You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

El cornudo paga la renta 5

Continuación de los relatos:
http://www.poringa.net/posts/relatos/3920472/El-cornudo-paga-la-renta-1.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3926512/El-cornudo-paga-la-renta-2.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3932504/El-cornudo-paga-la-renta-3.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3935130/El-cornudo-paga-la-renta-4.html

Toda la situación con Pao me tenía tan excitado que me desquité con mi "amiga con beneficios" y a decir de ella "me reventaste el culo" y a decir mío "vas a cagar leche una semana"; que aún luego de eso, me fui a revisar a ver que hacía mi nueva putita y su marido. Ella me calentaba directo en lo sexual, pero el morbo que me estaba provocando ponerle los cuernos a mi nuevo vecino era algo nuevo para mí, y cada día más intenso. Cuando le estaba llenando el culo de leche a mi amiga, y me lo imaginé a Edgar chupando la concha de Pao llena de mi leche, como que me salió un lechazo extra, un adicional doble, como esos que te ofrecen en McDonals. Con la idea fija, ofrecía a mi amiga que se quede un rato más, que descanse y yo me fuí a ver las cámaras. Quería ver que hacían mis vecinos al irse de la fiesta. Me llevó un rato encontrar la parte de acción, pero desde el comienzo estaba interesante. Cuando los vi por última vez en casa él estaba como dubitativo, indeciso y desconfiado. Pero al llegar a su casa estaban "juguetones". Él más que ella. Le tocaba el culo, las tetas, la besaba y le comió la boca en la base de las escaleras. Mientras subían, él quedó detrás y le acariciaba las piernas y el orto. Llegaron al cuarto, él le dijo algo y empezó a desvestirla. Ella se dejaba hacer. La acomodó boca arriba en la cama y, besándole las piernas, fue subiendo hasta su concha. Ella, al principio, estaba dura como una muñeca, pero con el pasar de los segundos, se fue aflojando hasta que empezó a acariciar la cabeza de Edgar. Él le fue levantando las piernas y ella apoyó sus pies en los hombros de él. Levantaba la cadera ¡Edgar estaba siguiendo mis instrucciones! a mí se me empezó juntar sangre en la pija. Él la intentó dar vueltas y ella lo besó. Se estuvieron besando un rato y luego ella se acomodó boca a abajo con las piernas abiertas. Él se zambulló entre sus nalgas. Ella estiró los brazos y agarró las sábanas primero, luego con la almohada se tapó la cabeza. En un momento levantó su cola contra la cara de Edgar. Él se arrodilla y como que sacó su pito pero no se veía bien. Se puso sobre ella que como un gato se arrodilló en la cama frente a él. Lo empezó a besar y llevó una mano entre las piernas de Edgar. Otra vez estuvieron un rato en esa posición, besándose, hasta que él agachó su cabeza y la apoyó en el hombro de ella. Un instante después, Pao pasaba su mano contra la cama. Parece que el marido queda en esa posición respirando intensamente entonces ella lo empuja con suavidad, él cae boca abajo, ella de da un chirlo en sus nalgas a medio asomar de su pantalón de baño y se va. Vuelve un instante después, se acuesta y apaga la luz. Yo ya estaba con la pija a full. Volví a mi dormitorio y "ataque" a mi amiga que dormitaba y no entendía nada que pasaba. Como tiene un culo de monumento me lo ofreció, pero esta vez quería llenarle la concha de leche y cuando le dije que la iba a preñar acabo como cerda, acabó como Pao. Ahí si me dormí totalmente vaciado en la cajeta de mi amiga que al otro día me despertó para mostrarme como se le había pegado la sabana a la concha. Pero mi leche era para Pao. De repente me agarró una especie de sentimiento de incredulidad y resistencia: ¡como Edgar, el cornudo complaciente había osado tratar de coger a su mujer, MI HEMBRA!
Cuando me asomé a mirar el automóvil no estaba, pero al ir a la casa no había nadie. La semana había empezado y los dos trabajaban, algo relativamente extraño en mi vida. Todo ese día no dio sus frutos porque, al ver movimientos en el domicilio vecino, vi en las cámaras que estaban ambos. Un rato me debatí que tanto "tensar la cuerda", que pesaba más, mi calentura o un mal rato que puedan pasar ellos, si no les hacía un favor poniendo a cada uno en su lugar. Me traté de conformar pensando que desde que llegaron a la casa me la había cogido todos los dias, que Edgar había estrenado casa y cuernos el mismo día. Era muy inicio de la semana para empezar a socializar asi que me quedé en la casa a ver un poco de televisión, comer y tomar algo. Pero mi noche de "tranquilidad" fue interrumpida por el timbre. Abro y allí estaba Pao, con cara consternada. Cara de puta consternada. Entró y me besó. No le respondí porque sabiendo que lo besa al marido ni bien me terminó de mamar la pija a mí, me daba un poco de repulsión. Me abrazó y sollozaba.
P: No sé qué hacer
Y: Respecto a que bebe
P: Edgar sospecha. Discutimos recién
Y: ¿Y qué haces aca? ¿No te parece que vas a empeorar las cosas?
P: No sabe que estoy aca. Salí en el auto, lo dejé a la vuelta y vine caminando. Pero eso no es el problema
Y: ¿Ha no?
P: No. El problema es que no te quiero dejar a vos ni a él. Lo amo con locura, Edgar es el hombre perfecto... Pero vos tenes esto
Y me agarro la pija
P: No sé qué me pasa con vos
Y sola se puso de rodillas
P: Con esto
Ya la tenía en la mano Se la metió todo lo que pudo en la boca, pero el solo contacto de su mano y verla en esa pose ya iniciaba el proceso de erección. Se la sacó de la boca
P: No puede ser que no me entre... lo voy a lograr, algún día
La chupó un poco más y continuó diciendo:
P: Desde que llegamos aca que no tuve sexo con mi marido... no sé, no puedo. Aparte que me rompiste toda. No sé, no me nace. No me excito como con vos. Me diste vuelta hijo de puta
Se iba aponer la verga en la boca otra vez y la tomé de los cabellos y la hice mirarme
Y: No me mientas putita, no me digas que no tuviste sexo con el cornudo
P: No le digas asi, me siento mal
Y: Es que ahí está tu error, Edgar será un buen marido, pero no es un buen hombre, es un hombrecito, un maridito.. no soy malo, te digo lo que se nota. Alguna vez cogiste con él como conmigo
Me masajeaba la verga y trataba de hacerla llegar a su boca. Yo sostenía su cabeza y mi pelvis a la distancia justa para que no lo logre.
P: DEJAME CHUPARLA POR FAVOOORRRR
Se la metí en la boca hasta que se ahogó. Tosió. Empujó con las manos y ahí la solté
P: No me podes tratar asi.
Y: ¿No la querías chupar?
P: SI
Y: Chupala entonces
Y la volvía a atorar de pija
Y: No me mientas putita, ¿te lo cogiste al cornudo?
La solté. Jadeaba. Babeaba. Tosía
P: No papi, te juro que no. ¿Queres que te diga la verdad?
Como respuesta solo la miré
P: La verdad, la verdad, todo el sexo que tuvimos fue que él me dio sexo oral a mí, y todas las veces con tu lechita adentro... ay me caliento de solo acordarme
Se empezó a desprender su jean y metió su mano. Me la volvió a chupar y se tocaba
P: y yo lo masturbé a él... ¿sabes? él no la tiene como vos.. es hermosa
Me la chupó un poco mas
P: la tiene un poco chica, y me excita sentirla en mi mano tan chiquita comparada con la tuya
Se paró. Me tomó de la mano y me llevó hasta el sillón. Me bajó mi short y mientras se bajaba sus pantalones y se ponía en cuatro contra el respaldo siguió
P: Tu leche me calienta, me excita, la necesito, me gusta su olor, su sabor, como se siente dentro.... metemela, por favor metemela
Se la metí. Toda pero muy lentamente
P: asi papito, asi, asi, si si metemela.
Retrocedí
P: no, no por favor no, no me la saques
La complac
íP: Su su leche no me gustaaaa haaa no sé por queeeee sisisisi asi toda, me siento mal por el haaaa sisisis, pero me desagrada su semen
Se la saqué. Se la froté por la concha. Le froté el ano
P: Siiiiiiii, hasta eso me calienta por tu culpa... Nunca lo imaginé y ahora me calienta imaginar que me puedas meter toda tu cosa en mi colita, pero ahora cojeme por favor, no me hagas rogarte, no me la saques.
Se la mandé por la concha hasta el fondo otra vez con lo que le arranque una espacie de gruñido mezcla de ronroneo, pero con sus propios jugos que habían quedado en el ano se lo empecé a masajear, con mi pulgar, presionando suavemente y entrando lentamente
P: hijo de putaaaaaaa como me gustaaaaa
Y: ¿Sabes que? la primera vez que te haga el culo, va a ser frente a tu marido
P: ay ay ay ay
Y se puso una mano en la cajeta y trató de frenar el squirt
Como si lo hubiera convocado, sonó el timbre. Ella se sentó en el sillón y se tapaba la cara
P: Perdoname, que desastre, nunca me paso
Yo estaba a mil, no había acabado.
El timbre sonó otra vez
Y: ¿Nunca te pasó?
P: No, no no, que vergüenza, te juro que no
Otra vez el timbre
Y: ¿Por que "que verguenza"? esta re bien, veni, cometela que te voy a dar tu lechita
Timbre
La dejé sentada, enredada en sus ropas y muy molesto, acomodando las mías, fuía a la puerta.
Al abrir ahí estaba Edgar. En un primer momento sumamente enojado él también, pero al verme a mi, sudado y visiblemente molesto también, como dicen "bajó un cambio" y en un tono cortante me dijo "necesito hablar con vos"
Y. ¡No puedo Edgar, ahora no! ¡tenes un detector para cortarme los polvos!¡estaba grachando y otra vez me interrumpis! ¿va a ser siempre asi?
Un poco avergonzado contesto
E: Perdón, me pareció escuchar algo ... hasta pensé mal.. pero bueno, no viene al caso, encontré algo en la casa y quería preguntarte de que se trata
Y: Mañana voy Edgar, dejame literalmente "ACABAR" con lo que estoy haciendo ¿si? ¿puede ser? Pensó un instante y luego prosiguió
E: ¿Me podes avisar ahora cuando te desocupes? Quiero aprovechar que no está Pao para hablar de ese tema y definir si seguimos en la casa o no.
Trató de sonar decidido, pero le demostré que no es su estilo.
Y: Mañana voy
Y cerré la puerta dejándolo parado ahí afuera. Pao iba a pagar la interrupción del cornudo





0 comentarios - El cornudo paga la renta 5