Yo siempre tuve a mi madre por una mujer normal, estaba casada desde hacia 20 años, se llamaba Edurne y se conservaba bien para su edad, yo a mis 17 años nunca habia imaginado que la madre a la que tenia por una buena esposa y madre era en realidad una golfa de campeonato.
Era un dia de agosto, las clases habian terminado y quede con mis amigos para ir a jugar un partido de futbol, Samuel, Marcos y Jorge llegaron pronto y yo todavía estaba dormido.
Cuando desperte oi ruidos que venian del salon, cuando baje me lleve una gran impresión, alli estaban mis amigos y mi madre hablaba con ellos, cuando iba a bajar las escaleras escuche algo que me hizo volver a pensarmelo.
"Quiero que me folleis los 3, aquí mismo, con mi hijo en casa, para que sea mas morboso y si baja a desayunar y me ve comiendo vuestras pollas pues mejor, siempre me ha encantado humillar a su padre, ahora que mi hijo va siendo mayor creo que tambien sera divertido hacerlo con el".
Yo no podia creer lo que escuchaba, yo no sabia que mi madre era una guarra, la imagen que tenia de ella, se desmorono ante mi, follarse a mis amigos con toda la cara dura, sabiendo que yo podia pillarles era de ser una zorrona de campeonato.
Como supe mas tarde, mama se follaba todo lo que se ponia a tiro y era un placer para ella humillar a los varones de la familia.
Me quede observando desde las escaleras.
Sin perdida de tiempo, Marcos que estaba a la derecha de mi madre, le puso una mano sobre el muslo y comenzó a acariciarle la pierna por encima del pantalón, con mucha suavidad y mirándola sonrientemente a los ojos con expresión lasciva.
Unos segundos mas tarde era Samuel el que la tocaba.
Mi madre mantenía su cabeza baja observando como aquellas dos manos acariciaban sabiamente su cuerpo. Había dejado caer sus brazos a los costados para facilitar el acceso a sus eventuales amantes, y cuando Marcos presiono su muslo con un poco mas de firmeza para que entreabriera un poco mas las piernas, ella le obedeció con docilidad.
¿Por qué no nos haces un striptease, querida? – Le dijo Jorge
– Queremos ver las maravillas que se esconden bajo esa ropa.
Tras un instante de vacilación, mama se levanto y con una provocada lentitud, encogió él estomago y desabrocho el botón de sus ajustados téjanos.
Luego, mirando fijamente a los ojos del publico hizo descender la cremallera de los mismos en la totalidad de su recorrido, dejando entrever la parte superior de las blancas bragas que llevaba debajo.
A continuación, introdujo sus pulgares por entre la cintura de los téjanos y sus caderas, y los fue haciendo descender sensualmente a lo largo de sus piernas hasta quitárselos completamente.
Yo me mantenía embobado e inmóvil contemplando como mi madre se desnudaba, por tanto ella cogió su jersey por la parte inferior y lo fue levantando lentamente hasta hacerlo salir por encima de su cabeza, quedando ya cubierta exclusivamente por su blanca y minúscula ropa interior.
Lentamente fueron apareciendo sus firmes y bien torneadas tetas conforme la prenda descendía a lo largo de sus brazos, mostrándonos unos pezones totalmente erectos que ponían de manifiesto la calentura que hacia rato soportaba mama.
Jorge la atrajo hacia el y la bajo las bragas hasta los tobillos.
Levantando primero una pierna y después la otra, mama se deshizo de las bragas, que fueron a parar junto con el resto de su ropa que se amontonaba en el centro del salon
Ya es hora de que empecemos a divertirnos, muñequita. – Le dijo mientras le separaba las piernas y su coño quedaba totalmente expuesto a las miradas del resto.
– Quiero oírte gritar de placer como una autentica zorra.
Tras sus palabras, puso su mano sobre el dorso de una de las de mama y se la llevo hasta entre las piernas de mama. Las dos manos juntas, guiadas siempre por la de Jorge, comenzaron un excitante masaje sobre sus labios vaginales que rápidamente hicieron que mama levantara la cabeza hacia el techo con los ojos cerrados y dejara escapar de su boca la primera exclamación de verdadero placer.
A esas alturas, Marcos tenia la polla más dura que un barrote de acero. En tan solo unos segundos se levanto del sofá y se despojo de toda su ropa, colocándose de pie al lado de mama de forma que su erecto rabo quedaba situado justo a la altura de su cara.
Mientras tanto, Samuel no había perdido el tiempo, se había desabrochado el pantalón y deslizado sus calzoncillos hasta un poco por debajo de los huevos para mostrar un pollon de piel oscura totalmente empinado.
El jodido tenia una herramienta de armas tomar, no mediría menos de veinte o veintidós centímetros, y su grosor era semejante al de una de las muñecas de mama.
Mama, que ya estaba ciega de placer, al darse cuenta de la maravilla que Samuel tenia entre las piernas, rápidamente se la agarro con su mano libre y comenzó a meneársela acompasadamente y con largos movimientos debido a la longitud de aquel erecto cipote.
Con unos hábiles movimientos cerro su puño sobre la mano que mama movía entre sus labios vaginales de tal forma que el dedo corazón de ambos quedaba superpuesto uno sobre el otro, la mano de mi madre debajo y la de Samuel siempre por encima, sujetándola firmemente y acompañándola en sus movimientos.
De improviso, y sin que mama se lo esperara, empezó a presionar con su mano, y los dos dedos, el de Samuel y el de mi madre, se hundieron por completo en su húmeda raja.
Sin perder un instante, Samuel comenzó a practicarle a mama un frenético mete saca donde los dos dedos llegaban simultáneamente hasta el fondo de su coño, mientras que el resto de los nudillos de las dos manos entrelazadas chocaba violentamente contra el pubis de mi madre.
Acto seguido, y con una cara de verdadera perversión, comenzó a restregarle el cipote por las mejillas, la nariz y la barbilla.
Jorge se acerco con la polla en la mano y tras unas cuantas restregadas de polla entre una y otra parte de su cara, mama comenzó a buscar la punta de aquel capullo con su lengua, mientras el placer que los dos dedos le producían en el clítoris, no le permitía dejar de gemir ni un solo momento.
Por descontado que Jorge no iba a rechazar la clara invitación que mi madre le hacia para que le follara la boca, y tras los primeros lengüetazos rápidamente le hizo pasar su hinchado pene por entre los labios hasta que la punta del capullo debió de toparse con la garganta de mama.
Durante unos segundos mantuvo la polla totalmente dentro de la boca de mama, sujetándole la cabeza firmemente con las dos manos, que agarraban su pelo con los puños cerrados un poco por detrás de las orejas.
Mientras los dos dedos seguían entrando y saliendo frenéticamente de su coño y Samuel se deleitaba comiéndole y sobandole las tetas, Jorge se la metía en la boca con contundentes movimientos de cadera, pero en vez de acompasar sus envestidas en lo que hubiera sido una mamada convencional, se detenía cuando la nariz de mama quedaba casi oculta entre los pelos que Jorge tenia sobre el cipote y sus huevos chocaban con la barbilla de mi madre, de tal forma que hubo ocasiones en las que temí que la polla en el fondo de la garganta le fuera a producir arcadas.
Pero a esas alturas, mama ya estaba desbocada de lujuria y atendía convenientemente y con sumisión a los distintos juegos que sus tres eventuales amantes le iban proponiendo, tan solo la mano que mantenía sobre el pollazo de Jorge había cesado en sus movimientos, aunque la mantenía sujeta entre sus dedos, como si la tuviera en espera para ocuparse de ella mas tarde.
Dirigiendose a Marcos que aguardaba mientras mama disfrutaba de las manos de Samuel y la polla de Jorge en la boca le dijo
Necesito una polla dentro de mí ya. – Le dijo con una cara de puta que yo jamás le había visto. - ¿Cuál me va a follar primero?
Los tres intercambiaron una sonrisa de complicidad mientras Jorge daba un paso atrás y Samuel le daba unas palmaditas en el culo a mi madre indicándole que se levantara.
Que empiece Marcos. – Le contestaba a mi madre Samuel poniéndose en pie y bajándose los pantalones completamente. – Yo también quiero comprobar si eres una buena mamadora.
Marcos dirigió a mama hacia el extremo del sofá más cercano a donde yo me encontraba. Se sentó un poco ladeada, con su espalda levemente apoyada en el reposacodos del tresillo, y dejando en el suelo su pierna izquierda, levanto la otra y la coloco semiflexionada contra el respaldo, quedando totalmente abierta de piernas frente a Marcos, que ya se dirigía a ella meneándose la polla.
Mientras Samuel se despojaba de su ropa lo mas rápidamente que podía, Marcos se arrodillo entre las piernas de mama y se recreo durante unos segundos restregando la punta de su capullo por entre los húmedos labios vaginales de mi madre.
Mama ya no tenia el cuerpo para jueguecitos, así que agarro con su mano el empinado rabo de Marcos y se lo coloco presurosa en la entrada de su encharcado coño. Este se inclino un poco hacia delante, quedando apoyada una de sus manos en el respaldo del sofá mientras la otra volvía a magrear con ansia las tetas de mi madre.
Ella lo cogió por las caderas, y con un mas que expresivo - ¡¡¡Empuja fuerte, cabron!!! – Tiro de el de tal forma que la polla de Marcosdebió de chocar violentamente con su matriz, ya que le hizo soltar un tremendo grito al tiempo que sus ojos se abrían como platos a causa de las sensaciones que empezaban a recorrerla por dentro.
Marcos comenzó entonces a darle tales sacudidas a mi madre en el coño, que incluso pude observar como ella cerraba sus puños en torno al tapizado del sofá y la tela de este quedaba aprisionada entre sus dedos. Además, Marcos ya había dejado de sóbrale las tetas a mama y ahora se dedicaba a pellizcar y retorcer alternativamente sus pezones con el dedo pulgar e índice de su mano izquierda.
Mientras tanto, Samuel se había colocado justo por detrás de mi madre y contemplaba la escena pajeandose la enorme polla, que más bien se asemejaba a la de un caballo que a la de un hombre, unos centímetros por encima de su cabeza.
Claro, que no estaba dispuesto a permanecer mucho tiempo en inactividad, además de que como ya había manifestado hacia solo unos minutos, tenia muy claro por donde le quería meter aquella estaca a mama.
Unos segundos mas tarde, mientras mi madre seguía gimiendo y gritando de placer al compás de cada embestida de marcos tan fuertes que la hacían desplazarse casi un palmo sobre el sillón, Samuel la cogió por debajo de la barbilla, aferrándola con su pulgar en una mejilla y el resto de los dedos en la otra, y tiro de su cabeza hasta quedar completamente colgando por fuera del reposacodos del tresillo.
En ese momento decidi entrar en escena, baje gritando y llamando a mis amigos cabrones, mi madre era guarra pero tampoco habia imginado nunca que mis amigos de toda la vida, dejaran de lado nuestra amistad por un polvo, desde luego no es de amigos follarse a la madre de tu compañero, ¿Qué pensariais vosotros sobre vuestros amigos si un dia al entrar en casa os los encontrais en el sofa enculando a vuestra madre?
Mi madre me mando callar y dijo
"Ya sabes que soy una guarra, lo he sido siempre, pero hasta ahora eras demasiado niño para hacertelo saber, ahora ya sabes que tu madre necesita tener una polla bien adentro todos los dias, ya sea la de tu padre, la de tus amigos o la del vecino, puedes irte fuera y volver luego o quedarte y ver como tus amigos me follan, como si te quieres masturbar mientras ves a tus colegas darme por el culo, tu mismo, pero no molestes o te doy dos tortas".
Decidi quedarme sin importarme nada.
Samuel hundió su descomunal polla en la boca de mama, que no pudo menos que abrir otra vez sus ojos al máximo y emitir un ininteligible sonido de protesta mientras su nariz quedaba prácticamente escondida entre los cojones de Samuel.
Con su cabeza colgando boca abajo por fuera del apoya codos del tresillo y sujeta por la gran mano que Samuel aferraba a su garganta, a mama no le quedo mas remedio que tragarse aquel descomunal pollon que perforaba su boca perfectamente sincronizado con las embestidas que Marcos le propinaba entre las piernas.
Jorge se sento junto a mi y me dijo que tenia una madre muy puta, que eso se lo tenia que a ver dicho antes para a verla follado antes
A mi madre ya le era imposible cualquier tipo de movimiento entre los dos tíos, y lo único que podía hacer era emitir entrecortados gemidos cuando las dos pollas le llenaban el coño y la boca simultáneamente.
Yo estaba en el sillon mirando embobado como aquellos dos cabrones sonreían y disfrutaban follandose a mi madre.
Durante mas de cinco minutos estuve contemplando inmóvil como mama se había convertido en un juguete de placer entre los dos chavales y desempeñaba el papel de puta a la perfección, hasta que Samuel, a punto de correrse, saco su ensalivada polla de la boca de mi madre y se dio unos segundos de descanso.
Poco después Marcos también libero el dolorido coño de mama y se permitió un pequeño respiro antes de retirarse de entre las piernas de mi madre, que permanecía excusa en el sofá tal como sus dos eventuales amantes la habían dejado.
Jorge se levanto entonces y fue a por mama.
Aun no había recuperado el ritmo normal de su respiración cuando Jorger la cogió del brazo he izo que se levantara. Luego se acomodo en el centro del sillón, con las piernas entreabiertas y la polla mirando al techo, e hizo indicaciones a mi madre para que se sentara encima de el.
Súbete a esta maravilla, preciosa. – Le dijo Jorge señalándose el erecto rabo y palmeándose luego los muslos con ambas manos. – Ahora viene lo mejor, bomboncito.
Sin apartar la vista de la polla de Jorge, mama obedeció sumisamente colocando cada una de sus rodillas a los lados de las caderas de Jorge y apoyándose con las manos en el respaldo del sillón a izquierda y derecha de la cabeza.
Mientras tanto, Marcos se reponía del esfuerzo físico realizado en pie a su lado, meneándose suavemente la polla y observando a mi madre colocándose encima de Jorge.
Este no se demoro por mas tiempo, y sujetando a mama por las caderas, la coloco en la posición ideal para que la punta de su capullo quedara en puertas de los labios vaginales de mi madre.
Cuando comprobó que su que su rabo estaba perfectamente encarado hacia el coño de mama y sin previo aviso, tiro de ella violentamente hacia abajo al tiempo que impulsaba también su trasero en dirección a la entrepierna de mi madre, clavándole la descomunal polla hasta las entrañas de un solo golpe.
Mama emitió un potente grito de dolor y se aferró con las manos al respaldo del sillón, al tiempo que arqueaba su espalda con una convulsión semejante a haber recibido una potente descarga eléctrica, y sin darle él más mínimo cuartel, colocando sus enormes manos en las nalgas de mi madre, Jorger comenzó a dirigir su cuerpo en un frenético movimiento de vaivén que hacia que su polla entrara y saliera del coño de mama a una velocidad de vértigo.
Tras media docena de furiosas envestidas, cuando la vagina de mi madre se acomodo a las fantásticas medidas de la herramienta de Jorge, esta sustituyo los lastimeros gritos iniciales por elocuentes gemidos de placer, era ella misma la que con sus hábiles movimientos de caderas buscaba la máxima penetración posible.
Los dos follaban como locos ante las miradas de Marcos a un lado, que continuaba masajeándose el rabo con una sonrisa enorme en la cara, y yo y Samuel al otro.
La follada y la comida de tetas que Jorge le estaba proporcionando a mi madre no disminuían en intensidad, sin embargo, el dedo que hurgaba en su culo si que iba poco a poco abriéndose camino en su interior, hasta el punto de que ya desaparecía dentro de el mas de la mitad y era cuestión de segundos que mama tuviera también completamente ocupada su puerta trasera.
Cuándo inevitablemente Jorge llego con su dedo al fondo del culo de mi madre, esta repitió casi de forma calcada la convulsión que había experimentado al meterse en el coño la tranca, y con un expresivo - ¡¡¡Ssiiiiii.........!!! – Imprimió aun más velocidad a sus movimientos provocando que polla y dedo la perforaran con mas ímpetu por sus dos agujeros.
No tengo la menor duda de que la acción de Jorge dilatando el ano de mi madre había sido premeditada, ya que tras media docena de incursiones del dedo de Jorge en el culo de mama, , este lo libero al ver que Marcos se posicionaba tras la espalda de mi madre y apuntaba con su pene al expuesto agujero negro de mama que tan hábilmente Jorgel había preparado.
Jorge agarro las cachas de mama, y al tiempo que la mantenía quieta con toda su polla dentro, tiro de las nalgas de mi madre hacia fuera para facilitar el ataque trasero que iba a iniciar Marcos.
Marcos empezó a empujar despacio pero con firmeza, y durante los dos o tres segundos que tardo su rabo en introducirse completamente en el ano de mi madre esta se mantuvo sumisamente inmóvil sobre Jorge, y a medida que su culo se iba llenando de polla, iba emitiendo un grito que fue ganando en estridencia y culmino cuando la penetración fue tan profunda que casi se tocaban los huevos de los dos tipos.
Para mi sorpresa, fue ella la que empezó a menearse hacia delante y hacia atrás entre las dos pollas, y segundos mas tarde los dos chavales la acompañaban sincronizadamente con golpes de cadera que machacaban a mama por sus dos orificios y la obligaban a emitir elocuentes y entrecortados jadeos que invitaban a pensar que se mantenía en un estado de orgasmo constante.
Mama se levantaba sobre sus rodillas y se dejaba caer con todo el peso de su cuerpo encima de la pelvis de Jorge, cuya enorme polla debía de entrar por dentro de mi madre hasta poco mas abajo del ombligo. Marcos aprovechaba la fuerza de dichos movimientos para impulsar su rabo en el dilatado culo de mama, que lo absorbía por completo sin ninguna dificultad.
¡¡¡Joder!!! Que polvazo me están echando. – Me dijo mi madre jadeando y sin dejar de bailar entre los dos chavales. – Lo que me están metiendo estos tíos no son pollas, son cañones.
Tras las palabras de mi madre tanto Jorge como Marcos se afanaron aun más de que esa era victima e incrementaron la velocidad y la fuerza de las envestidas, cosa que mama agradeció con los explícitos gritos de otro orgasmo.
Estas disfrutando de lo lindo, ¿verdad, zorra? – Dijo entonces Jorge volviendo a sóbrale las tetas a mi madre con total descaro.
Samuel se coloco a la derecha de mama, subiendo un pie encima del tresillo y deslizando sus pantalones unos centímetros mas hasta que también sus huevos quedaron al aire. Y sin demorarse mas, agarro a mi madre del pelo y le hundiola polla en la boca hasta que noto que su capullo tocaba ya con su garganta.
Los tres la penetrában prácticamente al mismo por el agujero que habían elegido, y mi madre debía de ver el paraíso cada vez que las tres pollas taladraban su cuerpo sin darle un momento de respiro.
En ocasiones hacia vanos intentos de gemir, gritar o jadear, pero las rápidas envestidas de la polla de Samuel follandole la boca, solo le permitían emitir ahogados sonidos guturales que se perdían entre las exclamaciones de placer que los tres liberában a causa de la salvaje orgía en la que estában enfrascados.
Sus envestidas ganaron en fuerza, pero cuando su polla llenaba el culo de mi madre s detenía unos instantes y se mantenía dentro de ella hasta que transcurrían unos segundos. Luego sacaba su pene del agujero trasero de mama, y repetía la operación tras volver a encularla con un potente golpe de caderas.
Tras media docena de idénticas embestidas, Marcos soltó un enorme grito de placer y dejo su polla mas tiempo del habitual dentro del culo de mama, a la que este ultimo brutal golpe de caderas le había hecho abrir los ojos como si le estuviera dando por detrás el mismísimo demonio.
No cabía ninguna duda. Marcos se acababa de correr en su culo y su semen ya debía de recorrer todo el intestino de mi madre.
Samuel, sujeto aun con mas fuerza la cabeza de mi madre y se dispuso a inundar su garganta con toda la leche que había acumulado en sus huevos.
Un segundo después, con la nariz casi aplastada contra su vientre, la boca de mama comenzaba a llenarse con tal cantidad de leche que su garganta no daba abasto para tragar todo lo que salía de la polla de Samuel.
Aunque se afanaba en no desperdiciar ni una sola gota, pronto se le empezaron a inflar los mofletes a causa de la abundante corrida, y no pudo evitar que un poco mas tarde el semen comenzara a escapársele por la comisura de los labios.
Cuando ya era evidente que Jorge estaba a punto de regarle él coño a mi madre, esta empezó a votar sobre él con un desbocado ímpetu, y jadeando y gimiendo agarro la polla de Samuel por su base y comenzó a restregársela por toda la cara, dándole de vez en cuando algún que otro lametazo e impregnándose todo su rostro con los restos de semen que quedaban en ella.
Poco después, Jorge se corrio en las entrañas de mi madre, se vistieron y me dijeron que ya quedariamos otro dia para jugar al futbol, que se habia echo muy tarde, alli nos dejaron, mama sobre el sofa, con sus 3 agujeros repletos de la leche de mis amigos
Era un dia de agosto, las clases habian terminado y quede con mis amigos para ir a jugar un partido de futbol, Samuel, Marcos y Jorge llegaron pronto y yo todavía estaba dormido.
Cuando desperte oi ruidos que venian del salon, cuando baje me lleve una gran impresión, alli estaban mis amigos y mi madre hablaba con ellos, cuando iba a bajar las escaleras escuche algo que me hizo volver a pensarmelo.
"Quiero que me folleis los 3, aquí mismo, con mi hijo en casa, para que sea mas morboso y si baja a desayunar y me ve comiendo vuestras pollas pues mejor, siempre me ha encantado humillar a su padre, ahora que mi hijo va siendo mayor creo que tambien sera divertido hacerlo con el".
Yo no podia creer lo que escuchaba, yo no sabia que mi madre era una guarra, la imagen que tenia de ella, se desmorono ante mi, follarse a mis amigos con toda la cara dura, sabiendo que yo podia pillarles era de ser una zorrona de campeonato.
Como supe mas tarde, mama se follaba todo lo que se ponia a tiro y era un placer para ella humillar a los varones de la familia.
Me quede observando desde las escaleras.
Sin perdida de tiempo, Marcos que estaba a la derecha de mi madre, le puso una mano sobre el muslo y comenzó a acariciarle la pierna por encima del pantalón, con mucha suavidad y mirándola sonrientemente a los ojos con expresión lasciva.
Unos segundos mas tarde era Samuel el que la tocaba.
Mi madre mantenía su cabeza baja observando como aquellas dos manos acariciaban sabiamente su cuerpo. Había dejado caer sus brazos a los costados para facilitar el acceso a sus eventuales amantes, y cuando Marcos presiono su muslo con un poco mas de firmeza para que entreabriera un poco mas las piernas, ella le obedeció con docilidad.
¿Por qué no nos haces un striptease, querida? – Le dijo Jorge
– Queremos ver las maravillas que se esconden bajo esa ropa.
Tras un instante de vacilación, mama se levanto y con una provocada lentitud, encogió él estomago y desabrocho el botón de sus ajustados téjanos.
Luego, mirando fijamente a los ojos del publico hizo descender la cremallera de los mismos en la totalidad de su recorrido, dejando entrever la parte superior de las blancas bragas que llevaba debajo.
A continuación, introdujo sus pulgares por entre la cintura de los téjanos y sus caderas, y los fue haciendo descender sensualmente a lo largo de sus piernas hasta quitárselos completamente.
Yo me mantenía embobado e inmóvil contemplando como mi madre se desnudaba, por tanto ella cogió su jersey por la parte inferior y lo fue levantando lentamente hasta hacerlo salir por encima de su cabeza, quedando ya cubierta exclusivamente por su blanca y minúscula ropa interior.
Lentamente fueron apareciendo sus firmes y bien torneadas tetas conforme la prenda descendía a lo largo de sus brazos, mostrándonos unos pezones totalmente erectos que ponían de manifiesto la calentura que hacia rato soportaba mama.
Jorge la atrajo hacia el y la bajo las bragas hasta los tobillos.
Levantando primero una pierna y después la otra, mama se deshizo de las bragas, que fueron a parar junto con el resto de su ropa que se amontonaba en el centro del salon
Ya es hora de que empecemos a divertirnos, muñequita. – Le dijo mientras le separaba las piernas y su coño quedaba totalmente expuesto a las miradas del resto.
– Quiero oírte gritar de placer como una autentica zorra.
Tras sus palabras, puso su mano sobre el dorso de una de las de mama y se la llevo hasta entre las piernas de mama. Las dos manos juntas, guiadas siempre por la de Jorge, comenzaron un excitante masaje sobre sus labios vaginales que rápidamente hicieron que mama levantara la cabeza hacia el techo con los ojos cerrados y dejara escapar de su boca la primera exclamación de verdadero placer.
A esas alturas, Marcos tenia la polla más dura que un barrote de acero. En tan solo unos segundos se levanto del sofá y se despojo de toda su ropa, colocándose de pie al lado de mama de forma que su erecto rabo quedaba situado justo a la altura de su cara.
Mientras tanto, Samuel no había perdido el tiempo, se había desabrochado el pantalón y deslizado sus calzoncillos hasta un poco por debajo de los huevos para mostrar un pollon de piel oscura totalmente empinado.
El jodido tenia una herramienta de armas tomar, no mediría menos de veinte o veintidós centímetros, y su grosor era semejante al de una de las muñecas de mama.
Mama, que ya estaba ciega de placer, al darse cuenta de la maravilla que Samuel tenia entre las piernas, rápidamente se la agarro con su mano libre y comenzó a meneársela acompasadamente y con largos movimientos debido a la longitud de aquel erecto cipote.
Con unos hábiles movimientos cerro su puño sobre la mano que mama movía entre sus labios vaginales de tal forma que el dedo corazón de ambos quedaba superpuesto uno sobre el otro, la mano de mi madre debajo y la de Samuel siempre por encima, sujetándola firmemente y acompañándola en sus movimientos.
De improviso, y sin que mama se lo esperara, empezó a presionar con su mano, y los dos dedos, el de Samuel y el de mi madre, se hundieron por completo en su húmeda raja.
Sin perder un instante, Samuel comenzó a practicarle a mama un frenético mete saca donde los dos dedos llegaban simultáneamente hasta el fondo de su coño, mientras que el resto de los nudillos de las dos manos entrelazadas chocaba violentamente contra el pubis de mi madre.
Acto seguido, y con una cara de verdadera perversión, comenzó a restregarle el cipote por las mejillas, la nariz y la barbilla.
Jorge se acerco con la polla en la mano y tras unas cuantas restregadas de polla entre una y otra parte de su cara, mama comenzó a buscar la punta de aquel capullo con su lengua, mientras el placer que los dos dedos le producían en el clítoris, no le permitía dejar de gemir ni un solo momento.
Por descontado que Jorge no iba a rechazar la clara invitación que mi madre le hacia para que le follara la boca, y tras los primeros lengüetazos rápidamente le hizo pasar su hinchado pene por entre los labios hasta que la punta del capullo debió de toparse con la garganta de mama.
Durante unos segundos mantuvo la polla totalmente dentro de la boca de mama, sujetándole la cabeza firmemente con las dos manos, que agarraban su pelo con los puños cerrados un poco por detrás de las orejas.
Mientras los dos dedos seguían entrando y saliendo frenéticamente de su coño y Samuel se deleitaba comiéndole y sobandole las tetas, Jorge se la metía en la boca con contundentes movimientos de cadera, pero en vez de acompasar sus envestidas en lo que hubiera sido una mamada convencional, se detenía cuando la nariz de mama quedaba casi oculta entre los pelos que Jorge tenia sobre el cipote y sus huevos chocaban con la barbilla de mi madre, de tal forma que hubo ocasiones en las que temí que la polla en el fondo de la garganta le fuera a producir arcadas.
Pero a esas alturas, mama ya estaba desbocada de lujuria y atendía convenientemente y con sumisión a los distintos juegos que sus tres eventuales amantes le iban proponiendo, tan solo la mano que mantenía sobre el pollazo de Jorge había cesado en sus movimientos, aunque la mantenía sujeta entre sus dedos, como si la tuviera en espera para ocuparse de ella mas tarde.
Dirigiendose a Marcos que aguardaba mientras mama disfrutaba de las manos de Samuel y la polla de Jorge en la boca le dijo
Necesito una polla dentro de mí ya. – Le dijo con una cara de puta que yo jamás le había visto. - ¿Cuál me va a follar primero?
Los tres intercambiaron una sonrisa de complicidad mientras Jorge daba un paso atrás y Samuel le daba unas palmaditas en el culo a mi madre indicándole que se levantara.
Que empiece Marcos. – Le contestaba a mi madre Samuel poniéndose en pie y bajándose los pantalones completamente. – Yo también quiero comprobar si eres una buena mamadora.
Marcos dirigió a mama hacia el extremo del sofá más cercano a donde yo me encontraba. Se sentó un poco ladeada, con su espalda levemente apoyada en el reposacodos del tresillo, y dejando en el suelo su pierna izquierda, levanto la otra y la coloco semiflexionada contra el respaldo, quedando totalmente abierta de piernas frente a Marcos, que ya se dirigía a ella meneándose la polla.
Mientras Samuel se despojaba de su ropa lo mas rápidamente que podía, Marcos se arrodillo entre las piernas de mama y se recreo durante unos segundos restregando la punta de su capullo por entre los húmedos labios vaginales de mi madre.
Mama ya no tenia el cuerpo para jueguecitos, así que agarro con su mano el empinado rabo de Marcos y se lo coloco presurosa en la entrada de su encharcado coño. Este se inclino un poco hacia delante, quedando apoyada una de sus manos en el respaldo del sofá mientras la otra volvía a magrear con ansia las tetas de mi madre.
Ella lo cogió por las caderas, y con un mas que expresivo - ¡¡¡Empuja fuerte, cabron!!! – Tiro de el de tal forma que la polla de Marcosdebió de chocar violentamente con su matriz, ya que le hizo soltar un tremendo grito al tiempo que sus ojos se abrían como platos a causa de las sensaciones que empezaban a recorrerla por dentro.
Marcos comenzó entonces a darle tales sacudidas a mi madre en el coño, que incluso pude observar como ella cerraba sus puños en torno al tapizado del sofá y la tela de este quedaba aprisionada entre sus dedos. Además, Marcos ya había dejado de sóbrale las tetas a mama y ahora se dedicaba a pellizcar y retorcer alternativamente sus pezones con el dedo pulgar e índice de su mano izquierda.
Mientras tanto, Samuel se había colocado justo por detrás de mi madre y contemplaba la escena pajeandose la enorme polla, que más bien se asemejaba a la de un caballo que a la de un hombre, unos centímetros por encima de su cabeza.
Claro, que no estaba dispuesto a permanecer mucho tiempo en inactividad, además de que como ya había manifestado hacia solo unos minutos, tenia muy claro por donde le quería meter aquella estaca a mama.
Unos segundos mas tarde, mientras mi madre seguía gimiendo y gritando de placer al compás de cada embestida de marcos tan fuertes que la hacían desplazarse casi un palmo sobre el sillón, Samuel la cogió por debajo de la barbilla, aferrándola con su pulgar en una mejilla y el resto de los dedos en la otra, y tiro de su cabeza hasta quedar completamente colgando por fuera del reposacodos del tresillo.
En ese momento decidi entrar en escena, baje gritando y llamando a mis amigos cabrones, mi madre era guarra pero tampoco habia imginado nunca que mis amigos de toda la vida, dejaran de lado nuestra amistad por un polvo, desde luego no es de amigos follarse a la madre de tu compañero, ¿Qué pensariais vosotros sobre vuestros amigos si un dia al entrar en casa os los encontrais en el sofa enculando a vuestra madre?
Mi madre me mando callar y dijo
"Ya sabes que soy una guarra, lo he sido siempre, pero hasta ahora eras demasiado niño para hacertelo saber, ahora ya sabes que tu madre necesita tener una polla bien adentro todos los dias, ya sea la de tu padre, la de tus amigos o la del vecino, puedes irte fuera y volver luego o quedarte y ver como tus amigos me follan, como si te quieres masturbar mientras ves a tus colegas darme por el culo, tu mismo, pero no molestes o te doy dos tortas".
Decidi quedarme sin importarme nada.
Samuel hundió su descomunal polla en la boca de mama, que no pudo menos que abrir otra vez sus ojos al máximo y emitir un ininteligible sonido de protesta mientras su nariz quedaba prácticamente escondida entre los cojones de Samuel.
Con su cabeza colgando boca abajo por fuera del apoya codos del tresillo y sujeta por la gran mano que Samuel aferraba a su garganta, a mama no le quedo mas remedio que tragarse aquel descomunal pollon que perforaba su boca perfectamente sincronizado con las embestidas que Marcos le propinaba entre las piernas.
Jorge se sento junto a mi y me dijo que tenia una madre muy puta, que eso se lo tenia que a ver dicho antes para a verla follado antes
A mi madre ya le era imposible cualquier tipo de movimiento entre los dos tíos, y lo único que podía hacer era emitir entrecortados gemidos cuando las dos pollas le llenaban el coño y la boca simultáneamente.
Yo estaba en el sillon mirando embobado como aquellos dos cabrones sonreían y disfrutaban follandose a mi madre.
Durante mas de cinco minutos estuve contemplando inmóvil como mama se había convertido en un juguete de placer entre los dos chavales y desempeñaba el papel de puta a la perfección, hasta que Samuel, a punto de correrse, saco su ensalivada polla de la boca de mi madre y se dio unos segundos de descanso.
Poco después Marcos también libero el dolorido coño de mama y se permitió un pequeño respiro antes de retirarse de entre las piernas de mi madre, que permanecía excusa en el sofá tal como sus dos eventuales amantes la habían dejado.
Jorge se levanto entonces y fue a por mama.
Aun no había recuperado el ritmo normal de su respiración cuando Jorger la cogió del brazo he izo que se levantara. Luego se acomodo en el centro del sillón, con las piernas entreabiertas y la polla mirando al techo, e hizo indicaciones a mi madre para que se sentara encima de el.
Súbete a esta maravilla, preciosa. – Le dijo Jorge señalándose el erecto rabo y palmeándose luego los muslos con ambas manos. – Ahora viene lo mejor, bomboncito.
Sin apartar la vista de la polla de Jorge, mama obedeció sumisamente colocando cada una de sus rodillas a los lados de las caderas de Jorge y apoyándose con las manos en el respaldo del sillón a izquierda y derecha de la cabeza.
Mientras tanto, Marcos se reponía del esfuerzo físico realizado en pie a su lado, meneándose suavemente la polla y observando a mi madre colocándose encima de Jorge.
Este no se demoro por mas tiempo, y sujetando a mama por las caderas, la coloco en la posición ideal para que la punta de su capullo quedara en puertas de los labios vaginales de mi madre.
Cuando comprobó que su que su rabo estaba perfectamente encarado hacia el coño de mama y sin previo aviso, tiro de ella violentamente hacia abajo al tiempo que impulsaba también su trasero en dirección a la entrepierna de mi madre, clavándole la descomunal polla hasta las entrañas de un solo golpe.
Mama emitió un potente grito de dolor y se aferró con las manos al respaldo del sillón, al tiempo que arqueaba su espalda con una convulsión semejante a haber recibido una potente descarga eléctrica, y sin darle él más mínimo cuartel, colocando sus enormes manos en las nalgas de mi madre, Jorger comenzó a dirigir su cuerpo en un frenético movimiento de vaivén que hacia que su polla entrara y saliera del coño de mama a una velocidad de vértigo.
Tras media docena de furiosas envestidas, cuando la vagina de mi madre se acomodo a las fantásticas medidas de la herramienta de Jorge, esta sustituyo los lastimeros gritos iniciales por elocuentes gemidos de placer, era ella misma la que con sus hábiles movimientos de caderas buscaba la máxima penetración posible.
Los dos follaban como locos ante las miradas de Marcos a un lado, que continuaba masajeándose el rabo con una sonrisa enorme en la cara, y yo y Samuel al otro.
La follada y la comida de tetas que Jorge le estaba proporcionando a mi madre no disminuían en intensidad, sin embargo, el dedo que hurgaba en su culo si que iba poco a poco abriéndose camino en su interior, hasta el punto de que ya desaparecía dentro de el mas de la mitad y era cuestión de segundos que mama tuviera también completamente ocupada su puerta trasera.
Cuándo inevitablemente Jorge llego con su dedo al fondo del culo de mi madre, esta repitió casi de forma calcada la convulsión que había experimentado al meterse en el coño la tranca, y con un expresivo - ¡¡¡Ssiiiiii.........!!! – Imprimió aun más velocidad a sus movimientos provocando que polla y dedo la perforaran con mas ímpetu por sus dos agujeros.
No tengo la menor duda de que la acción de Jorge dilatando el ano de mi madre había sido premeditada, ya que tras media docena de incursiones del dedo de Jorge en el culo de mama, , este lo libero al ver que Marcos se posicionaba tras la espalda de mi madre y apuntaba con su pene al expuesto agujero negro de mama que tan hábilmente Jorgel había preparado.
Jorge agarro las cachas de mama, y al tiempo que la mantenía quieta con toda su polla dentro, tiro de las nalgas de mi madre hacia fuera para facilitar el ataque trasero que iba a iniciar Marcos.
Marcos empezó a empujar despacio pero con firmeza, y durante los dos o tres segundos que tardo su rabo en introducirse completamente en el ano de mi madre esta se mantuvo sumisamente inmóvil sobre Jorge, y a medida que su culo se iba llenando de polla, iba emitiendo un grito que fue ganando en estridencia y culmino cuando la penetración fue tan profunda que casi se tocaban los huevos de los dos tipos.
Para mi sorpresa, fue ella la que empezó a menearse hacia delante y hacia atrás entre las dos pollas, y segundos mas tarde los dos chavales la acompañaban sincronizadamente con golpes de cadera que machacaban a mama por sus dos orificios y la obligaban a emitir elocuentes y entrecortados jadeos que invitaban a pensar que se mantenía en un estado de orgasmo constante.
Mama se levantaba sobre sus rodillas y se dejaba caer con todo el peso de su cuerpo encima de la pelvis de Jorge, cuya enorme polla debía de entrar por dentro de mi madre hasta poco mas abajo del ombligo. Marcos aprovechaba la fuerza de dichos movimientos para impulsar su rabo en el dilatado culo de mama, que lo absorbía por completo sin ninguna dificultad.
¡¡¡Joder!!! Que polvazo me están echando. – Me dijo mi madre jadeando y sin dejar de bailar entre los dos chavales. – Lo que me están metiendo estos tíos no son pollas, son cañones.
Tras las palabras de mi madre tanto Jorge como Marcos se afanaron aun más de que esa era victima e incrementaron la velocidad y la fuerza de las envestidas, cosa que mama agradeció con los explícitos gritos de otro orgasmo.
Estas disfrutando de lo lindo, ¿verdad, zorra? – Dijo entonces Jorge volviendo a sóbrale las tetas a mi madre con total descaro.
Samuel se coloco a la derecha de mama, subiendo un pie encima del tresillo y deslizando sus pantalones unos centímetros mas hasta que también sus huevos quedaron al aire. Y sin demorarse mas, agarro a mi madre del pelo y le hundiola polla en la boca hasta que noto que su capullo tocaba ya con su garganta.
Los tres la penetrában prácticamente al mismo por el agujero que habían elegido, y mi madre debía de ver el paraíso cada vez que las tres pollas taladraban su cuerpo sin darle un momento de respiro.
En ocasiones hacia vanos intentos de gemir, gritar o jadear, pero las rápidas envestidas de la polla de Samuel follandole la boca, solo le permitían emitir ahogados sonidos guturales que se perdían entre las exclamaciones de placer que los tres liberában a causa de la salvaje orgía en la que estában enfrascados.
Sus envestidas ganaron en fuerza, pero cuando su polla llenaba el culo de mi madre s detenía unos instantes y se mantenía dentro de ella hasta que transcurrían unos segundos. Luego sacaba su pene del agujero trasero de mama, y repetía la operación tras volver a encularla con un potente golpe de caderas.
Tras media docena de idénticas embestidas, Marcos soltó un enorme grito de placer y dejo su polla mas tiempo del habitual dentro del culo de mama, a la que este ultimo brutal golpe de caderas le había hecho abrir los ojos como si le estuviera dando por detrás el mismísimo demonio.
No cabía ninguna duda. Marcos se acababa de correr en su culo y su semen ya debía de recorrer todo el intestino de mi madre.
Samuel, sujeto aun con mas fuerza la cabeza de mi madre y se dispuso a inundar su garganta con toda la leche que había acumulado en sus huevos.
Un segundo después, con la nariz casi aplastada contra su vientre, la boca de mama comenzaba a llenarse con tal cantidad de leche que su garganta no daba abasto para tragar todo lo que salía de la polla de Samuel.
Aunque se afanaba en no desperdiciar ni una sola gota, pronto se le empezaron a inflar los mofletes a causa de la abundante corrida, y no pudo evitar que un poco mas tarde el semen comenzara a escapársele por la comisura de los labios.
Cuando ya era evidente que Jorge estaba a punto de regarle él coño a mi madre, esta empezó a votar sobre él con un desbocado ímpetu, y jadeando y gimiendo agarro la polla de Samuel por su base y comenzó a restregársela por toda la cara, dándole de vez en cuando algún que otro lametazo e impregnándose todo su rostro con los restos de semen que quedaban en ella.
Poco después, Jorge se corrio en las entrañas de mi madre, se vistieron y me dijeron que ya quedariamos otro dia para jugar al futbol, que se habia echo muy tarde, alli nos dejaron, mama sobre el sofa, con sus 3 agujeros repletos de la leche de mis amigos
1 comentarios - La guarra de mi madre se folla a mis amigos