Cuatro
Elresto del día me la pase esquivando a Tammy debido al arrebato de vergüenza queme inundaba cada vez que la veia, ya que de solo mirarla los recuerdos de losucedido en la piscina me asaltaban casi de inmediato.
Loque restaba del día fue así, yo escondiéndome y ella junto a mis padreshablando de cosas banales y de la fiesta de esa noche a la cual no había sidoinvitado, según lo que estaba escuchando del hombre en cuestión. Habia sido uncompañero de mi padre en sus años de universidad, pero que con el correr deltiempo habían perdido contacto.
Llegandoa medio día almorzamos unas hamburguesas que devoramos con entusiasmo, luegodescansamos un poco y después pasamos a la piscina donde pude recrearme viendo de cerca los más queincreíbles cuerpos de mi madre y Tammy en sus respectivos bikinis, ya en lapiscina ellas se pusieron a jugar con nosotros y aprovechando esa ocacion.
Tentadono pude dejar de entre juego y juego, acariciar con disimulo sus macizoscuerpos. A lo que ellas o mas precisamente mi madre, no se percataba de misintenciones. Tammy que si se dio cuenta no dijo nada, no obstante gustandole el juego sedejó manosear sin problema alguno e incluso cada vez que conseguía llegar a sustetas o culo, como premio me regalaba una sonrisa pícara.
Estabacasi anocheciendo cuando decidieron dejar de jugar e ir a cambiarse para ir ala susodicha fiesta, pero antes de hacerlo. Tammy me pregunto delante de mispadres – estas seguro de que no tienes problemas, en quedarte esta noche con Anay Drake?. Negándome ella me sonrió y acercando su cara a la mía, me dio un besoen la mejilla al son que agregaba – eres un auténtico sol.
Portenues segundos mi corazón pálpito por su proximidad, pero no pudiendo decirnada y regalandole una mirada que le hacía ver lo que sentía en ese momento mequedé callado. En tanto ella separándose de mi, termino por decir – será mejorque vaya a prepararme.
Quedándomeen la sala supe que por esa noche me tocaba hacer de niñero, por lo queplaneando que iba a hacer. Llegue a la conclusión que comenzaria con unapelícula, lo que me daba a entender que sería una larga noche.
Conesto en mente y luego de ver por varios stremers en la t.v elegí una peli, asíque estaba dejando el control en el sofá cuando escuche a mis espaldas una vozque me decia – que tal me veo?
Girandomerapido enfoque mi mirada y dandome cuenta de que era mi madre la que me habíahablado, fue inevitable el admirar lo bella que estaba. Llevaba una camisanegra con unos tacos altos y lo que restaba de su vestuario, estaba comprendidopor unos pantalones negros que marcaban a la perfección no sólo sus torneadas ykilométricas piernas. Si no también le hacía justicia a su enorme, pero hermosotrasero el cual resultaba a la perfección.
Nopudiendo dejar de verla, le dije sin pensarlo – estas hermosa, mamá.
Ellacontenta por mi respuesta se me acerco y danodome un beso muy cerca de lacomisura de mis labios, me dijo con tono alegre – me gusta que seas uncaballero.
Estabapor replicar eso, cuando de las escaleras otra voz dijo – quien es uncaballero, porque si hablan de Artie, tiene de caballero lo que yo de astrologa.
Perolejos de decir algo sobre su comentario me quedé viendola embelezado a ella, yaque Tammy estaba tan o mas hermosa que mi madre. Llevaba un vestido corto decolor rojo el cual le llegaba hasta el final de sus macizos muslos, en tanto laparte superior poseía un escote tan amplio que casi le llegaba hasta elcomienzo de su abdomen.
Juntocon unos tacos de aguja mas del mismo color, la hacían ver simplementeespectacular. No obstante recordando su comentario, le dije cuando llegó y sepuso a un costado de mi madre – estas preciosa, Tam.
Sorprendidapor llamarle de forma tan íntima me otorgó una sonrisa a la vez que le decía ami madre – ahora se porque le decías que es todo un caballero.
Realmenteambas se veían despampanantes y estaba mas que seguro de que ambas destacaríanen la susodicha fiesta, no obstante sabiendo que no podría verlas. Advertícuando mi padre apareció vestido de forma elegante y mirando a las bellezas quelo acompañarán, solo les pregunto secamente – estan listas?
Ambasasistieron y viendo que ya estaba lejos, mi madre de forma mordaz suelta – estoconfirma que el único caballero que hay por aquí es mi pequeño.
Conesas palabras volvio a besarme y dandome esta vez el pico directamente sobremis labios, me dijo al separarse de mi – recuerda si tienes algún problema nodudes en llamarnos.
Dichoesto salió por la misma puerta que mi padre dejándonos solo a Tammy y a mi, porlo que reinando un pequeño silencio. Me atreví a soltar nuevamente – en seriolo digo, estas hermosa Tam.
Ellame regaló una tenue sonrisa en respuesta e imitando a mi madre me dio un besoen los labios que me supo a cereza, disfrutando del breve momento termino porsepararse de mi y despidiéndose con su mano. Me dijo antes de irse – no tepreocupes los mellizos ya están en su hora de sueño, por lo que no te daránmuchos problemas.
Segundosdespués escuche al auto sonar y mientras lo oía alejarse, termine por gritar –chicos quieren ver una película?
Yaeran casi las dos de la madrugada cuando los escuche llegar y mientras mequedaba en la sala a ver que pasaba, advertí cuando ingresaban y apenas los vi.Me percaté de inmediato que mi padre estaba bastante bebido, por lo quearrastrado por mi madre. Termino en su cuarto, acostado y profundamentedormido.
Quele paso? – le pregunté a Tammy que mirandome contesto – parece que con su amigose pusieron a rememorar el pasado y se le fue un poco la mano con las bebidas.
Sonriendoen repuesta vi que mi madre regresaba, a lo que Tammy mirandome pregunto – quetal los mellizos?
Durmiendocomo un par de pequeños troncos – contesté a lo que Tammy, saliendo rapido medijo al pasar – iré a verlos.
Quedandosolo con mi madre, no pude evitar verle el trasero el cual sobresalia conesplendor gracias a su vestimenta. Pero mi observación no duro muchos, ya quemi madre arrojando un suspiro se quejó diciendo – tu padre realmente meavergonzo, esta noche.
Colocandoun gesto de incomprensión note cuando ella me miro, a lo que no sabiendo de quehablaba me dijo – sabes que tu padre es un poco suave cuando se trata dealcohol y creo que está noche paso su límite y entre su falta de resistencia ysus memorias, hizo que se comportará como un idiota.
Escuchandola sabia que estaba realmente molesta, porlo que intentando calmarla arroje de inmediato – me hubiese gustado ir.
A si– arrojo ella con curiosidad, a lo que continuando agregue – claro que Si, nosabes lo bien que me sentiría si llegó a una fiesta del brazo de dos mujeresinmensamente hermosas como los son Tammy y tú.
Senotaba que ella también estaba algo bebida, puesto qu no tuvo reacción a mispalabras, pero antes de poder decir algo. Tammy volvió y dándonos una rápidamirada nos dijo – estoy cansada, así que para mi el día termina justamenteahora.
Dichoesto se fue y viendola desaparecer, mi madre solté de inmediato – así quepiensas que Tammy y Yo, somos dos bellezas?
Claroque sí mamá – agregue con seguridad – no todos los días vas a una fiesta debrazo de dos mujeres tan hermosas como ustedes y por eso envidio un poco apapá.
Ellaescuchando mi confesión me otorgó una sonrisa y haciendo un movimiento que mesorprendió, se colgó de ni brazo a la vez que me decia – vamos afuera un rato,la noche está hermosa y quiero tomar algo de aire.
Saliendode mi estupor termine por asentir y empezando a caminar, terminamos por salirafuera. Sintiendo la calma y el silencio rodeandonos. Terminamos por llegarhasta el borde del gran patio que tenia la casa de campo de Tammy y mi madreviendo el cielo por breves segundos, solto al pasar – sabes a mi también mehubiese gustado que este a allí, tal vez así hubiese podido bailar y disfrutarun poco de la fiesta.
Sin pensarloy escuchando su pedido aferre mis manos a las suyas y tomando su cintura conuna de estas, empecé a movernos como si de verdad estuviéramos bailando en la susodichafiesta. Al comprender mi intención, mi madre me siguió el juego y no dejando demovernos. Disfrutamos del momento, hasta que no pudiendo mas y mirandoladirectamente a los ojos, le dije con dulzura – estas verdaderamente hermosaEmma.
Ellaal igual que Tammy se sorprendió por mi atrevimiento a llamarla tan íntimamente,pero no ofendiendose por ello me contestó – Ojalá tu padre fuese un poco comotú, cariño.
Elambiente estaba viciado y sus palabras habían alentado la locura que tenía enmente, por lo que no esperando mas me arroje hacia ella logrando presionar mislabios a los suyos.
Estola tomo por sorpresa y dandome un leve empujón, me dijo con enojo – que creesque haces?
Lolamento – intente disculparme al ver su reacción, pero no queriendo retrocederagregue – estas tan hermosa y pareces tan triste, que solo deseaba poderhacerte feliz.
Ellaescuchando mi excusa puso una expresion que no supe comprender, no obstante no deseandoretroceder me acerque a ella lentamente y poniendo mi manos en su mejilla laacaricie al son que soltaba – vamos mamá déjate llevar, sólo esta noche déjame mostrartecuanto te quiero.
Dichoesto volvi a besarla e increíblemente ella no me rechazó, es mas estaba tanreceptiva que coloco sus manos sobre mi cuello para profundizar el beso. A loque contento por conseguir lo que deseaba, de a poco lleve mis manos detrás desu cuerpo y colocandolas con cuidado por sobre su trasero, apreté sus nalgascon fuerza.
Ellanoto mi movimiento pero no hizo nada, a lo que aprovechando la oportunidad amasesus nalgas sin problemas lo que provocó que mi pene se despertará y pusiese duro.Cosa que se notó, puesto que mi falo estaba ahora pegado directamente en suvientre.
Sintiendomi pene caliente ella dejo de besarme y poniendo su mano por sobre mi erección,dijo con un tono de admiración - vaya cariño, si que estas a tope.
Alinstante coloque mi mano sobre la suya y obligando a que tocará mejor mi granerección, le solté – esto es tu culpa mamá y espero que hagas algo parasolucionarlo.
Poniendocara de vicio se separo de mi y como si se tratase de una mujer completamentediferente, tomo su camisa y deshaciendose de los molestos botones me mostróalgo que me dejo sin aliento. Ya que mi madre al parecer esa noche carecía deun corpiño, por lo que sus grandes pechos estaban libres y bamboleandose por lacarencia de la prenda.
Nopudiendo contenerme me abalance sobre sus pechos y agarrando ambas mamas, me Dicuenta de inmediato que eran tan grandes que mis manos no alcanzaban acubrirlas por completo. Por lo que parte de sus tetas y sus pezones, escapabanpor entre mis dedos.
Estome fascinó y no pudiendo contenerme me puse a jugar con ellos, mientras volvíaa besar a mi madre con lujuria.
Estábamosbasándonos de lo lindo, cuando de repente ella sin dejar de mover su boca sobrela mía, llevo sus manos a mi pantalóncorto y haciendose de la cintura de los mismos me lo bajo. Dejando al aire mipene que estaba tan duro, que parecía un garrote.
Impresionadaal ver mi aparato empezo a frotar su mano de arriba hacia abajo haciéndome unaexquisita pája, lo que provocó que detuviera mis manos y soltando variosgemidos. Termine por correrme en su mano.
Cerrandolos ojos con fuerza por breves segundos disfrute de mi liberación, pero cuandoabrí nuevamente estos. Me encontré con una escena que logró que mi penerecuperará su fuerza de inmediato, puesto que mi madre como si se tratase deuna autentica actriz porno se estaba comiendo parte mi corrida.
Tal situaciónmorbosa me calentó enseguida y quedando desnudo de la cintura para abajo, tomea mi madre y girandola sobre si misma. Conseguí colocarme en su detrás mientrasmis manos se aferraba nuevamente a sus grandes pechos.
Alnotar mi caliente miembro pegado a su culo, me pregunto nerviosa – que vas ahacerme?
Nadaque no quieras – contesté desesperado, pero consiente de que no nuncalastimaria a mi madre. Sin embargo caliente como estaba en ese momento. De apoco fui moviendo mi cintura y como si la estuviera cogiendo, le daba suavesestocadas mientras mis manos jugueteaba con sus pechos.
Alsentirme mi madre arrojo un leve gemido de gozo y colocándose en una mejorposición saco su trasero hacia atrás agachandose y dejando su culo en pompa, supantalón era bastante fino. Lo que me hacía notar a la perfección su anatomia yhacia que mi excitación subiera, ya que sentía sus nalgas bajo la fina cuernadel pantalón.
Comosi realmente estuviéramos cogiendo arremetía mi cintura contra su cuerpo, a loque gozando escuchaba como ella soltaba alaridos lo que me daba a entender lo bienque iban las cosas. A lo que embalentonado con esto, me atreví a tomarla de lacintura y no dejando de mover mi pelvis. Note como mi pene se movía entre micuerpo y entre medio de sus nalgas marcando la raya de su culo a la perfección,hasta llegar a un punto que no pudiendo mas me corrí inevitablemente porsegunda vez esa noche.
Peroesta vez había sido tan potente que parte de mi corrida salto al aire y cayódirectamente sobre el pantalón negro de mi madre, dejando allí una manchablanca.
Más calmado tome parte de esa corrida y esparciendola por su espaldadesnuda, quise dejar en ella una marca mía. Una que declaraba que por esa nocheella habia sido mia.
Alsentirme ella se incorporó y tocando con su mano lo que había hecho, me dijo entanto ponía una expresión de seriedad en su rostro – esto nunca sucedió.
Mesorprendió su cambio repentino de humor, no obstante no diciendo nada la vi incorporarsey tomando la camisa que estaba tirada a un costado. Se fue a la casa con sutorso desnudo.
Mirandolaalejarse me pregunté que estaba mal?
Pero noteniendo la respuesta, agarre mi pantalón y colocándomelo, me fui a dormir conuna sonrisa plantada en mi cara.
Elresto del día me la pase esquivando a Tammy debido al arrebato de vergüenza queme inundaba cada vez que la veia, ya que de solo mirarla los recuerdos de losucedido en la piscina me asaltaban casi de inmediato.
Loque restaba del día fue así, yo escondiéndome y ella junto a mis padreshablando de cosas banales y de la fiesta de esa noche a la cual no había sidoinvitado, según lo que estaba escuchando del hombre en cuestión. Habia sido uncompañero de mi padre en sus años de universidad, pero que con el correr deltiempo habían perdido contacto.
Llegandoa medio día almorzamos unas hamburguesas que devoramos con entusiasmo, luegodescansamos un poco y después pasamos a la piscina donde pude recrearme viendo de cerca los más queincreíbles cuerpos de mi madre y Tammy en sus respectivos bikinis, ya en lapiscina ellas se pusieron a jugar con nosotros y aprovechando esa ocacion.
Tentadono pude dejar de entre juego y juego, acariciar con disimulo sus macizoscuerpos. A lo que ellas o mas precisamente mi madre, no se percataba de misintenciones. Tammy que si se dio cuenta no dijo nada, no obstante gustandole el juego sedejó manosear sin problema alguno e incluso cada vez que conseguía llegar a sustetas o culo, como premio me regalaba una sonrisa pícara.
Estabacasi anocheciendo cuando decidieron dejar de jugar e ir a cambiarse para ir ala susodicha fiesta, pero antes de hacerlo. Tammy me pregunto delante de mispadres – estas seguro de que no tienes problemas, en quedarte esta noche con Anay Drake?. Negándome ella me sonrió y acercando su cara a la mía, me dio un besoen la mejilla al son que agregaba – eres un auténtico sol.
Portenues segundos mi corazón pálpito por su proximidad, pero no pudiendo decirnada y regalandole una mirada que le hacía ver lo que sentía en ese momento mequedé callado. En tanto ella separándose de mi, termino por decir – será mejorque vaya a prepararme.
Quedándomeen la sala supe que por esa noche me tocaba hacer de niñero, por lo queplaneando que iba a hacer. Llegue a la conclusión que comenzaria con unapelícula, lo que me daba a entender que sería una larga noche.
Conesto en mente y luego de ver por varios stremers en la t.v elegí una peli, asíque estaba dejando el control en el sofá cuando escuche a mis espaldas una vozque me decia – que tal me veo?
Girandomerapido enfoque mi mirada y dandome cuenta de que era mi madre la que me habíahablado, fue inevitable el admirar lo bella que estaba. Llevaba una camisanegra con unos tacos altos y lo que restaba de su vestuario, estaba comprendidopor unos pantalones negros que marcaban a la perfección no sólo sus torneadas ykilométricas piernas. Si no también le hacía justicia a su enorme, pero hermosotrasero el cual resultaba a la perfección.
Nopudiendo dejar de verla, le dije sin pensarlo – estas hermosa, mamá.
Ellacontenta por mi respuesta se me acerco y danodome un beso muy cerca de lacomisura de mis labios, me dijo con tono alegre – me gusta que seas uncaballero.
Estabapor replicar eso, cuando de las escaleras otra voz dijo – quien es uncaballero, porque si hablan de Artie, tiene de caballero lo que yo de astrologa.
Perolejos de decir algo sobre su comentario me quedé viendola embelezado a ella, yaque Tammy estaba tan o mas hermosa que mi madre. Llevaba un vestido corto decolor rojo el cual le llegaba hasta el final de sus macizos muslos, en tanto laparte superior poseía un escote tan amplio que casi le llegaba hasta elcomienzo de su abdomen.
Juntocon unos tacos de aguja mas del mismo color, la hacían ver simplementeespectacular. No obstante recordando su comentario, le dije cuando llegó y sepuso a un costado de mi madre – estas preciosa, Tam.
Sorprendidapor llamarle de forma tan íntima me otorgó una sonrisa a la vez que le decía ami madre – ahora se porque le decías que es todo un caballero.
Realmenteambas se veían despampanantes y estaba mas que seguro de que ambas destacaríanen la susodicha fiesta, no obstante sabiendo que no podría verlas. Advertícuando mi padre apareció vestido de forma elegante y mirando a las bellezas quelo acompañarán, solo les pregunto secamente – estan listas?
Ambasasistieron y viendo que ya estaba lejos, mi madre de forma mordaz suelta – estoconfirma que el único caballero que hay por aquí es mi pequeño.
Conesas palabras volvio a besarme y dandome esta vez el pico directamente sobremis labios, me dijo al separarse de mi – recuerda si tienes algún problema nodudes en llamarnos.
Dichoesto salió por la misma puerta que mi padre dejándonos solo a Tammy y a mi, porlo que reinando un pequeño silencio. Me atreví a soltar nuevamente – en seriolo digo, estas hermosa Tam.
Ellame regaló una tenue sonrisa en respuesta e imitando a mi madre me dio un besoen los labios que me supo a cereza, disfrutando del breve momento termino porsepararse de mi y despidiéndose con su mano. Me dijo antes de irse – no tepreocupes los mellizos ya están en su hora de sueño, por lo que no te daránmuchos problemas.
Segundosdespués escuche al auto sonar y mientras lo oía alejarse, termine por gritar –chicos quieren ver una película?
Yaeran casi las dos de la madrugada cuando los escuche llegar y mientras mequedaba en la sala a ver que pasaba, advertí cuando ingresaban y apenas los vi.Me percaté de inmediato que mi padre estaba bastante bebido, por lo quearrastrado por mi madre. Termino en su cuarto, acostado y profundamentedormido.
Quele paso? – le pregunté a Tammy que mirandome contesto – parece que con su amigose pusieron a rememorar el pasado y se le fue un poco la mano con las bebidas.
Sonriendoen repuesta vi que mi madre regresaba, a lo que Tammy mirandome pregunto – quetal los mellizos?
Durmiendocomo un par de pequeños troncos – contesté a lo que Tammy, saliendo rapido medijo al pasar – iré a verlos.
Quedandosolo con mi madre, no pude evitar verle el trasero el cual sobresalia conesplendor gracias a su vestimenta. Pero mi observación no duro muchos, ya quemi madre arrojando un suspiro se quejó diciendo – tu padre realmente meavergonzo, esta noche.
Colocandoun gesto de incomprensión note cuando ella me miro, a lo que no sabiendo de quehablaba me dijo – sabes que tu padre es un poco suave cuando se trata dealcohol y creo que está noche paso su límite y entre su falta de resistencia ysus memorias, hizo que se comportará como un idiota.
Escuchandola sabia que estaba realmente molesta, porlo que intentando calmarla arroje de inmediato – me hubiese gustado ir.
A si– arrojo ella con curiosidad, a lo que continuando agregue – claro que Si, nosabes lo bien que me sentiría si llegó a una fiesta del brazo de dos mujeresinmensamente hermosas como los son Tammy y tú.
Senotaba que ella también estaba algo bebida, puesto qu no tuvo reacción a mispalabras, pero antes de poder decir algo. Tammy volvió y dándonos una rápidamirada nos dijo – estoy cansada, así que para mi el día termina justamenteahora.
Dichoesto se fue y viendola desaparecer, mi madre solté de inmediato – así quepiensas que Tammy y Yo, somos dos bellezas?
Claroque sí mamá – agregue con seguridad – no todos los días vas a una fiesta debrazo de dos mujeres tan hermosas como ustedes y por eso envidio un poco apapá.
Ellaescuchando mi confesión me otorgó una sonrisa y haciendo un movimiento que mesorprendió, se colgó de ni brazo a la vez que me decia – vamos afuera un rato,la noche está hermosa y quiero tomar algo de aire.
Saliendode mi estupor termine por asentir y empezando a caminar, terminamos por salirafuera. Sintiendo la calma y el silencio rodeandonos. Terminamos por llegarhasta el borde del gran patio que tenia la casa de campo de Tammy y mi madreviendo el cielo por breves segundos, solto al pasar – sabes a mi también mehubiese gustado que este a allí, tal vez así hubiese podido bailar y disfrutarun poco de la fiesta.
Sin pensarloy escuchando su pedido aferre mis manos a las suyas y tomando su cintura conuna de estas, empecé a movernos como si de verdad estuviéramos bailando en la susodichafiesta. Al comprender mi intención, mi madre me siguió el juego y no dejando demovernos. Disfrutamos del momento, hasta que no pudiendo mas y mirandoladirectamente a los ojos, le dije con dulzura – estas verdaderamente hermosaEmma.
Ellaal igual que Tammy se sorprendió por mi atrevimiento a llamarla tan íntimamente,pero no ofendiendose por ello me contestó – Ojalá tu padre fuese un poco comotú, cariño.
Elambiente estaba viciado y sus palabras habían alentado la locura que tenía enmente, por lo que no esperando mas me arroje hacia ella logrando presionar mislabios a los suyos.
Estola tomo por sorpresa y dandome un leve empujón, me dijo con enojo – que creesque haces?
Lolamento – intente disculparme al ver su reacción, pero no queriendo retrocederagregue – estas tan hermosa y pareces tan triste, que solo deseaba poderhacerte feliz.
Ellaescuchando mi excusa puso una expresion que no supe comprender, no obstante no deseandoretroceder me acerque a ella lentamente y poniendo mi manos en su mejilla laacaricie al son que soltaba – vamos mamá déjate llevar, sólo esta noche déjame mostrartecuanto te quiero.
Dichoesto volvi a besarla e increíblemente ella no me rechazó, es mas estaba tanreceptiva que coloco sus manos sobre mi cuello para profundizar el beso. A loque contento por conseguir lo que deseaba, de a poco lleve mis manos detrás desu cuerpo y colocandolas con cuidado por sobre su trasero, apreté sus nalgascon fuerza.
Ellanoto mi movimiento pero no hizo nada, a lo que aprovechando la oportunidad amasesus nalgas sin problemas lo que provocó que mi pene se despertará y pusiese duro.Cosa que se notó, puesto que mi falo estaba ahora pegado directamente en suvientre.
Sintiendomi pene caliente ella dejo de besarme y poniendo su mano por sobre mi erección,dijo con un tono de admiración - vaya cariño, si que estas a tope.
Alinstante coloque mi mano sobre la suya y obligando a que tocará mejor mi granerección, le solté – esto es tu culpa mamá y espero que hagas algo parasolucionarlo.
Poniendocara de vicio se separo de mi y como si se tratase de una mujer completamentediferente, tomo su camisa y deshaciendose de los molestos botones me mostróalgo que me dejo sin aliento. Ya que mi madre al parecer esa noche carecía deun corpiño, por lo que sus grandes pechos estaban libres y bamboleandose por lacarencia de la prenda.
Nopudiendo contenerme me abalance sobre sus pechos y agarrando ambas mamas, me Dicuenta de inmediato que eran tan grandes que mis manos no alcanzaban acubrirlas por completo. Por lo que parte de sus tetas y sus pezones, escapabanpor entre mis dedos.
Estome fascinó y no pudiendo contenerme me puse a jugar con ellos, mientras volvíaa besar a mi madre con lujuria.
Estábamosbasándonos de lo lindo, cuando de repente ella sin dejar de mover su boca sobrela mía, llevo sus manos a mi pantalóncorto y haciendose de la cintura de los mismos me lo bajo. Dejando al aire mipene que estaba tan duro, que parecía un garrote.
Impresionadaal ver mi aparato empezo a frotar su mano de arriba hacia abajo haciéndome unaexquisita pája, lo que provocó que detuviera mis manos y soltando variosgemidos. Termine por correrme en su mano.
Cerrandolos ojos con fuerza por breves segundos disfrute de mi liberación, pero cuandoabrí nuevamente estos. Me encontré con una escena que logró que mi penerecuperará su fuerza de inmediato, puesto que mi madre como si se tratase deuna autentica actriz porno se estaba comiendo parte mi corrida.
Tal situaciónmorbosa me calentó enseguida y quedando desnudo de la cintura para abajo, tomea mi madre y girandola sobre si misma. Conseguí colocarme en su detrás mientrasmis manos se aferraba nuevamente a sus grandes pechos.
Alnotar mi caliente miembro pegado a su culo, me pregunto nerviosa – que vas ahacerme?
Nadaque no quieras – contesté desesperado, pero consiente de que no nuncalastimaria a mi madre. Sin embargo caliente como estaba en ese momento. De apoco fui moviendo mi cintura y como si la estuviera cogiendo, le daba suavesestocadas mientras mis manos jugueteaba con sus pechos.
Alsentirme mi madre arrojo un leve gemido de gozo y colocándose en una mejorposición saco su trasero hacia atrás agachandose y dejando su culo en pompa, supantalón era bastante fino. Lo que me hacía notar a la perfección su anatomia yhacia que mi excitación subiera, ya que sentía sus nalgas bajo la fina cuernadel pantalón.
Comosi realmente estuviéramos cogiendo arremetía mi cintura contra su cuerpo, a loque gozando escuchaba como ella soltaba alaridos lo que me daba a entender lo bienque iban las cosas. A lo que embalentonado con esto, me atreví a tomarla de lacintura y no dejando de mover mi pelvis. Note como mi pene se movía entre micuerpo y entre medio de sus nalgas marcando la raya de su culo a la perfección,hasta llegar a un punto que no pudiendo mas me corrí inevitablemente porsegunda vez esa noche.
Peroesta vez había sido tan potente que parte de mi corrida salto al aire y cayódirectamente sobre el pantalón negro de mi madre, dejando allí una manchablanca.
Más calmado tome parte de esa corrida y esparciendola por su espaldadesnuda, quise dejar en ella una marca mía. Una que declaraba que por esa nocheella habia sido mia.
Alsentirme ella se incorporó y tocando con su mano lo que había hecho, me dijo entanto ponía una expresión de seriedad en su rostro – esto nunca sucedió.
Mesorprendió su cambio repentino de humor, no obstante no diciendo nada la vi incorporarsey tomando la camisa que estaba tirada a un costado. Se fue a la casa con sutorso desnudo.
Mirandolaalejarse me pregunté que estaba mal?
Pero noteniendo la respuesta, agarre mi pantalón y colocándomelo, me fui a dormir conuna sonrisa plantada en mi cara.
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