No se ni como no les conté esta historia, realmente el otro día un amigo me dijo "Che, te acordás la millo que te garchasbas hace mil años?" y me avivé que la historia es para escribirla. No voy a dar muchos detalles en los que se pueda identificarla ya que con un par de cositas en seguida alguien que la conozca la podría identificar y como siempre la privacidad primero. Obviamente tiene el nombre cambiado.
Fue cuando yo tenía 24, ella 19. En un bar/boliche de Palermo fui a encarar a una morocha infernal, con la mirada me rechazó directamente y automáticamente asumiendo esa batalla perdida, pero sin retirarme de la guerra saqué a bailar a la chica que estaba al lado, resultó ser la prima, Pilar.
Pili es una rubia hermosa, 1,60m, de pelo lacio, de cuerpo nada exuberante, un cuerpo balanceado, bien de tetas, bien de culo, flaca, divina.
Estaba con un vestidito negro cortito bien pegado al cuerpo, un espectáculo.
Esa noche bailamos bastante, nos divertimos mucho, hablamos poco, pero nos besamos mucho, pero nos pasamos los teléfonos.
No sabía su apellido, por lo que buscarla por Facebook era imposible, igual recuerdo intentarlo por horas mientras nos escribíamos a diario.
El fin de semana siguiente no pudimos vernos por compromisos familiares, pero para el otro sus padres se iban de viaje, me pasó la dirección, agarré mi Fiat 147, llené el tanque de GNC en la YPF y me fui para allá sin imaginarme con lo que me iba a encontrar.
Entré a un barrio cerrado super exclusivo, el personal de seguridad de la puerta me indica como llegar a la casa. A ojo, 100 metros de frente construidos estilo francés, 3 pisos, materiales de primerísima, una locura que usé como inspiración más de una vez.
Estaciono mi humilde vehículo cerca de la entrada principal de la casa, lo cierro y pongo la alarma mientras me pregunto quién carajo va a mirar este auto ahí con una mirada que no sea de desprecio.
Toqué timbre y a los pocos segundos me abre una señora. Me hace pasar y me dice "La señorita lo está esperando en la sala", claramente me indicó como llegar porque me habría perdido.
Llegué y Pili estaba hermosa, con una remerita sin mangas negra, un short de jean que apenas le tapaba el culo y unas botas tipo texanas.
Nos saludamos directo con un beso en la boca, hablamos, chapamos un poco, me contó de su vida, le conté de la mía.
Una de las cosas que me contó es que hace un mes había cortado con quién fue su novio, Federico, hijo del mejor amigo del padre, único hombre con el que había tenido sexo en su vida.
Después cenamos, obviamente nos cocinó el personal de la casa y le pedí que me lleve a recorrer la casa. Yo estaba terminando la carrera de arquitectura, me tenía que acomodar la mandíbula cada 4 pasos. Igualmente los padres cerraban con llave varias habitaciones y salones de la casa. Llegamos a un bar. Tiene un bar el la casa, barra con banquetas, algunas mesas, un pequeño escenario, chopera de cerveza, todas las bebidas que se les ocurran, hasta fábrica de hielo. Listo, me dio el pie para demostrar lo que había aprendido en el curso de barman, nos pusimos a tomar unos tragos mientras nos besábamos y bailábamos. Nos divertíamos mucho, pero ambos sabíamos que ahí no nos íbamos a quedar...
P: Santi, vamos para mi habitación, no te la mostré todavía.
S: Bueno, vamos, te sigo pero con una condición.
P: Que me vas a pedir?
S: Que hagas todo lo que quieras, que en ningún momento te frenes por pensar que algo no me va a gustar, quiero que te sientas completamente libre, que hagas y pidas todo sin filtro.
Agarré un par de tragos y nos fuimos a su habitación que obviamente tiene el tamaño de un dpto de 4 ambientes. Además un enorme baño y un vestidor gigante con un camarín para peinarse y maquillarse.
Pusimos música y seguimos a los besos, cada vez más intensos. Nos manoseábamos y fuimos desnudándonos mutuamente, ella tenía un conjunto de encaje negro, hermoso, pintado le quedaba.
Le saqué el corpiño y empecé a chuparle las tetas, la recosté en la cama, le arranqué la tanga y por fin pude mirarle la conchita, con una pequeña alfombrita de pelos, muy prolija. Empecé a besarle desde una rodilla y lentamente fui entre mordiscos suaves y besos llegando a su concha y empecé a besarla suavemente mientras con un dedo empezaba a penetrarla, ella gemía, cada vez más fuerte.
Sin acabar me sacó la cabeza de ahí, me hizo acostarme a mi, me sacó el boxer y directamente se puso arriba mío para hacer un 69 y empezó a chuparme la pija de una manera violenta, me daba un poquito de dolor, pero ese dolor que viene acompañado de calentura. Cuando yo estaba a punto de acabar se incorporó quedando sentada sobre mi que le comía la concha a besos y me acabó con todo, su calentura y sus jugos invadieron mi boca.
Demoró un minuto en recuperar la respiración y volvió a chuparme la pija con aún más intensidad de antes.
Empecé a gemir más fuerte para que se de cuenta que estaba por acabar, pero seguía dándole con todo.
S: Te acabo toda Pili.
Silencio de su parte y siguió con la intensidad al 110%, empecé a acabarle en la boca, los 2 primeros disparos fueron directo a su garganta, se atoró un poco y después los tragó como una reina y el resto lo acabé entre sus tetas y mi propio cuerpo. De hecho me refregó las tetas acabadas por mi cuerpo.
Se dio vuelta y se acostó encima mío y empezamos a darnos besos con nuestros pechos todos acabados, hasta con cierta ternura y mientras hablábamos y ella se movía lentamente para ir sintiéndome.
P: Lindo, te voy a dar unos minutos para que te recuperes.
S: Sí linda, dame unos minutos y volvemos a la acción.
P: Te molesta si te cuento cosas de mi pasado sexual?
S: Además que soy el segundo con el que garchás?
P: Todavía no garchamos.
S: Todavía, me diste unos minutos.
P: Lo se, por eso, todavía no garchamos.
S: Hablá libremente Pili, sin filtros, ya te dije.
P: Mi ex era super conservador.
S: En que sentido?
P: Nunca me acabó en la boca, yo se lo pedía, pero decía que eso era de puta, la verdad a mi me gustó.
S: De puta es cobrar por sexo, si te gusta no te limites, él se lo perdió, no entiende nada.
P: Bueno, en realidad decía directamente que chupar pija es de puta. Como si una mina no puede disfrutar del sexo.
S: Pero ese pibe no entiende nada, pero nada de la vida
P: La verdad me siento super cómoda con vos y me parece bien que hablemos así. Vos que onda conmigo?
S: Yo la estoy pasando muy bien. Sos una mina hermosa, nos llevamos bien. Me gusta que te sientas libre, que no te limites.
P: Estoy abierta a casi todo.
S: Y que entra en lo que no es casi todo?
P: Cosas como el sadomasoquismo, cualquier cosa violenta. El sexo anal tampoco me atrae.
S: Nunca probaste nada anal?
P: No probé nada, no me interesa, igual si se lo decía a Fede se iba a espantar.
S: Eso ya se, pero vos misma, tocándote.
P: No, nunca probé.
S: Sin miedo y despacio, otro día, vamos a probar a ver si no te interesa o si pensás que no te interesa.
P: Si me hacés doler metiéndomela en el culo sin permiso te mato.
S: Definitivamente tenés una idea equivocada Pili. Juguetes?
P: Me intriga, pero no me atrae mucho.
S: Bueno, la próxima traigo una cajita mágica para que juguemos juntos.
P: Bueno, ya probaremos eso, me parece que alguien quiere volver a la guerra. -Dijo haciendo alusión a que ya se me estaba parando nuevamente.
Terminó de decir eso y bajó a chuparme la pija hasta que se puso bien dura.
Se acostó boca arriba y me pidió que me la coja así, me puse un forro y cumplí su deseo hasta que ella acabó, la hice ponerse en 4 en el borde de la cama, mientras me acomodaba parado al costado se me ocurrió pasarle la lengua en una sola lamida desde el clítoris hasta el ano. Soltó un gemido hermoso. Ya lo sabía, en algún momento ese culito va a ser penetrado por mi pija.
Empecé a cogerla así, en esa posición. Veía como a cada choque de cuerpos se movía ese culito, ella estaba gimiendo a ritmo, apretando las sábanas con sus manos, de repente me quedé quieto a ver que hacía ella (y para no acabar) y empezó a moverse chocándome con su culo y a quejarse que yo no hacía nada. "cogeme, cogeme" me dijo y me terminó de calentar y empecé a darle con todas mis fuerzas, acabé nuevamente y ella seguía moviéndose mientras yo trataba de mantenerme en pie hasta que Pili acabó nuevamente y se recostó con el culito para arriba bajando de a poco el ritmo de la respiración, mientras yo miraba su culito, pensando en todo lo que le iba a hacer.
Me recosté a su lado y nos quedamos dormidos.
A la mañana nos dimos murra otra vez, un clásico misionero. Desayuné en la casa con ella y nos quedamos charlando hasta casi el mediodía que me fui porque tenía un almuerzo, pero la verdad es que la estaba pasando tan bien que me habría quedado.
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Link a segunda parte:
http://www.poringa.net/posts/relatos/3997619/Pili-millonaria-y-entrega-el-culito.html
Fue cuando yo tenía 24, ella 19. En un bar/boliche de Palermo fui a encarar a una morocha infernal, con la mirada me rechazó directamente y automáticamente asumiendo esa batalla perdida, pero sin retirarme de la guerra saqué a bailar a la chica que estaba al lado, resultó ser la prima, Pilar.
Pili es una rubia hermosa, 1,60m, de pelo lacio, de cuerpo nada exuberante, un cuerpo balanceado, bien de tetas, bien de culo, flaca, divina.
Estaba con un vestidito negro cortito bien pegado al cuerpo, un espectáculo.
Esa noche bailamos bastante, nos divertimos mucho, hablamos poco, pero nos besamos mucho, pero nos pasamos los teléfonos.
No sabía su apellido, por lo que buscarla por Facebook era imposible, igual recuerdo intentarlo por horas mientras nos escribíamos a diario.
El fin de semana siguiente no pudimos vernos por compromisos familiares, pero para el otro sus padres se iban de viaje, me pasó la dirección, agarré mi Fiat 147, llené el tanque de GNC en la YPF y me fui para allá sin imaginarme con lo que me iba a encontrar.
Entré a un barrio cerrado super exclusivo, el personal de seguridad de la puerta me indica como llegar a la casa. A ojo, 100 metros de frente construidos estilo francés, 3 pisos, materiales de primerísima, una locura que usé como inspiración más de una vez.
Estaciono mi humilde vehículo cerca de la entrada principal de la casa, lo cierro y pongo la alarma mientras me pregunto quién carajo va a mirar este auto ahí con una mirada que no sea de desprecio.
Toqué timbre y a los pocos segundos me abre una señora. Me hace pasar y me dice "La señorita lo está esperando en la sala", claramente me indicó como llegar porque me habría perdido.
Llegué y Pili estaba hermosa, con una remerita sin mangas negra, un short de jean que apenas le tapaba el culo y unas botas tipo texanas.
Nos saludamos directo con un beso en la boca, hablamos, chapamos un poco, me contó de su vida, le conté de la mía.
Una de las cosas que me contó es que hace un mes había cortado con quién fue su novio, Federico, hijo del mejor amigo del padre, único hombre con el que había tenido sexo en su vida.
Después cenamos, obviamente nos cocinó el personal de la casa y le pedí que me lleve a recorrer la casa. Yo estaba terminando la carrera de arquitectura, me tenía que acomodar la mandíbula cada 4 pasos. Igualmente los padres cerraban con llave varias habitaciones y salones de la casa. Llegamos a un bar. Tiene un bar el la casa, barra con banquetas, algunas mesas, un pequeño escenario, chopera de cerveza, todas las bebidas que se les ocurran, hasta fábrica de hielo. Listo, me dio el pie para demostrar lo que había aprendido en el curso de barman, nos pusimos a tomar unos tragos mientras nos besábamos y bailábamos. Nos divertíamos mucho, pero ambos sabíamos que ahí no nos íbamos a quedar...
P: Santi, vamos para mi habitación, no te la mostré todavía.
S: Bueno, vamos, te sigo pero con una condición.
P: Que me vas a pedir?
S: Que hagas todo lo que quieras, que en ningún momento te frenes por pensar que algo no me va a gustar, quiero que te sientas completamente libre, que hagas y pidas todo sin filtro.
Agarré un par de tragos y nos fuimos a su habitación que obviamente tiene el tamaño de un dpto de 4 ambientes. Además un enorme baño y un vestidor gigante con un camarín para peinarse y maquillarse.
Pusimos música y seguimos a los besos, cada vez más intensos. Nos manoseábamos y fuimos desnudándonos mutuamente, ella tenía un conjunto de encaje negro, hermoso, pintado le quedaba.
Le saqué el corpiño y empecé a chuparle las tetas, la recosté en la cama, le arranqué la tanga y por fin pude mirarle la conchita, con una pequeña alfombrita de pelos, muy prolija. Empecé a besarle desde una rodilla y lentamente fui entre mordiscos suaves y besos llegando a su concha y empecé a besarla suavemente mientras con un dedo empezaba a penetrarla, ella gemía, cada vez más fuerte.
Sin acabar me sacó la cabeza de ahí, me hizo acostarme a mi, me sacó el boxer y directamente se puso arriba mío para hacer un 69 y empezó a chuparme la pija de una manera violenta, me daba un poquito de dolor, pero ese dolor que viene acompañado de calentura. Cuando yo estaba a punto de acabar se incorporó quedando sentada sobre mi que le comía la concha a besos y me acabó con todo, su calentura y sus jugos invadieron mi boca.
Demoró un minuto en recuperar la respiración y volvió a chuparme la pija con aún más intensidad de antes.
Empecé a gemir más fuerte para que se de cuenta que estaba por acabar, pero seguía dándole con todo.
S: Te acabo toda Pili.
Silencio de su parte y siguió con la intensidad al 110%, empecé a acabarle en la boca, los 2 primeros disparos fueron directo a su garganta, se atoró un poco y después los tragó como una reina y el resto lo acabé entre sus tetas y mi propio cuerpo. De hecho me refregó las tetas acabadas por mi cuerpo.
Se dio vuelta y se acostó encima mío y empezamos a darnos besos con nuestros pechos todos acabados, hasta con cierta ternura y mientras hablábamos y ella se movía lentamente para ir sintiéndome.
P: Lindo, te voy a dar unos minutos para que te recuperes.
S: Sí linda, dame unos minutos y volvemos a la acción.
P: Te molesta si te cuento cosas de mi pasado sexual?
S: Además que soy el segundo con el que garchás?
P: Todavía no garchamos.
S: Todavía, me diste unos minutos.
P: Lo se, por eso, todavía no garchamos.
S: Hablá libremente Pili, sin filtros, ya te dije.
P: Mi ex era super conservador.
S: En que sentido?
P: Nunca me acabó en la boca, yo se lo pedía, pero decía que eso era de puta, la verdad a mi me gustó.
S: De puta es cobrar por sexo, si te gusta no te limites, él se lo perdió, no entiende nada.
P: Bueno, en realidad decía directamente que chupar pija es de puta. Como si una mina no puede disfrutar del sexo.
S: Pero ese pibe no entiende nada, pero nada de la vida
P: La verdad me siento super cómoda con vos y me parece bien que hablemos así. Vos que onda conmigo?
S: Yo la estoy pasando muy bien. Sos una mina hermosa, nos llevamos bien. Me gusta que te sientas libre, que no te limites.
P: Estoy abierta a casi todo.
S: Y que entra en lo que no es casi todo?
P: Cosas como el sadomasoquismo, cualquier cosa violenta. El sexo anal tampoco me atrae.
S: Nunca probaste nada anal?
P: No probé nada, no me interesa, igual si se lo decía a Fede se iba a espantar.
S: Eso ya se, pero vos misma, tocándote.
P: No, nunca probé.
S: Sin miedo y despacio, otro día, vamos a probar a ver si no te interesa o si pensás que no te interesa.
P: Si me hacés doler metiéndomela en el culo sin permiso te mato.
S: Definitivamente tenés una idea equivocada Pili. Juguetes?
P: Me intriga, pero no me atrae mucho.
S: Bueno, la próxima traigo una cajita mágica para que juguemos juntos.
P: Bueno, ya probaremos eso, me parece que alguien quiere volver a la guerra. -Dijo haciendo alusión a que ya se me estaba parando nuevamente.
Terminó de decir eso y bajó a chuparme la pija hasta que se puso bien dura.
Se acostó boca arriba y me pidió que me la coja así, me puse un forro y cumplí su deseo hasta que ella acabó, la hice ponerse en 4 en el borde de la cama, mientras me acomodaba parado al costado se me ocurrió pasarle la lengua en una sola lamida desde el clítoris hasta el ano. Soltó un gemido hermoso. Ya lo sabía, en algún momento ese culito va a ser penetrado por mi pija.
Empecé a cogerla así, en esa posición. Veía como a cada choque de cuerpos se movía ese culito, ella estaba gimiendo a ritmo, apretando las sábanas con sus manos, de repente me quedé quieto a ver que hacía ella (y para no acabar) y empezó a moverse chocándome con su culo y a quejarse que yo no hacía nada. "cogeme, cogeme" me dijo y me terminó de calentar y empecé a darle con todas mis fuerzas, acabé nuevamente y ella seguía moviéndose mientras yo trataba de mantenerme en pie hasta que Pili acabó nuevamente y se recostó con el culito para arriba bajando de a poco el ritmo de la respiración, mientras yo miraba su culito, pensando en todo lo que le iba a hacer.
Me recosté a su lado y nos quedamos dormidos.
A la mañana nos dimos murra otra vez, un clásico misionero. Desayuné en la casa con ella y nos quedamos charlando hasta casi el mediodía que me fui porque tenía un almuerzo, pero la verdad es que la estaba pasando tan bien que me habría quedado.
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Link a segunda parte:
http://www.poringa.net/posts/relatos/3997619/Pili-millonaria-y-entrega-el-culito.html
4 comentarios - Pili, millonaria y putita