Buenas amigos, cómo andan? Tanto tiempo.
He estado con mucho trabajo y sin poder escribir, la última vez que me puse a hacerlo, tuve que parar porque un imprevisto y perdí todo lo escrito.
Hoy les voy a contar sobre una secretaria que tuve en mí trabajo.
Resulta que hace un tiempo, estuve a cargo de un grupo de casi 100 personas, las cuales tenían tareas específicas, las cuales tenía que ir rotando sus objetivos diariamente, entre esas tareas una era ser mí secretario del día, recepción y chófer, tres personas que iban a estar casi todo el día conmigo.
Este grupo de personas estaba conformado en partes iguales de hombres y mujeres. Yo era su jefe directo.
Un determinado día toca dejar a una chica, a la que llamaremos Juliana, cómo mí secretaria, a otra mujer en la recepción y un chófer.
Todas las mañanas, antes de comenzar con la jornada laboral, teníamos una reunión en un salón, en la cual yo les informaba sobre los objetivos de la fecha y su rol individual. Por lo que una vez finalizado esto, solo quedamos los tres antes mencionados y yo en todo el edificio.
Una vez que todos salieron a sus respectivos puntos de trabajo, comienzo a redactar los mails diarios mientras mí secretaria esperaba para salir a realizar controles del personal, a todo esto yo había notado que juliana me miraba mucho y cuando estaba escribiendo fue cuando más lo noté.
Entonces me di cuenta que no era la primera vez que me veía así y comencé a recordar conversación que había tenido con ella y comentarios que me había hecho veces anteriores.
Una vez que termine con los mails, le pido al chófer que nos lleve a hacer un recorrido por los puntos de venta donde estaba el personal, en todo el recorrido, juliana estuvo sentada atrás en silencio, luego de unas horas volvimos a las oficinas y el chófer se queda en la recepción con la chica que trabajaba ahí, mientras que juliana me acompaña a mí oficina.
Generalmente el trabajo de mí secretario/a era solo acompañarme, ya que por mí carácter no me gusta delegar nada, pero Juliana estaba impaciente y quería tener algo para hacer, así que le comence a solicitar carpetas dónde ir dejando los documentos que iba escribiendo, en un momento se sentó cerca de mí y solo me miraba fijamente, cuando me percató de esto, la quedó mirando y ella se ríe, luego de unos minutos se para se me acerca y en voz baja me dice:
Juli - Que ganas de chupar te bien la pija.
Se imaginan que esto me fue tan chocante e inesperado que quede callado sin saber que decir. Hasta me pareció poco creíble y una broma, por lo que, después de unos segundos mirandola, solo pude reír y ella me preguntó si me había molestado.
Yo - no, para nada,
Juli - no me crees, no?
Yo - la verdad es que no, me sorprendiste
Juli - me di cuenta, pero vos, no te das cuenta Como te miro siempre?
Yo - puede ser, pero como no te conozco, no se si ya sos de mirar así a la gente, intento no confundirme.
Juli - bueno, ya lo sabes, me re calentas.
Yo - uh! Boluda, no me digas así.
En ese momento, me levanto y me voy al baño, la verdad, solo fui a lavarme la cara, era muy temprano y todo me parecía poco creíble. Cómo para ponerlos en contexto, Juliana es una mujer rubia a la que le encanta el ejercicio, se mata en el gimnasio y tiene el mejor cuerpo fitnes que había visto hasta el momento, en ese momento, según ella, solo le faltaba tener más busto, algo que más adelante corrigió con cirugía.
Luego de esto, se hace el medio día y termina el primer turno, por lo que cada cual vuelve a su casa. Yo me quedo en las instalaciones, ya que mí departamento estaba muy alejado y entre que iba y volvía tres horas más tarde, era mucho movimiento de gusto.
Compre la comida y cuando estaba sentándome a almorzar, me llega un mensaje de Juliana.
Juli - jefe, cóme en el edificio, no?
Yo - si juliana, por?
Juli - que dice si llevo el postre?
Yo - según, puedo elegir?
Juli - no hay para elegir 😢
Yo - bueno, que tenés?
Juli -
Cuando vi la foto sentí un calor que se me concentraba en el centro de mí cuerpo y me excite muy rápido.
Yo - y si pasamos directo al postre? Almuerzo después
Juli - seguro? Mira que voy, estoy cerca.
Yo - vení.
Cinco minutos después.
Juli - abrí.
Bajo a abrir, la hago pasar y vuelvo a cerrar el edificio,
Yo - tenemos dos horas antes que venga el chófer.
Juli - bueno apuremos, dónde vamos?
La tomo de la mano y la llevo a un cuarto dónde tenía una cama para descansar cuando me quedaba en el edificio. Al entrar y cerrar la puerta Juli me toma de la cabeza y me da un buen beso mientras me desprendía la camisa, me desabotona el jean, se pone en cuclillas y comienza a lamerme los huevos mientras me masturbaba con una mano y con la otra se desprendía su camisa, comenzó a lamerme el pene desde el tronco hasta la cabeza, luego lo empezó a chupar todo, entraba toda sin atragantarse, yo podía sentir como le entraba en la garganta. Pasados unos minutos así, se levanta se saca el pantalón, yo termino de desnudarla, ella se acuesta en la cama y yo termino de desnudarme, cuando me acerco para acostarme ella se sienta y vuelve a chupármela bien.
Juli - me encanta, te la chuparía todo el día
Yo solo podía tomarla del pelo y disfrutar.
Juli - cogeme toda
Se acuesta boca arriba, le levanto las piernas y se la chupo un rato, pero ella me decía todo el tiempo que la coja, por lo que pongo sus piernas en mis hombros y la penetró lentamente. Estaba muy húmeda y caliente, a su vez la sentía bien ajustada, por lo que me calentaba mucho. Todo su cuerpo era firme, nunca había estado ni estuve con una mujer con ese cuerpo.
La doy vuela, se pone en cuatro, la tomo del pelo y comienzo a cogerla con fuerza, cómo si estuviera haciendo ejercicio, dándolo todo a morir mientras la nalgueaba con fuerza y ella gemia y puteaba.
Juli - dale hijo de puta, así, así, seguí, no pares!!!
Yo - te gusta así? Te voy a cojer como nunca te cogieron.
Juli - si, cógeme toda
Unos minutos después, hace que me acueste y ella se pone sobre mí en cuclillas y comienza a subir, bajar y cabalgar como loca mientras gritaba.
Juli - uh! Me encanta, cómo aguantas, seguí así, no acabes que me encanta coger así
Yo - seguí, no pares -nalgada- dale puta dale
Juli - aaah! Me estás haciendo acabar como yegua.
Yo - si puta seguí así
Unos minutos más tarde
Juli - no doy más ya me acabe todo
Yo - entonces me toca a mí.
Estábamos todos transpirado y mojados de la cintura para abajo, ella sale de arriba mío me levanta de la cama y se arrodilla frente a mí, me la chupa un rato, la levanto la apoyo con las manos en la pared y la cojo otro rato así.
Juli - hijo de puta me vas a hacer acabar otra vez.
Yo - acaba todo lo que quieras.
Inmediatamente después gime fuerte y siento que le temblaban las piernas mientras se chorreaban nuestros muslos, yo seguía cogiéndola.
Juli - avísame, quiero tomar tu leche.
Yo - ahora!
Ella se arrodilla y pone mí verga en su boca, luego de los dos primeros chorros comienza a pasársela por la cara y el pecho mientras seguía acabando. Luego de esto nos tiramos en la cama, veo el celular y faltan 40 minutos para la hora de ingreso del chófer. nos quedamos un rato más en la cama y luego fuimos a la ducha, nos bañamos y vestimos para esperar mientras almorzamos juntos.
Bueno amigos, esa es la historia de una de las secretarias que tuve en ese tiempo, solo salí con tres de ellas, ya les voy a contar más de esta y las otras, espero que les haya gustado, si es así, los leo en los comentarios, gracias y saludos.
He estado con mucho trabajo y sin poder escribir, la última vez que me puse a hacerlo, tuve que parar porque un imprevisto y perdí todo lo escrito.
Hoy les voy a contar sobre una secretaria que tuve en mí trabajo.
Resulta que hace un tiempo, estuve a cargo de un grupo de casi 100 personas, las cuales tenían tareas específicas, las cuales tenía que ir rotando sus objetivos diariamente, entre esas tareas una era ser mí secretario del día, recepción y chófer, tres personas que iban a estar casi todo el día conmigo.
Este grupo de personas estaba conformado en partes iguales de hombres y mujeres. Yo era su jefe directo.
Un determinado día toca dejar a una chica, a la que llamaremos Juliana, cómo mí secretaria, a otra mujer en la recepción y un chófer.
Todas las mañanas, antes de comenzar con la jornada laboral, teníamos una reunión en un salón, en la cual yo les informaba sobre los objetivos de la fecha y su rol individual. Por lo que una vez finalizado esto, solo quedamos los tres antes mencionados y yo en todo el edificio.
Una vez que todos salieron a sus respectivos puntos de trabajo, comienzo a redactar los mails diarios mientras mí secretaria esperaba para salir a realizar controles del personal, a todo esto yo había notado que juliana me miraba mucho y cuando estaba escribiendo fue cuando más lo noté.
Entonces me di cuenta que no era la primera vez que me veía así y comencé a recordar conversación que había tenido con ella y comentarios que me había hecho veces anteriores.
Una vez que termine con los mails, le pido al chófer que nos lleve a hacer un recorrido por los puntos de venta donde estaba el personal, en todo el recorrido, juliana estuvo sentada atrás en silencio, luego de unas horas volvimos a las oficinas y el chófer se queda en la recepción con la chica que trabajaba ahí, mientras que juliana me acompaña a mí oficina.
Generalmente el trabajo de mí secretario/a era solo acompañarme, ya que por mí carácter no me gusta delegar nada, pero Juliana estaba impaciente y quería tener algo para hacer, así que le comence a solicitar carpetas dónde ir dejando los documentos que iba escribiendo, en un momento se sentó cerca de mí y solo me miraba fijamente, cuando me percató de esto, la quedó mirando y ella se ríe, luego de unos minutos se para se me acerca y en voz baja me dice:
Juli - Que ganas de chupar te bien la pija.
Se imaginan que esto me fue tan chocante e inesperado que quede callado sin saber que decir. Hasta me pareció poco creíble y una broma, por lo que, después de unos segundos mirandola, solo pude reír y ella me preguntó si me había molestado.
Yo - no, para nada,
Juli - no me crees, no?
Yo - la verdad es que no, me sorprendiste
Juli - me di cuenta, pero vos, no te das cuenta Como te miro siempre?
Yo - puede ser, pero como no te conozco, no se si ya sos de mirar así a la gente, intento no confundirme.
Juli - bueno, ya lo sabes, me re calentas.
Yo - uh! Boluda, no me digas así.
En ese momento, me levanto y me voy al baño, la verdad, solo fui a lavarme la cara, era muy temprano y todo me parecía poco creíble. Cómo para ponerlos en contexto, Juliana es una mujer rubia a la que le encanta el ejercicio, se mata en el gimnasio y tiene el mejor cuerpo fitnes que había visto hasta el momento, en ese momento, según ella, solo le faltaba tener más busto, algo que más adelante corrigió con cirugía.
Luego de esto, se hace el medio día y termina el primer turno, por lo que cada cual vuelve a su casa. Yo me quedo en las instalaciones, ya que mí departamento estaba muy alejado y entre que iba y volvía tres horas más tarde, era mucho movimiento de gusto.
Compre la comida y cuando estaba sentándome a almorzar, me llega un mensaje de Juliana.
Juli - jefe, cóme en el edificio, no?
Yo - si juliana, por?
Juli - que dice si llevo el postre?
Yo - según, puedo elegir?
Juli - no hay para elegir 😢
Yo - bueno, que tenés?
Juli -
Cuando vi la foto sentí un calor que se me concentraba en el centro de mí cuerpo y me excite muy rápido.
Yo - y si pasamos directo al postre? Almuerzo después
Juli - seguro? Mira que voy, estoy cerca.
Yo - vení.
Cinco minutos después.
Juli - abrí.
Bajo a abrir, la hago pasar y vuelvo a cerrar el edificio,
Yo - tenemos dos horas antes que venga el chófer.
Juli - bueno apuremos, dónde vamos?
La tomo de la mano y la llevo a un cuarto dónde tenía una cama para descansar cuando me quedaba en el edificio. Al entrar y cerrar la puerta Juli me toma de la cabeza y me da un buen beso mientras me desprendía la camisa, me desabotona el jean, se pone en cuclillas y comienza a lamerme los huevos mientras me masturbaba con una mano y con la otra se desprendía su camisa, comenzó a lamerme el pene desde el tronco hasta la cabeza, luego lo empezó a chupar todo, entraba toda sin atragantarse, yo podía sentir como le entraba en la garganta. Pasados unos minutos así, se levanta se saca el pantalón, yo termino de desnudarla, ella se acuesta en la cama y yo termino de desnudarme, cuando me acerco para acostarme ella se sienta y vuelve a chupármela bien.
Juli - me encanta, te la chuparía todo el día
Yo solo podía tomarla del pelo y disfrutar.
Juli - cogeme toda
Se acuesta boca arriba, le levanto las piernas y se la chupo un rato, pero ella me decía todo el tiempo que la coja, por lo que pongo sus piernas en mis hombros y la penetró lentamente. Estaba muy húmeda y caliente, a su vez la sentía bien ajustada, por lo que me calentaba mucho. Todo su cuerpo era firme, nunca había estado ni estuve con una mujer con ese cuerpo.
La doy vuela, se pone en cuatro, la tomo del pelo y comienzo a cogerla con fuerza, cómo si estuviera haciendo ejercicio, dándolo todo a morir mientras la nalgueaba con fuerza y ella gemia y puteaba.
Juli - dale hijo de puta, así, así, seguí, no pares!!!
Yo - te gusta así? Te voy a cojer como nunca te cogieron.
Juli - si, cógeme toda
Unos minutos después, hace que me acueste y ella se pone sobre mí en cuclillas y comienza a subir, bajar y cabalgar como loca mientras gritaba.
Juli - uh! Me encanta, cómo aguantas, seguí así, no acabes que me encanta coger así
Yo - seguí, no pares -nalgada- dale puta dale
Juli - aaah! Me estás haciendo acabar como yegua.
Yo - si puta seguí así
Unos minutos más tarde
Juli - no doy más ya me acabe todo
Yo - entonces me toca a mí.
Estábamos todos transpirado y mojados de la cintura para abajo, ella sale de arriba mío me levanta de la cama y se arrodilla frente a mí, me la chupa un rato, la levanto la apoyo con las manos en la pared y la cojo otro rato así.
Juli - hijo de puta me vas a hacer acabar otra vez.
Yo - acaba todo lo que quieras.
Inmediatamente después gime fuerte y siento que le temblaban las piernas mientras se chorreaban nuestros muslos, yo seguía cogiéndola.
Juli - avísame, quiero tomar tu leche.
Yo - ahora!
Ella se arrodilla y pone mí verga en su boca, luego de los dos primeros chorros comienza a pasársela por la cara y el pecho mientras seguía acabando. Luego de esto nos tiramos en la cama, veo el celular y faltan 40 minutos para la hora de ingreso del chófer. nos quedamos un rato más en la cama y luego fuimos a la ducha, nos bañamos y vestimos para esperar mientras almorzamos juntos.
Bueno amigos, esa es la historia de una de las secretarias que tuve en ese tiempo, solo salí con tres de ellas, ya les voy a contar más de esta y las otras, espero que les haya gustado, si es así, los leo en los comentarios, gracias y saludos.
2 comentarios - Mí secretaria atrevida