"Me quema..."

Desde mi escondite podía ver en primer plano y escondido a mi padre metiendo todo " su pito enojado" entre las piernas de su amiga. Papá era viudo con 29 años y yo su único hijo tenía 11.
Mi padre gendarme era muy cuidadoso en mi crianza y cuidaba de mi presunta inocencia hasta ese dia en que me escondí en el.viejo placard de su habitación y me quedé dormido hasta que los gritos desesperados de una hembra me despertaron entre asustado y curioso.
- Me quema... tu pija me quema...- La hembra gritaba sofocada y con una desesperación contagiosa que me inundaba todo el cuerpo.

Mis ojos no daban credito a lo que veian mientras no quería perderme detalle.

- Me estás matando...- jadeaba Susana mientras la pija negra y dura de mi padre se le escurría hasta el fondo haciendola chorrear





Era tan intenso el placer de la hembra que contagiaba, se podía oler en el aire una mescla entre sémen y flujo, olor a verga cojiendo.


Desde ese dia me hice fanático del sexo en todas sus formas...pero el placer mas intenso me lo provocaban siempre las parejas hétero.