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Parte 2 o partime en 2

Parte 2
Algunas tardes salía a caminar por la zona en la que me sentía segura, siempre el mismo horario desde las 13 hasta las 19. Me movía por mi barrio.
Después de alejarme unas cuadras de casa me prendía un porrito. Eso me encendía y crecía ese fuerza imparable dentro de mi... debía montarme. Me calzaba la mini falda. Me ponía linda, me maquillaba, me sentía cómoda en la calle como para recorrerla con unas lindas medias, taquitos y una blusa. pollera cortita y a veces con el uniforme de chicas del colegio.
Entre que me alejaba un poquito de casa para ser yo y fumar un poquito estaría a 15 cuadras.
Loquita y caliente había algo que no podía evitar hacer.
Mirar a los varones que manejaban los autos que pasaban. Aprendí rápido como llamar la atención con mi modo de vestir, andar, sonrisas, gestos.
Si caminaba contramano estaba bueno porque los veía venir así que las vistas se cruzaban rápidamente pero así de rápido también nos cruzábamos, la bocina sonaba siempre. Si me parecía lindo le dedicaba una sonrisa pícara siguiéndolos con la vista, me detenía y me giraba para ver que hacían, sabía que miraban por el espejo y muchos doblaban para dar la vuelta manzana, esos venían por mi, me excitaba mucho esos momentos.
Paraban, bajaban el vidrio de la puerta del acompañante, me llamaban,
-"¿a mi?", me hacía la ingenua.
-"si linda a vos, vení".
Me acercaba caminando sexy, siempre me gustó caminar sueltita, relajada, sonriendo. Me apoyaba en la puerta inclinándome y metía la cabeza un poquito. Me preguntaban si quería que me llevara o si quería subir a pasear, charlábamos un poquito me encantaba jugar a la seducción y ser la elegida del levante.
Sonrisitas, ojos entre cerrados, lengua por los labios, guiños de ojos, pasadas con la vista por su bulto con alguna exclamación sorprendida, palabras pícaras para romper el hielo.
-"Dale subí". Sí me gustaba, me ganaba, subía.
Casi siempre dejaba como corresponde que el hombre inicie el juego, después de las preguntas clásicas comooo... ¿qué hacías?, "¿cómo te llamás?, ¿donde ibas?" empezaba el avance al ver que era dada,
-"¿Y tu novio te deja solita, tan linda y provocadora con esas medias y esa mini?".
-"¿Te gustan las medias?" le decía invitándolos a mirar tranquilos y justo distraídamente me cruzaba de piernas para que la pollera se deslizara y descubriera que usaba portaligas, uno dijo "¡portaligas! que lindo putito que sos.
Empezaban a alargar la mano y a insinuar, al principio un toque como algo casual pero evaluando mi reacción, al rato empezaban las caricias en mi pierna, yo me dejaba.
El próximo paso casi siempre era el beso. Los más jovenes siempre paraban en un lugar tranqui, una plaza, "¿paramos así charlamos tranquilos?".
A mi me encantan los autos son un objeto erótico así que me sentía cómoda y era un plus que me excitaba.
Los besos se ponían más profundos y húmedos, empezaba la franela, me dejaba tocar, me ponía muy loquita y me olvidaba de todo hasta de que estábamos en la calle, las exhibicionistas somos atrevidas.
Me encantaba cuando me agarran mi mano y la ponían sobre su bulto. Me hacía la difícil y sacaba la mano haciéndome la sorprendida casi ofendida. Siempre repetían la acción, otra vez sacaba mi mano pero ya la dejaba un poco y se la apretaba, hasta que la dejaba después que insistiera "dale si está dentro del pantalón no pasa nada", "mm bueno pero un poquito" y se la amasaba.
Al rato, plinnn, se sentía el ruido de la hebilla del cinturón y del cierre del pantalón...
-"la saco, me apreta mucho en el pantalón".
"¿estás loco, mirá si nos ven?, guardala" y se la tocaba sin querer como queriendo alejarla o a veces se la agarraba e intentaba metérsela en el pantalón.
-"me la hiciste parar, recién no me la podías dejar de mirar, me la agarraste y pusiste una carita de comilona, mirámela, ¿no te gusta?".
La miraba con lascivia, "si, me gusta pero...".
"y si te gusta haceme una paja".
"ok te la hago, pero no me pidas nada más, los conozco" llevaban mi mano a su pija dura y los empezaba a pajear bien. El ambiente se llenaba de ese aroma a pija y pre semen.
Después de un rato algunos me ponían la mano en la nuca y me llevaban a su pija, "pajeame con la boquita golosa que tenés así me la humedeces".
Me resistía un poco pero hacían más fuerza, me acercaba y frenaba cuando mi boca estaba a centimetros esperando su reacción, podía oler su sexo. Decían cosas como "a ver si la chupás tan bien como parece", sí me resistía un poquito más, "dale si te encanta la pija, tenés fama de ser la putita del barrio no te hagas la difícil".
-"¿y cómo me conocen?". Quería información".
Me estaba haciendo conocida. A veces me decían algo así "la que anda por el barrio caminando sóla, mucha pinta de trola, le gusta la pija, se la come toda hasta que te saca toda la leche. Si la ves pensás, a esta guachita le encanta la verga", ooo "tenés a todos los pibes calientes sos de las pocas putas del barrio". También se me conocía como "el putito que se viste de mujer" o "el travesti chupa pija" jaja. Los chicos son así se pasan el dato entre las barritas del barrio y salen de cacería a buscar las putitas en los barrios, parace que yo era una.
Tiraban la butaca y el respaldo para atrás se bajaban los pantalones y slip hasta mitad de pierna y quedaba al aire esa carne poderosa y deliciosa, mano en la nuca, "te la chupo si no se lo contás a nadie", me llevaban a su pija sin resistirme, llegaba con la boca abierta para chupar y mano derecha para acariciarles las piernas y los huevos.
Las mamadas en los autos son intensas, rápidas, arrancan a ritmo acelerado, 3 minutos y al buche entre sus gemidos y frases entrecortadas, no muy originales, "que puta que sos", "como las travestis no la chupa nadie", "que bien tirás la goma travita".
Después me llevaban donde les decía, me bajaba o si estaba tranquila la zona me bajaba ahí y seguía mi deriva traviesa y terminar el porrito.
Pero había veces que alguno quería metérmela en el auto, y si se podía y daba...
Me pasó también que paraban muy hots, me llamaban y una vez que empezabamos a hablar yo apoyada a la ventanilla la sacaban dura "mirámela", "mmm estás al palo" y como me quedaba mirándosela empezaban a masturbarse, no tardaban en acabar, no eran gran cosa pero me iba subiendo la temperatura.
Otros ya la tenían afuera quizás se la tapaban con la mano.
-"¿qué tenés ahí? pregunté una vez.
-"¿dónde?".
-"debajo de la mano".
-"¿querés ver?".
-"si", me la mostró, parada, "te estabas pajeando?".
-"si, te vi y me calentaste, ¿la querés? subí", me gustaba aspi que... arriba, "¿vos sos el travesti que anda siempre por acá?, me re van ustedes".
-"¿quienes?"
- "los que se visten de mujer, te queda muy bien, tenés look trola que calienta, ¿te gusta mucho la pija?".
-"si, a veces, obvio, vos la tenés muy linda".
-"no te cortes, acaríciala se nota que querés", se la agarraba, "y con esa cara de mamadora que tenés... ¿te gusta que te hagan la cola también? ¿Cuantos añitos tenés?".
-"15".
-"mmm tan chiquito y tan nenita, a mi me encanta cogerlos se ponen muy mimosas, voy siempre a la zona roja de Flores nunca te vi, ¿vas?".
-"no, eso es de noche y sólo salgo los sábados de noche".
-"está bueno andan casi en bolas o vestidas como vedettes, ¿te gustaría ir el Sábado?, vamos y ves, si querés te bajas un rato y yo te miro aunque si te sacas la pollerita un pendejito nenita como vos levanta al toque, ¿cuanto cobrás aca?".
-¿Qué?".
-"una buena chupada de pija que tengo poca plata ¿y si te doy por el culo, cuanto?", "¿vamos el sábado entonces?, nos vamos a divertir y nos ponemos loquitos y si te va bien nos vamos de gira", "¿y no hay una muestra? me muero por vértela en la boca, quiero que seas mi travesti fijo para hacerte bien mujer".
Estos eran puro sexo caliente, sin filtros, querían ponerla, acabar una y otra vez.
Con los señores era distinto, ellos buscan privacidad y discreción, casados la mayoría, yo los prefiero. Así que por lo general atendía a los chicos con la boca en sus autos como una previa y salía a caminar un rato más con ganas de hacer un completo.
Una vez roto el hielo son directos, "¿querés hacer algo?", "¿cobrás?", "vamos a un telo que te cojo y te hago sentir mujer, pendeja"
Como no tenía 18 años aún había que ir a hoteles liberados, eran los más precarios, el barrio de Flores, Once y Constitución eran ideales. A mi me gustaba el de Bolivia y Bacacay en Once el de Alsina Y Urquiza y en Constitución en Carlos Calvo y Salta ya los conocía y me daban unos pesos por ir ahí.
En el trayecto al hotel que a veces era larguito los muy piratas iban por calles no por avenidas y se hacían acariciar la verga, siempre duras, si me dejaba hacerlo sin decir nada avanzaba, generalmente usan pantalón de vestir, me encantan porque es fácil usando las 2 manos bajarles el cierre y tienen lugar para meter la mano y manosearlos un poco, se las sacaba, "mmm que grande y calentita la tenés".
-"¿te gusta?",
-"me encanta, ¿me dejás darle un beso de presentación mientras llegamos?",
-"¿un besito nada más?, chupásela despacito a tu papi bebota", me encanta chuparla mientras manejan así que le daba con ganas.
Una vez en el hotel era cantada que en el pasillo, camino a la habitación me tocaran el culo, obvio que me dejaba, me giraba para un rato de franela ahí. Continuábamos en la habitación, muy calientes, me sacaban la blusa, me quedaba en tanga tacos, medias de red y portaligas. Sabía que tenía que hacer y amaba hacerlo.
Con los señores era y es maravilloso, experimentados, agradecidos, calientes, generosos, dulces, los mejores polvos, cogen muy bien sin apuros, muy fantasiosos, pervertidos, me enseñaron mucho, después del bucal... mmmm completito.,,

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