Les dejo la segunda parte de esta historia, los que no leyeron el capítulo I acá está el link:
http://www.poringa.net/posts/relatos/3866295/Mi-historia-con-Natalia-Mi-Hermanastra-I.html
No pude dormir en toda la noche pensando en lo que había pasado, como se dio todo y lo bien que me había sentido compartiendo tiempo con Natalia. Me levante temprano, el Domingo se presentaba con peor clima que el día anterior, truenos, refucilos, y lluvia motivaban a reflexionar, me prepare el desayuno y me senté a mirar por la ventana del living pensando una estrategia para que mi hermanastra sea mía. Todavía no tenía muy en claro cual era el objetivo, la certeza radicaba en que la quería coger, pero ¿sentía algo más por ella?, ¿me podía plantear la posibilidad de que estemos juntos? ¿Qué dirían nuestros viejos?
Intente despejar todos los pensamientos accesorios y centrarme en la única certeza que tenía, Nuestros viejos volverían en veintiocho días, de los cuales trece estaríamos los dos de vacaciones, un tiempo interesante para afianzar la relación de confianza que había comenzado los días anteriores.
Natalia se despertó cerca de las once de la mañana, ya se sentía mucho mejor, estaba vestida con una calza negra muy ajustada que traslucía una tanga blanca, una campera ajustada en la que evidentemente por la notoriedad de sus pezones no llevaba nada debajo y zapatillas,
- NATALIA: ¿Te levantaste temprano?
- YO: ¿Si no pude dormir muy bien, vos cómo te sentís?
- NATALIA: un poco mejor, pero me sigue molestado la garganta, me voy a preparar el desayuno.
- YO: Te deje Café en la Cafetera, hay leche en la heladera, y te deje el pan lactal con semillas en la tostadora para que ya lo prepares.
- NATALIA: ¡Gracias! Me vas a mal acostumbrar estos días, evidentemente hay que estar enferma para que me trates bien
- YO: jajaja la que siempre me bardeo fuiste vos, yo soy un santo
- NATALIA: jajaja pude ser, Espérame que vengo a sentarme un rato con vos, quiero preguntarte algo
Que me querría preguntar, se habrá dado cuenta de algo, mi mente no paraba de girar, volvió con el desayuno y un libro abajo el brazo
- NATALIA: vos no me podes explicar las obligaciones en moneda extranjera, la verdad que no me animé a pedírtelo antes porque nos llevábamos muy mal y rindo el 18.
- YO: Dale, vení sentante y mientras desayunas lo vemos.
Naty se sentó a mi lado y comencé a explicarle, a mí en la facultad me iba muy bien, siempre con excelente promedio y obligaciones era un tema que manejaba muy bien. Natalia entendió rapidísimo, evidentemente tenía una gran capacidad.
- NATALIA: ¡Gracias! ¡Entendí todo, sos un genio!
- YO: enserio, decime quien sos y que hiciste con mi hermanastra
- NATALIA: tarado, te estoy diciendo un elogió jajaja
- YO: Por eso mismo jajjaa
- NATALIA: Tenes razón, te tengo que pedir perdón. La verdad es que el divorcio de mis viejos no me resultó fácil, mi sueño de familia perfecta se desplomó en quince minutos. Estaba terminando de asimilar el divorcio y apareció tu papá, para colmo al año vendieron la que había sido mi casa de toda la vida y termine viviendo con el novio de mi mamá y un hermanastro que no conocía en otra ciudad, fue todo muy rápido y muy difícil para mi, pero eso no me daba derecho a tratarlos como lo hice en estos seis meses.
Se le llenaron los ojos de lágrimas y se le entrecortaba la voz, no sé por qué pero por instinto la abrace muy fuerte
- YO: No tenía idea de como te sentías, yo también te pido perdón si te trate mal en algún momento, para mi fue un poco más fácil, mi viejo después de que murió mi vieja si bien no lo demostraba estuvo muy depresivo, Paula fue una luz en su vida. Si bien yo me sentí celoso, el Departamento era muy grande para los dos y las ausencias se hacían sentir.
¿Por qué me había abierto así?, ¿donde estaban las dos personas que hasta hace dos días se odiaban?, ¿que nos estaba pasando? Estuvimos abrazados un rato, yo acariciaba su espalda y ella me apretaba con sus dos manos por debajo de mis brazos, al ratito nos soltamos
- NATALIA: ¿Qué querés almorzar? Hoy cocino yo
- YO: (Agarre el celular y haciendo que hablaba) hola bomberos
- NATALIA: tarado
A mi cabeza llego un almohadón que estaba al alcance a su alcance, se lo devolví, pero se agachó, me incorporé y empecé a correrla mientras los dos nos reíamos a carcajadas. Tras dos vueltas a la casa la alcancé desde atrás en el jardín de invierno, la tiré suavemente sobre los sillones y empecé a hacerle cosquillas. Ella se reía a carcajadas
- NATALIA: basta por favor
- YO: tenes que pagar por el golpe
Producto de las cosquillas y los movimientos toque por segundos sus tetas, eran mejor de lo que imaginaba, suaves, redondas, que ganas de sacarle la campera y comérmelas, por favor. Yo estaba sobre Natalia y los movimientos, el morbo, rozar sus tetas comenzaron a tener efecto en mi entrepierna, se me pudo durísima, y Natalia evidentemente lo sintió, me empujó
- NATALIA: Bueno me voy a cocinar
- ¿YO (colorado como un tomate) querés que te ayude?
- NATALIA: Por estos días ya hiciste mucho, yo cocino quédate tranquilo
Me quería matar, toda la estrategia desarrollada en la mañana la había perdido en una erección, igualmente en la medida que me fui tranquilizando supuse que era bueno que Natalia sepa lo que provocaba en mí.
Natalia no me dio mucho calce el resto del domingo, comimos y se fue a encerrar a su pieza con la excusa de estudiar. A la noche decidí cocinar asado (menos mal que tenemos parrillero bajo techo) , prendí el fuego y preparé un matambre que teníamos en la heladera. Compartimos la cena, intercambiando cosas del momento, y apenas termino de comer se fue a bañar. Yo me quedé ordenando un poco, tenía que esperar que ella salga del baño para poder bañarme yo también (tenía un olor a humo).
Cuando subí Natalia ya estaba encerrada en su cuarto y el baño libre, Entre al baño, hacía tres días que no me masturbaba y con lo que había pasado estos días me comía un yogurt y Moría de sobredosis (todos sabemos que el exceso de leche no deja pensar con claridad).
Sobre el canasto de la ropa sucia debajo de la campera y la calza, vi la tanga blanca.
No me pude contener, la agarre, miré hacia la puerta, para saber que Natalia no estaba cerca, cerré la puerta del baño y me senté en el inodoro. Me desvestí completo y desenrollé la bombacha, en el interior había una mancha de humedad. Sería posible que se haya calentado conmigo, pensé. Puse la mano en mi pija que a esas alturas estaba más dura que Pity Álvarez en un concierto, me llevé la tanga a la nariz y me invadió ese olor a mujer, ese olor embriagante a concha del que todos los hombres disfrutamos.
Me imagine chupándole la concha a Naty que suponía toda depilada, que ese olor venia de vagina y mi nariz sentía por estar enterrado en ella. Me masturbe ferozmente, cuando estaba a punto, envolví mi pija con la prenda y acabé como nunca, dos chorros impactaron el espejo del baño y el resto quedo todo en la bombacha, que no alcanzaba a absorber tamaña cantidad por lo que empezó a chorrear.
Me bañe, Sali del baño, ya más relajado y lleve todo el canasto de la ropa (incluido la tanga) al lavadero. Puse el lavarropa. Y me fui a acostar. En la pieza de Natalia todas las luces estaban apagadas.
El lunes me desperté tarde, me dolía el cuerpo y la garganta, tenía escalofríos, malestar general, era evidente que la cercanía del sábado y del domingo por la mañana había logrado contagiarme. La Puta Madre por lo menos si la hubiera comido, pensé refunfuñando para adentro.
Mire el celular y tenía un mensaje de Natalia
"Santiago ya me siento mejor, me llevo el auto. Nos vemos"
La bronca que tenía era inimaginable, apenas se sintió bien se fue con las amigas y yo me pase el finde cuidándola. Encima me sentía para el orto. Como comprenderán solo le clave el visto.
Me levante envuelto en la frazada, me hice un café con leche, manotee el termómetro y me fui a acostar de nuevo. 38.8 que cagada.
El día se hizo eterno el malestar, sumado al aburrimiento, hacían que las horas parezcan días. No tuve hambre en todo el día así que ni me levanté a cocinarme.
Tipo 10 de la noche escucho la puerta de entrada y que sacan la alarma, seguramente debía ser Natalia. Paso todo el día afuera era evidente que pretendía evitarme, lo que no sé porque me dolía demasiado.
No se cuánto habrá pasado hasta que
- NATALIA: ¿Santiago que haces acostado tan temprano?
- YO: no me levante en todo el día, me siento muy mal.
- NATALIA: ¿Que te pasa?
Le señale el termómetro, que la última medición había marcado 39.2
-NATALIA: Como no me vas a avisar que tenes tanta fiebre tarado,
- YO: No quería molestarte, seguro estabas ocupada
- NATALIA: que voy a estar ocupada, estaba con Caro (caro era una amiga de la facultad que había venido una vez a casa a estudiar con Naty, morocha, ojos verdes, labios carnosos, 1.80, jugadora de vóley, piernas torneadas, linda cola, y tetas hechas, regalo del papá para los dieciocho).
- YO: No quise molestarte
- NATALIA: Con todo lo que vos hiciste por mí, como me vas a molestar
- YO: demasiado te esforzaste ayer y hoy por evitarme no Tenes porque sentirte obligada a atenderme.
Ya sé que soné despechado, lo estaba. Me pasaban cosas que no podía explicar con mi hermanastra, y ella me había esquivado dos días después que yo la había tratado como una princesa.
-NATALIA: ¿Que decís nene? Yo no te evité
- YO: No hace falta que me expliques nada, no tenes porque
- NATALIA: Que pire que tenes por favor, te voy a hacer algo de comer y te vas a tomar una pastilla para bajar esa fiebre.
- YO: No tengo hambre
- NATALIA: Vas a comer igual, y te vas a tomar el ibuprofeno entendiste.
A los quince minutos subió con un plato de Risotto (de los que se compran obvio) y la pastilla. Se quedo conmigo en silencio mirándome pensativa mientras yo comía.
- NATALIA: la verdad que no te estuve evitando
- YO: está bien, no Tenes que explicarme nada, ya sé que no me soportas
- NATALIA: eso era antes estos tres días, ahora nos llevamos muy bien y compartimos muchas cosas
Yo sabía porque me estaba evitando, pero quería que lo reconozca ella.
-YO: Si compartimos muchas cosas decime porque me evitabas
-NATALIA: ¿UFA... no me vas a dejar zafar no? me sentí incomoda cuando estábamos jugando y..... se te paro. Ni bien termino de armar la frase se puso bordó, se quiso levantar, pero la agarre del brazo
-YO: no te quise incomodar, es una reacción natural, no lo hice a propósito.
-NATALIA: Ya sé, pero la sentí mal en la panza (seguía terriblemente colorada)
-YO: no fue mi intención, la verdad es que me resultó difícil controlarlo, más si adelante te tengo a vos, ¡perdona que te lo diga... pero sos hermosa!
Natalia si antes estaba colorada, ahora pasaba por todos los colores, balbuceaba,
- NATALIA: no seas pavote, aparte soy tu hermanita.
No pensaba dejar de atacar Natalia estaba a la defensiva y yo tenía la pelota, si era inteligente esa noche tenía que terminar con un gol
- YO: mi hermanita no sos, al menos no de sangre y la verdad es que estas más fuerte que la casa del tercer chanchito.
- NATALIA: jajaja me hiciste reír, deja de decir pavadas que me la voy a creer
- YO: ¿que pensas de mí?
- NATALIA: En qué sentido
- YO: como hombre
- NATALIA: No estas mal, sos lindo, sos un buen pibe, después de cómo te trate me re atendiste.
- YO: ¿saldrías conmigo?
- NATALIA: Santiago no soy boluda, vos sos otro que en el mejor de los casos esta confundido, o que solo me quiere coger, y después tenemos que compartir al menos 3 o 4 años en esta casa juntos. Es un quilombo.
- YO: ¿y a vos quien te dijo que yo estoy confundido o solo te quiero coger?
- NATALIA: ahora me vas a decir que te enamoraste en tres días, que no podes vivir sin mí, si los últimos seis meses nos matamos.
Acá fue cuando la estrategia se me fue al piso había dos opciones, seguir trabajando despacio y desperdiciar una oportunidad que podía ser única o jugarme el todo por el todo, traicionando todos los indicadores que me decían que me incline por la primera opción, fui por la segunda (el amor te vuelve idiota) aunque eso significó que la pelota pase del lado de Natalia
- YO: No sé si me enamoré, pero te quiero conmigo.
-NATALIA: Estoy con vos
- YO: sabes lo que quiero decir
- NATALIA: No, la verdad que no
- YO: que no sé cómo, ni porque, pero te quiero, y no con amor de hermanos, te quiero enserio, en estos tres días me di cuenta que te quiero desde que te vi por primera vez, con tu pollera negra y tu camisa roja,
- NATALIA: No me podes decir eso… como esperas que reaccione
- YO: Vos reacciona como quieras, pero YO TE QUIERO!
Creo que nunca espero que la charla llegue a ese punto, sin dejarla pensar la besé, un beso profundo y correspondido, en ese beso no había solo pasión, en ese beso había AMOR y de parte de los dos estaba seguro…
Natalia se levantó rápido, me miró toda colorada y salió corriendo de la pieza. Yo me levante detrás de ella, la seguí a su pieza, metía la mano para que no cierre la puerta y me metí.
-NATALIA: Santiago salí de acá, me besaste…
-YO: Vos también me lo respondiste, ya te dije que TE QUIERO
- NATALIA: Deja de decirme eso, que esperas que te diga. Te pusiste a pensar el caos que sería contarlo, y si después nos peleamos como lo abordarían nuestros padres. No quiero quilombos, quiero estar tranquila.
- YO: No se si te diste cuenta que estas poniendo excusas pero nunca dijiste NO TE QUIERO
- NATALIA: Me resultas interesante, sos inteligente, me tratas bien, me cuidas, incluso te pensas que no me di cuenta de que esperabas que entre a la facultad, que me esperabas más temprano, para que no tenga que esperarte yo. La vez que nos vimos en la peña Inter facultades, vi como apretaste al tipo que me molestaba, creo que por eso te trataba mal.
La verdad, más de la mitad de las cosas que enumero las hacía sin darme cuenta, era una mujer y parte de mi familia, actúa como cualquier hombre en mi lugar. Lo de la peña si lo recordaba me había dado mucha bronca que se acerque a Natalia, y lo fui a buscar mal cuando se alejo para que no vuelva a acercarse. Natalia no era boluda, y había prestado atención a todas mis actitudes y eso había hecho mella en ella.
-YO: Con más razón, vos también me queres, déjame estar con vos
- NATALIA: No sé, me da miedo
Nuevamente no la deje pensar y la bese, laagarre de la cintura y la traje hacia mí, ella correspondió mi beso y me abrazo, una lagrima comenzó a rodar por su mejilla,
-YO: ¿Estas bien?
- NATALIA: Si simplemente, tengo miedo
- YO: Juntos lo vamos a ir superando,
- NATALIA: TE QUIERO por favor no me falles
Esa mujer que me había tratado tan mal los últimos seis meses estaba abrazada a mi besándome y llorando, pidiéndome que no le falle.
Mientras estábamos abrazos, comencé a besarle lentamente el cuelo y acariciar su espalda, besos cortos y chiquitos, mezclados con besos mas grandes, volví a comerle la boca, ahora si con mucha lengua de parte de los dos, tras unos cinco minutos de besos y caricias, me aleje, me saque la remera, y baje el cierre de su campera, un corpiño calado rojo quedo conteniendo esas tetas con las que había soñado, me acosté sobre ella y a recorrí con besos todo el contorno de su pecho, de repente me agarro la cara me dio un beso muy tierno y me dijo:
- NATALIA: por favor con cuidado, todavía soy virgen.
Les adjunto fotos de una modelo muy parecida a Natalia (pronto entenderán porque no puedo poner las reales)
Continuará
http://www.poringa.net/posts/relatos/3866295/Mi-historia-con-Natalia-Mi-Hermanastra-I.html
No pude dormir en toda la noche pensando en lo que había pasado, como se dio todo y lo bien que me había sentido compartiendo tiempo con Natalia. Me levante temprano, el Domingo se presentaba con peor clima que el día anterior, truenos, refucilos, y lluvia motivaban a reflexionar, me prepare el desayuno y me senté a mirar por la ventana del living pensando una estrategia para que mi hermanastra sea mía. Todavía no tenía muy en claro cual era el objetivo, la certeza radicaba en que la quería coger, pero ¿sentía algo más por ella?, ¿me podía plantear la posibilidad de que estemos juntos? ¿Qué dirían nuestros viejos?
Intente despejar todos los pensamientos accesorios y centrarme en la única certeza que tenía, Nuestros viejos volverían en veintiocho días, de los cuales trece estaríamos los dos de vacaciones, un tiempo interesante para afianzar la relación de confianza que había comenzado los días anteriores.
Natalia se despertó cerca de las once de la mañana, ya se sentía mucho mejor, estaba vestida con una calza negra muy ajustada que traslucía una tanga blanca, una campera ajustada en la que evidentemente por la notoriedad de sus pezones no llevaba nada debajo y zapatillas,
- NATALIA: ¿Te levantaste temprano?
- YO: ¿Si no pude dormir muy bien, vos cómo te sentís?
- NATALIA: un poco mejor, pero me sigue molestado la garganta, me voy a preparar el desayuno.
- YO: Te deje Café en la Cafetera, hay leche en la heladera, y te deje el pan lactal con semillas en la tostadora para que ya lo prepares.
- NATALIA: ¡Gracias! Me vas a mal acostumbrar estos días, evidentemente hay que estar enferma para que me trates bien
- YO: jajaja la que siempre me bardeo fuiste vos, yo soy un santo
- NATALIA: jajaja pude ser, Espérame que vengo a sentarme un rato con vos, quiero preguntarte algo
Que me querría preguntar, se habrá dado cuenta de algo, mi mente no paraba de girar, volvió con el desayuno y un libro abajo el brazo
- NATALIA: vos no me podes explicar las obligaciones en moneda extranjera, la verdad que no me animé a pedírtelo antes porque nos llevábamos muy mal y rindo el 18.
- YO: Dale, vení sentante y mientras desayunas lo vemos.
Naty se sentó a mi lado y comencé a explicarle, a mí en la facultad me iba muy bien, siempre con excelente promedio y obligaciones era un tema que manejaba muy bien. Natalia entendió rapidísimo, evidentemente tenía una gran capacidad.
- NATALIA: ¡Gracias! ¡Entendí todo, sos un genio!
- YO: enserio, decime quien sos y que hiciste con mi hermanastra
- NATALIA: tarado, te estoy diciendo un elogió jajaja
- YO: Por eso mismo jajjaa
- NATALIA: Tenes razón, te tengo que pedir perdón. La verdad es que el divorcio de mis viejos no me resultó fácil, mi sueño de familia perfecta se desplomó en quince minutos. Estaba terminando de asimilar el divorcio y apareció tu papá, para colmo al año vendieron la que había sido mi casa de toda la vida y termine viviendo con el novio de mi mamá y un hermanastro que no conocía en otra ciudad, fue todo muy rápido y muy difícil para mi, pero eso no me daba derecho a tratarlos como lo hice en estos seis meses.
Se le llenaron los ojos de lágrimas y se le entrecortaba la voz, no sé por qué pero por instinto la abrace muy fuerte
- YO: No tenía idea de como te sentías, yo también te pido perdón si te trate mal en algún momento, para mi fue un poco más fácil, mi viejo después de que murió mi vieja si bien no lo demostraba estuvo muy depresivo, Paula fue una luz en su vida. Si bien yo me sentí celoso, el Departamento era muy grande para los dos y las ausencias se hacían sentir.
¿Por qué me había abierto así?, ¿donde estaban las dos personas que hasta hace dos días se odiaban?, ¿que nos estaba pasando? Estuvimos abrazados un rato, yo acariciaba su espalda y ella me apretaba con sus dos manos por debajo de mis brazos, al ratito nos soltamos
- NATALIA: ¿Qué querés almorzar? Hoy cocino yo
- YO: (Agarre el celular y haciendo que hablaba) hola bomberos
- NATALIA: tarado
A mi cabeza llego un almohadón que estaba al alcance a su alcance, se lo devolví, pero se agachó, me incorporé y empecé a correrla mientras los dos nos reíamos a carcajadas. Tras dos vueltas a la casa la alcancé desde atrás en el jardín de invierno, la tiré suavemente sobre los sillones y empecé a hacerle cosquillas. Ella se reía a carcajadas
- NATALIA: basta por favor
- YO: tenes que pagar por el golpe
Producto de las cosquillas y los movimientos toque por segundos sus tetas, eran mejor de lo que imaginaba, suaves, redondas, que ganas de sacarle la campera y comérmelas, por favor. Yo estaba sobre Natalia y los movimientos, el morbo, rozar sus tetas comenzaron a tener efecto en mi entrepierna, se me pudo durísima, y Natalia evidentemente lo sintió, me empujó
- NATALIA: Bueno me voy a cocinar
- ¿YO (colorado como un tomate) querés que te ayude?
- NATALIA: Por estos días ya hiciste mucho, yo cocino quédate tranquilo
Me quería matar, toda la estrategia desarrollada en la mañana la había perdido en una erección, igualmente en la medida que me fui tranquilizando supuse que era bueno que Natalia sepa lo que provocaba en mí.
Natalia no me dio mucho calce el resto del domingo, comimos y se fue a encerrar a su pieza con la excusa de estudiar. A la noche decidí cocinar asado (menos mal que tenemos parrillero bajo techo) , prendí el fuego y preparé un matambre que teníamos en la heladera. Compartimos la cena, intercambiando cosas del momento, y apenas termino de comer se fue a bañar. Yo me quedé ordenando un poco, tenía que esperar que ella salga del baño para poder bañarme yo también (tenía un olor a humo).
Cuando subí Natalia ya estaba encerrada en su cuarto y el baño libre, Entre al baño, hacía tres días que no me masturbaba y con lo que había pasado estos días me comía un yogurt y Moría de sobredosis (todos sabemos que el exceso de leche no deja pensar con claridad).
Sobre el canasto de la ropa sucia debajo de la campera y la calza, vi la tanga blanca.
No me pude contener, la agarre, miré hacia la puerta, para saber que Natalia no estaba cerca, cerré la puerta del baño y me senté en el inodoro. Me desvestí completo y desenrollé la bombacha, en el interior había una mancha de humedad. Sería posible que se haya calentado conmigo, pensé. Puse la mano en mi pija que a esas alturas estaba más dura que Pity Álvarez en un concierto, me llevé la tanga a la nariz y me invadió ese olor a mujer, ese olor embriagante a concha del que todos los hombres disfrutamos.
Me imagine chupándole la concha a Naty que suponía toda depilada, que ese olor venia de vagina y mi nariz sentía por estar enterrado en ella. Me masturbe ferozmente, cuando estaba a punto, envolví mi pija con la prenda y acabé como nunca, dos chorros impactaron el espejo del baño y el resto quedo todo en la bombacha, que no alcanzaba a absorber tamaña cantidad por lo que empezó a chorrear.
Me bañe, Sali del baño, ya más relajado y lleve todo el canasto de la ropa (incluido la tanga) al lavadero. Puse el lavarropa. Y me fui a acostar. En la pieza de Natalia todas las luces estaban apagadas.
El lunes me desperté tarde, me dolía el cuerpo y la garganta, tenía escalofríos, malestar general, era evidente que la cercanía del sábado y del domingo por la mañana había logrado contagiarme. La Puta Madre por lo menos si la hubiera comido, pensé refunfuñando para adentro.
Mire el celular y tenía un mensaje de Natalia
"Santiago ya me siento mejor, me llevo el auto. Nos vemos"
La bronca que tenía era inimaginable, apenas se sintió bien se fue con las amigas y yo me pase el finde cuidándola. Encima me sentía para el orto. Como comprenderán solo le clave el visto.
Me levante envuelto en la frazada, me hice un café con leche, manotee el termómetro y me fui a acostar de nuevo. 38.8 que cagada.
El día se hizo eterno el malestar, sumado al aburrimiento, hacían que las horas parezcan días. No tuve hambre en todo el día así que ni me levanté a cocinarme.
Tipo 10 de la noche escucho la puerta de entrada y que sacan la alarma, seguramente debía ser Natalia. Paso todo el día afuera era evidente que pretendía evitarme, lo que no sé porque me dolía demasiado.
No se cuánto habrá pasado hasta que
- NATALIA: ¿Santiago que haces acostado tan temprano?
- YO: no me levante en todo el día, me siento muy mal.
- NATALIA: ¿Que te pasa?
Le señale el termómetro, que la última medición había marcado 39.2
-NATALIA: Como no me vas a avisar que tenes tanta fiebre tarado,
- YO: No quería molestarte, seguro estabas ocupada
- NATALIA: que voy a estar ocupada, estaba con Caro (caro era una amiga de la facultad que había venido una vez a casa a estudiar con Naty, morocha, ojos verdes, labios carnosos, 1.80, jugadora de vóley, piernas torneadas, linda cola, y tetas hechas, regalo del papá para los dieciocho).
- YO: No quise molestarte
- NATALIA: Con todo lo que vos hiciste por mí, como me vas a molestar
- YO: demasiado te esforzaste ayer y hoy por evitarme no Tenes porque sentirte obligada a atenderme.
Ya sé que soné despechado, lo estaba. Me pasaban cosas que no podía explicar con mi hermanastra, y ella me había esquivado dos días después que yo la había tratado como una princesa.
-NATALIA: ¿Que decís nene? Yo no te evité
- YO: No hace falta que me expliques nada, no tenes porque
- NATALIA: Que pire que tenes por favor, te voy a hacer algo de comer y te vas a tomar una pastilla para bajar esa fiebre.
- YO: No tengo hambre
- NATALIA: Vas a comer igual, y te vas a tomar el ibuprofeno entendiste.
A los quince minutos subió con un plato de Risotto (de los que se compran obvio) y la pastilla. Se quedo conmigo en silencio mirándome pensativa mientras yo comía.
- NATALIA: la verdad que no te estuve evitando
- YO: está bien, no Tenes que explicarme nada, ya sé que no me soportas
- NATALIA: eso era antes estos tres días, ahora nos llevamos muy bien y compartimos muchas cosas
Yo sabía porque me estaba evitando, pero quería que lo reconozca ella.
-YO: Si compartimos muchas cosas decime porque me evitabas
-NATALIA: ¿UFA... no me vas a dejar zafar no? me sentí incomoda cuando estábamos jugando y..... se te paro. Ni bien termino de armar la frase se puso bordó, se quiso levantar, pero la agarre del brazo
-YO: no te quise incomodar, es una reacción natural, no lo hice a propósito.
-NATALIA: Ya sé, pero la sentí mal en la panza (seguía terriblemente colorada)
-YO: no fue mi intención, la verdad es que me resultó difícil controlarlo, más si adelante te tengo a vos, ¡perdona que te lo diga... pero sos hermosa!
Natalia si antes estaba colorada, ahora pasaba por todos los colores, balbuceaba,
- NATALIA: no seas pavote, aparte soy tu hermanita.
No pensaba dejar de atacar Natalia estaba a la defensiva y yo tenía la pelota, si era inteligente esa noche tenía que terminar con un gol
- YO: mi hermanita no sos, al menos no de sangre y la verdad es que estas más fuerte que la casa del tercer chanchito.
- NATALIA: jajaja me hiciste reír, deja de decir pavadas que me la voy a creer
- YO: ¿que pensas de mí?
- NATALIA: En qué sentido
- YO: como hombre
- NATALIA: No estas mal, sos lindo, sos un buen pibe, después de cómo te trate me re atendiste.
- YO: ¿saldrías conmigo?
- NATALIA: Santiago no soy boluda, vos sos otro que en el mejor de los casos esta confundido, o que solo me quiere coger, y después tenemos que compartir al menos 3 o 4 años en esta casa juntos. Es un quilombo.
- YO: ¿y a vos quien te dijo que yo estoy confundido o solo te quiero coger?
- NATALIA: ahora me vas a decir que te enamoraste en tres días, que no podes vivir sin mí, si los últimos seis meses nos matamos.
Acá fue cuando la estrategia se me fue al piso había dos opciones, seguir trabajando despacio y desperdiciar una oportunidad que podía ser única o jugarme el todo por el todo, traicionando todos los indicadores que me decían que me incline por la primera opción, fui por la segunda (el amor te vuelve idiota) aunque eso significó que la pelota pase del lado de Natalia
- YO: No sé si me enamoré, pero te quiero conmigo.
-NATALIA: Estoy con vos
- YO: sabes lo que quiero decir
- NATALIA: No, la verdad que no
- YO: que no sé cómo, ni porque, pero te quiero, y no con amor de hermanos, te quiero enserio, en estos tres días me di cuenta que te quiero desde que te vi por primera vez, con tu pollera negra y tu camisa roja,
- NATALIA: No me podes decir eso… como esperas que reaccione
- YO: Vos reacciona como quieras, pero YO TE QUIERO!
Creo que nunca espero que la charla llegue a ese punto, sin dejarla pensar la besé, un beso profundo y correspondido, en ese beso no había solo pasión, en ese beso había AMOR y de parte de los dos estaba seguro…
Natalia se levantó rápido, me miró toda colorada y salió corriendo de la pieza. Yo me levante detrás de ella, la seguí a su pieza, metía la mano para que no cierre la puerta y me metí.
-NATALIA: Santiago salí de acá, me besaste…
-YO: Vos también me lo respondiste, ya te dije que TE QUIERO
- NATALIA: Deja de decirme eso, que esperas que te diga. Te pusiste a pensar el caos que sería contarlo, y si después nos peleamos como lo abordarían nuestros padres. No quiero quilombos, quiero estar tranquila.
- YO: No se si te diste cuenta que estas poniendo excusas pero nunca dijiste NO TE QUIERO
- NATALIA: Me resultas interesante, sos inteligente, me tratas bien, me cuidas, incluso te pensas que no me di cuenta de que esperabas que entre a la facultad, que me esperabas más temprano, para que no tenga que esperarte yo. La vez que nos vimos en la peña Inter facultades, vi como apretaste al tipo que me molestaba, creo que por eso te trataba mal.
La verdad, más de la mitad de las cosas que enumero las hacía sin darme cuenta, era una mujer y parte de mi familia, actúa como cualquier hombre en mi lugar. Lo de la peña si lo recordaba me había dado mucha bronca que se acerque a Natalia, y lo fui a buscar mal cuando se alejo para que no vuelva a acercarse. Natalia no era boluda, y había prestado atención a todas mis actitudes y eso había hecho mella en ella.
-YO: Con más razón, vos también me queres, déjame estar con vos
- NATALIA: No sé, me da miedo
Nuevamente no la deje pensar y la bese, laagarre de la cintura y la traje hacia mí, ella correspondió mi beso y me abrazo, una lagrima comenzó a rodar por su mejilla,
-YO: ¿Estas bien?
- NATALIA: Si simplemente, tengo miedo
- YO: Juntos lo vamos a ir superando,
- NATALIA: TE QUIERO por favor no me falles
Esa mujer que me había tratado tan mal los últimos seis meses estaba abrazada a mi besándome y llorando, pidiéndome que no le falle.
Mientras estábamos abrazos, comencé a besarle lentamente el cuelo y acariciar su espalda, besos cortos y chiquitos, mezclados con besos mas grandes, volví a comerle la boca, ahora si con mucha lengua de parte de los dos, tras unos cinco minutos de besos y caricias, me aleje, me saque la remera, y baje el cierre de su campera, un corpiño calado rojo quedo conteniendo esas tetas con las que había soñado, me acosté sobre ella y a recorrí con besos todo el contorno de su pecho, de repente me agarro la cara me dio un beso muy tierno y me dijo:
- NATALIA: por favor con cuidado, todavía soy virgen.
Les adjunto fotos de una modelo muy parecida a Natalia (pronto entenderán porque no puedo poner las reales)
Continuará
15 comentarios - Mi Historia con Natalia, Mi Hermanastra II