Asi mismo esta mañana me he levantado con dos tías, una a cada lado de mi cama. Como ya he dicho, soy independiente, así que las eché de mi casa con sutileza. Tenía un dolor de cabeza espantoso, y me dirigí a la cocina en ropa interior a tomarme una aspirina... de repente suena el timbre y seguidamente recuerdo que había quedado a las 12 con la nueva sirvienta.
Os voy a ser sincera, me gusta que me lo hagan todo y la casa es demasiado grande, problemas de dinero la verdad que no tengo, así que pensé en contratar a alguien para que me hiciera las tareas, evidentemente escogí que fuera mujer...
Me levanto como puedo de la silla y abro la puerta, me encuentro a una joven morena, que me mira de arriba abajo y se sonroja, después me doy cuenta que es que sigo en tanga y sujetador...
-Nina: perdón por este recibimiento, es que me acabo de despertar... eres la nueva sirvienta no? Tú nombre?
-Carla: no te preocupes, soy Carla y venía para hablar sobre lo del trabajo
-Nina: vale, pues pasa por aquí
La dirijo hasta el salón, y me pongo una camisa que tenía encima de la mesa, creo que ni es mía, porque no me suena. Bueno, me siento en un sofá y ella en otro, os la voy a describir, es delgada y alta, unos ojos verdes impactantes y su pelo negro y ondulado... creo que con la resaca que tengo no me he dado cuenta de lo buena que está! Anoche tuve un trio espectacular, pero me metería en la cama de nuevo para hacérselo a ella... empieza a hablarme de su experiencia en este tipo de trabajo, pero me da igual lo que me diga, la quiero tener en mi casa todos los días... así que cuando terminamos de hablar, le pregunté que si quería empezar ya, me dijo que si y le expliqué lo que más o menos quería que me hiciera, aparte de que me follara claro (eso no se lo dije a ella) no sé si le gustaran las mujeres o no, pero esta va a probar mi boca si no hoy, mañana! Me voy a la ducha y voy a aprovechar mis dotes de seducción para que caiga rendida. Desde la ducha la llamo para que venga, abre la puerta y me mira avergonzada, le digo que me acerque la toalla, cuando se va a ir, le digo que necesito que me eche la crema en la espalda porque no llego. Empieza a untarme la crema y me estoy poniendo cachondisima, estamos frente al espejo, yo desnuda, y ella vergonzosa... le digo que no se ponga tensa, que no le voy a hacer nada que no quiera, se le escapa una sonrisa y a mí me da entender que quiere que le haga de todo. Le digo que también me unte la crema por mi culo, y no me esperaba que lo hiciera sin rechistar, empieza a sobármelo y creo que me estoy empezando a mojar, me pone la situación y me pone Carla. Cuando lleva un rato entretenida en mi culo, le pido que me meta un dedo en el. Me mira a través del espejo y me lo mete, empiezo a gemir al sentir su dedo entrar y salir en mi ano. Estoy apoyada en el lavabo y ella dándome por detrás, así que le digo que pare, para llevármela a mi habitación. Desde el baño hasta mi habitación, hemos empezados a besarnos, su lengua juega con la mía, nada más llegar le quito la ropa, tiene unos pechos preciosos, en su justa medida y con unos pezones respingones... me meto toda su teta en mi boca, le doy pequeños mordiscos para que se excite, da un pequeño gemido, así que la tumbo y empiezo a comerme todo su coño. Ahora gime más y me agarra la cabeza para hundirme más en su chochito, mientras le lamo toda su entrepierna, con mi otra mano me estoy masturbando, llevo rato cachonda y capaz de que me corra sin tocarme. Cuando me dice que está a punto de llegar, empiezo a hacer círculos en mi propio clítoris cada vez más rápido para llegar a la vez, noto un flujo en mi boca y otro en mi mano, nos hemos corrido a la vez y ella me pregunta sorprendida que si también había llegado, le digo que si, que el sabor de su coño me había puesto a mil, me dice que ella quiere probar el mío y evidentemente no se lo voy a negar. Como ella sigue tumbada, me arrodillo poniendo todo mi coño en su cara. Ella me lo empieza a comer y yo hago movimientos hacia delante y hacia atrás para sentir más placer, gimo y su lengua parece una bala dentro de mi, que bien lo hace! Ella me pide que me corra en su boca, así que aumenta su velocidad y me corro muchísimo más que antes en su cara... no quiero que esto acabe, así que abro mi cajón y cojo uno de mis juguetitos sexuales favoritos. Pongo a Carla a cuatro patas, como me gusta esta postura, y le empiezo a meter el dildo por su coño jugoso. No sé si grita de placer o de dolor, pero me pide que la folle más, y así hago, meto y saco con fuerza, mientras que veo sus tetas como se mueven de un lado para otro. Ahora meto el dildo por su culo y ahora sí que me dice que le duele, así que cambio de posición, me tumbo, la pongo encima mío y le digo que cabalgue, mientras que me la estoy follando con el dildo la cojo de sus tetas y las estrujo, veo cómo suda y como grita de placer, y yo estoy como una moto, llega a un grito final y rápidamente me quita el dildo y mete sus dedos dentro de mi. Joder, esta chica me hace maravillas con su mano, mi coño va explotar de placer, hasta que lo hace y lleno mis sábanas de mi corrida. Ella se tumba al lado mío y yo le susurró: contratada.....Era un día caluroso de verano. Mis amigas y yo estábamos en una casa de campo, decidimos ir allí a pasar el día. Me sentía bien rodeada de tanta mujer. , pero lo que me pone a mil son las morenas... y en esa piscina había demasiadas morenas por lo que mi ser ya chorreaba por si solo. Me tumbé, me coloqué mis gafas de sol y empecé a tantear el terreno, sabía que alguna esa tarde me la acabaría follando y así fue.
Seguía tumbada y vino una morena, de estatura media, con una sonrisa deslumbrante. Dejo sus cosas y empezó a desvestirse para quedarse en bikini, yo seguía sus movimientos con mis ojos, y estaba muy muy caliente. Puso su culo en pompa haciéndome sentir un cosquilleo en mi coño, solo con mirarla ya me estaba poniendo cachonda, pero no la conocía de nada, era conocida de otras que ya estaban allí... pero yo lo único que me imaginaba era comiéndole toda su raja. Después de darme esa exhibición, se metió en la piscina, hacia demasiado calor y solo se dio un remojón para salir enseguida con su cuerpo mojado, sus grandes pechos estaban llenos de gotas, las cuales yo quería lamer. Por casualidad puso la vista en mi, y yo simplemente le sonreí. Vino hacia a mí, para preguntarme que quién era y aproximadamente estuvimos hablando unos 10 minutos... no paraba de mirarle todo su cuerpo lo que hizo que ella también se excitara. La mayoría entro a la casa para comer, ya que el sol ese día daba muy duro. Ella dijo de entrar pero la cogí del brazo y la junte hasta a mí.
Era ahora o nunca, y mis ganas de follarmela eran inmensas. Le susurré que si quería que nos conociéramos mejor y me dijo que sí sin pensar. La cogí de la mano y la lleve hasta mi coche, dentro había mucha gente y yo quería que gozará a gusto. Abrí la parte de atrás y la empuje hacia dentro. Le empecé a comer la boca, metiéndole la lengua hasta el fondo, y le susurré que me la quería follar sin piedad. Noté su excitación así que baje mi mano hasta su entrepierna, la tenía mojada y eso me ponía aún más, su chocho era grande y jugoso, quería probarlo. Así que le arranque la parte de abajo del biquini de un tirón, baje mi boca y empecé a lamer, y ella gemía y gemía. Mi velocidad iba aumentando y yo no podía parar de comerme ese chochito... en un grito me dijo que parara que se iba a correr, pero yo lo que quería era que me llenara la boca de su jugo, así que no pare, seguí y seguí hasta que se corrió en mi boca. Estoy segura de que es la mejor comida de coño que le han hecho en su vida, porque se corrió muchísimo y eso me excito más. Después le quite la parte de arriba para probar sus dos tetas que me volvían loca, mordisqueaba sus pezones y ella mientras me decía que la follara más. Dicho y hecho, la puse a cuatro patas y le metí los dedos, primero dos, luego tres y hasta que metí cuatro, aquello resbalaba como si nada, empecé a meter y sacar sin piedad quería que gritara y lo estaba consiguiendo. Hasta que pego un último gemido llegando al orgasmo, estábamos sudando, y mi coño también sudaba.
Cogí su cabeza y la puse entre mis piernas. Le ordené que me comiera el coño y que me hiciera correrme en su boca y como buena sumisa lo hizo, y no veas cómo lo hizo, su lengua parecía una polla penetrándome y hizo que me corriera en su propia boca. Las dos disfrutamos en mi bmw, dejando todo mis asientos de piel con corridas de las dos, pero me da igual, Nati me había follado como muy pocas.....
Os voy a ser sincera, me gusta que me lo hagan todo y la casa es demasiado grande, problemas de dinero la verdad que no tengo, así que pensé en contratar a alguien para que me hiciera las tareas, evidentemente escogí que fuera mujer...
Me levanto como puedo de la silla y abro la puerta, me encuentro a una joven morena, que me mira de arriba abajo y se sonroja, después me doy cuenta que es que sigo en tanga y sujetador...
-Nina: perdón por este recibimiento, es que me acabo de despertar... eres la nueva sirvienta no? Tú nombre?
-Carla: no te preocupes, soy Carla y venía para hablar sobre lo del trabajo
-Nina: vale, pues pasa por aquí
La dirijo hasta el salón, y me pongo una camisa que tenía encima de la mesa, creo que ni es mía, porque no me suena. Bueno, me siento en un sofá y ella en otro, os la voy a describir, es delgada y alta, unos ojos verdes impactantes y su pelo negro y ondulado... creo que con la resaca que tengo no me he dado cuenta de lo buena que está! Anoche tuve un trio espectacular, pero me metería en la cama de nuevo para hacérselo a ella... empieza a hablarme de su experiencia en este tipo de trabajo, pero me da igual lo que me diga, la quiero tener en mi casa todos los días... así que cuando terminamos de hablar, le pregunté que si quería empezar ya, me dijo que si y le expliqué lo que más o menos quería que me hiciera, aparte de que me follara claro (eso no se lo dije a ella) no sé si le gustaran las mujeres o no, pero esta va a probar mi boca si no hoy, mañana! Me voy a la ducha y voy a aprovechar mis dotes de seducción para que caiga rendida. Desde la ducha la llamo para que venga, abre la puerta y me mira avergonzada, le digo que me acerque la toalla, cuando se va a ir, le digo que necesito que me eche la crema en la espalda porque no llego. Empieza a untarme la crema y me estoy poniendo cachondisima, estamos frente al espejo, yo desnuda, y ella vergonzosa... le digo que no se ponga tensa, que no le voy a hacer nada que no quiera, se le escapa una sonrisa y a mí me da entender que quiere que le haga de todo. Le digo que también me unte la crema por mi culo, y no me esperaba que lo hiciera sin rechistar, empieza a sobármelo y creo que me estoy empezando a mojar, me pone la situación y me pone Carla. Cuando lleva un rato entretenida en mi culo, le pido que me meta un dedo en el. Me mira a través del espejo y me lo mete, empiezo a gemir al sentir su dedo entrar y salir en mi ano. Estoy apoyada en el lavabo y ella dándome por detrás, así que le digo que pare, para llevármela a mi habitación. Desde el baño hasta mi habitación, hemos empezados a besarnos, su lengua juega con la mía, nada más llegar le quito la ropa, tiene unos pechos preciosos, en su justa medida y con unos pezones respingones... me meto toda su teta en mi boca, le doy pequeños mordiscos para que se excite, da un pequeño gemido, así que la tumbo y empiezo a comerme todo su coño. Ahora gime más y me agarra la cabeza para hundirme más en su chochito, mientras le lamo toda su entrepierna, con mi otra mano me estoy masturbando, llevo rato cachonda y capaz de que me corra sin tocarme. Cuando me dice que está a punto de llegar, empiezo a hacer círculos en mi propio clítoris cada vez más rápido para llegar a la vez, noto un flujo en mi boca y otro en mi mano, nos hemos corrido a la vez y ella me pregunta sorprendida que si también había llegado, le digo que si, que el sabor de su coño me había puesto a mil, me dice que ella quiere probar el mío y evidentemente no se lo voy a negar. Como ella sigue tumbada, me arrodillo poniendo todo mi coño en su cara. Ella me lo empieza a comer y yo hago movimientos hacia delante y hacia atrás para sentir más placer, gimo y su lengua parece una bala dentro de mi, que bien lo hace! Ella me pide que me corra en su boca, así que aumenta su velocidad y me corro muchísimo más que antes en su cara... no quiero que esto acabe, así que abro mi cajón y cojo uno de mis juguetitos sexuales favoritos. Pongo a Carla a cuatro patas, como me gusta esta postura, y le empiezo a meter el dildo por su coño jugoso. No sé si grita de placer o de dolor, pero me pide que la folle más, y así hago, meto y saco con fuerza, mientras que veo sus tetas como se mueven de un lado para otro. Ahora meto el dildo por su culo y ahora sí que me dice que le duele, así que cambio de posición, me tumbo, la pongo encima mío y le digo que cabalgue, mientras que me la estoy follando con el dildo la cojo de sus tetas y las estrujo, veo cómo suda y como grita de placer, y yo estoy como una moto, llega a un grito final y rápidamente me quita el dildo y mete sus dedos dentro de mi. Joder, esta chica me hace maravillas con su mano, mi coño va explotar de placer, hasta que lo hace y lleno mis sábanas de mi corrida. Ella se tumba al lado mío y yo le susurró: contratada.....Era un día caluroso de verano. Mis amigas y yo estábamos en una casa de campo, decidimos ir allí a pasar el día. Me sentía bien rodeada de tanta mujer. , pero lo que me pone a mil son las morenas... y en esa piscina había demasiadas morenas por lo que mi ser ya chorreaba por si solo. Me tumbé, me coloqué mis gafas de sol y empecé a tantear el terreno, sabía que alguna esa tarde me la acabaría follando y así fue.
Seguía tumbada y vino una morena, de estatura media, con una sonrisa deslumbrante. Dejo sus cosas y empezó a desvestirse para quedarse en bikini, yo seguía sus movimientos con mis ojos, y estaba muy muy caliente. Puso su culo en pompa haciéndome sentir un cosquilleo en mi coño, solo con mirarla ya me estaba poniendo cachonda, pero no la conocía de nada, era conocida de otras que ya estaban allí... pero yo lo único que me imaginaba era comiéndole toda su raja. Después de darme esa exhibición, se metió en la piscina, hacia demasiado calor y solo se dio un remojón para salir enseguida con su cuerpo mojado, sus grandes pechos estaban llenos de gotas, las cuales yo quería lamer. Por casualidad puso la vista en mi, y yo simplemente le sonreí. Vino hacia a mí, para preguntarme que quién era y aproximadamente estuvimos hablando unos 10 minutos... no paraba de mirarle todo su cuerpo lo que hizo que ella también se excitara. La mayoría entro a la casa para comer, ya que el sol ese día daba muy duro. Ella dijo de entrar pero la cogí del brazo y la junte hasta a mí.
Era ahora o nunca, y mis ganas de follarmela eran inmensas. Le susurré que si quería que nos conociéramos mejor y me dijo que sí sin pensar. La cogí de la mano y la lleve hasta mi coche, dentro había mucha gente y yo quería que gozará a gusto. Abrí la parte de atrás y la empuje hacia dentro. Le empecé a comer la boca, metiéndole la lengua hasta el fondo, y le susurré que me la quería follar sin piedad. Noté su excitación así que baje mi mano hasta su entrepierna, la tenía mojada y eso me ponía aún más, su chocho era grande y jugoso, quería probarlo. Así que le arranque la parte de abajo del biquini de un tirón, baje mi boca y empecé a lamer, y ella gemía y gemía. Mi velocidad iba aumentando y yo no podía parar de comerme ese chochito... en un grito me dijo que parara que se iba a correr, pero yo lo que quería era que me llenara la boca de su jugo, así que no pare, seguí y seguí hasta que se corrió en mi boca. Estoy segura de que es la mejor comida de coño que le han hecho en su vida, porque se corrió muchísimo y eso me excito más. Después le quite la parte de arriba para probar sus dos tetas que me volvían loca, mordisqueaba sus pezones y ella mientras me decía que la follara más. Dicho y hecho, la puse a cuatro patas y le metí los dedos, primero dos, luego tres y hasta que metí cuatro, aquello resbalaba como si nada, empecé a meter y sacar sin piedad quería que gritara y lo estaba consiguiendo. Hasta que pego un último gemido llegando al orgasmo, estábamos sudando, y mi coño también sudaba.
Cogí su cabeza y la puse entre mis piernas. Le ordené que me comiera el coño y que me hiciera correrme en su boca y como buena sumisa lo hizo, y no veas cómo lo hizo, su lengua parecía una polla penetrándome y hizo que me corriera en su propia boca. Las dos disfrutamos en mi bmw, dejando todo mis asientos de piel con corridas de las dos, pero me da igual, Nati me había follado como muy pocas.....
1 comentarios - En el coche y mi sirvienta el mismo dia