que entregar, y que por el momento los pasaría a la cajuela, mi amiga le dijo que no había problema que nos íbamos adelante las dos, me subí yo primero y después mi amiga, por el tamaño de mi mini se me subió hasta enseñar la tanga por delante, el taxista tenía una visión completa de mis piernas, el final de mis medias y el principio de mi tanga, al cambiar velocidades rozaba mi pierna, yo estaba super caliente y mojada, cruce mi pierna sacando mi colita para que la viera mas, el no perdió el tiempo obvio cada que cambiaba de cambio me rozaba con la parte externa del a mano toda mi colita, me hice un poco más hacia atrás fingiendo que estaba incomoda, quedando toda mi colita cubierta solo por mi tanga , realmente estaba muy caliente por esa situacion , me sentia muy perra , queria llegar ya a mi casa a que mi marido me violara estaba con muchas ganas en ese momento llegamos a nuestro destino yo me acomodé la mini falda , realmente esa situacion y al ser madre me hizo sentir muy gata

Un día fui con mi esposo, al cine. Yo iba con un vestido muy corto y ceñido, de tirantes, de color azul marino, con un escote bastante grande, y unos zapatos de tacón de unos 15 cm. Además no llevaba sostén, por lo que cada vez que daba un paso o me movía un poco mis pechos se bamboleaban bastante. Debajo del vestido sólo llevaba una tanga minúscula, que era más que nada, un poco de hilo con un trozo de tela.

Bueno, en eso estábamos. Fuimos al cine y elegimos una película para adultos. En la sala casi no había gente, sólo unos cuantos hombres jóvenes. Mi esposo y yo nos sentamos en una de las filas centrales, para poder ver bien la pantalla sin que nos doliese el cuello, y empezó la película.

Conforme pasaron los minutos me fui calentando. Los protagonistas de la película tenían cuerpos espectaculares y creo que hablo en nombre de toda la sala cuando digo que me los follaría si pudiese. El caso es que cuando llegamos a la mitad de la película no pude resistirlo y le metí la mano en el pantalón a mi esposo, que se quedó un poco sorprendido pero no dijo nada. Al cabo de unos segundos pareció calentarse también y se las apañó para acariciarme los pechos por encima del vestido primero, y introduciendo los dedos por el escote y manoseándome los pezones después. Yo seguí calentándome más y más, así que bajé de mi asiento, me arrodillé frente a mi marido, le abrí la bragueta y dejé salir su enorme verga. la tenia re parada y mucho por encima del pantalón. Nada más verla terminé de ponerme caliente y empecé a lamerla, chupándole la punta y haciendo que gimiera de gusto. Cuando terminé de mamársela se corrió en mi boca y sentí el sabor de su semen en el paladar.

Me chupé los labios y después le di un beso a Héctor en los labios, noté que los hombres empezaban a mirarme con deseo lo que me hizo aumentar mi excitación al sentirme deseada. Así que antes de volver a sentarme en mi asiento, teniendo en cuenta que todos los presentes me miraban, me metí la mano por debajo del vestido y levanté un poco el hilo del tanga de mi culo. Seguidamente, sin dejar que nadie perdiera detalle, lujuriosamente me chupé el dedo que había estado en contacto con mi culo y lo relamí con gusto, poniendo cara de viciosa. A estas alturas todos estaban ya más calientes que yo y seguro que tenían ganas de cogerme. Héctor me miraba, divertido, pero también tenía una expresión libidinosa.

En mi trabajo....., el 90% de los hombres...me devoran con la mirada.... todos se fijan en mis nalgas. Yo imagino que tratan de imaginar las tangas que traigo yo solo me rio..y los dejo que me vean...al fin por ver no pasa nada...solo que no quieran tocar por que entonces si hay problema bueno si esta guapo no...yo creo que si lo dejo que me manosee.

soy fanática de las tangas e hilos dentales...por que son mas provocativas, me hacen sentir sexi y a los hombres les encanta ver como se marcan en los pantalones, lo que provoca en mi una supermega excitación, siempre uso tanguitas me encanta sentir el hilo entre mis nalgas, y a cada paso que doy disfruto como rosa en mi culito….todo esto lo hablo con mi esposo y al un poco le molesta , por sabe que en mi trabajo o en la calle suelen miarme el escote o la cola , , a mi la verdad me calienta mucho esa situacion ,
me calienta ser osada

2 comentarios - me calienta ser osada

Elpiston44
Que ganas de comer esa cola hermosa...
Mauricio_2431
me encantaria que esa boquita me extruje bien la pija.

sexy