Por primera vez, debido a las restricciones, no me tocaba trabajar en el bar en la nochebuena, así que mi novia Rakety y yo, tras cenar, y antes del toque de queda, fuimos a casa de nuestros amigos Claudia y Luis a tomar algo y pasar ya allí la noche. Además de ellos, estaba el hermano de Claudia, Guille. Luis iba ya bien borrachín, y encima a su hijo se lo habían llevado los padres de esta, por lo que intuimos que la noche iba a ser más divertida de lo que creíamos.
Claudia iba guapísima con una camisa roja, con buen escote redondo mostrando el canalillo maravilloso formado por sus grandes pechos operados y media manga, una falda negra, de tabla, hasta final de muslo, y unas medias transparentes. Mi novia iba con un vestido negro, ajustado marcando sus tetazas, con buen escote redondo y medias negras.
En el salón bailamos, sobre todo el hermano de Claudia con mi novia, charlamos y bebimos, sobre todo Luis, terminando de emborracharse bien. Cuando este comenzó a dar cabezazos de sueño y ya apenas le entendíamos lo que decía, los bailes de Rakety y Guille fueron más calentitos y Claudia y yo ya no solo charlábamos, también nos besábamos de vez en cuando y mi mano acariciaba sus piernas.
Subimos, Guille y yo a Luis a su habitación y al volver al salón Claudia y Rakety bailaban bien arrimadas, zorreando para ponernos más cachondos aún. Guille se colocó por la espalda de Rakety y yo por la de Claudia y bailamos con ellas. Nuestras manos agarraron sus tetazas y las manosearon bien mientras nos besábamos. Guille no aguanto más y se llevó a Rakety a una habitación. Gire a Claudia y baje mi cabeza para comenzar a besarla el canalillo, mientras apretaba más aun sus tetazas con mis manos.
Claudia me llevo y sentó en el sofá. Me dio un beso y se separó de mí, bailando muy sexy nuevamente. comenzó a subir y bajar la falda, cada vez un poco más arriba, hasta que me mostro que debajo, las medias llegaban hasta los muslos y que llevaba un tanguita rojo, con encaje y un liguero del mismo color sujetando las medias. Dio varias vueltas, pudiendo ver su culazo y el fino hilo del tanga. Se acabo quitando la falda y dio un par de vueltas bailando sexy, antes de apoyarse en el borde de la mesa. Me miró fijamente y empezó a chuparse un dedo. Bien mojado, lo bajo hasta su coño, lo metió por el tanga y comenzó a masturbarse el clítoris con él.
Ya no aguantaba más y me levante, dirigiéndome a ella. Me coloqué entre sus abiertas piernas, nos empezamos a besar y comencé a acariciar sus muslazos, poniéndome a mil el liguero. Ella seguía masturbándose y mis manos subieron desde sus muslos hasta sus tetazas. comencé a desabrocharla la camisa hasta quitársela. Se quedo con un sujetador rojo de encaje que alzaba y juntaba sus tetazas. Baje mi cabeza para comenzar a comérselas con el sujetador puesto, mientras se las apretaba con mis manos.
Me arrodillé y comencé a besarla los muslos. Coloqué sus piernas en mis hombros y la empecé a besar el clítoris, con el tanga tapándolo. Pase mi lengua despacito por él, hasta que se le marco bien en el mojado tanga. Tras unos mordiscos en la tela, la eche a un lado para empezar a lamérselo directamente. comencé despacio para ir subiendo la velocidad. Abrí bien su coño y metí mi lengua, moviéndola y jugando bien dentro. No pare hasta que ella me pidió que me levantara.
Me llevo al sofá, me sentó de nuevo y ella se colocó de rodillas a mi lado. Nos besamos, me desabrocho el pantalón y agarro mi polla masturbándome. Mi mano se metió por el tanga para masturbarla también. Cuando la tuve dura, Claudia se colocó a gatas y comenzó a hacer una mamada maravillosa. Mi mano, tras darla un par de azotes en su culazo, volvió a introducirse en el tanga para no dejar de masturbarla.
Cuando Claudia se corrió, me puso un condón, me quito el pantalón y el slip y se sentó sobre mí. Aparto su tanga, se metió mi polla y comenzó a dar ricos botecitos. Mi polla se sentía encantada de estar dentro de ella. Mis manos agarraron su cintura y no podía dejar de mirar como botaban sus grandes pechos. Metí nuevamente mi cabeza entre su canalillo y mis manos acariciaron sus piernas. Claudia apretaba mi cabeza contra sus pechos. Lea saque las tetas del sujetador y se las comí, con delicadeza, al principio, para ir poco a poco mordiéndoselas. Cuando sus pezones estaban muy duros, no dude en darla buenos bocados, haciéndola que chillase un poco por el dolor y el placer que sentía a la vez.
Nos levantamos y la hice colocarse de rodillas en el sofá, apoyándose en el cabecero. Me puse detrás de ella, aparte su tanga y comencé a follarla el culo. Pase mis manos para delante y agarre fuerte sus tetazas. Cada vez la follaba el culo un poco mas a fondo. Me incline sobre su espalda y, mientras apretaba fuerte sus tetazas, nos besamos. Cambié de agujero y volví a follarla el coño.
Cuando me iba a correr, Claudia se sentó en el sofá y yo me quede de pie. Me quito el condón y la paso por sus tetazas, notando sus duros pezones en mi glande. La metió entre ellas y las apretó, haciéndome una cubana. Mi polla se perdía dentro de sus enormes pechos y el placer era máximo. La avise que iba a correrme y entonces se la metió en la boca, donde explote llenándosela con mi semen. Esta se lo fue tragando y me dejo la polla bien limpia.
Tumbe a Claudia en el sofá y me eche sobre ella. Volvimos a besarnos, mientras acariciaba sus piernas. De vez en cuando bajaba la cabeza para poder morder más sus tetazas. Claudia agarro y acaricio mi culo. comencé a bajar besando su cuerpo, hasta llegar a su coño. Se lo volví a besar con el tanga puesto y luego lo aparte para hacerlo sin él. Me coloque a cuatro patas, entre sus piernas. Acaricié sus muslos y comencé a desabrochar el liguero de las medias. Le quité el tanga y volví a engancharla el tanga. Coloque sus piernas en mis hombros y me agache para comerla nuevamente su delicioso coño. Mis manos apretaban fuerte sus muslazos. No saque mi cabeza de entre sus piernas hasta q nuevamente se corrió.
Volví a tumbarme sobre ella, para besarnos y acariciarnos bien. Al rato me coloque de rodillas sobre su pecho, colocando mi polla entre sus tetazas. Esta las apretó y volvió a hacerme una gran cubana. Cuando mi polla estaba bien dura, me coloque de rodillas en el sofá y Claudia comenzó a masturbarme con sus pies cubiertos por las medias.
Me levanté, cogí una botella de cava que había abierta y me volví a sentar en el sofá. Claudia me puso un condón, se sentó sobre mí y comenzamos a follar. La eche cava en la boca y nos besamos intercambiándonos el líquido. comencé a verter cava por sus tetazas y pasé mi lengua por sus puntiagudos y mojados pezones. Claudia se giró y coloco su espalda contra mi pecho. Agarre fuerte sus tetazas y la folle el culo. Nos besábamos cada vez más apasionadamente.
Nos levantamos y fuimos a la mesa. La senté en ella y restregué sus tetazas con un pastel que había. Volvimos a follar y la comía las dulces tetazas, mientras acariciaba y agarraba fuerte sus muslos. La tumbe en la mesa y coloque sus piernas en mis hombros. Ahora además de su coño, la follaba el culo. Me encantaba, y ponía más a mil aun, ver como se movían sus tetazas cuando la follaba duro. Besaba y acariciaba sus piernas.
Volvimos al sofá y nos tumbamos ambos de lado, ella dándome la espalda. Levanté su pierna y metí mi polla por su empapadísimo coño. Follamos despacito, besándonos y acariciando sus tetazas. De vez en cuando la follaba el culo.
Claudia acabo sentándose encima de mí, conmigo tumbado y cabalgando sobre mi polla. Mis manos agarraban su cintura, pero de vez en cuando subían hasta sus tetazas. Esta se inclinaba cada poco, para que pudiera comérselas un rato, mientras la agarraba de su culazo. Claudia se metió mi polla en su culo y no paro de moverse, cada vez más rápido, hasta que me corrí con ella dentro.
Se volvió a tumbar sobre mi y estuvimos un rato besándonos y acariciándonos hasta que se coloco de rodillas en el suelo, me quito el condón y me dejo bien limpia la polla con su lengua.
Claudia se había ido al baño a limpiarse el cuerpo de lo que la había echado en él. Cuando entre al baño, estaba totalmente desnuda, sin las medias ni nada ya. Me arrime bien a su espalda, colocando mi paquete contra su culazo. Agarré su cintura y comencé a besarla el cuello mientras la miraba reflejada en el espejo. Su sonrisa me ponía caliente. Me arrodillé y comencé a acariciar, besar y morder su culazo. De vez en cuando se lo azotaba. Pasé una mano entre sus piernas y comencé a masturbarla con mi dedo corazón.
Me levante y pase mi mano para delante, continuando la masturbación, mientras nos besábamos. Con mi otra mano acariciaba sus tetazas. Claudia agarro fuerte mi polla y comenzó a masturbarme también. Con mi polla durísima, me puse un condón. La incline, apoyando esta sus manos en el lavabo, y coloco su culo bien hacia mí. Lo golpee con mi polla varias veces, antes d metérsela dentro y follárselo duro.
Sus tetazas se veían rebotar en el espejo y esa imagen me ponía más cachondo aún. Pase mis manos adelante, agarrando sus tetazas con fuerza. Claudia me miraba fijamente por el espejo, sonriéndome y dándome las gracias por hacérselo pasar tan bien.
La giré y, tras decirle que ella era la que me ponía a mil y hacia que yo lo diese todo, la levante una pierna, metí mi polla en su coño y volvimos a follar. Nos besábamos y con la otra mano seguía acariciando sus tetazas.
Cuando se corrió, Claudia se arrodillo y me quito el condón. Volvió a hacerme una mamada y una cubana hasta que me corrí en su boca. Tras limpiármela, nos besamos, acariciamos y acabamos yéndonos cada uno para nuestra habitación.
Mi novia aún estaba pasándoselo bien con Guille. Cuando me desperté, ya estaba a mi lado. Desayunamos con Luis y Claudia, pues Guille dormía y nos despedimos de ellos, yéndonos a nuestra casa.
Claudia iba guapísima con una camisa roja, con buen escote redondo mostrando el canalillo maravilloso formado por sus grandes pechos operados y media manga, una falda negra, de tabla, hasta final de muslo, y unas medias transparentes. Mi novia iba con un vestido negro, ajustado marcando sus tetazas, con buen escote redondo y medias negras.
En el salón bailamos, sobre todo el hermano de Claudia con mi novia, charlamos y bebimos, sobre todo Luis, terminando de emborracharse bien. Cuando este comenzó a dar cabezazos de sueño y ya apenas le entendíamos lo que decía, los bailes de Rakety y Guille fueron más calentitos y Claudia y yo ya no solo charlábamos, también nos besábamos de vez en cuando y mi mano acariciaba sus piernas.
Subimos, Guille y yo a Luis a su habitación y al volver al salón Claudia y Rakety bailaban bien arrimadas, zorreando para ponernos más cachondos aún. Guille se colocó por la espalda de Rakety y yo por la de Claudia y bailamos con ellas. Nuestras manos agarraron sus tetazas y las manosearon bien mientras nos besábamos. Guille no aguanto más y se llevó a Rakety a una habitación. Gire a Claudia y baje mi cabeza para comenzar a besarla el canalillo, mientras apretaba más aun sus tetazas con mis manos.
Claudia me llevo y sentó en el sofá. Me dio un beso y se separó de mí, bailando muy sexy nuevamente. comenzó a subir y bajar la falda, cada vez un poco más arriba, hasta que me mostro que debajo, las medias llegaban hasta los muslos y que llevaba un tanguita rojo, con encaje y un liguero del mismo color sujetando las medias. Dio varias vueltas, pudiendo ver su culazo y el fino hilo del tanga. Se acabo quitando la falda y dio un par de vueltas bailando sexy, antes de apoyarse en el borde de la mesa. Me miró fijamente y empezó a chuparse un dedo. Bien mojado, lo bajo hasta su coño, lo metió por el tanga y comenzó a masturbarse el clítoris con él.
Ya no aguantaba más y me levante, dirigiéndome a ella. Me coloqué entre sus abiertas piernas, nos empezamos a besar y comencé a acariciar sus muslazos, poniéndome a mil el liguero. Ella seguía masturbándose y mis manos subieron desde sus muslos hasta sus tetazas. comencé a desabrocharla la camisa hasta quitársela. Se quedo con un sujetador rojo de encaje que alzaba y juntaba sus tetazas. Baje mi cabeza para comenzar a comérselas con el sujetador puesto, mientras se las apretaba con mis manos.
Me arrodillé y comencé a besarla los muslos. Coloqué sus piernas en mis hombros y la empecé a besar el clítoris, con el tanga tapándolo. Pase mi lengua despacito por él, hasta que se le marco bien en el mojado tanga. Tras unos mordiscos en la tela, la eche a un lado para empezar a lamérselo directamente. comencé despacio para ir subiendo la velocidad. Abrí bien su coño y metí mi lengua, moviéndola y jugando bien dentro. No pare hasta que ella me pidió que me levantara.
Me llevo al sofá, me sentó de nuevo y ella se colocó de rodillas a mi lado. Nos besamos, me desabrocho el pantalón y agarro mi polla masturbándome. Mi mano se metió por el tanga para masturbarla también. Cuando la tuve dura, Claudia se colocó a gatas y comenzó a hacer una mamada maravillosa. Mi mano, tras darla un par de azotes en su culazo, volvió a introducirse en el tanga para no dejar de masturbarla.
Cuando Claudia se corrió, me puso un condón, me quito el pantalón y el slip y se sentó sobre mí. Aparto su tanga, se metió mi polla y comenzó a dar ricos botecitos. Mi polla se sentía encantada de estar dentro de ella. Mis manos agarraron su cintura y no podía dejar de mirar como botaban sus grandes pechos. Metí nuevamente mi cabeza entre su canalillo y mis manos acariciaron sus piernas. Claudia apretaba mi cabeza contra sus pechos. Lea saque las tetas del sujetador y se las comí, con delicadeza, al principio, para ir poco a poco mordiéndoselas. Cuando sus pezones estaban muy duros, no dude en darla buenos bocados, haciéndola que chillase un poco por el dolor y el placer que sentía a la vez.
Nos levantamos y la hice colocarse de rodillas en el sofá, apoyándose en el cabecero. Me puse detrás de ella, aparte su tanga y comencé a follarla el culo. Pase mis manos para delante y agarre fuerte sus tetazas. Cada vez la follaba el culo un poco mas a fondo. Me incline sobre su espalda y, mientras apretaba fuerte sus tetazas, nos besamos. Cambié de agujero y volví a follarla el coño.
Cuando me iba a correr, Claudia se sentó en el sofá y yo me quede de pie. Me quito el condón y la paso por sus tetazas, notando sus duros pezones en mi glande. La metió entre ellas y las apretó, haciéndome una cubana. Mi polla se perdía dentro de sus enormes pechos y el placer era máximo. La avise que iba a correrme y entonces se la metió en la boca, donde explote llenándosela con mi semen. Esta se lo fue tragando y me dejo la polla bien limpia.
Tumbe a Claudia en el sofá y me eche sobre ella. Volvimos a besarnos, mientras acariciaba sus piernas. De vez en cuando bajaba la cabeza para poder morder más sus tetazas. Claudia agarro y acaricio mi culo. comencé a bajar besando su cuerpo, hasta llegar a su coño. Se lo volví a besar con el tanga puesto y luego lo aparte para hacerlo sin él. Me coloque a cuatro patas, entre sus piernas. Acaricié sus muslos y comencé a desabrochar el liguero de las medias. Le quité el tanga y volví a engancharla el tanga. Coloque sus piernas en mis hombros y me agache para comerla nuevamente su delicioso coño. Mis manos apretaban fuerte sus muslazos. No saque mi cabeza de entre sus piernas hasta q nuevamente se corrió.
Volví a tumbarme sobre ella, para besarnos y acariciarnos bien. Al rato me coloque de rodillas sobre su pecho, colocando mi polla entre sus tetazas. Esta las apretó y volvió a hacerme una gran cubana. Cuando mi polla estaba bien dura, me coloque de rodillas en el sofá y Claudia comenzó a masturbarme con sus pies cubiertos por las medias.
Me levanté, cogí una botella de cava que había abierta y me volví a sentar en el sofá. Claudia me puso un condón, se sentó sobre mí y comenzamos a follar. La eche cava en la boca y nos besamos intercambiándonos el líquido. comencé a verter cava por sus tetazas y pasé mi lengua por sus puntiagudos y mojados pezones. Claudia se giró y coloco su espalda contra mi pecho. Agarre fuerte sus tetazas y la folle el culo. Nos besábamos cada vez más apasionadamente.
Nos levantamos y fuimos a la mesa. La senté en ella y restregué sus tetazas con un pastel que había. Volvimos a follar y la comía las dulces tetazas, mientras acariciaba y agarraba fuerte sus muslos. La tumbe en la mesa y coloque sus piernas en mis hombros. Ahora además de su coño, la follaba el culo. Me encantaba, y ponía más a mil aun, ver como se movían sus tetazas cuando la follaba duro. Besaba y acariciaba sus piernas.
Volvimos al sofá y nos tumbamos ambos de lado, ella dándome la espalda. Levanté su pierna y metí mi polla por su empapadísimo coño. Follamos despacito, besándonos y acariciando sus tetazas. De vez en cuando la follaba el culo.
Claudia acabo sentándose encima de mí, conmigo tumbado y cabalgando sobre mi polla. Mis manos agarraban su cintura, pero de vez en cuando subían hasta sus tetazas. Esta se inclinaba cada poco, para que pudiera comérselas un rato, mientras la agarraba de su culazo. Claudia se metió mi polla en su culo y no paro de moverse, cada vez más rápido, hasta que me corrí con ella dentro.
Se volvió a tumbar sobre mi y estuvimos un rato besándonos y acariciándonos hasta que se coloco de rodillas en el suelo, me quito el condón y me dejo bien limpia la polla con su lengua.
Claudia se había ido al baño a limpiarse el cuerpo de lo que la había echado en él. Cuando entre al baño, estaba totalmente desnuda, sin las medias ni nada ya. Me arrime bien a su espalda, colocando mi paquete contra su culazo. Agarré su cintura y comencé a besarla el cuello mientras la miraba reflejada en el espejo. Su sonrisa me ponía caliente. Me arrodillé y comencé a acariciar, besar y morder su culazo. De vez en cuando se lo azotaba. Pasé una mano entre sus piernas y comencé a masturbarla con mi dedo corazón.
Me levante y pase mi mano para delante, continuando la masturbación, mientras nos besábamos. Con mi otra mano acariciaba sus tetazas. Claudia agarro fuerte mi polla y comenzó a masturbarme también. Con mi polla durísima, me puse un condón. La incline, apoyando esta sus manos en el lavabo, y coloco su culo bien hacia mí. Lo golpee con mi polla varias veces, antes d metérsela dentro y follárselo duro.
Sus tetazas se veían rebotar en el espejo y esa imagen me ponía más cachondo aún. Pase mis manos adelante, agarrando sus tetazas con fuerza. Claudia me miraba fijamente por el espejo, sonriéndome y dándome las gracias por hacérselo pasar tan bien.
La giré y, tras decirle que ella era la que me ponía a mil y hacia que yo lo diese todo, la levante una pierna, metí mi polla en su coño y volvimos a follar. Nos besábamos y con la otra mano seguía acariciando sus tetazas.
Cuando se corrió, Claudia se arrodillo y me quito el condón. Volvió a hacerme una mamada y una cubana hasta que me corrí en su boca. Tras limpiármela, nos besamos, acariciamos y acabamos yéndonos cada uno para nuestra habitación.
Mi novia aún estaba pasándoselo bien con Guille. Cuando me desperté, ya estaba a mi lado. Desayunamos con Luis y Claudia, pues Guille dormía y nos despedimos de ellos, yéndonos a nuestra casa.
0 comentarios - Navidad 20/21: Nochebuena con Claudia