Como todos mis relatos estan basados en mis fantasías
Me habían invitado a una fiesta y cuando llegó al lugar me hacen pasar y veo que en el lugar había ciento de hombres y sólo una gran mesa, me agarraron entre varios atandome de manos y me amordazaron, me tumbaron en la mesa, me ataron las piernas a las patas de la mesa, quedando bien abiertas. Empezaron a juguetear con mis pezones, a lamerlos y a estirarlos. Cogieron las pinzas y me las ajustaron en los pezones. Grite del dolor
-¡Mmmm¡
-Vete acostumbrando a ellas puta.
Juguetearon con mis tetas arrancado gemidos de dolor, dejando las aureolas rojas, sinti un pinchazo y empece a llorar a causa del dolor, me estaban haciendo unos oricificios en las tetas donde irían unos argollas y en ellas colgadas unas bolas, me dieron latigazos en las tetas, cada vez el dolor aumentaba, luego en la concha haciendome gritar aunque la mordaza ahogaba mis gemidos. Yacía semidesmayada sobre la mesa, mi clitoris enrojecido, me llevaron a una habitación donde había una barra situada a un metro de altura y me esposaron a ella, separaron mis piernas y uno me metía sus dedos en mi concha varias veces hasta que de un empujón metió su mano entera, me sentía empalada, con su mano adentro mío me pellizco el clítoris haciéndolo enrojecer aún más, al sacarlo me dejo un enorme agujero, estaba totalmente agotada y dolorida, mis tetas estaban rojos e hinchados al igual que mi concha. Me llevaron a una habitación con.uma cama donde me tiraron, otro me metio su mano en mi concha y empezo a sacarlo y meterlo, luego la saco y entre dos me cojieron por ahí, la tenian enormes y gordas. Yo ya sin fuerzas para gritar o moverme. Así pasaron varios, siempre de a dos cojiendome salvajemente hasta acabar, hasta que me pusieron un dildo del tamaño de dos puños y unos 40 cm de largo, me estaba partiendo, lo tenía todo adentro, luego lo sacaron y uno me metio sus dos manos, los metia y sacaba, hasta que me desmayé. Luego de un tiempo me desperté y me seguían cojiendo está vez de a tres pijas en mi concha a la vez, estaba tan grande mi concha que podían meter cualquier cosa ahí dentro y es lo que pensaban hacer, estaba en un estado lamentable, durante un fin de semana fui torturada, violada sin importar si estaba conciente o no, despierta o no
Me habían invitado a una fiesta y cuando llegó al lugar me hacen pasar y veo que en el lugar había ciento de hombres y sólo una gran mesa, me agarraron entre varios atandome de manos y me amordazaron, me tumbaron en la mesa, me ataron las piernas a las patas de la mesa, quedando bien abiertas. Empezaron a juguetear con mis pezones, a lamerlos y a estirarlos. Cogieron las pinzas y me las ajustaron en los pezones. Grite del dolor
-¡Mmmm¡
-Vete acostumbrando a ellas puta.
Juguetearon con mis tetas arrancado gemidos de dolor, dejando las aureolas rojas, sinti un pinchazo y empece a llorar a causa del dolor, me estaban haciendo unos oricificios en las tetas donde irían unos argollas y en ellas colgadas unas bolas, me dieron latigazos en las tetas, cada vez el dolor aumentaba, luego en la concha haciendome gritar aunque la mordaza ahogaba mis gemidos. Yacía semidesmayada sobre la mesa, mi clitoris enrojecido, me llevaron a una habitación donde había una barra situada a un metro de altura y me esposaron a ella, separaron mis piernas y uno me metía sus dedos en mi concha varias veces hasta que de un empujón metió su mano entera, me sentía empalada, con su mano adentro mío me pellizco el clítoris haciéndolo enrojecer aún más, al sacarlo me dejo un enorme agujero, estaba totalmente agotada y dolorida, mis tetas estaban rojos e hinchados al igual que mi concha. Me llevaron a una habitación con.uma cama donde me tiraron, otro me metio su mano en mi concha y empezo a sacarlo y meterlo, luego la saco y entre dos me cojieron por ahí, la tenian enormes y gordas. Yo ya sin fuerzas para gritar o moverme. Así pasaron varios, siempre de a dos cojiendome salvajemente hasta acabar, hasta que me pusieron un dildo del tamaño de dos puños y unos 40 cm de largo, me estaba partiendo, lo tenía todo adentro, luego lo sacaron y uno me metio sus dos manos, los metia y sacaba, hasta que me desmayé. Luego de un tiempo me desperté y me seguían cojiendo está vez de a tres pijas en mi concha a la vez, estaba tan grande mi concha que podían meter cualquier cosa ahí dentro y es lo que pensaban hacer, estaba en un estado lamentable, durante un fin de semana fui torturada, violada sin importar si estaba conciente o no, despierta o no
2 comentarios - Una fiesta que fue una tortura