Noche morbosa para Silvia D

Habíamos acabado Miguel C, Fernando y yo con nuestra amiga Silvia D en un after. Lo estábamos pasando muy bien y estábamos bien calientes a esas horas ya. Miguel y Fernando estaban a la caza de alguna mujer, mientras que yo me dedique a pasarlo bien con Silvia, pues se que eso no falla y menos sin estar su marido. Esta llevaba un vestido de muchos colores grises, azules y rojos, con estampados geométricos, de manga larga, hasta medio muslo, con un escote en v, con botonera delantera hasta debajo de los pechos. El vestido remarcaba sus grandes pechos y su culazo ancho. Además, llevaba unas medias negras tupidas con tiras verticales más brillantes.
No paramos de meternos mano durante el baile, acariciando sobre todo su culo. No pudimos aguantar mucho antes de meternos en un baño y cerrar uno de los departamentos. Allí mis manos se metieron por su vestido acariciando su culo con la textura de las medias. Una de mis manos subió por su cuerpo hasta acariciar, nuevamente sus tetazas. La gire y la coloque mirando la pared. La mano que acariciaba su culo se introdujo por las medias y el tanga y comenzó a jugar con su clítoris. La otra mano, desabrocho varios botones para meter la mano y acariciar sus tetazas solo tapadas por el sujetador. Silvia giro la cabeza y nos besamos mientras acariciaba mi paquete, cada vez más duro. Acabo sacándome la polla y masturbándome.
Silvia acabo arrodillándose y comenzó a hacerme una mamada maravillosa. Su lengua jugaba por toda mi polla, tanto dentro de su boca como fuera. Se desabrocho el resto de los botones, se abrió el escote y me hizo una cubana, metiéndola entre sus tetazas, cubiertos por el sujetador negro, de aro, con encaje. La textura de este me ponía más cachondo aun si cabe. Cuando me iba a correr, volvió a meterla en su boca, pasando velozmente su lengua por mi glande hasta que me corrí. Silvia trago rápido para no perder ni una gota de mi semen.
Se levanto y nos volvimos a besar y meter mano, antes de colocarnos bien la ropa y salir del baño.

En la pista nos encontramos de nuevo con Miguel y Fernando que no habían tenido mucho éxito en su búsqueda. Silvia no dudo en consolarlos besándose con ellos. Mientras fui a por unas copas para Silvia y para mí. Al regresar Silvia estaba con el paquete de Miguel agarrado, besándose con él, mientras Fernando tenía su cara dentro del escote de esta. Me coloqué detrás de ella y comencé a besarla el cuello. Metí mi mano por la falda y las medias, eché el tanguita a un lado y comencé a masturbarla el culo. Cuando la metí el dedo corazón, esta dio un gritito, de gusto y sorpresa y me miro, sonriendo pícaramente.
Tras un rato de calentón acabamos saliendo del after yéndonos a un parque cercano. Nos metimos en unos matorrales y nos volvimos a besar los 3 con ella, metiéndola bien mano. Me coloque, nuevamente tras ella y agarre sus tetazas. La desabroche los botones, abrí su escote y agarre sus tetazas. Las saque del sujetador y las aprete por abajo, mientras Fernando y Miguel, comenzaron a comérselas. Silvia giro la cabeza y nos empezamos a besar.
Me acabe sentando en el suelo entre sus piernas. La baje las medias y el tanga hasta las rodillas. Comencé a pasar mi lengua por su clítoris mientras agarraba fuerte su culo y se lo masturbaba de vez en cuando. Cuando su clítoris estaba bien empapado, comencé a comerla el coño. Mi lengua se movía rápido dentro de su coño, mientras Fernando y Miguel la pidieron a Silvia que los masturbara, cosa que esta hizo inmediatamente, tras bajarles los pantalones.
Cuando Silvia se corrió en mi boca me levante. Me volví a besar con ella y comencé a restregar mi paquete por su culo. Me quite los pantalones y pase bien mi polla por el culo. Me puse un condón y la hice inclinarse hasta que se puso a comerles las pollas a Fernando y Miguel. Con su culo bien ofrecido, la abrí las piernas lo necesario para meter mi polla y comenzar a follarla.
Miguel y Fernando la follaban la boca cada vez mas duro y yo hacia lo mismo con su coño y su culo. Silvia les puso un condón a estos y ahora ellos también la follaron culo y coño a turnos. Mientras otro la follaba, me masturbaba o mamaba la polla con el condón puesto.
Cuando nos íbamos corriendo, lo hacíamos en la boca de Silvia. Fernando fue el primero en correrse, después fue mi turno y finalmente Miguel. Silvia se trago todo nuestro semen y nos dejo las pollas bien limpias.

Nos vestimos bien y tras besarnos y meternos mano nuevamente, Fernando y Miguel volvieron al after, mientras que Silvia y yo nos fuimos a buscar mi coche, pues esta quería volver ya a casa y me ofrecí a llevarla.
Sabia que algo iba a sacar llevándola y no me equivoque. En el primer semáforo en rojo, nos empezamos a besar y esta me saco la polla, comenzando a masturbarme. Al no haber ningún otro coche, el semáforo se puso verde y rojo varias veces.
Acabamos desviándonos y yéndonos a un descampado. Nada mas parar el coche, Silvia se me sentó encima y nos besamos muy acaloradamente. Ella agarro mi polla y siguió masturbándome. La desabroché los botones y la comí las tetas y el canalillo con el sujetador puesto. Al poco la saque las tetazas de el para comérselas bien. Le acabe quitando el vestido, para acariciárselo y besárselo mejor, mientras comía y jugaba con sus tetazas.
Cuando tenía la polla durísima nos bajamos del coche. La apoye contra la puerta, mirando hacia ella y me coloque a su espalda. Me puse un condón, la bajé las medias y aparte su tanga negro. Pase mi polla por su raja del culo, antes de abrírselo y comenzar a follarlo. Agarre fuerte sus tetazas y me besaba con Silvia, que giro su cara.
Le quite las medias y la lleve al capo, donde la tumbe. Me coloque entre sus piernas, las coloque contra mi pecho y volví a follarla. Mis manos acariciaban sus muslazos. Me ponía a mil ver sus tetazas moviéndose cada vez que la penetraba duro. La hice rodearme con las piernas la cintura y me incliné sobre ella. Seguí follándola, cada vez más duro, mientras la comía las tetazas.
Cuando me corrí en su coño, me arrodillé y se lo comí, hasta que volvió a correrse en mi boca. Entonces se bajó, me quito el condón y me limpio la polla con su lengua.

Nos vestimos y la lleve ya por fin a su casa, tras una mañana bien morbosa.