Siete
Narrado desde el punto de vista de Daniel
El resto de ese día no tuve oportunidad de abordar a mi madre en ningún momento,ya que la mayoría de el tiempo o se la pasaba con mi padre o jugando con mi pequeña hermana mientras que mi hermano se la pasaba encerrado en su mundo. Como se lo había prometido tampoco intente nada delante de mí familia, aunque debía admitir que ganas no me faltaban.
Lo que si me frustró bastante, es que recién tuve la chance de poder estar con ella cuando anocheció. Ya era bastante tarde cuando mis hermanos se fueron a dormir, seguido de mi padre que viéndose bastante agotado se fue directamente a la cama. Mi madre no obstante se hallaba en la cocina terminando de lavar algunas cosas que habíamos usamos para la cena, cuando no pudiendo contenerme más fui a buscarla.
Al verla de espaldas me deslice con suma cautela y logrando posicionarme en su detrás apoye de forma descarada mi cuerpo sobre el suyo y colando mi cabeza sobre su hombro, le susurre suavemente al oído – te deseo tanto, que me estoy volviendo loco.
Pensando que haría algo por alejarme espere su reacción, pero me sorprendió terriblemente cuando ella se recosto sobre mi cuerpo y apoyando su culo sobre mi aparato que a esa altura ya estaba mas que parado, me dijo con voz melosa – estoy Igual, pero por el bien de todos debemos contenernos.
Escuchar esa confesión me puso loco, así que mandando todo por el caño agarre los pliegues del vestido veraniego que portaba y metiéndole mano por debajo del mismo, conseguí levantar los pliegues de su prenda dejando su culo en pompapara mi total satisfacción.
Desesperado tome su tanga y se la baje hasta conseguir que quedará en sus pies y haciéndolo mismo con mi ropa deje mi reluciente pene a la vista de cualquiera, luego tome sin perder tiempo su cintura y logrando poner la cabeza de mi pene directamente sobre la entrada de su concha. La ensarte de tal manera, que empecé a cogérmela con mucha desesperación.
Ese polvo carecía de cariño alguno, puesto que en ese momento lo único que quería era deshacerme del deseo que sentía por ella y lograr marcar a su vez su cuerpo para así hacerle saber que de ahora en mas ella era de mi propiedad. Por lo que cogiendo como animales, arremetía contra ella mientras bufaba como un auténtico toro.
Mientras que ni madre a su vez recibía mis acometidas con agrado, en tanto soltaba varios gemidos que intentaba contener. No se cuantos minutos estuvimos acoplados, solo se que cuando logre correrme lo hice de tal manera que me asegure de llenarle la concha de semen.
Más calmado me fui saliendo de ella y apenas extraje mi miembro, note como de su cueva empezaba a salir parte del semen que le había regalado. Contento con ello vi que estaba bastante agitada, a lo que deseando hacerle mimos me acerqué a su cuello y dándole varios pequeños besos le susurre al mismo con anhelo –escapemos mañana.
Una vez que logró tranquilizarse giro su cuello y viéndome con cierta curiosidad,me pregunto – como lo haremos?
Mientras me ponía a pensar tomaba la ropa que había arrojado al suelo y colocándomela,vi de reojo como mi madre tomaba su tanga. Pero en vez de ponérsela de vuelta,se llevo la prenda a su entrepierna y sorprendiéndome, ella se puso a limpiar parte de los fluidos que le corrían por las piernas con su tanga.
Verla tan desinhibida en mi delante comenzó a excitarme otra vez, pero sabiendo del peligro que corríamos si volvíamos a la acción me aguante como pude. Luego trague el nudo que tenia atrapado en mi garganta y pensando como haríamos mañana para tener cierta libertad, me quedé en silencio.
Pasaron varios segundos y no encontraba una solución a nuestro problema, pensé que estábamos verdaderamente atrapados. Ese pensamiento hizo que pusiera una cara de total desilusión, no obstante esta meduro poco. Ya que de la nada mi madre soltó al aire – creo tener una solución.
Contento con sus palabras la tome de vuelta entre mis brazos y como si de una amorosa pareja nos tratásemos, le di un beso en la mejilla en tanto le decía - Cuéntame.
He visto que hay caminos para hacer senderismo que parten de diferentes lugares dela casa – comento – así que pensé que ir a caminar temprano por la mañana no,nos caería mas, que te parece?
Sorprendido que tuviese semejante idea, solté en repuesta – eres una genia mamá, los sabes?
Orgullosa por mis palabras se zafo de mis brazos y dando media vuelta, me soltó en tanto me miraba – bien ya que tenemos solución a nuestro problema, creo que deberíamos ir a dormir si queremos salir temprano mañana.
Realmente no quería dejarla ir, pero sabiendo que no podía hacer otra cosa. La deje pasar, no obstante cuando estaba pasando por mi costado de forma repentina le di una pequeña nalgada que la tomo por sorpresa.
Al principio pensé que me había excedido un poco y que de seguro se enojaría, pero no sucediendo eso y haciendo todo lo contrario. Ella me regaló una pequeña sonrisa y dándome a entender que le había gustado, se despidió diciéndome – nos vemos mañana temprano.
Ya en mi cuarto me recosté en mi cama y pensando en todo lo que había sucedido ese día, intente dormirme. Pero no consiguiéndolo por la ansiedad que me invadía, esa noche casi no pude cerrar mis ojos.
Había cabeceado en varias ocasiones, pero no pude dormir como debía. Así que sin darme cuenta amaneció y mi ansiedad solo aumento cuando de la nada, alguien toco mi puerta.
Sabiendo quien era me levanté con excesiva prisa y abriendo la puerta con desesperación,me topé con mi madre que a diferencia mía. Se notaba mas fresca que una lechuga.
Llevaba encima solo un short vaquero, unas zapatillas deportivas y una remera corta que mostraba gran parte de su firme vientre. Por lo que embelesado, solo pude escuchar que me decía – no estas listo aún?
Como un autómata moví mi cabeza de forma negativa, mientras ella desesperada agregaba – deja de mirarme y apúrate, que todavía nadie esta despierto.
Haciéndole caso con rapidez me coloque una remera, un pantalón corto y una zapatillas. A lo que listo la seguia en tanto notaba como movía su culo a cada paso que daba,no obstante cuando estaba a punto de darle un pellizco a tan perfecto trasero,de la nada una voz nos pregunto – a donde van?
Kevin mi hermano apareció de repente con un vaso de agua en su mano, mientras que mi madre completamente nerviosa no supo que responder. A lo que intentando verme lo más normal posible, le contesté enseguida – vimos algunos senderos por ahí y decidimos ir a dar una larga caminata – mi madre loca por los palabras me dio una mirada asesina, a lo que ignorando la le pregunté – quieres venir?
Kevin nos miro por algunos segundos y decidiendo no ir, soltó al pasar – no gracias.
Diciendo esto volvió a su cuarto y mientras mi mamá suspiraba con cierto alivio, me dijo con enojo – estas loco.
Lo tenía calculado – me excuse añadiendo – Kevin es bastante flojo para los deportes, así que deduje que si lo invitaba lo más seguro es que no vendría.
Sorprendida mi mamá no agrego mas y poniéndose en camino, me dijo – vamos antes de que se despierte alguien mas.
Segundos después ya estábamos afuera y tomando la primera senda que vimos, nos escabullimos por allí y notando como mi corazón me latía con fuerza a medida que avanzábamos. No podía quitar los ojos del esbelto cuerpo de mi madre.
No se cuanto tiempo anduvimos, solo se que no pudiendo aguantar mas me arroje sobre ella y tomando su mano la jale hasta lograr meterla en un espacio que habia entre varios árboles, que a su vez nos daba bastante intimidad.
Ya allí empecé a besarle con desenfreno y solo deje de empujarla, cuando su cuerpo choco contra un grueso tronco de uno de los árboles. Loco de deseo metí mis manos por debajo de su camiseta y llevándola directamente hasta sus pechos,intente tomarlas con su fino corpiño puesto.
Esto le robo un suspiro, cosa que me calentó mucho más a si que continuando tome su camiseta y sacándosela de encima. Le deje únicamente con el corpiño puesto.
Se veía increíblemente sensual, no obstante deseaba algo más que sexo en ese momento. Deseaba dominar la por completo, así que con cierta autoritaria le dije – chupa mela.
Sorprendida ella me pregunto – que?
Quiero que me la chupes y no continuaré hasta que hagas lo que te pido – sabia que mela estaba jugando, estaba consciente de que si ese juego a mi madre no le gustaba. Mandaría todo al diablo y regresaríamos a casa, como si nada de lo que estábamos pasando sucediera.
Pero insolentemente mi jugada al parecer funcionó ya que sin dejar de mirarme mi madre se agachó y arrodillándose en mi delante, con cuidado tomo mi Bermuda y bajándome primero esta prenda. Dejó al aire mi erección la cual estaba atrapada en mi ropa interior.
Realmente parecía una carpa de circo de lo parado que estaba, a lo que intentando sacarme el malestar que tenía quise acomodar mi visible erección. Pero mi madre impidiéndomelo, empezó a acariciar mi pene por sobre la tela de mi bóxer y sacándome un gemido con sus movimientos pego mi pene a su cara y frotándose el mismo sobre su mejilla me dijo – esta tan caliente, que me quema la cara.
Desesperado deseaba que Continuara y para mi felicidad lo hizo, ya que tomó la cintura de mi ropa interior y bajándomelo. Logro liberar mi miembro que a esa altura estaba en todo su esplendor y dando algunos saltitos.
Sin que le dijera nada se metió parte de este a la boca y mientras comenzaba a chupármela con maestría, yo de a poco tomaba su cabeza por detrás e intentaba marcar el ritmo que deseaba de esa felación. Cerraba los ojos mientras me dejaba llevar por la emoción, de vez en cuando lograba abrirlos y veía la cabeza de mi madre que subía y bajaba con autentica desesperación.
Completamente excitado deje que ella me diera placer con su boca, hasta el punto que no pudiendo mas. Me corrí inevitablemente dentro de la misma, soltando tres chorros que salieron directamente disparados hacia su garganta. Cosa que provoco que tuviese que tragarse la corrida, para que así no tuviese que ahogarse con la misma.
Mientras que yo a pesar de haberme corrido conservaba cierta erección que para mi suerte no había bajado, una vez que salí del extacis en el cual me había sumergido vi a mi madre que se incorporándose y no dejaba de sonreír y mientras lo hacia llevaba sus manos a su espalda solo para que segundos después viera como su corpiño volaba y caía directamente sobre la tierra del en la cual nos hablábamos.
Ya con las tetas al aire jugo un rato con ellas para mi total deleite, primero hizo que sus pezones se chocaran para luego sin tapujo algunos se las amasara para hacerme ver el par de manjares que de seguro devoraría. Por lo que no haciéndola esperar por más tiempo me reuní con ella y tomando sus mamas, las devore en tanto las manoseaba con total deleite.
A esas alturas sus pezones están tan erectos que rayaban las Palmas de mis manos,a lo que no desaprovechando la oportunidad me hice de ellos y estirándoles concierta fuerza. Conseguí que arrojará verdaderos alaridos de placer.
Realmente estaba perdida de placer y eso lo note mas cuando me agache esta vez yo y bajándole los shorts vaqueros que llevaba, me lleve una grata sorpresa al ver que su tanga estaba mas que humedecida por lo excitada que estaba. Murmurando una plegaria por lo bajo tome su fina tanga y deshaciéndome de la penúltima prenda que portaba, deje a la vista su concha la cual estaba enchastrada por sus propios jugos vaginales.
Deleitándome con semejante manjar me fue inevitable el no probar su fruto prohibido y acercando mi cara a su ostra, comencé a comérmela de tal manera que mi madre no conteniéndose arrojaba gemidos que sonaban por todos lados. Mientras que usaba sus manos para empujar mas fuertemente a su entrepierna y así poder lamer mas perfectamente su concha.
Me estaba quedando sin aire, pero no me importaba ya que iba a ser un auténtico placer morir de esa manera. No obstante cuando pensé que me ahogaba definitivamente,mi madre me soltó y mientras caía de culo al piso vi como ella jadeaba a la vez que me decía entrecortadamente – soy tuya y puse a hacer conmigo lo que tú quieras.
Esas palabras me emocionaron de tal manera que no perdiendo el tiempo me paré y dándole un pequeño beso logré que apoyará sus manos sobre el árbol que tenía en su detrás, arqueando su cintura me esperaba ansiosa ya que llevo una de sus manos a su entrepierna y empezando a masturbarse me regaló una imagen que subía mi temperatura.
Pero no dejándole jugar mucho con su raja hice que colocará nuevamente su mano sobre el árbol y tomando su cintura apunte mi pene sobre su concha, la cual me quería recibir con entusiasmo ya que estaba tan abierta que no tuve problema en penetrarla.
Cielos– murmure apenas senti su cálida cueva, mientras que ella igual de excitada que yo arrojaba un fuerte gemido que para nuestra suerte no se escuchaba muy lejos. Ya acoplados me fue inevitable el no mover mis caderas de forma frenética y gracias a que ya me había corrido minutos atrás, estuve varios minutos dándole pija hasta que no pudiendo mas senti como ella se corría primero. Para luego yo seguirla de tal manera que deje su concha llena de mi leche.
Inevitablemente caí sobre ella y mientras recuperaba el aliento senti como su espalda mojada del sudor que le corría, yo también debia estar bastante sudado. Por lo que separándome de ella, le Di un último beso en su espalda a la vez que le preguntaba – quieres volver Ya?
Mi madre incorporándose se giro y viéndome con cierta complicidad, me dijo para mi total sorpresa – creo que tenemos algunos minutos más.
Terminamos teniendo relaciones un par de veces más, mi tercera corrida que fue menos abundante que las dos primeras la arroje entre sus tetas luego de que me masturbara con ellas. Mientras que la última que era casi nada, la arroje directamente sobre su cola.
Cuando terminamos parecía que realmente había caminado varios kilómetros de lo cansado que estaba, no obstante estaba tan feliz que ambos regresamos sonriendo y tomados de la mano. Sabiendo que algo nuevo nacía, pero que sería un secreto que solo ella y yo compartíamos
Narrado desde el punto de vista de Daniel
El resto de ese día no tuve oportunidad de abordar a mi madre en ningún momento,ya que la mayoría de el tiempo o se la pasaba con mi padre o jugando con mi pequeña hermana mientras que mi hermano se la pasaba encerrado en su mundo. Como se lo había prometido tampoco intente nada delante de mí familia, aunque debía admitir que ganas no me faltaban.
Lo que si me frustró bastante, es que recién tuve la chance de poder estar con ella cuando anocheció. Ya era bastante tarde cuando mis hermanos se fueron a dormir, seguido de mi padre que viéndose bastante agotado se fue directamente a la cama. Mi madre no obstante se hallaba en la cocina terminando de lavar algunas cosas que habíamos usamos para la cena, cuando no pudiendo contenerme más fui a buscarla.
Al verla de espaldas me deslice con suma cautela y logrando posicionarme en su detrás apoye de forma descarada mi cuerpo sobre el suyo y colando mi cabeza sobre su hombro, le susurre suavemente al oído – te deseo tanto, que me estoy volviendo loco.
Pensando que haría algo por alejarme espere su reacción, pero me sorprendió terriblemente cuando ella se recosto sobre mi cuerpo y apoyando su culo sobre mi aparato que a esa altura ya estaba mas que parado, me dijo con voz melosa – estoy Igual, pero por el bien de todos debemos contenernos.
Escuchar esa confesión me puso loco, así que mandando todo por el caño agarre los pliegues del vestido veraniego que portaba y metiéndole mano por debajo del mismo, conseguí levantar los pliegues de su prenda dejando su culo en pompapara mi total satisfacción.
Desesperado tome su tanga y se la baje hasta conseguir que quedará en sus pies y haciéndolo mismo con mi ropa deje mi reluciente pene a la vista de cualquiera, luego tome sin perder tiempo su cintura y logrando poner la cabeza de mi pene directamente sobre la entrada de su concha. La ensarte de tal manera, que empecé a cogérmela con mucha desesperación.
Ese polvo carecía de cariño alguno, puesto que en ese momento lo único que quería era deshacerme del deseo que sentía por ella y lograr marcar a su vez su cuerpo para así hacerle saber que de ahora en mas ella era de mi propiedad. Por lo que cogiendo como animales, arremetía contra ella mientras bufaba como un auténtico toro.
Mientras que ni madre a su vez recibía mis acometidas con agrado, en tanto soltaba varios gemidos que intentaba contener. No se cuantos minutos estuvimos acoplados, solo se que cuando logre correrme lo hice de tal manera que me asegure de llenarle la concha de semen.
Más calmado me fui saliendo de ella y apenas extraje mi miembro, note como de su cueva empezaba a salir parte del semen que le había regalado. Contento con ello vi que estaba bastante agitada, a lo que deseando hacerle mimos me acerqué a su cuello y dándole varios pequeños besos le susurre al mismo con anhelo –escapemos mañana.
Una vez que logró tranquilizarse giro su cuello y viéndome con cierta curiosidad,me pregunto – como lo haremos?
Mientras me ponía a pensar tomaba la ropa que había arrojado al suelo y colocándomela,vi de reojo como mi madre tomaba su tanga. Pero en vez de ponérsela de vuelta,se llevo la prenda a su entrepierna y sorprendiéndome, ella se puso a limpiar parte de los fluidos que le corrían por las piernas con su tanga.
Verla tan desinhibida en mi delante comenzó a excitarme otra vez, pero sabiendo del peligro que corríamos si volvíamos a la acción me aguante como pude. Luego trague el nudo que tenia atrapado en mi garganta y pensando como haríamos mañana para tener cierta libertad, me quedé en silencio.
Pasaron varios segundos y no encontraba una solución a nuestro problema, pensé que estábamos verdaderamente atrapados. Ese pensamiento hizo que pusiera una cara de total desilusión, no obstante esta meduro poco. Ya que de la nada mi madre soltó al aire – creo tener una solución.
Contento con sus palabras la tome de vuelta entre mis brazos y como si de una amorosa pareja nos tratásemos, le di un beso en la mejilla en tanto le decía - Cuéntame.
He visto que hay caminos para hacer senderismo que parten de diferentes lugares dela casa – comento – así que pensé que ir a caminar temprano por la mañana no,nos caería mas, que te parece?
Sorprendido que tuviese semejante idea, solté en repuesta – eres una genia mamá, los sabes?
Orgullosa por mis palabras se zafo de mis brazos y dando media vuelta, me soltó en tanto me miraba – bien ya que tenemos solución a nuestro problema, creo que deberíamos ir a dormir si queremos salir temprano mañana.
Realmente no quería dejarla ir, pero sabiendo que no podía hacer otra cosa. La deje pasar, no obstante cuando estaba pasando por mi costado de forma repentina le di una pequeña nalgada que la tomo por sorpresa.
Al principio pensé que me había excedido un poco y que de seguro se enojaría, pero no sucediendo eso y haciendo todo lo contrario. Ella me regaló una pequeña sonrisa y dándome a entender que le había gustado, se despidió diciéndome – nos vemos mañana temprano.
Ya en mi cuarto me recosté en mi cama y pensando en todo lo que había sucedido ese día, intente dormirme. Pero no consiguiéndolo por la ansiedad que me invadía, esa noche casi no pude cerrar mis ojos.
Había cabeceado en varias ocasiones, pero no pude dormir como debía. Así que sin darme cuenta amaneció y mi ansiedad solo aumento cuando de la nada, alguien toco mi puerta.
Sabiendo quien era me levanté con excesiva prisa y abriendo la puerta con desesperación,me topé con mi madre que a diferencia mía. Se notaba mas fresca que una lechuga.
Llevaba encima solo un short vaquero, unas zapatillas deportivas y una remera corta que mostraba gran parte de su firme vientre. Por lo que embelesado, solo pude escuchar que me decía – no estas listo aún?
Como un autómata moví mi cabeza de forma negativa, mientras ella desesperada agregaba – deja de mirarme y apúrate, que todavía nadie esta despierto.
Haciéndole caso con rapidez me coloque una remera, un pantalón corto y una zapatillas. A lo que listo la seguia en tanto notaba como movía su culo a cada paso que daba,no obstante cuando estaba a punto de darle un pellizco a tan perfecto trasero,de la nada una voz nos pregunto – a donde van?
Kevin mi hermano apareció de repente con un vaso de agua en su mano, mientras que mi madre completamente nerviosa no supo que responder. A lo que intentando verme lo más normal posible, le contesté enseguida – vimos algunos senderos por ahí y decidimos ir a dar una larga caminata – mi madre loca por los palabras me dio una mirada asesina, a lo que ignorando la le pregunté – quieres venir?
Kevin nos miro por algunos segundos y decidiendo no ir, soltó al pasar – no gracias.
Diciendo esto volvió a su cuarto y mientras mi mamá suspiraba con cierto alivio, me dijo con enojo – estas loco.
Lo tenía calculado – me excuse añadiendo – Kevin es bastante flojo para los deportes, así que deduje que si lo invitaba lo más seguro es que no vendría.
Sorprendida mi mamá no agrego mas y poniéndose en camino, me dijo – vamos antes de que se despierte alguien mas.
Segundos después ya estábamos afuera y tomando la primera senda que vimos, nos escabullimos por allí y notando como mi corazón me latía con fuerza a medida que avanzábamos. No podía quitar los ojos del esbelto cuerpo de mi madre.
No se cuanto tiempo anduvimos, solo se que no pudiendo aguantar mas me arroje sobre ella y tomando su mano la jale hasta lograr meterla en un espacio que habia entre varios árboles, que a su vez nos daba bastante intimidad.
Ya allí empecé a besarle con desenfreno y solo deje de empujarla, cuando su cuerpo choco contra un grueso tronco de uno de los árboles. Loco de deseo metí mis manos por debajo de su camiseta y llevándola directamente hasta sus pechos,intente tomarlas con su fino corpiño puesto.
Esto le robo un suspiro, cosa que me calentó mucho más a si que continuando tome su camiseta y sacándosela de encima. Le deje únicamente con el corpiño puesto.
Se veía increíblemente sensual, no obstante deseaba algo más que sexo en ese momento. Deseaba dominar la por completo, así que con cierta autoritaria le dije – chupa mela.
Sorprendida ella me pregunto – que?
Quiero que me la chupes y no continuaré hasta que hagas lo que te pido – sabia que mela estaba jugando, estaba consciente de que si ese juego a mi madre no le gustaba. Mandaría todo al diablo y regresaríamos a casa, como si nada de lo que estábamos pasando sucediera.
Pero insolentemente mi jugada al parecer funcionó ya que sin dejar de mirarme mi madre se agachó y arrodillándose en mi delante, con cuidado tomo mi Bermuda y bajándome primero esta prenda. Dejó al aire mi erección la cual estaba atrapada en mi ropa interior.
Realmente parecía una carpa de circo de lo parado que estaba, a lo que intentando sacarme el malestar que tenía quise acomodar mi visible erección. Pero mi madre impidiéndomelo, empezó a acariciar mi pene por sobre la tela de mi bóxer y sacándome un gemido con sus movimientos pego mi pene a su cara y frotándose el mismo sobre su mejilla me dijo – esta tan caliente, que me quema la cara.
Desesperado deseaba que Continuara y para mi felicidad lo hizo, ya que tomó la cintura de mi ropa interior y bajándomelo. Logro liberar mi miembro que a esa altura estaba en todo su esplendor y dando algunos saltitos.
Sin que le dijera nada se metió parte de este a la boca y mientras comenzaba a chupármela con maestría, yo de a poco tomaba su cabeza por detrás e intentaba marcar el ritmo que deseaba de esa felación. Cerraba los ojos mientras me dejaba llevar por la emoción, de vez en cuando lograba abrirlos y veía la cabeza de mi madre que subía y bajaba con autentica desesperación.
Completamente excitado deje que ella me diera placer con su boca, hasta el punto que no pudiendo mas. Me corrí inevitablemente dentro de la misma, soltando tres chorros que salieron directamente disparados hacia su garganta. Cosa que provoco que tuviese que tragarse la corrida, para que así no tuviese que ahogarse con la misma.
Mientras que yo a pesar de haberme corrido conservaba cierta erección que para mi suerte no había bajado, una vez que salí del extacis en el cual me había sumergido vi a mi madre que se incorporándose y no dejaba de sonreír y mientras lo hacia llevaba sus manos a su espalda solo para que segundos después viera como su corpiño volaba y caía directamente sobre la tierra del en la cual nos hablábamos.
Ya con las tetas al aire jugo un rato con ellas para mi total deleite, primero hizo que sus pezones se chocaran para luego sin tapujo algunos se las amasara para hacerme ver el par de manjares que de seguro devoraría. Por lo que no haciéndola esperar por más tiempo me reuní con ella y tomando sus mamas, las devore en tanto las manoseaba con total deleite.
A esas alturas sus pezones están tan erectos que rayaban las Palmas de mis manos,a lo que no desaprovechando la oportunidad me hice de ellos y estirándoles concierta fuerza. Conseguí que arrojará verdaderos alaridos de placer.
Realmente estaba perdida de placer y eso lo note mas cuando me agache esta vez yo y bajándole los shorts vaqueros que llevaba, me lleve una grata sorpresa al ver que su tanga estaba mas que humedecida por lo excitada que estaba. Murmurando una plegaria por lo bajo tome su fina tanga y deshaciéndome de la penúltima prenda que portaba, deje a la vista su concha la cual estaba enchastrada por sus propios jugos vaginales.
Deleitándome con semejante manjar me fue inevitable el no probar su fruto prohibido y acercando mi cara a su ostra, comencé a comérmela de tal manera que mi madre no conteniéndose arrojaba gemidos que sonaban por todos lados. Mientras que usaba sus manos para empujar mas fuertemente a su entrepierna y así poder lamer mas perfectamente su concha.
Me estaba quedando sin aire, pero no me importaba ya que iba a ser un auténtico placer morir de esa manera. No obstante cuando pensé que me ahogaba definitivamente,mi madre me soltó y mientras caía de culo al piso vi como ella jadeaba a la vez que me decía entrecortadamente – soy tuya y puse a hacer conmigo lo que tú quieras.
Esas palabras me emocionaron de tal manera que no perdiendo el tiempo me paré y dándole un pequeño beso logré que apoyará sus manos sobre el árbol que tenía en su detrás, arqueando su cintura me esperaba ansiosa ya que llevo una de sus manos a su entrepierna y empezando a masturbarse me regaló una imagen que subía mi temperatura.
Pero no dejándole jugar mucho con su raja hice que colocará nuevamente su mano sobre el árbol y tomando su cintura apunte mi pene sobre su concha, la cual me quería recibir con entusiasmo ya que estaba tan abierta que no tuve problema en penetrarla.
Cielos– murmure apenas senti su cálida cueva, mientras que ella igual de excitada que yo arrojaba un fuerte gemido que para nuestra suerte no se escuchaba muy lejos. Ya acoplados me fue inevitable el no mover mis caderas de forma frenética y gracias a que ya me había corrido minutos atrás, estuve varios minutos dándole pija hasta que no pudiendo mas senti como ella se corría primero. Para luego yo seguirla de tal manera que deje su concha llena de mi leche.
Inevitablemente caí sobre ella y mientras recuperaba el aliento senti como su espalda mojada del sudor que le corría, yo también debia estar bastante sudado. Por lo que separándome de ella, le Di un último beso en su espalda a la vez que le preguntaba – quieres volver Ya?
Mi madre incorporándose se giro y viéndome con cierta complicidad, me dijo para mi total sorpresa – creo que tenemos algunos minutos más.
Terminamos teniendo relaciones un par de veces más, mi tercera corrida que fue menos abundante que las dos primeras la arroje entre sus tetas luego de que me masturbara con ellas. Mientras que la última que era casi nada, la arroje directamente sobre su cola.
Cuando terminamos parecía que realmente había caminado varios kilómetros de lo cansado que estaba, no obstante estaba tan feliz que ambos regresamos sonriendo y tomados de la mano. Sabiendo que algo nuevo nacía, pero que sería un secreto que solo ella y yo compartíamos
5 comentarios - El secreto de mama 7
Pd: continua la historia de kevin porfa