Después del episodio de Néstor el día transcurrió lo más bien. Los adolescentes de enfrente cruzaron a saludar cuando venían a la pileta, son re simpáticos. El de rulos se llama Pedro, el de barbita es Francisco, y la mina se llama Martina. Estudian periodismo, son de Córdoba, y se pegaron una escapada para conocer Federación.
Pedro no dejaba de mirarme las lolas. Pude notar un bulto en su short, pero no se notaba tanto como el de Néstor. Fran, en cambio, no parecía calentarse conmigo y se limito a charlar de deportes con mi marido y Martina, que aparentemente sabe mucho de fútbol. La anduve chusmeando y no tiene un mal culo, de tetas medio flojita.
Fue cayendo el sol, y con Marce nos metimos adentro para darnos una ducha. Pedro nos ofreció comer un asado en una parrilla de la zona, así que saldremos los 5.
Estaba saliendo de la ducha cuando apareció Marcelo con lentes de sol, peinado para atrás y con una cadenita que había dejado en la mesa. Lo estaba imitando a Néstor, y no pude evitar reírme
-como andas preciosa? - dijo con una tonadita entrerriana
-que haces así disfrazado? - reí tentada
-te vengo a dar pija - respondió sacándose la malla. Estaba duro, y no pude evitar calentarme
Le hice un pete, primero despacio, pero subiendo la intensidad de a poco. Su verga fue creciendo en mi boca, mientras esforzaba mi garganta para tragarla toda. No era muy larga, sino más bien gruesa, pero igualmente me costaba comerla toda. Cuando no aguante más, me acosté en la cama abriendo las piernas. Mi concha estaba perfectamente depilada para la ocasión
Marce me la enterró con ganas, se notaba que teníamos un tiempo sin coger. Podía sentir mi vagina ensancharse mientras su pija me penetraba. Tomándome del cuello, se acercó a mí y me preguntó
-te gusta la pija de Néstor?
-no Marcelo, me gusta la tuya
-admitilo, se la estabas mirando hoy
Me quedé muda, no iba a admitirlo pero tampoco quería rechazarlo
-te encantaría tener esa verga cabezona cogiendote ahora
Me empezó a coger más duro, como salvaje. Su verga parecía latir y mi concha estaba a punto de explotar. Acabamos a la vez, y en un grito, decidí soltarlo
-Si! Si dios, me encanta su verga
Habiendo cumplido su misión cayó rendido encima mío y me besó
-amor - intenté justificarme
-ale, no tengo problema con que te calienten otros tipos. Una de mis fantasías es ver como te coge otro, incluso aunque me insultes y me basurees, me calienta más
-en serio te gusta eso? Me estás pidiendo que te sea infiel?
-no exactamente eso, pero otros detalles si. Me encanta que te vistas como puta, que te dejes rozar o apoyar por otros hombres, que te garchen con la mirada
-no sé si soy ese tipo de mina - respondí confundida
-no lo hagas si no querés, sólo te cuento mis morbos
Él entro a la ducha, y yo me quedé pensando. No me disgustaba la idea, había un poco de morbo en el hecho de sentirme observada, y tampoco es que no tuviera mucho que mostrar. Decidí hacerle caso, me puse un vestido suelto, sin ropa interior, y el pareció alegrarse cuando me vio. Nos juntamos con los chicos de enfrente y marchamos a pie hacia una parrilla que queda en el centro, se llamaba Casablanca. Pedimos una parrillada completa para cinco, y mientras estábamos conversando sentí como algo rozaba mi vagina. Parecía una mano, pero era diferente.
La charla siguió y terminé por darme cuenta que lo que me estaba masturbando era un pie. Pero Marcelo estaba a mi derecha, no podría ser el. Pedro estaba en la punta de la mesa, a mi izquierda, pero es complicado girar la pierna para tocarme. Francisco estaba demasiado lejos como para hacerlo, por lo que solo quedaba una opción. Levanté la vista, y comprendí todo. Martina me estaba masturbando...
Asi terminamos este capítulo!! Qué les pareció? Estaba pensando en conseguir fotos de Instagram para ilustrar a los personajes, así que dejen su opinión en los comentarios
Les gustaría leer otros relatos que no sean cuckold? Quieren un relato totalmente gratis para ustedes solos? Escríbanme a mechaargenta@gmail.com, y díganme con quién y sobre qué les gustaría el relato!!
Los amo bombonazos!!
Mecha 😉
Pedro no dejaba de mirarme las lolas. Pude notar un bulto en su short, pero no se notaba tanto como el de Néstor. Fran, en cambio, no parecía calentarse conmigo y se limito a charlar de deportes con mi marido y Martina, que aparentemente sabe mucho de fútbol. La anduve chusmeando y no tiene un mal culo, de tetas medio flojita.
Fue cayendo el sol, y con Marce nos metimos adentro para darnos una ducha. Pedro nos ofreció comer un asado en una parrilla de la zona, así que saldremos los 5.
Estaba saliendo de la ducha cuando apareció Marcelo con lentes de sol, peinado para atrás y con una cadenita que había dejado en la mesa. Lo estaba imitando a Néstor, y no pude evitar reírme
-como andas preciosa? - dijo con una tonadita entrerriana
-que haces así disfrazado? - reí tentada
-te vengo a dar pija - respondió sacándose la malla. Estaba duro, y no pude evitar calentarme
Le hice un pete, primero despacio, pero subiendo la intensidad de a poco. Su verga fue creciendo en mi boca, mientras esforzaba mi garganta para tragarla toda. No era muy larga, sino más bien gruesa, pero igualmente me costaba comerla toda. Cuando no aguante más, me acosté en la cama abriendo las piernas. Mi concha estaba perfectamente depilada para la ocasión
Marce me la enterró con ganas, se notaba que teníamos un tiempo sin coger. Podía sentir mi vagina ensancharse mientras su pija me penetraba. Tomándome del cuello, se acercó a mí y me preguntó
-te gusta la pija de Néstor?
-no Marcelo, me gusta la tuya
-admitilo, se la estabas mirando hoy
Me quedé muda, no iba a admitirlo pero tampoco quería rechazarlo
-te encantaría tener esa verga cabezona cogiendote ahora
Me empezó a coger más duro, como salvaje. Su verga parecía latir y mi concha estaba a punto de explotar. Acabamos a la vez, y en un grito, decidí soltarlo
-Si! Si dios, me encanta su verga
Habiendo cumplido su misión cayó rendido encima mío y me besó
-amor - intenté justificarme
-ale, no tengo problema con que te calienten otros tipos. Una de mis fantasías es ver como te coge otro, incluso aunque me insultes y me basurees, me calienta más
-en serio te gusta eso? Me estás pidiendo que te sea infiel?
-no exactamente eso, pero otros detalles si. Me encanta que te vistas como puta, que te dejes rozar o apoyar por otros hombres, que te garchen con la mirada
-no sé si soy ese tipo de mina - respondí confundida
-no lo hagas si no querés, sólo te cuento mis morbos
Él entro a la ducha, y yo me quedé pensando. No me disgustaba la idea, había un poco de morbo en el hecho de sentirme observada, y tampoco es que no tuviera mucho que mostrar. Decidí hacerle caso, me puse un vestido suelto, sin ropa interior, y el pareció alegrarse cuando me vio. Nos juntamos con los chicos de enfrente y marchamos a pie hacia una parrilla que queda en el centro, se llamaba Casablanca. Pedimos una parrillada completa para cinco, y mientras estábamos conversando sentí como algo rozaba mi vagina. Parecía una mano, pero era diferente.
La charla siguió y terminé por darme cuenta que lo que me estaba masturbando era un pie. Pero Marcelo estaba a mi derecha, no podría ser el. Pedro estaba en la punta de la mesa, a mi izquierda, pero es complicado girar la pierna para tocarme. Francisco estaba demasiado lejos como para hacerlo, por lo que solo quedaba una opción. Levanté la vista, y comprendí todo. Martina me estaba masturbando...
Asi terminamos este capítulo!! Qué les pareció? Estaba pensando en conseguir fotos de Instagram para ilustrar a los personajes, así que dejen su opinión en los comentarios
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Mecha 😉
5 comentarios - Las vacaciones de Alejandra [capitulo 2]