Todavia no podía creer lo que la tormenta había dejado.
Me desperté en la cama de mí tía. Lo había soñado? No creo. Fue maravilloso.
Esa mañana apareció mí tía Sol en el dormitorio ni bien me desperté.
Sol: buen día dormilón. Descansaste bien.
Yo: si tía. Muuyyyy bien. Gracias!
Sol se había levantado y estaba haciendo algunas tareas del hogar ya en el departamento.
Estaba divina. Tenía una remerita ajustada, sin corpiño. Se le notaban sus tetitas, no las tiene grandes. Son más bien chiquitas, pero hermosas. Abajo tenía puesta u a calza larga, blanca, ajustada. Se le marcaba la tanguita, negra abajo.
Sol: sos mirón eh? Decí que estás vos aquí conmigo, si no andaría un poco más desprovista de ropas.
Yo: por mí no te preocupes... Estás en tu casa.
Sol: ah sí? Te gusta desafiarme....
Lo que siguió a ese momento fue sublime. Se sacó la remera y quedó en tetas. Se me paró al instante.
Sol: te gusta?
Yo: me encanta!!!
Sol: me saco más?
Yo: si, por favor
Se sacó calza y tanguita juntos, dándome la espalda. No les puedo contar lo divino que tiene los labios vaginales vistos desde atrás, nunca vi una conchita tan linda. Les cuento, la empanada se asemeja a algo así, pongan los dos pulgares de sus manos juntas y admirenlos, bueno, así. Una delicia.
Me arrancó las sábanas. Literalmente, las tiró al piso, me saco el boxer, me dejó en bolas en dos segundos.
Sol: anoche me encantó chupartela y tomarte tu leche, sabías?
Me hablaba así y me volaba la cabeza. Terrible
Sol: me encanta como la tenés, es grande...
Me miraba fijo y me hablaba, yo calladito la miraba nomás.
Sol: me gusta porque puedo agarrartela con las dos manos y chuparla...
Me pajeaba despacito y se metía la cabeza en la boca.
Sol: me vas a cojer no?
Se paró con una pierna a cada lado de las mías y se sentó de golpe. Me cojio divinamente esa mañana...
Acabe como un niño...
Se venía la fiesta a la noche. Y más vacaciones con mí tía Sol...
Me desperté en la cama de mí tía. Lo había soñado? No creo. Fue maravilloso.
Esa mañana apareció mí tía Sol en el dormitorio ni bien me desperté.
Sol: buen día dormilón. Descansaste bien.
Yo: si tía. Muuyyyy bien. Gracias!
Sol se había levantado y estaba haciendo algunas tareas del hogar ya en el departamento.
Estaba divina. Tenía una remerita ajustada, sin corpiño. Se le notaban sus tetitas, no las tiene grandes. Son más bien chiquitas, pero hermosas. Abajo tenía puesta u a calza larga, blanca, ajustada. Se le marcaba la tanguita, negra abajo.
Sol: sos mirón eh? Decí que estás vos aquí conmigo, si no andaría un poco más desprovista de ropas.
Yo: por mí no te preocupes... Estás en tu casa.
Sol: ah sí? Te gusta desafiarme....
Lo que siguió a ese momento fue sublime. Se sacó la remera y quedó en tetas. Se me paró al instante.
Sol: te gusta?
Yo: me encanta!!!
Sol: me saco más?
Yo: si, por favor
Se sacó calza y tanguita juntos, dándome la espalda. No les puedo contar lo divino que tiene los labios vaginales vistos desde atrás, nunca vi una conchita tan linda. Les cuento, la empanada se asemeja a algo así, pongan los dos pulgares de sus manos juntas y admirenlos, bueno, así. Una delicia.
Me arrancó las sábanas. Literalmente, las tiró al piso, me saco el boxer, me dejó en bolas en dos segundos.
Sol: anoche me encantó chupartela y tomarte tu leche, sabías?
Me hablaba así y me volaba la cabeza. Terrible
Sol: me encanta como la tenés, es grande...
Me miraba fijo y me hablaba, yo calladito la miraba nomás.
Sol: me gusta porque puedo agarrartela con las dos manos y chuparla...
Me pajeaba despacito y se metía la cabeza en la boca.
Sol: me vas a cojer no?
Se paró con una pierna a cada lado de las mías y se sentó de golpe. Me cojio divinamente esa mañana...
Acabe como un niño...
Se venía la fiesta a la noche. Y más vacaciones con mí tía Sol...
5 comentarios - Vacaciones con mi tía Sol III