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Empezando a desatarme

Continuando con la historia de mi vida, va esta segunda entrega, pero les dejo el link de la primer parte, asi lo pueden releer
http://www.poringa.net/posts/relatos/3784658/Mi-temprano-debut-sexual.html



Corría el primer año de secundaria. Sergiome atendía una o dos veces por semana, impecable. Con el tiempo fuimosaprendiendo nuevas cositas, como coger de frente (aunque me cansaba mucho laspiernas) y darle besos negros (como se retorcía de placer). Hasta llegó achuparme la pija, cada vez que me acababa en la boca me preguntaba si megustaba, si era rica, etc, y un día se animó a probar, y le gustó.

En paralelo, yo me iba haciendo nuevosamigos en la secundaria, en especial me hice muy amigo de Leo, quien me fuellevando a integrar su grupo de amigos. Estos chicos no estaban tan “avanzados”como yo, pero nos empezamos a juntar para hacernos pajas en grupo, concompetencias de quien hacia más en un determinado tiempo, o quien “escupía” máslejos. Y aunque con Sergio estaba todo súper bien y seguimos con esaregularidad semanal hasta los 18 o 19 años (hoy por hoy nos “vemos” cadatanto), cada vez me sentía más atraído por el grupo de amigos y amigas de Leo. Inclusoanduve de noviecito con un par de las chicas (que me guste la pija no quieredecir que no me gusten las mujeres).

Ya en segundo año (durante el verano Sergiovolvió a cogerme todos los días), una noche Leo me invita a hacer una piyamada.Por error tuvimos acceso a ver una porno, en esa época no existían ni siquieralas VCR, los padres de Leo habían alquilado un proyector con algunos carretesde películas, y mezclado vino una porno, imagínense la lustrada de vara quepegamos, jajaja. Ya íbamos por la tercer paja, cuando me dice “esperá… cerrálos ojos… imagínate que estas con Lili” (la pechugona de la barra), y sin decirnada más, siento que me agarra la pija y que algo caliente y húmedo la rodea,me la estaba chupando!!! Sus movimientos eran bastante toscos, se notaba queera su primera vez (o una de sus primeras), pero igual se sentía muy lindo.Después de un rato, y sin que yo acabe, deja de chuparla y se sienta. En esemomento me dice “te gustó?? Queres probar??” Yo hacía bastante tiempo que letenía ganas a esa verga hermosa, como de unos 18x4, pero por miedo a que metildaran del putito del grupo, me reprimía, pero en ese momento me olvidé detodos mis miedos y en silencio, me acerqué, primero a sentir su olor, y despuésde unos instantes, comencé a chupársela con muchas ganas, pero tratando de queno se notara que sabia. Cuando noté que ya le faltaba poco para acabar, dejé dechuparla y lo hice acabar pajeándolo, mientras le masajeaba un poco los huevos.El lechazo no fue abundante, recuerden que ya era la tercer paja de la noche,pero me llenó la mano de ese néctar que tiene un sabor tan raro, pero mecalienta mucho saborear.

El fin de semana siguiente me volví aquedar a dormir, obviamente ya se me había calentado el pico. Al irnos a suhabitación, directamente me agarró el bulto y empezó a sobarlo hasta que sepuso bien al palo para poder comenzar a chuparlo. Seguía siendo bastante tosco,pero se le notaban las ganas que tenia de saborear una pija. Cuando yo estabapor acabar le avisé, asi que pudo sacarla de la boca, pero igual un poco deleche le dio en la cara. Tenia una expresión de nene con juguete nuevo… eraevidente que a pesar de tener novia y coger con ella, el putito interior queríasalir a pleno. Después de dejarlo descansar un rato, lo terminé de desnudar ylo tiré en la cama, levantándole las piernas, para poder tener buen acceso ypegarle una tremenda chupara de orto y huevos. Como gozaba, terrible, un par deveces quise dedicarme a la pija, pero me empujaba la cabeza hacia abajo paraque siga con el beso negro. Hasta que se la empecé a chupar, a full, yo estabamás caliente que una pipa, ya quería avanzar un poco más, asi que esta vez nola saqué de mi boca, me dio una muy buena acabada, la cual saboreé y traguéhasta la última gota. Leo estaba tan extasiado, que creo que no se dio cuentaque me acabó adentro de la boca, se quedó ahí, tendido, con los ojos cerrados,balbuceando. Yo, de lo caliente que estaba, al toque me hice una paja y cuandoestaba por acabar le agarré la mano, y se la llené de leche, como dándole laofrenda. Después de esto, estábamos tan cansados que nos dormimos.

Ya los fines de semana no nos alcanzaban,ambos queríamos más. Como íbamos a un colegio industrial de doble turno, y yovivía a 2 cuadras, Leo algunos días se quedaba a “almorzar” en casa.Aprovechando que mis viejos trabajaban, teníamos los mediodías para nosotros.Con tanta práctica, Leo avanzó un montón, ya la chupaba muy bien y hasta lepodía acabar en la boca. Se notaba que no le gustaba el sabor, pero se latragaba sin chistar. Y así nos íbamos, a veces solo con leche en el estómago,al colegio. Más de una vez pensé que se me notaria el olor a pija, pero nuncame dijeron nada por suerte, que vergüenza!!

Asi fuimos pasando el año, cada vez másenganchados uno con el otro, siempre pensando en tocar, chupar y pajear. Hastaque un día, le pedí que la convenciera a Marina (novia de Leo hacia un año)para cogerla entre los dos, pero eso lo cuento la próxima.

2 comentarios - Empezando a desatarme

nick8765
Que buena historia! Me trae muchos recuerdos...