Última parte de mi segunda visita al Swinger

Estaba parada en la pista esperando a mi marido y sus tragos, estaba sedienta, pero a la vez estaba encendida, trataba de asimilar los que había vivido, una cosa es una fantasía, un juego pero lo que había pasado era real, en mi cabeza no paraban de aparecer los recuerdos de lo vivido, le había chupado la pija a un total desconocido, me había cogido, no sabía su nombre y para serles totalmente franca tampoco sabía bien como se veía.
Me tocan el hombro, era mi marido con los tragos, me pregunta si todo estaba bien? Le conté lo que me pasaba, sus ojos brillaban de una manera que expresaban lo excitante que fue para el haber compartido esa experiencia conmigo. Me dijo vamos a casa o querés quedarte un ratito más. No dude la respuesta, me quiero quedar, tomamos nuestros tragos sin hablar, sólo miraba todo lo que pasaba a nuestro alrededor, se olía el erotismo, parejas mirando a solos o a otras parejas, gente bailando y tocándose con disimulo, hombres seduciendo chicas, y yo seguía encendida.
La voz de mi marido me recordó que estábamos juntos, me decía de ir a a visitar el cuarto de las parejas en el primer piso, otra vez pasar entre todos, sentir sus apoyadas, sus manos tratando de tocar un poco de más, miradas buscando un beso, en la escalera subía una chica delante mío con un vestido tan corto que pude ver sus nalgas, y me sentí uno de esos hombres que aprovecharon para tocarme, acelere los pasos, llegamos juntas al último escalón, tome su cintura con mis manos y la apoye, mis pechos se apoyaron en su espalda y mi pelvis sintió el calor de su cola, se dio vuelta, casi sorprendida, no era ninguna nena, era una milf como yo, me sonrió diciéndome que linda sorpresa, la solté y siguió caminado con su hombre hasta la habitación de parejas.
Mi caminar fue lento hasta la cortina que separaba ese pasillo de la habitación, mi marido me tomo de la mano e ingresamos, otra vez a acostumbrar los ojos, el lugar estaba lleno, la cama redonda no se veía de la cantidad de gente que estaba parada a su alrededor, el olor a sexo inundaba la habitación a igual que los gemidos, quejidos, gritos, el ruido inconfundible de las nalgadas, hombres con pantalones bajos y mujeres a medio vestir cogiendo por todas partes, sobre sillones, sobre la cama redonda, contra las paredes, grupos improvisados de gente compartiendo sexo, mi Conchita asimilada todo lo que veía y se inundaba de lubricación, quería estar en todas partes, queria probar todo, quería que todos me miraran coger, la mano de mi marido en mi culo terminó de acelerar mi respiración, estaba caliente, quería acción.
Nos acomodados contra una pared, sentada una pareja frente a nosotros, ella le chupada la pija arrodillada, sentados junto a ellos otra pareja cogiendo, el sentado y ella sentada frente a él. Mi marido me dio vuelta y empezó a chaparme a tocarme el culo, a levantarme el vestido, a mostrarme a todos, yo lo ayudaba a desvestirse, le baje los pantalones Y me incline a chuparle la pija con las piernas bien estiradas para que todos me vean el culo, enseguida sentí su pija durísima, me tomaba de la cabeza y empujaba con fuerza para que me.la tragara toda, estaba muy concentrada en mi trabajo hasta que sentí una mano en mi cintura, volví a sentir es sensación de ser tomada por más de una persona, me acaricio la cola con mucha suavidad, eran mimos, corrió su mano hasta mi cabeza, jugo con mi pelo, me marcó el ritmo para la chupada de pija, sentí su respiración en mi oreja, giro mi cara y ahí la vi!! Era la milf que había apoyado, no llegue a decir nada que me dio un beso de lengua muy profundo y muy húmedo, no se como no tuve un orgasmo en ese momento, disfrute de ese besos como la primera pija que chupe, solté. a mi marido, me incorporé para abrazarla y seguir chapando, sus manos eran ligeras, acariciaba todo mi cuerpo, yo sólo con torpeza le tocaba la cola Y una teta, estuvimos unos segundos eternos, se separó y me dijo que sorpresa, nos volvimos a besar y tocar, está vez empezó a jugar con.mi Conchita, sabía jugar y accionar los botones justos para que gozará mucho, una boca de costado se unió a nuestro beso, eran dos lenguas besando la mía, la calentura que tenía era gigante, me Di cuenta que era un hombre el que nos besaba, nos separamos, el me puso frente a él para besarme fogosamente, me tomo de los hombros marcandome el camino hasta su pija, me puse de cuchillas y le empecé a chupar la pija con muchas ganas, estuve unos instante hasta que se sumó la boca de mi amiga a la chupada, no podía creerlo, estaba chupando una pija con otra mujer, nuestras lenguas se encontraban en.la punta y aprovechabamos para basarnos, otra pija se sumó del otro costado, otra vez esa hermosa sensación de tener dos pijas para chupar, levanté la vista, era mi marido, con sus ojos brillante, mi amiga se apoderó de la pija de mi marido, por un instante tuve una sensación rara, otra mujer le chupada la pija frente a mi, los celos llegaron por un segundo hasta que se convirtieron en morbo, lo vi gozar, tomarla de la cabeza como hace conmigo Y sólo me dediqué a jugar con mi amigo, le chupe la pija unas veces más hasta que me hizo parar, otros besos y me giro contra la pared, tardó unos instantes, me levanto el vestido corrió mi tanguita, al oido me dijo quédate tranquila que tengo el forro puesto Y sin más preámbulos me la metió, me empezó a bombear despacio, tomo ritmo y me bombeaba con fuerza, sentía sus huevos chocar contra mi Conchita, me.llenaba, me hacía gozar, me tomo con una mano del pelo y con la otra empujaba mi cadera, me hacía arquear para que sintiera la pija bien adentro, varios manos desconocidas aprovecharon para acariciarme el pelo, las tetas, la espalda, el ritmo empezó a ser más rápido, se acercaba mi orgasmo, sentía mi cuerpo hirviendo, mira a mi costado y la imagen que vi me hizo llegar al mejor orgasmo de los últimos años, mi marido se estaba cogiendo a mi amiga en cuatro en uno de los sillones, los pijazos seguían dentro mío, se aceleró el ritmo Y sentí como se estremeció mi hombre, me abrazo me dio un beso en el cuello y salió.
Gire, me apoye contra la pared, miraba como mi marido seguía dándole en cuatro a mi amiga, ella levanto la vista y me miro directo a los ojos, me volvió a sonreír, se separó de mi marido le dijo algo al oido, se arrodilló frente a él, le sacó el forro y le empezó a chupar la pija, yo en mi posición me empecé a masturbar mirando esa escena, el la tomo fuerte de la cabeza y tiro todo su cuerpo hacía atrás!! Ella siguió unos instantes más chupando. Se paro, giro y camino hacia mi, nos fundimos en otro besos húmedo, pero estaba vez estábamos compartiendo la leche de mi marido, me apoyo la mano en mi Conchita empapada y me pajeo hasta llegar a un nuevo orgasmo. Me quedé quieta, volvió a sonreír y me dijo que linda sorpresa que fuiste. Me volvió a besar y se fue con su hombre.
Mi marido me abrazo, me dijo Te Amo, salimos de la habitación bajamos a los baños, nos arreglamos y nos higienizamos rápidamente.
Salimos del club , sudados, cansados y con mucho olor a sexo.
Subimos al auto, nos besamos, nos dijimos cuanto nos amabamos y nos fuimos para casa.
Así empezó una nueva forma de vida entre nosotros, somos swinger, nos encanta disfrutar del sexo juntos. Cumplimos varias fantasías, pero esas serán otras historias.
Besos Sil