Otra experiencia con mi tía parte 3

Antes de empezar les dejo 3 fotos más de mi tía porque me las estuvieron pidiendo mucho jeje.

Bien ahora sí voy a seguir con este relato
Luego de dormir toda la noche juntos totalmente desnudos nos despertamos temprano y ver nuestros cuerpos nos volvió a calentar. Eran las 8 y teníamos que llevar a los niños a las 10:30. Teníamos 2 horitas para arrancar muy bien el día.
Le digo la hora y sin darme tiempo a nada se sube arriba mío y empieza a besarme.
-me siento una adolescente con vos no me puedo controlar sobri
+Quisiera hacerte mía todo el día tia, mira como me pusiste ya.
Le puse su mano en mi chota y empezó a masturbarme mientras besaba mi cuello. La empecé a masturbar su concha estaba ardiendo, acaricie su clítoris y comenzó a gemir. Nuestros cuerpos estaban deseando sexo. Cada uno de sus poros desprendían sensualidad, yo le acariciaba con mi otra mano la espalda, apretaba sus tetas que entraban perfectamente en mi mano. Y ella no paraba de gemir, me hablaba al oído. Me decía:3
-quiero tu pija, cogeme cómo nunca por favor poneme contra la pared y haceme tuya.
Entonces me volví loco, la bese por todas partes y la levanté. Mientras nos moviamos hacía la pared la seguía besando y le separaba las nalgas. La apoyé contra la pared y la di vuelta. Estaba totalmente entregada a mi poronga, quería que se la meta entera. Busque su vagina y empecé a rozarla con mi verga, acariciaba su clítoris con ella. Me gritaba que se la ponga. No aguante más y lo hice entro toda. Entraba y salía con velocidad, le metía mi mano en la boca para tapar sus gritos y que no despierte a los nenes. Ella me chupaba los dedos. Me decía:
-que rico seguí así por favor no pares no pares me encanta
No tienen idea de la voz que pone cuando está caliente, le explotaría la pija a cualquier hombre. No paraba de cogerla. La puse en la cama para darle en 4. Parecía una gatita en celo. Su postura era perfecta. Se la volví a poner y a tocar su cadera y sus gomas. Le daba nalgadas.
Luego de unos minutos se la saqué y se puso prácticamente acostada de espaldas, me dijo que es su pose favorita. Se la puse y sus gritos ahí si que fueron incontrolables. A penas la metí me di cuenta por qué era su pose favorita, era increíble lo que entraba mi pija ahí, y ella gritaba y gozaba
-Dame más con todo por dios no pares
Y yo seguía no paraba. Sus gritos siguieron y unos segundos después vino un gran gemido y note cómo se corrió en mi pija. Fue increíble.
Yo pensé que todavía no iba a acabar hasta que me dijo con una voz que me volvió loco
-donde me querés acabar sobrinito?
Cuando me dijo eso toda mi leche acumulada no tarde nada en empaparle la cola y la espalda, ella me miraba con una cara de puta tremenda mordiéndose el labio.
Espero que les haya gustado la parte 3, si quieren más no olviden comentar y votar estos relatos. Un saludo