muy sumisa en navidad

Hola chicos hoy quería contarles el regalo que recibí de navidad, no me lo van a creer pero cuando llegue esa noche luego de realizar unas compras la casa tenia un ambiente un tanto romántico, mi esposo había salido temprano y me había dicho que no sabia muy bien a que hora regresaría así que supuse estaría sola hasta casi llegada las 12, deje las llaves en la mesa junto a la puerta y me dispuse a poner los regalos en el árbol en este ya habían varios que en la mañana no estaban, vi una nota en el árbol la letra era la de mi esposo donde decía que subiera a mi cuarto cuando llegara ya que había dejado un detalle en el para mi, subí un poco intrigada mi esposo no es de los que son muy detallistas y últimamente estábamos muy distanciados, al entrar a la habitación vi una caja sobre la cama la abrí y dentro había un baby doll negro de una seda fina junto a el una nota que decía póntelo me cambie e hice lo que me dijo me cambie y me recosté en la cama, luego de unos minutos vi a mi esposo entrar solo llevaba puesto unos pantalones  en sus manos traía unas sogas, se acerco a mi y me miro de pies a cabeza, nunca había visto a mi esposo actuar de esta forma, cuando intente hablar me detuvo y me dijo, , hoy te voy a demostrar el hombre que tienes junto a ti y como regalo de navidad dejare que tengas tus aventuras 


Me tomo de las manos y comenzó a atarme dejando a su disposición mi cuerpo para el, la cuerda era suave y los nudos que hacia hacían presión en puntos de mi cuerpo que me de dejaban una sensación de placer, termino de atarme y se aseguro que no pudiera moverme ni desatarme, tomo el baby doll y  lo rompió dejando mis senos descubiertos y una diminuta tanga que solo tapaba un poco de mi sexo, se acerco y con sus dedos me apretó los pezones, lo tiraba  y pellizcaba la sensación entre dolor y placer me estaba enloqueciendo sentía como mi sexo palpitaba y como la diminuta tela que lo cubría quedaba empapada en mis fluidos, se acerco y tomo mis pezones entre sus labios los chupaba desesperado los mordía y dejaba marcas en mi piel, mientras su mano bajo a mi ansiado sexo húmedo, froto sus dedos sobre la tela sintiendo mi humedad, levanto su mirada y me dijo,- mmm como me gusta que estés así de mojada, ahora déjame escuchar la puta que tienes dentro, terminado de decir eso tomo mis tanga y la saco me hizo excitar mucho mas, grite y gemí de dolor y placer quería sentirlo ya dentro pero sabia que me haría sufrir, me miro y tomo la tanga la olio y la metió en mi boca, me miro toda y lo siguiente que sentí fue como me dio la vuelta quedando boca abajo levanto mi culo dejándolo a su disposición y comenzó a darme unas deliciosas nalgadas dejando mi trasero rojo y caliente, escuche como bajo el cierre de su pantalón y sentí su verga caliente y erecta entre mis nalgas, luego sentí como con su miembro me golpeaba mi ya hinchada y mojada vagina quería sentirlo ya e intente decirle pero el aun no me daría ese placer comenzó a frotar su verga por mi vagina y mi cola  dejándome mas mojada con sus fluidos y los míos no paraba de darme nalgadas y de apretar mis pezones dejándolos completamente sensibles mi espalda tenia innumerables mordidas y chupones y yo solo podía gemir del placer de sentirme dominada, luego de un rato de jugar y de marcarme sentí como me lleno de saliva mi culo  y sin previo aviso introdujo toda su verga en el me deje caer en la cama y un gritó salió de mi boca el no dejaba de embestirme y el dolor paso a ser placer abrió mas mis piernas y en un momento sentí como introdujo un vibrador en mi vagina haciéndome dar un grito y gemido de placer el vibrador se sentía muy grande y sentía que rasgaba un poco mi vagina pero la sensación era deliciosa sentía como llegaba a uno y otro orgasmo dejando todo mojado saco ese vibrador e introdujo otro que tenia como puntas haciéndome sentir mas placer paro de bombear mi cola  salió de el y me dio la vuelta quedando baca arriba, me miro a la cara y me dice, – que rico culo tienes puta , ahora quiero que la chupes hasta que me dejes seco, se puso sobre mi cara quedando en posición de 69, no me dio tiempo solo abrió mi boca saco la tanga y metió su verga, empezó a embestir y yo como podía chupaba y lamia, su boca se acerco a mi clítoris lo tomo en un mordisco y lametazos que me hacían sentir llegar a un orgasmo de lo bien que lo hacia


Luego del delicioso 69 que dejo mi cara llena de leche se levanto y me dijo,- ahora quiero que llegues para mi lo mas rico que puedas puta-, me tiro al borde de la cama y comenzó a meter vibrador por vibrador aumentando de tamaño tenia cuatro el ultimo era del tamaño de un brazo, cada vez me sentía mas mojada  se sentía muy rico como cada vez mi vagina era perforada por uno mas grande y grueso, llego el turno del mas grande pero me giro y antes de introducirlo metió su verga en mi cola  y me dijo, – a ver si aguantas-, me dio una nalgada que mi hizo gritar y enseguida metió el vibrador comenzó a embestir al tiempo que el vibrador sentía como salía de mi fluidos y mas fluidos gemia y gemia,- ahhhh si sigue ahhh rómpeme el culo sigue, sigue ahhh-, sentía como mi voz ya no me daba mas no sabia cuanto llevábamos teniendo sexo pero sabia que ya pasaba de media noche o estaba cerca, cada vez me daba mas duro sentí como mis paredes se contraían y un fuerte orgasmo llegaba, nunca nadie me había echo sentir así, cuando de un momento a otro sentí como salía de mi la tan ansiada lluvia dorada el mayor orgasmo que había tenido en mucho tiempo el no dejaba de embestirme y me decía, – que rico puta me estas lavando, sabia que eras la mejor puta me encanta como llegas-, con cada embestida que daba salían mas y mas fluidos sentía como me daba cada vez mas rápido hasta que lleno mi cola  de su semen se quedo dentro de mi sintiendo como vacío todo, salió de mi y saco el vibrador el cual acerco a mi cara y dijo,- lámelo déjalo limpio y lo hice como una vil sumisa lo lamí todo viendo el gran tamaño que tenia luego de eso desato las cuerdas y me dejo descansar no se en que momento me quede dormida solo sentía que había tenido el mejor sexo navideño con mie esposo