Travesuras a mi plomero

Hola a todos, como están? Esta es mi primer publicación, comenzaré por decirles que me llamo loquita Rodríguez obvio no les diría mi verdadero nombre, soy una mujer joven de 22 años y casada desde hace dos, mi esposo tiene un trabajo donde el está 15 días en una plataforma de Diésel y 15 días aquí en casa, como notarán paso mucho tiempo sola, como toda mujer tengo algunas necesidades y fantasías que de alguna manera yo tenía que satisfacer, tenía que buscar una forma de la cual no me sintiera culpable por engañar a mi esposo de cierta forma. A continuación les dejo una foto de como soy físicamente obvio tapando mi rostro. No soy muy buena describiendome así que mejor vean ustedes mismos en esta foto que me tomé está navidad.


Como les comentaba anteriormente tengo algunas necesidades como mujer, en ocasiones me despertaba con ganas de estar con mi esposo, de que me hiciera el amor, pero el no estaba en casa, aún le faltaban muchos días por bajar de la plataforma. Se me ocurrían muchas cosas pero con todas me sentiría muy culpable. Hasta que se me ocurrió decirle a mi esposo que ya estaba cansada de manejar y cargar el mandado que a diario hacia así que el como tiene un buen sueldo me contestó a un chófer. Hubo varios prospectos que obvio yo sería la que elegiría así que por curiosidad eligí a Don Alfredo, un señor casado de 52 años de edad. El fue el elegido. Ya con un par de semanas de trabajo nos hicimos buenos amigos, el me contaba sobre su esposa y sus hijas, me caía muy bien, mi plan iba perfecto. Así que le hice notar que confianza bastante en el dándole un juego de las llaves de mi casa para que ya no estuviera esperando afuera. Cierto día, Sábado para ser exacta sentía yo que era el día perfecto para cumplir una de mis fantasías más fuertes.
Eran las 6:50 de la mañana a 10 minutos de que el señor Alfredo llegara a casa, siempre que el llega va a mi cuarto al que siempre lo tengo cerrado con seguro, me toca la puerta y me avisa que ya llegó. Ese día para llevar a cabo mi fantasía deje la puerta entreabierta justo donde se pudiera ver mi cama, me quité mi pijama y me deje solo mi calzón negro favorito con el que me gusta bastante como me veo y un Bra de color púrpura y me recosté esperando a que el llegara. Cuando escuché que abrió la puerta de abajo me recosté boca abajo y con una pierna arriba para verme bastante bien, escuché que el venía subiendo las escaleras por el ruido de sus zapatos entonces trate de no moverme tanto para disimular que estaba dormida, se escuchaba un silencio enorme, sabía yo que el estaba observandome, escuché levemente como el abrió aún más la puerta y entraba tratando de no hacer tanto ruido con sus zapatos pero era muy notorio que lo tenía perplejo, me estaba observando en calzones, yo estaba bastante caliente ya al saber todo lo que el se estaba imaginándo, escuche en varias ocasiones como el estaba tomandome fotos, eso no era parte del plan pero al saber que el es casado sabía que las iba a borrar llegando a su casa, así que deje que tomara las fotos que el creyera necesario hasta yo me acomodaba en varias poses haciendole aún saber a el que seguía dormida. Cuando escuché que el salió del cuarto me desperté y comencé a cambiarme. Salí a la cocina y ahí estaba el supuse viendo mis fotos por que inmediatamente guardó su teléfono. Lo saludé como de costumbre sentía como el estaba hirviendo aún después de haber visto a su patrona joven en calzones. para salir de dudas sobre si aún tenía las fotos decidí inventar que se me había terminado mi plan telefónico y tenía que hacerle una llamada a mi esposo, le pedí su teléfono que para mí sorpresa era un teléfono de los más nuevos, pensé yo que traía uno de esos viejitos, el me lo presto no muy convencido, lo veía muy nervioso así que para mí era obvio que tenía mis Fotos ahí. Antes de haber la llamada lo mandé a traerme huevos y jamón para desayunar, la tienda estaba a 15 minutos de mi casa, no se quería ir sin su teléfono pero le dije que no se preocupara, que solo le llamaba a mi esposo y ahí le dejaba su teléfono, el se fue a la tienda y comencé a revisar su galería, encontré muchas fotos de ese momento tan mágico para mí, no desaprovechó la oportunidad don Alfredo, es tan inocente que ni el flash ni el sonido le quitó, pero así me cumplí mi fantasía de que alguien que no fuera mi esposo me viera en calzones. No me voy sin antes compartir algunas de las fotos que don Alfredo me tomó, tan lindo el tuvo la delicadeza de no fotografíar mi rostro.






Espero les haya gustado está primer historia que les comparto, la siguiente se me ocurre lo esperaré igual haciéndome la dormida pero sin calzones. Bueno espero mejor que ustedes me den ideas de como hacer que mi plomero se caliente y yo sentir placer al hacerlo.