La vieja amiga de la preparatoria

Nos encontramos por facebook por casualidad quizá, pero ella era una de mis mejores amigas cuando cursaba la preparatoria, osea ya hace algunos años, pero por cuestiones que ignoro, perdimos contacto, pero ya extrañaba platicar con ella.

Quedamos en vernos en mi negocio para platicar en persona y reírnos como antes, y así fue, solo que la conversación fue más de nuestros problemas de adultos que por tonterías adolecentes como antes, pero entre la plática salió la ves que en una fiesta terminamos en la cama, y sin más me dijo que lo habíamos hecho muy rico.

La verdad ya no me acordaba muy bien, ya que estaba algo borracho, pero le dije que también lo disfruté. Nos miramos y algo paso, ella me regaló una sonrisa traviesa, y le dije que sería increíble que lo hagamos otra vez, pero fue en tono de broma, pero ella me dijo que le encantaría.

No hacía falta más conversación, tome las llaves del mi camioneta, y nos fuimos al motel más cercano, llegamos a la habitación y nos comenzamos a besar, su boca tenía un agradable sabor y era tibia, su lengua jugaba con la mía y las cosas se encendieron rápidamente, que no alcanzamos a desnudarnos completamente.

Me recosté en la cama y me ayudó a quitarme los pantalones, mi verga, estaba súper dura, mi amiga la tomo entre su mano y comenzó a masturbarme, y se la llevó a boca, haciendo un delicioso oral con garganta profunda incluida, adoro sentir como mi verga llega hasta la garganta de las chicas.

Después fue mi turno, se recostó, y le quite los zapatos, y después lo leggins, tenía una linda y sexy tanga que decidí dejarlo puesto, solo la hice a un lado para ver esa hermosa vagina rasurada, ya estaba húmeda, su olor era delicioso y no decir de su sabor, mientras mi lengua la recorría, entraba y salía y jugaba con su clítoris, ella se iba humedeciendo más y más, gemía delicioso, comenzó a temblar y me dijo que la penetrara.

Fui a buscar un condón a mi pantalón, pero el último que tenía lo había utilizado, se lo comenté, pero ya estábamos muy cachondos, así que me atreví a penetrarla al natural (pero, es mucho mejor con condón, por seguridad chicos) apretaba muy rico, creo que ya los dos estábamos a punto de terminar, que ella comenzó a soltar pequeños chorros, y yo decidí eyacular en sus pechos.

Me miró, llevo sus manos a su pecho y comenzó a repartir mi semen por todos lados, después se llevó sus dedos a su boca, eso me calentó otra vez, muy pocas chicas les gusta el sabor del semen.

Me dijo que me quería limpiar la verga, y lo hizo con su boca.

Nos recostamos y descansamos un poco, nos bañamos y la fui a dejar a su casa, espero que pronto podamos repetirlo.