ras aquella mañana del día 28 de Diciembre pensé que follarme a Eva delante de Raúl o sin que él estuviera delante estaba cada vez más cerca. Lo único que tenía que hacer era tener paciencia, y esperar al 31 por la noche, que habíamos concertado una salida nocturna entre un grupo de amigos comunes, tras las uvas, jeje. No habíamos hablado de nada específico los últimos días del año, pero yo tenía la confianza en que en algún momento de la noche los dos se me acercaran para proponerme algún juego... dejarían al peque en casa de algún familiar y lo demás... estaba hecho.
El día 2 mi amigo salía de viaje, así que seguro que tendrían apalabrado hacer algo de despedida... y conociendo a Raúl, sabiendo que todo se había despendolado un poco... igual pensaba que lo mejor era dar rienda suelta a todo y que me follase a su mujer delante de él, en lugar de que lo hiciéramos a espaldas de él cuando él estuviese fuera
El dia 31 le envié un wha ts app a Eva, era por la mañana.
"Hola, guapisima,que tal todo? preparando las cosas para esta noche?"
Al cabo de media hora contestó:
"ya ves, ocupada al maximo, siempre igual. Raul ha salido a comprar"
"Ya imagino, no he hablado con el desde ayer, supongo q lo de esta noche sigue en pie"
"saldremos todos ¿no?" - escribí.
"claaarooo, mis amigas, vuestros amigos, los casados, los que no... jajaja"
"que teneis pensado hacer luego?"
tardó unos minutos en contestar:
"no te voy a decir nada" - escribió
Y a mí ya se me empezó a endurecer la polla, algo habían hablado.
"ni una pista? ni un adelanto?"
"nada" soltó
"que cabrona eres conmigo, jajaja"
"Es así, rober, es así"
"necesito follarte, Eva. Me pones muy cachondo"
"tu a mi no, jajajaja" escribió de coña.
"si me tengo que conformar con otras cosas... sea entonces, pero sé que quieres que te la meta, hasta adentro. me la comiste de una forma increible"
"la cogí con ganas" escribió "tenía ganas... de follarte, de montarme encima de tu polla hasta hacerla reventar, pero no era ese el trato entre mi marido y yo"
"puede q ese trato se rompa, o se negocie de nuevo. puedo negociarlo yo" - escribí
"tu? con que?"
"puedo... " y aquí improvisé "ofrecerle a Raul un trato"
"de que tipo?"
me tomé unos minutos para responder:
"otra persona, una mujer"
"como?" escribió sorprendida.
"una cuarta persona, Eva"
Ella se quedó en silencio, sin escribir.
"No te sorprendas, es normal... no?" seguí yo.
"No sé"
"tu marido te comparte, lo ha hecho conmigo... tú tambien te pondrias verle jugar con alguna más... lo sé, y tu lo sabes, Eva. Aunque te qdes parada"
No dijo nada mas en unos minutos, luego escribió:
"Voy a seguir haciendo cosas... hablamos esta noche!! chaoooo"
No le escribí nada más, al menos ya habia planteado una cosa mas, no había pensado en nadie para mi amigo... tal vez Gloria, la madurita que me follaba, o tal vez un acuerdo con Susana, su compañera de trabajo, sería muy muy morboso todo, pero no había tiempo para prepararlo esta noche, tendría que ser todo sobre la marcha, y esta noche solo vendrian conocidos con nosotros, gente de nuestro circulo mas intimo y que no debian sospechar nada, cosa que echaría para atrás a Eva y Roberto. Si yo plantease algo con alguien de nuestro circulo de amigos... igual me arriesgaba demasiado, rompería uno de los puntos que me pusieron: no hablarle de esto nunca a nadie. Aunque al parecer Eva sí estaba dispuesta a incluir a alguien mas, y a buen seguro que raul tambien... tenia que ser cuidadoso, el siguiente paso... hablar con mi amigo, pero claro, tenia que ser todo la noche de año nuevo...si le enviaba mensajes proponiendo o intuyendo algo... igual jodía la cosa, y no era plan. Raul no era Eva, si veía que yo era demasiado impetuoso... volvería sospechar de mí y me vería como un tio candidato para lanzarme a por su mujer nada mas el montarse en el coche y salir de viaje, jaja, y no queria eso.
Tenia que seguir dando la imagen de que Eva no me gustaba mucho, solo lo justo como para hacerla disfrutar con el delante, y disfrutar los dos. debia ser así.
Pasó el día, estuvimos cada uno con sus familias... y despues de media noche nos llamamos pro telefono, nos felicitamos por el nuevo año y acordamos qdar cerca de la una en un pub concurrido, allí confluiriamos todos, jeje.
Llegué uno de los primeros, me puse una camisa y una chaqueta, algo normalito, gomina, que no suelo ponerme, y muy perfumado, jejeje.
En fin, que fueron llegando amigos comunes, amigas de Eva... pero de ellos ni rastro. Estuve hablando con Gonzalo, un ex compi de trabajo de Raul y mío, iba con su mujer, una sosa de cojones, jaja, pero con un tipazo muy bueno despues de haber parido a dos críos, increible la tia, aunque no tan buenorra y macizorra como Eva. Luego llegaron Alberto y Tomás, amigos gays, unos tios cojonudos, liberales, pero cada vez menos, por la edad decian, que habia que sentar cabeza. Y yo q pensaba en algun momento que estos dos hubieran sido piezas buenas para una noche de morbo con Eva... jajaja. Mejor no tentarles, que a veces contaban todo, y no era plan. En fin... saludé a las amigas de Eva que iban llegando, unas más guapas que otras, algunas con sus parejas, o maridos, que yo apenas conocía. Las chicas estaban espectaculares la mayoría.
Hasta que pasadas un poco de la una... llegaron Raúl y Eva. Mi amigo se vino a saludarme a la barra y detrás iba Eva, que empezó a saludar primero a sus amigas, llevaba un abrigo. La vigilé cuando iba a soltarlo a unas perchas que había en un lado del pub, cuando se lo quitó... a mí se me quitó el hipo, jajaja. No lo tenía, pero como si lo hubiera tenido, jaja. llevaba un vestido rojo ajustado, nunca se lo había visto, casi toda la espalda descubierta, y se dio la vuelta para encararnos, y llevaba un escotazo monumental que le llegaba por debajo del pecho, dejaba ver un cuarto de cada teta, en el centro, y ambas se unían una con la otra. Era algo increíble. Ahí venía eva, poniendo las pollas duras, por instinto me llevé una mano al pantalón y me acaricié el paquete.
Casi no me di cuenta que la tenía ya delante.
- Hola, guapo - dijo-. Feliz año.
Y me soltó dos besos, sus tetas, con algo de purpurina... brillaban a un palmo de mí. No dije nada.
- Va a ser una noche larga ¿eh? - me dijo sonriendo.
- Creo que todo lo larga que tú quieras, guapa - le solté mientras le daba un abrazo y sus tetas se rozaban contra mi pecho. El empalme era instantáneo.
Ella se apartó un poco sonriendo.
- Estás increíble - le solté por lo bajo.
- Y tú seguro que estás empalmado.
- Empalmado es poco, no me he tocado desde lo del 28 por la mañana, sé que hace ya casi cuatro días pero... quise reservarme por si hoy... ya sabes.
- Bueno, ahora no te puedo contar nada. Pero como Raúl y yo venimos ya un poco piripis... jajaja, no sé si pasará algo. Desde luego a mí me gustaría... pero por otra parte...
- Por otra parte qué? - le dije mientras tomaba de un cubata que me habían servido.
- Por otra parte mañana por la noche se va Raúl, y no sé si me querrá sólo para él... ya sabes.
- Ya... Bueno, qué te pido? Vamos a ver cómo se desarrolla la noche. Me dijiste que sería larga, y eso espero. Yo por si acaso no me pasaré con la bebida, jeje. Cosa que veo que tu marido sí está haciendo.
Miramos a Raúl, al otro lado de la barra, con dos amigos nuestros, bebiendo de tragos grandes unos cubatas.
- A ver si al final vamos a tenerlo que llevarlo a rastras... - dijo Eva mientras se acercaba al grupo de su marido-. Pídeme un JB cola, anda - me dijo en voz alta.
Lo pedí y mientras miraba al grupo de mi amigo Raúl, donde había llegado Eva a saludar con sus dos tetas en escote por delante, riéndose, pensé que no sería mala opción que mi amigo se emborrachase hasta el punto de quedarse sopa en el coche, o en su misma casa. Eso quizás me dejaría vía más libre, y sobre todo si Eva también se ponía contenta y bajaba la guardia, pensaba que por muy cachonda que estuviera... eso de follármela era algo que habrían decidido no llevar a cabo. Sería difícil, o no, nunca se sabe hasta que llega el momento, y yo, calentando al personal, estaba hecho un fiera, jajaja.
Adonde yo estaba se acercaron unos amigos y amigas, tanto de Raul y míos como de Eva, reclamando mi presencia en una de las mesas. Acudí y empezamos a charlar de forma animada. Algunas de las parejas se comenzaban a meter mano, no de forma muy descarada, pero sí abiertamente, caricias tontas, en los hombros, en la cintura... hasta que una de las chicas, una que tiene marido... pero como si no lo tuviera, jajaja, me sacó a bailar una canción de Shakira. Esta era ****, una amiga de Eva y Raúl, su marido nos miraba mientras nosotros bailábamos en la pista. En una de esas se me puso ella detrás, muy pegada, pasandome las manos por los hombros y el contorno del resto del cuerpo, bajando hasta los muslos. Susurró en mi oído:
- Estás tela de bueno ¿eh?
A mí ella no me parecía guapa, aun así me volví para encararla y le solté en plan coña:
- Y tú estás muy cachonda, hasta delante de tu marido, cuidado que te ve meterme mano.
Ella rió y luego dijo:
- A él no le importa, jajaja. Sabe lo cachonda que estoy, y sabe que cuando ya no pueda más le pediré que nos vayamos a casa para que me dé... bueno.
- Que te dé polla ¿no? - solté sonriendo.
- Eso, eso, jajajaja.
Ya ibamos dejando de bailar y volvimos lentos a acercarnos a la mesa, pero antes le dije:
- Pues echa un buen polvo con el... y otro día me lo cuentas.
Me miró sin decir nada pero vi en sus ojos un brillo especial, se mordió el labio inferior y fue a sentarse con las demas chicas, frente a su marido. Los demás jalearon el baile, y Eva y Raúl también lo habían presenciado todo desde el otro lado del pub, en la barra.
Fui a pedirme otro cubata, me propuse beber ahora muy lento, tenía que estar atento y vigilante a la noche, a lo q sucediera. De modo que me acerqué donde estaban Raúl y Eva, con dos parejas más.
- Hooolaaaaa - saludé a todos-. Qué tal la noche por aqui??
- Muy bieeen, -dijeron Raúl y los chicos-. Aquí quemando los vasos de tubo, jajaja.
- Ya veo, ya.
Miré a Eva y me sonrió. En lugar de decirle nada a ella me dirigí a mi amigo. Me cuidé de decirle al oído, muy bajo, a pesar de la música alta...:
- Qué plan tienes para esta noche, amo?
Le llamé amo, en mi plan sumiso total, jajaja.
Él sonrió, me miró de cerca y luego me dijo al oído:
- Voy a echarte de menos mucho, cabroncete. Aún no tengo nada decidido... pero... no sé, no sé.
Su aliento ya olía a borrachuzo, jeje.
- Bien, quiero que sepas, amo... que estoy a tu disposición, a la tuya, sólo a la tuya, para lo que quieras, así como a ti tu compañera de trabajo te ordena... yo estoy por debajo de ella, y de ti, por supuesto. Así que si me ordenas arrodillarme... yo lo hago, si me ordenas que sea yo quien te desvista para que tu mujer lo vea... ese soy yo, sumiso, tuyo.
Me sorprendí porque no había ensayado ni pensado nada de eso, me salió solo, con toda la relajación que me podía dar las dos o tres copas que ya llevaba encima.
Él me miró riendo, pero luego se puso serio y dijo:
- Espera aquí, perro.
Se dirigió a Eva ahora. Me puse un poco nervioso, igual esto iba a funcionar. La apartó un momento y le dijo algo al oído. Ella me miró al instante y de momento se puso un poco seria, luego sonrió un poco, solo un poco. Como si estuviera algo tensa. Esperé. Ella le decía algo al oído, intercambiaban frases. Me puse más nervioso, hasta que Raúl empezó a besarle el cuello a Eva, le dio un muerdo y luego él vino a mí.
- Bien, perro - dijo al oído-. Estarás a mi disposición esta noche, mi putita y tú. Ya sabes que me tienes que obedecer.
- Sea así, pues.
- Me la has puesto dura con eso de que tú me desvistas delante de mi mujer, cabrón.
- Ah sí? - dije sorprendido.
- Sí, pero lo que vas a hacer ahora... es distinto. Has visto el grupito de amiguitas solteronas de mi mujer, no?
Asentí.
- Bien, ya sabes que hay una muy cachonda, rellenita, ya sé que no te gusta mucho.
Asentí.
- Quiero que vayas a ellas, cojas a Pilar y la invites a una copa en la barra, y la pongas cachonda.
- Pero...
- Hazlo, perro, jajajaj - y se rió-. Hazlo si quieres hacerme feliz, si soy feliz... disfrutaremos todos, vale? Y procura que nadie te vea.
- Bien - dije esbozando una sonrisa algo forzada.
Todo fuera porque luego nos fueramos a su casa... los tres, sin Pilar, que no me gustaba nada, y ponerla cachonda no significaba mérito alguno. pero tenía que hacerlo... mi amo, la llave para llegar esta noche a Eva, lo quería así.
Cogí a Pilar, literalmente, jaja, por un brazo y le dije:
- Ven aquí que te invito a algo, que eso que tienes ya se te está calentando.
- Ah, sí? - dijo ella riéndose.
- Claro que sí - dije yo - a ti se te calienta todo muy rápido.
- No lo sabes tú bien, hijo - dijo haciéndose la graciosa.
Luego se rió, y yo me reí también para acompañarla, no porque me hiciera gracia, jeje.
Una vez en la barra el pub, ya estaba más llenito de gente, al otro lado estaban Raúl y Eva hablando con más amigos. Lo hicimos bien, ya que desde allí ellos podían verme, y yo a ellos. Pero nuestros amigos no nos veían mucho, la verdad, apenas.
Coloqué a Pilar en la barra, de modo que les daba la espalda. Así ella no les vería. Pedí las copas. Sonreí, y mirando a Pilar a los ojos dije en alto para que me oyera por encima de la música:
- Hoy estás para que te metan con todo, jaja. Se nota que has salido a cazar.
La verdad es que la chica había elegido un vestido negro y un pañuelo blanco, con unos guantes también blancos, que no le sentaban nada bien en conjunto, ni punto de comparación con Eva. Ella sonrió.
- No sé si a cazar... pero supongo que sí, por qué lo preguntas? - dijo mientras se acercaba a mi cuello y daba un sorbo a su copa.
La tía metía cuello una cosa mala, jajaja. Yo aproveché para meterlo también y mirar hacia donde estaban estos. Eva y Raúl miraban para comprobar lo que yo estaba haciendo y no perder comba. Le di un beso casto en el cuello a Pilar, si ese tipo de beso puede ser casto, claro. Ella se puso un poco rígida, pero no del nerviosismo, todo lo contrario, supuse. Como vi que no decía nada... miré a Eva, ella me miró, sonriendo. Y le solté a Pilar en el oído:
- Cuántas aquí... como tú... deben tener el coño ahora bien empapado?
Ella tosió un poco. Me aparté y la miré. Me miró un poco ruborizada quizás, no esperaría que fuese así... tan claro o tan guarro, o tan... explícito, jeje. Como no dije nada volví a decirle:
- Me preguntaba esto mientras os veía a todas. Y me dije: "voy a coger a Pilar y a preguntarselo". Eso, que si piensas en la de mujeres que deben estar ahora deseando algo como... como...
Y me paré miré alrededor, a los lados, ella me miraba, como preguntándose qué estaba yo haciendo... y luego la miré de nuevo y bajé mi mano a los pantalones. Y cogiendome el paquete dije:
- Como esto... algo como esto que llevo aquí dentro.
Rió, yo reí. Y miré al otro lado de la barra. Eva y Raúl miraban, parecían contentos de mi actuación, aunque no supieran de lo que yo estaba hablando, pero se lo podían imaginar al ver mis gestos. Le dije a Pilar:
- Oye, espera un momento, no te vayas de aquí que voy al baño y ahora vuelvo, ok?
- Vale.
Me metí entre la gente y aproveché para hacerle un gesto a Eva y Raúl para q se acercaran, que me siguieran. Lo hizo Eva, porque en unos segundos me dio alcance camino de los baños.
- Ya está - le dije.
- Ya está qué? caliente? - dijo.
- La he calentado, como me ponga a más... seguro que cae, y Raúl me dijo que...
- Ya. ya sé lo que te dijo Raúl, me lo ha contado - dijo, y detecté un poco de mala entonación.
- Bueno, pues... no sé.
- Sigue.
- Que siga qué? - pregunté.
Entonces, allí en la cola de los baños, bajo una mano por su vestido y me cogió el paquete disimulando, mientras se acercaba a mi oído y me acariciaba la polla por encima de los pantalones. Dijo:
- Sigue calentando a esa puta, y ponte cachondo tú. A ver si esto te sirve.
Y dejó caer la lengua en mi cuello, lo lamió unos segundos. Miré al frente y vi que Raúl nos miraba desde cerca. Se había acercado. Mi primera reacción fue alejarme de Eva, pero di un pequeño respingo y como Raúl no se movía yo tampoco lo hice. Luego Eva se apartó y desapareció entre la gente. Parecía que lo tenían todo estudiado estos cabrones.
Me quedé allí y raúl se acercó adonde yo estaba.
- Yo también voy a mear - dijo. Y me dio unas palmaditas en la espalda.
- Vale - dije yo en un susurro que no debió oír.
- Ya la tienes cachondas ¿no?
- Qué?
- A las dos, cabron, a Pilar y a mi mujer, las tienes cachondas, jajaja. Aunque Eva ya estaba cachonda desde antes de las uvas, jajaja.
Sonreí, y por un momento me vi fuera de lugar, se suiponía que era yo el que tenía que manejar la situacion, y estos dos cabrones le habían dado la vuelta de tal forma que era yo el dominado, el que estaba bajo sus mandos.
- Qué más quieres que haga, Raúl?
- Mea, sacúdete la polla en condiciones, jajaja, y luego vuelve adonde está Pilar, sigue unos minutos más, sólo eso, perro mío - y bebió un trago de su copa. Ya empezaba a estar con el punto encima...
- Bien, eso haré, pero espero que la amiguita no me siga a todas partes... porque si no...
- Pues tú sabes deshacerte de ese tipo de situaciones, no? cuando no te gusta una tía... se te nota tela, eso me dijiste.
Y era verdad. Mientras meaba pensaba cómo quitarme de en medio a Pilar, no iba a ser difícil, sólo tenía que decirle dos tonterías más, algo fuera de tono y desaparecer. Y hasta con suerte podría haberse acercado a ella algún tío desesperado mientras yo iba al baño. Así me lo ponía más fácil. Salí del baño y me dirigí a la barra, al llegar...
... ... Pilar ya no estaba sola, pero no era un tío el que se había acercado, no.
También me esperaba Eva.
Me acerqué poniendo mi mejor sonrisa:
- Hoooolaaaa - dije animadamente -. Pero a quién tenemos aquíiiiiií.
Y me acerqué a Eva, la besé en la cara y le rodeé la cintura con un brazo. Sólo sentir de nuevo su perfume de lavanda y sentir el roce de mi brazo con su tela del vestido me la puso dura. Miré a Pilar, que sonreía y bebía de su copa. Se acercó a nosotros, su cara estaba a un palmo, y para que le pudiéramos oír, pues la música ya empezaba a sonar más alta, dijo:
- uyyyy, he visto un no se qué ahora mismo entre vosotros... que no sé, como si hubiera mucha química ¿no?
- Es porque nos conocemos ya de hace años - dijo muy rápido Eva-. El amigo de mi marido es uno de los mejores que puedes tener.
- Uno de los mejores amantes - dije yo riéndome.
Ellas se rieron y cuando Pilar miró a su vaso Eva me dio un codazo advirtiéndome de que no fuera tan descarado, lo interpreté como que no debía ir por ahí. Pilar no es que fuese muy cotilla pero... al fin y al cabo era más amiga de las otras del grupo que de Eva. Y a saber la de envidias que podía despertar Eva en ella.
- Ahora bien - dije continuando- yo respeto siempre a mis amigas, a las novias de mis amigos y a sus mujeres - dije levantando mi copa y ofreciendola como un brindis.
- Yo soy amiga tuya? - preguntó Pilar.
- Tú... tú eres... - comencé mientras Eva nos miraba - tú no eres amiga mía, pero lo podrías ser, aunque antes de eso...
- Antes de eso qué? - dijo ella acercándose a tres dedos de mi boca.
- Igual antes de eso follamos - solté.
Ella comenzó a reírse, yo me reí, Eva sonreía tan solo.
- Qué te parece, Eva? Me follo a tu amiga? - dije mientras me acercaba a Pilar por detrás, le daba la vuelta y la abrazaba. Puse mi cara junto a la de ella y los dos miramos a Eva. Al momento la noté un poco nerviosa. Como si ya no pudiera controlar la situación. Yo me había metido en algo de donde no sabía salir, no estaba cortando en absoluto a Pilar, todo lo contrario, la estaba poniendo más cachonda, y para colmo le estaba rozando con mi paquete todas las nalgas, y ella comenzó a ronronear, a decir: "uuuh, uuuhhh" y a mover su culo ante el bulto de mis pantalones.
- Pues mira - comenzó Eva acercándose - hoy es la ultima noche de Raúl aquí durante un par de semanas al menos- Y ya sabes lo que teníamos pensado hacer en mi casa, bueno... os lo podéis imaginar - dijo mirando a Pilar.
- Follar como leones - dijo ella.
- Justo eso - dijo Eva mirandome a los ojos.
Lo que hizo que mi polla se endureciera aún más, y adivinara en sus ojos... que quizás habían pactado que yo me la follaría... y que estropearía todo si no le daba largas a Pilar. Pero claro... por otro lado, pensé que podía seguir jugando, si esta noche no salía bien... mi amigo iba a faltar dos semanas en casa, y Eva iba a estar sola... solo tenia que presionarla un poquito para ver si accedía a darme una noche, solos ella y yo, sin su marido.
Seguí:
- Bien, pues mira, hacemos parejas - dije separandome un poco de Pilar.
- Parejas? -dijo Pilar acabandose la copa.
- Sí, parejas - dije-. Eva con Raúl, y tú conmigo, jajaja.
- Uy, eso no lo he hecho nunca, nunca follé en presencia de nadie más - dijo Pilar - quiero otra copa! Uuuuuhhh - y pegó un grito, se notaba que el alcohol comenzaba a hacer mella.
- Yo invito - dijo Eva fingiendo una sonrisa.
Se acercó del todo a la barra y le dejé paso.
- Yo voy al baño - dijo Pilar -. Ahora vuelvo, pedidme lo que me gusta, graciiiaaaas!!
Fui directo a por Eva.
- Qué tal lo estoy haciendo?
- Estás fatal, cabrón. Has invitado a Pilar a mi casa!
- Claaarooo, no queríais juegos? pues ahí lo llevais.
- Raúl te dijo que te la quitaras de encima!
- Estás celosa?
- Qué?
- Que si estás celosa porque me vaya a follar en tu casa, delante tuya, a tu amiga.
- No digas gilipolleces
- Sí, porque seguro que habíais pensado algo para mí, que yo te follara tal vez...
Ella no dijo nada. Yo seguí mientras ella pedía las copas.
- No pasa nada, Eva. Pilar viene, cuando llegue estará más que borracha ya. Y a saber como estará Raúl, o tú, jeje. Yo aguanto bastante, ya lo sabes.
- Toma - dijo largandome mi vaso.
En ese momento apareció raúl:
- como esta yendo todo?
- Este cabrón está seduciendo a Pilar, la ha invitado a follar a nuestra casa, así, los cuatro juntos.
- De veras? - dijo Raúl sorprendido-. Jajajaja, qué haces, cabrón?
- Me pareció buena idea.
- Has desobedecido a tu amo - dijo poniendo una cara de serio que no podía aguantar, porque estaba de broma.
Me reí.
- No pasa nada, cariño - dijo Raúl-. A ver si lo arreglo... Voy a buscar a Pilar, adonde ha ido?
- Al baño - dije sin opinar nada más sobre el asunto.
Bebí de mi copa, Eva lo hizo de la suya.
- Sigues enfadada?
- No, no.
- Ya sé, lo que te pasa es que estás cachonda. Me gustaría ahora mismo comprobar si llevas bragas. Seguro que no.
- Igual no lo puedes averiguar en toda la noche.
La gente nos rodeaba. Ella se volvió a la barra a poner su vaso. Miré a mi alrededor. Estábamos tapados por todos, no nos veía nadie conocido...
Me puse detrás de Eva y bajé mi mano hasta su muslo.
- Que coño haces? - dijo acercándose a mí, ladeando la cabeza.
- No es qué coño hago, Eva, esto es: Qué coño quiero tocar! El tuyo! Eso es lo que quiero - dije metiendo mi mano por el filo de su vestido y subiendo por dentro. Llegué al borde de sus medias y seguí. Ella se dejó.
- Ahaahhhhh - susurró.
Al fin llegué a su coño. Lo tenía depilado por completo. Estaba ardiendo, mojado era poco. Estaba empapado del todo, chorreando.
- Me encanta tu coño, puta - le dije al oído.
Luego quité la mano rápido. La dí la vuelta y delante suya me llevé mi mano manchada de flujo a la boca y me metí los cuatro dedos.
- Este coño es el que me quiero follar esta noche, y si es delante de tu marido y con la zorra de tu amiguita follada... mejor - le dije al oído.
Pues igual no te lo follas - dijo ella.
- Ahora mismo te arrancaría ese vestido, por la parte de las tetas, el escote, lo abriría y dejaría tus tetas al aire - dije sin hacer caso a su comentario.
lla se volvió de nuevo y cogió su copa, me acercó la mía.
- bebe anda, que esto tiene hielo y estás tu muy caliente.
- Y tú, bebe bebe, que tienes algunas partes que arden - dije cogiendo la copa con una mano y volviendome a llevar los dedos a los labios. Los que habían estado dentro de ella.
- No vuelvas a tocarme el coño aquí, podrían vernos. Y ya sabes que no voy a hacer nada, ni quiero que hagas nada, sin que Raúl esté delante.
No dije nada y bebimos de las copas. Al cabo de un minuto llegaron Raúl y Pilar. Sonrientes. Pidieron más copas y siguieron bebiendo. Raúl barrió para que nos unieramos de nuevo al grupo de amigos y conocidos, de modo que nos apartamos de la barra en busca de ellos. Mientras lo hacíamos le pregunté:
- Qué tal ha ido con Pilar?
- Luego te cuento, luego te cuento - dijo con el punto de alcohol justo. Ese en el que estás muy a gusto pero como sigas bebiendo más... igual dejas de estar al tanto de lo que pasa...
Pensé: "Tú sigue así, Raúl, que igual luego no das la talla, y yo tendré que estar ahí como sea". Raúl se acercó a Eva y empezó a decirle algo al oído. Me fijé en la cara que ponía y enseguida obtuvo una expresión de gravedad, como no dando crédito a algo. Raúl le cogió por una de sus muñecas y siguió hablando. Era como si se estuviera justificando por algo. Yo sabía que algo había tenido que pasar entre Raúl y Pilar, pero... en tan poco tiempo? Igual Raúl había invitado a Pilar a su casa tras la salida por el pub... a saber. Tenía ganas de saberlo. En esto se me vuelve a acercar Pilar, ya estábamos con los demás, en la zona "de todos".
- De que habeis hablado Raúl y tú? - le pregunté directamente, sonriendo, claro.
- uuuyyyy, de un par de cosas - dijo riendose y afectada por el alcohol, un poco más que Raúl.
- Ah, y eso incluye... algo para esta noche?
- mmm.... sí, creo que sí - dijo bebiendo.
- Conmigo?
- mmm... puede ser - dijo mirandome picarona.
Porque eso sí, podría ser una chica de lo más normal, un poco desatada para mi gusto, con un cuerpo normal, rellenita, pero aquella noche lucía... muy cachonda. Se le veía. Muy picarona. Y eso gusta bastante, y el físico perfecto, casi perfecto, o que tenga unas tetas de una forma o de otra, etc... es lo de menos en una noche como aquella. Entre Eva y Pilar la noche olía a sexo. Hasta me dieron ganas de meterla mano para comprobar cómo gemía, porque estaba seguro de que Pilar gemía alto y claro, y que le encantaba el sexo, y no lo ocultaba. Eso sí, los zapatos le quedaban fatal, jajaja. Mi lado marujo salía muchas veces, jajaja. pero no sé, de repente me hubiera gustado tenerla delante, ponerla a cuatro patas y metérsela desde atrás, sin contemplaciones, para luego recogerle el pelo con una mano y montarla tirándole de él con fuerza. Y que todo eso lo viera Eva.
Eché un vistazo a Eva, su escote me ponía malo. Seguía con esa cara de seriedad, miró a Raúl, y luego paseó la vista por los demás, hasta que se detuvo un momento en Pilar, y luego en mí.
- Vamos, adelántame algo - le pedí a Pilar, que seguía a mi lado.
- Yo te gusto? - soltó de repente. me cogió de improviso.
- Estás genial esta noche - le solté.
- Ajá, esta noche...
- Sí, estás genial.
- Eso significa...
- Eso significa que te follaría donde quieras y cuando quieras.
- Ahora? en mi coche? - soltó.
- Por ejemplo - dije, deseando que no me pidiera que la acompañase, porque eso sería perder de vista la oportunidad de irme con Eva y Raúl y que todo se enfriara.
- Bien -dijo-. Porque no me vas a follar en mi coche. Según me ha propuesto Raúl... será de otra forma.
- ¿Raúuuuulll? - pregunté yo fingiendo sorpresa y para que Eva lo distinguiera si me estaba mirando.
- Sí - dijo ella sonriendo y bebiendo de su copa-. Dentro de un rato... iremos a su casa. No sé aún lo que pasará, pero me ha dicho que lo pasaremos bien...
"Joder con raulito" pensé. Miré a Eva y ella me miró con gravedad en su rostro. Igual ella sabía muy bien lo que iba a pasar, los planes de su marido. Tenía que averiguar más, porque como mínimo nos quedaba una hora más allí metidos...
CONTINUARÁ...
El día 2 mi amigo salía de viaje, así que seguro que tendrían apalabrado hacer algo de despedida... y conociendo a Raúl, sabiendo que todo se había despendolado un poco... igual pensaba que lo mejor era dar rienda suelta a todo y que me follase a su mujer delante de él, en lugar de que lo hiciéramos a espaldas de él cuando él estuviese fuera
El dia 31 le envié un wha ts app a Eva, era por la mañana.
"Hola, guapisima,que tal todo? preparando las cosas para esta noche?"
Al cabo de media hora contestó:
"ya ves, ocupada al maximo, siempre igual. Raul ha salido a comprar"
"Ya imagino, no he hablado con el desde ayer, supongo q lo de esta noche sigue en pie"
"saldremos todos ¿no?" - escribí.
"claaarooo, mis amigas, vuestros amigos, los casados, los que no... jajaja"
"que teneis pensado hacer luego?"
tardó unos minutos en contestar:
"no te voy a decir nada" - escribió
Y a mí ya se me empezó a endurecer la polla, algo habían hablado.
"ni una pista? ni un adelanto?"
"nada" soltó
"que cabrona eres conmigo, jajaja"
"Es así, rober, es así"
"necesito follarte, Eva. Me pones muy cachondo"
"tu a mi no, jajajaja" escribió de coña.
"si me tengo que conformar con otras cosas... sea entonces, pero sé que quieres que te la meta, hasta adentro. me la comiste de una forma increible"
"la cogí con ganas" escribió "tenía ganas... de follarte, de montarme encima de tu polla hasta hacerla reventar, pero no era ese el trato entre mi marido y yo"
"puede q ese trato se rompa, o se negocie de nuevo. puedo negociarlo yo" - escribí
"tu? con que?"
"puedo... " y aquí improvisé "ofrecerle a Raul un trato"
"de que tipo?"
me tomé unos minutos para responder:
"otra persona, una mujer"
"como?" escribió sorprendida.
"una cuarta persona, Eva"
Ella se quedó en silencio, sin escribir.
"No te sorprendas, es normal... no?" seguí yo.
"No sé"
"tu marido te comparte, lo ha hecho conmigo... tú tambien te pondrias verle jugar con alguna más... lo sé, y tu lo sabes, Eva. Aunque te qdes parada"
No dijo nada mas en unos minutos, luego escribió:
"Voy a seguir haciendo cosas... hablamos esta noche!! chaoooo"
No le escribí nada más, al menos ya habia planteado una cosa mas, no había pensado en nadie para mi amigo... tal vez Gloria, la madurita que me follaba, o tal vez un acuerdo con Susana, su compañera de trabajo, sería muy muy morboso todo, pero no había tiempo para prepararlo esta noche, tendría que ser todo sobre la marcha, y esta noche solo vendrian conocidos con nosotros, gente de nuestro circulo mas intimo y que no debian sospechar nada, cosa que echaría para atrás a Eva y Roberto. Si yo plantease algo con alguien de nuestro circulo de amigos... igual me arriesgaba demasiado, rompería uno de los puntos que me pusieron: no hablarle de esto nunca a nadie. Aunque al parecer Eva sí estaba dispuesta a incluir a alguien mas, y a buen seguro que raul tambien... tenia que ser cuidadoso, el siguiente paso... hablar con mi amigo, pero claro, tenia que ser todo la noche de año nuevo...si le enviaba mensajes proponiendo o intuyendo algo... igual jodía la cosa, y no era plan. Raul no era Eva, si veía que yo era demasiado impetuoso... volvería sospechar de mí y me vería como un tio candidato para lanzarme a por su mujer nada mas el montarse en el coche y salir de viaje, jaja, y no queria eso.
Tenia que seguir dando la imagen de que Eva no me gustaba mucho, solo lo justo como para hacerla disfrutar con el delante, y disfrutar los dos. debia ser así.
Pasó el día, estuvimos cada uno con sus familias... y despues de media noche nos llamamos pro telefono, nos felicitamos por el nuevo año y acordamos qdar cerca de la una en un pub concurrido, allí confluiriamos todos, jeje.
Llegué uno de los primeros, me puse una camisa y una chaqueta, algo normalito, gomina, que no suelo ponerme, y muy perfumado, jejeje.
En fin, que fueron llegando amigos comunes, amigas de Eva... pero de ellos ni rastro. Estuve hablando con Gonzalo, un ex compi de trabajo de Raul y mío, iba con su mujer, una sosa de cojones, jaja, pero con un tipazo muy bueno despues de haber parido a dos críos, increible la tia, aunque no tan buenorra y macizorra como Eva. Luego llegaron Alberto y Tomás, amigos gays, unos tios cojonudos, liberales, pero cada vez menos, por la edad decian, que habia que sentar cabeza. Y yo q pensaba en algun momento que estos dos hubieran sido piezas buenas para una noche de morbo con Eva... jajaja. Mejor no tentarles, que a veces contaban todo, y no era plan. En fin... saludé a las amigas de Eva que iban llegando, unas más guapas que otras, algunas con sus parejas, o maridos, que yo apenas conocía. Las chicas estaban espectaculares la mayoría.
Hasta que pasadas un poco de la una... llegaron Raúl y Eva. Mi amigo se vino a saludarme a la barra y detrás iba Eva, que empezó a saludar primero a sus amigas, llevaba un abrigo. La vigilé cuando iba a soltarlo a unas perchas que había en un lado del pub, cuando se lo quitó... a mí se me quitó el hipo, jajaja. No lo tenía, pero como si lo hubiera tenido, jaja. llevaba un vestido rojo ajustado, nunca se lo había visto, casi toda la espalda descubierta, y se dio la vuelta para encararnos, y llevaba un escotazo monumental que le llegaba por debajo del pecho, dejaba ver un cuarto de cada teta, en el centro, y ambas se unían una con la otra. Era algo increíble. Ahí venía eva, poniendo las pollas duras, por instinto me llevé una mano al pantalón y me acaricié el paquete.
Casi no me di cuenta que la tenía ya delante.
- Hola, guapo - dijo-. Feliz año.
Y me soltó dos besos, sus tetas, con algo de purpurina... brillaban a un palmo de mí. No dije nada.
- Va a ser una noche larga ¿eh? - me dijo sonriendo.
- Creo que todo lo larga que tú quieras, guapa - le solté mientras le daba un abrazo y sus tetas se rozaban contra mi pecho. El empalme era instantáneo.
Ella se apartó un poco sonriendo.
- Estás increíble - le solté por lo bajo.
- Y tú seguro que estás empalmado.
- Empalmado es poco, no me he tocado desde lo del 28 por la mañana, sé que hace ya casi cuatro días pero... quise reservarme por si hoy... ya sabes.
- Bueno, ahora no te puedo contar nada. Pero como Raúl y yo venimos ya un poco piripis... jajaja, no sé si pasará algo. Desde luego a mí me gustaría... pero por otra parte...
- Por otra parte qué? - le dije mientras tomaba de un cubata que me habían servido.
- Por otra parte mañana por la noche se va Raúl, y no sé si me querrá sólo para él... ya sabes.
- Ya... Bueno, qué te pido? Vamos a ver cómo se desarrolla la noche. Me dijiste que sería larga, y eso espero. Yo por si acaso no me pasaré con la bebida, jeje. Cosa que veo que tu marido sí está haciendo.
Miramos a Raúl, al otro lado de la barra, con dos amigos nuestros, bebiendo de tragos grandes unos cubatas.
- A ver si al final vamos a tenerlo que llevarlo a rastras... - dijo Eva mientras se acercaba al grupo de su marido-. Pídeme un JB cola, anda - me dijo en voz alta.
Lo pedí y mientras miraba al grupo de mi amigo Raúl, donde había llegado Eva a saludar con sus dos tetas en escote por delante, riéndose, pensé que no sería mala opción que mi amigo se emborrachase hasta el punto de quedarse sopa en el coche, o en su misma casa. Eso quizás me dejaría vía más libre, y sobre todo si Eva también se ponía contenta y bajaba la guardia, pensaba que por muy cachonda que estuviera... eso de follármela era algo que habrían decidido no llevar a cabo. Sería difícil, o no, nunca se sabe hasta que llega el momento, y yo, calentando al personal, estaba hecho un fiera, jajaja.
Adonde yo estaba se acercaron unos amigos y amigas, tanto de Raul y míos como de Eva, reclamando mi presencia en una de las mesas. Acudí y empezamos a charlar de forma animada. Algunas de las parejas se comenzaban a meter mano, no de forma muy descarada, pero sí abiertamente, caricias tontas, en los hombros, en la cintura... hasta que una de las chicas, una que tiene marido... pero como si no lo tuviera, jajaja, me sacó a bailar una canción de Shakira. Esta era ****, una amiga de Eva y Raúl, su marido nos miraba mientras nosotros bailábamos en la pista. En una de esas se me puso ella detrás, muy pegada, pasandome las manos por los hombros y el contorno del resto del cuerpo, bajando hasta los muslos. Susurró en mi oído:
- Estás tela de bueno ¿eh?
A mí ella no me parecía guapa, aun así me volví para encararla y le solté en plan coña:
- Y tú estás muy cachonda, hasta delante de tu marido, cuidado que te ve meterme mano.
Ella rió y luego dijo:
- A él no le importa, jajaja. Sabe lo cachonda que estoy, y sabe que cuando ya no pueda más le pediré que nos vayamos a casa para que me dé... bueno.
- Que te dé polla ¿no? - solté sonriendo.
- Eso, eso, jajajaja.
Ya ibamos dejando de bailar y volvimos lentos a acercarnos a la mesa, pero antes le dije:
- Pues echa un buen polvo con el... y otro día me lo cuentas.
Me miró sin decir nada pero vi en sus ojos un brillo especial, se mordió el labio inferior y fue a sentarse con las demas chicas, frente a su marido. Los demás jalearon el baile, y Eva y Raúl también lo habían presenciado todo desde el otro lado del pub, en la barra.
Fui a pedirme otro cubata, me propuse beber ahora muy lento, tenía que estar atento y vigilante a la noche, a lo q sucediera. De modo que me acerqué donde estaban Raúl y Eva, con dos parejas más.
- Hooolaaaaa - saludé a todos-. Qué tal la noche por aqui??
- Muy bieeen, -dijeron Raúl y los chicos-. Aquí quemando los vasos de tubo, jajaja.
- Ya veo, ya.
Miré a Eva y me sonrió. En lugar de decirle nada a ella me dirigí a mi amigo. Me cuidé de decirle al oído, muy bajo, a pesar de la música alta...:
- Qué plan tienes para esta noche, amo?
Le llamé amo, en mi plan sumiso total, jajaja.
Él sonrió, me miró de cerca y luego me dijo al oído:
- Voy a echarte de menos mucho, cabroncete. Aún no tengo nada decidido... pero... no sé, no sé.
Su aliento ya olía a borrachuzo, jeje.
- Bien, quiero que sepas, amo... que estoy a tu disposición, a la tuya, sólo a la tuya, para lo que quieras, así como a ti tu compañera de trabajo te ordena... yo estoy por debajo de ella, y de ti, por supuesto. Así que si me ordenas arrodillarme... yo lo hago, si me ordenas que sea yo quien te desvista para que tu mujer lo vea... ese soy yo, sumiso, tuyo.
Me sorprendí porque no había ensayado ni pensado nada de eso, me salió solo, con toda la relajación que me podía dar las dos o tres copas que ya llevaba encima.
Él me miró riendo, pero luego se puso serio y dijo:
- Espera aquí, perro.
Se dirigió a Eva ahora. Me puse un poco nervioso, igual esto iba a funcionar. La apartó un momento y le dijo algo al oído. Ella me miró al instante y de momento se puso un poco seria, luego sonrió un poco, solo un poco. Como si estuviera algo tensa. Esperé. Ella le decía algo al oído, intercambiaban frases. Me puse más nervioso, hasta que Raúl empezó a besarle el cuello a Eva, le dio un muerdo y luego él vino a mí.
- Bien, perro - dijo al oído-. Estarás a mi disposición esta noche, mi putita y tú. Ya sabes que me tienes que obedecer.
- Sea así, pues.
- Me la has puesto dura con eso de que tú me desvistas delante de mi mujer, cabrón.
- Ah sí? - dije sorprendido.
- Sí, pero lo que vas a hacer ahora... es distinto. Has visto el grupito de amiguitas solteronas de mi mujer, no?
Asentí.
- Bien, ya sabes que hay una muy cachonda, rellenita, ya sé que no te gusta mucho.
Asentí.
- Quiero que vayas a ellas, cojas a Pilar y la invites a una copa en la barra, y la pongas cachonda.
- Pero...
- Hazlo, perro, jajajaj - y se rió-. Hazlo si quieres hacerme feliz, si soy feliz... disfrutaremos todos, vale? Y procura que nadie te vea.
- Bien - dije esbozando una sonrisa algo forzada.
Todo fuera porque luego nos fueramos a su casa... los tres, sin Pilar, que no me gustaba nada, y ponerla cachonda no significaba mérito alguno. pero tenía que hacerlo... mi amo, la llave para llegar esta noche a Eva, lo quería así.
Cogí a Pilar, literalmente, jaja, por un brazo y le dije:
- Ven aquí que te invito a algo, que eso que tienes ya se te está calentando.
- Ah, sí? - dijo ella riéndose.
- Claro que sí - dije yo - a ti se te calienta todo muy rápido.
- No lo sabes tú bien, hijo - dijo haciéndose la graciosa.
Luego se rió, y yo me reí también para acompañarla, no porque me hiciera gracia, jeje.
Una vez en la barra el pub, ya estaba más llenito de gente, al otro lado estaban Raúl y Eva hablando con más amigos. Lo hicimos bien, ya que desde allí ellos podían verme, y yo a ellos. Pero nuestros amigos no nos veían mucho, la verdad, apenas.
Coloqué a Pilar en la barra, de modo que les daba la espalda. Así ella no les vería. Pedí las copas. Sonreí, y mirando a Pilar a los ojos dije en alto para que me oyera por encima de la música:
- Hoy estás para que te metan con todo, jaja. Se nota que has salido a cazar.
La verdad es que la chica había elegido un vestido negro y un pañuelo blanco, con unos guantes también blancos, que no le sentaban nada bien en conjunto, ni punto de comparación con Eva. Ella sonrió.
- No sé si a cazar... pero supongo que sí, por qué lo preguntas? - dijo mientras se acercaba a mi cuello y daba un sorbo a su copa.
La tía metía cuello una cosa mala, jajaja. Yo aproveché para meterlo también y mirar hacia donde estaban estos. Eva y Raúl miraban para comprobar lo que yo estaba haciendo y no perder comba. Le di un beso casto en el cuello a Pilar, si ese tipo de beso puede ser casto, claro. Ella se puso un poco rígida, pero no del nerviosismo, todo lo contrario, supuse. Como vi que no decía nada... miré a Eva, ella me miró, sonriendo. Y le solté a Pilar en el oído:
- Cuántas aquí... como tú... deben tener el coño ahora bien empapado?
Ella tosió un poco. Me aparté y la miré. Me miró un poco ruborizada quizás, no esperaría que fuese así... tan claro o tan guarro, o tan... explícito, jeje. Como no dije nada volví a decirle:
- Me preguntaba esto mientras os veía a todas. Y me dije: "voy a coger a Pilar y a preguntarselo". Eso, que si piensas en la de mujeres que deben estar ahora deseando algo como... como...
Y me paré miré alrededor, a los lados, ella me miraba, como preguntándose qué estaba yo haciendo... y luego la miré de nuevo y bajé mi mano a los pantalones. Y cogiendome el paquete dije:
- Como esto... algo como esto que llevo aquí dentro.
Rió, yo reí. Y miré al otro lado de la barra. Eva y Raúl miraban, parecían contentos de mi actuación, aunque no supieran de lo que yo estaba hablando, pero se lo podían imaginar al ver mis gestos. Le dije a Pilar:
- Oye, espera un momento, no te vayas de aquí que voy al baño y ahora vuelvo, ok?
- Vale.
Me metí entre la gente y aproveché para hacerle un gesto a Eva y Raúl para q se acercaran, que me siguieran. Lo hizo Eva, porque en unos segundos me dio alcance camino de los baños.
- Ya está - le dije.
- Ya está qué? caliente? - dijo.
- La he calentado, como me ponga a más... seguro que cae, y Raúl me dijo que...
- Ya. ya sé lo que te dijo Raúl, me lo ha contado - dijo, y detecté un poco de mala entonación.
- Bueno, pues... no sé.
- Sigue.
- Que siga qué? - pregunté.
Entonces, allí en la cola de los baños, bajo una mano por su vestido y me cogió el paquete disimulando, mientras se acercaba a mi oído y me acariciaba la polla por encima de los pantalones. Dijo:
- Sigue calentando a esa puta, y ponte cachondo tú. A ver si esto te sirve.
Y dejó caer la lengua en mi cuello, lo lamió unos segundos. Miré al frente y vi que Raúl nos miraba desde cerca. Se había acercado. Mi primera reacción fue alejarme de Eva, pero di un pequeño respingo y como Raúl no se movía yo tampoco lo hice. Luego Eva se apartó y desapareció entre la gente. Parecía que lo tenían todo estudiado estos cabrones.
Me quedé allí y raúl se acercó adonde yo estaba.
- Yo también voy a mear - dijo. Y me dio unas palmaditas en la espalda.
- Vale - dije yo en un susurro que no debió oír.
- Ya la tienes cachondas ¿no?
- Qué?
- A las dos, cabron, a Pilar y a mi mujer, las tienes cachondas, jajaja. Aunque Eva ya estaba cachonda desde antes de las uvas, jajaja.
Sonreí, y por un momento me vi fuera de lugar, se suiponía que era yo el que tenía que manejar la situacion, y estos dos cabrones le habían dado la vuelta de tal forma que era yo el dominado, el que estaba bajo sus mandos.
- Qué más quieres que haga, Raúl?
- Mea, sacúdete la polla en condiciones, jajaja, y luego vuelve adonde está Pilar, sigue unos minutos más, sólo eso, perro mío - y bebió un trago de su copa. Ya empezaba a estar con el punto encima...
- Bien, eso haré, pero espero que la amiguita no me siga a todas partes... porque si no...
- Pues tú sabes deshacerte de ese tipo de situaciones, no? cuando no te gusta una tía... se te nota tela, eso me dijiste.
Y era verdad. Mientras meaba pensaba cómo quitarme de en medio a Pilar, no iba a ser difícil, sólo tenía que decirle dos tonterías más, algo fuera de tono y desaparecer. Y hasta con suerte podría haberse acercado a ella algún tío desesperado mientras yo iba al baño. Así me lo ponía más fácil. Salí del baño y me dirigí a la barra, al llegar...
... ... Pilar ya no estaba sola, pero no era un tío el que se había acercado, no.
También me esperaba Eva.
Me acerqué poniendo mi mejor sonrisa:
- Hoooolaaaa - dije animadamente -. Pero a quién tenemos aquíiiiiií.
Y me acerqué a Eva, la besé en la cara y le rodeé la cintura con un brazo. Sólo sentir de nuevo su perfume de lavanda y sentir el roce de mi brazo con su tela del vestido me la puso dura. Miré a Pilar, que sonreía y bebía de su copa. Se acercó a nosotros, su cara estaba a un palmo, y para que le pudiéramos oír, pues la música ya empezaba a sonar más alta, dijo:
- uyyyy, he visto un no se qué ahora mismo entre vosotros... que no sé, como si hubiera mucha química ¿no?
- Es porque nos conocemos ya de hace años - dijo muy rápido Eva-. El amigo de mi marido es uno de los mejores que puedes tener.
- Uno de los mejores amantes - dije yo riéndome.
Ellas se rieron y cuando Pilar miró a su vaso Eva me dio un codazo advirtiéndome de que no fuera tan descarado, lo interpreté como que no debía ir por ahí. Pilar no es que fuese muy cotilla pero... al fin y al cabo era más amiga de las otras del grupo que de Eva. Y a saber la de envidias que podía despertar Eva en ella.
- Ahora bien - dije continuando- yo respeto siempre a mis amigas, a las novias de mis amigos y a sus mujeres - dije levantando mi copa y ofreciendola como un brindis.
- Yo soy amiga tuya? - preguntó Pilar.
- Tú... tú eres... - comencé mientras Eva nos miraba - tú no eres amiga mía, pero lo podrías ser, aunque antes de eso...
- Antes de eso qué? - dijo ella acercándose a tres dedos de mi boca.
- Igual antes de eso follamos - solté.
Ella comenzó a reírse, yo me reí, Eva sonreía tan solo.
- Qué te parece, Eva? Me follo a tu amiga? - dije mientras me acercaba a Pilar por detrás, le daba la vuelta y la abrazaba. Puse mi cara junto a la de ella y los dos miramos a Eva. Al momento la noté un poco nerviosa. Como si ya no pudiera controlar la situación. Yo me había metido en algo de donde no sabía salir, no estaba cortando en absoluto a Pilar, todo lo contrario, la estaba poniendo más cachonda, y para colmo le estaba rozando con mi paquete todas las nalgas, y ella comenzó a ronronear, a decir: "uuuh, uuuhhh" y a mover su culo ante el bulto de mis pantalones.
- Pues mira - comenzó Eva acercándose - hoy es la ultima noche de Raúl aquí durante un par de semanas al menos- Y ya sabes lo que teníamos pensado hacer en mi casa, bueno... os lo podéis imaginar - dijo mirando a Pilar.
- Follar como leones - dijo ella.
- Justo eso - dijo Eva mirandome a los ojos.
Lo que hizo que mi polla se endureciera aún más, y adivinara en sus ojos... que quizás habían pactado que yo me la follaría... y que estropearía todo si no le daba largas a Pilar. Pero claro... por otro lado, pensé que podía seguir jugando, si esta noche no salía bien... mi amigo iba a faltar dos semanas en casa, y Eva iba a estar sola... solo tenia que presionarla un poquito para ver si accedía a darme una noche, solos ella y yo, sin su marido.
Seguí:
- Bien, pues mira, hacemos parejas - dije separandome un poco de Pilar.
- Parejas? -dijo Pilar acabandose la copa.
- Sí, parejas - dije-. Eva con Raúl, y tú conmigo, jajaja.
- Uy, eso no lo he hecho nunca, nunca follé en presencia de nadie más - dijo Pilar - quiero otra copa! Uuuuuhhh - y pegó un grito, se notaba que el alcohol comenzaba a hacer mella.
- Yo invito - dijo Eva fingiendo una sonrisa.
Se acercó del todo a la barra y le dejé paso.
- Yo voy al baño - dijo Pilar -. Ahora vuelvo, pedidme lo que me gusta, graciiiaaaas!!
Fui directo a por Eva.
- Qué tal lo estoy haciendo?
- Estás fatal, cabrón. Has invitado a Pilar a mi casa!
- Claaarooo, no queríais juegos? pues ahí lo llevais.
- Raúl te dijo que te la quitaras de encima!
- Estás celosa?
- Qué?
- Que si estás celosa porque me vaya a follar en tu casa, delante tuya, a tu amiga.
- No digas gilipolleces
- Sí, porque seguro que habíais pensado algo para mí, que yo te follara tal vez...
Ella no dijo nada. Yo seguí mientras ella pedía las copas.
- No pasa nada, Eva. Pilar viene, cuando llegue estará más que borracha ya. Y a saber como estará Raúl, o tú, jeje. Yo aguanto bastante, ya lo sabes.
- Toma - dijo largandome mi vaso.
En ese momento apareció raúl:
- como esta yendo todo?
- Este cabrón está seduciendo a Pilar, la ha invitado a follar a nuestra casa, así, los cuatro juntos.
- De veras? - dijo Raúl sorprendido-. Jajajaja, qué haces, cabrón?
- Me pareció buena idea.
- Has desobedecido a tu amo - dijo poniendo una cara de serio que no podía aguantar, porque estaba de broma.
Me reí.
- No pasa nada, cariño - dijo Raúl-. A ver si lo arreglo... Voy a buscar a Pilar, adonde ha ido?
- Al baño - dije sin opinar nada más sobre el asunto.
Bebí de mi copa, Eva lo hizo de la suya.
- Sigues enfadada?
- No, no.
- Ya sé, lo que te pasa es que estás cachonda. Me gustaría ahora mismo comprobar si llevas bragas. Seguro que no.
- Igual no lo puedes averiguar en toda la noche.
La gente nos rodeaba. Ella se volvió a la barra a poner su vaso. Miré a mi alrededor. Estábamos tapados por todos, no nos veía nadie conocido...
Me puse detrás de Eva y bajé mi mano hasta su muslo.
- Que coño haces? - dijo acercándose a mí, ladeando la cabeza.
- No es qué coño hago, Eva, esto es: Qué coño quiero tocar! El tuyo! Eso es lo que quiero - dije metiendo mi mano por el filo de su vestido y subiendo por dentro. Llegué al borde de sus medias y seguí. Ella se dejó.
- Ahaahhhhh - susurró.
Al fin llegué a su coño. Lo tenía depilado por completo. Estaba ardiendo, mojado era poco. Estaba empapado del todo, chorreando.
- Me encanta tu coño, puta - le dije al oído.
Luego quité la mano rápido. La dí la vuelta y delante suya me llevé mi mano manchada de flujo a la boca y me metí los cuatro dedos.
- Este coño es el que me quiero follar esta noche, y si es delante de tu marido y con la zorra de tu amiguita follada... mejor - le dije al oído.
Pues igual no te lo follas - dijo ella.
- Ahora mismo te arrancaría ese vestido, por la parte de las tetas, el escote, lo abriría y dejaría tus tetas al aire - dije sin hacer caso a su comentario.
lla se volvió de nuevo y cogió su copa, me acercó la mía.
- bebe anda, que esto tiene hielo y estás tu muy caliente.
- Y tú, bebe bebe, que tienes algunas partes que arden - dije cogiendo la copa con una mano y volviendome a llevar los dedos a los labios. Los que habían estado dentro de ella.
- No vuelvas a tocarme el coño aquí, podrían vernos. Y ya sabes que no voy a hacer nada, ni quiero que hagas nada, sin que Raúl esté delante.
No dije nada y bebimos de las copas. Al cabo de un minuto llegaron Raúl y Pilar. Sonrientes. Pidieron más copas y siguieron bebiendo. Raúl barrió para que nos unieramos de nuevo al grupo de amigos y conocidos, de modo que nos apartamos de la barra en busca de ellos. Mientras lo hacíamos le pregunté:
- Qué tal ha ido con Pilar?
- Luego te cuento, luego te cuento - dijo con el punto de alcohol justo. Ese en el que estás muy a gusto pero como sigas bebiendo más... igual dejas de estar al tanto de lo que pasa...
Pensé: "Tú sigue así, Raúl, que igual luego no das la talla, y yo tendré que estar ahí como sea". Raúl se acercó a Eva y empezó a decirle algo al oído. Me fijé en la cara que ponía y enseguida obtuvo una expresión de gravedad, como no dando crédito a algo. Raúl le cogió por una de sus muñecas y siguió hablando. Era como si se estuviera justificando por algo. Yo sabía que algo había tenido que pasar entre Raúl y Pilar, pero... en tan poco tiempo? Igual Raúl había invitado a Pilar a su casa tras la salida por el pub... a saber. Tenía ganas de saberlo. En esto se me vuelve a acercar Pilar, ya estábamos con los demás, en la zona "de todos".
- De que habeis hablado Raúl y tú? - le pregunté directamente, sonriendo, claro.
- uuuyyyy, de un par de cosas - dijo riendose y afectada por el alcohol, un poco más que Raúl.
- Ah, y eso incluye... algo para esta noche?
- mmm.... sí, creo que sí - dijo bebiendo.
- Conmigo?
- mmm... puede ser - dijo mirandome picarona.
Porque eso sí, podría ser una chica de lo más normal, un poco desatada para mi gusto, con un cuerpo normal, rellenita, pero aquella noche lucía... muy cachonda. Se le veía. Muy picarona. Y eso gusta bastante, y el físico perfecto, casi perfecto, o que tenga unas tetas de una forma o de otra, etc... es lo de menos en una noche como aquella. Entre Eva y Pilar la noche olía a sexo. Hasta me dieron ganas de meterla mano para comprobar cómo gemía, porque estaba seguro de que Pilar gemía alto y claro, y que le encantaba el sexo, y no lo ocultaba. Eso sí, los zapatos le quedaban fatal, jajaja. Mi lado marujo salía muchas veces, jajaja. pero no sé, de repente me hubiera gustado tenerla delante, ponerla a cuatro patas y metérsela desde atrás, sin contemplaciones, para luego recogerle el pelo con una mano y montarla tirándole de él con fuerza. Y que todo eso lo viera Eva.
Eché un vistazo a Eva, su escote me ponía malo. Seguía con esa cara de seriedad, miró a Raúl, y luego paseó la vista por los demás, hasta que se detuvo un momento en Pilar, y luego en mí.
- Vamos, adelántame algo - le pedí a Pilar, que seguía a mi lado.
- Yo te gusto? - soltó de repente. me cogió de improviso.
- Estás genial esta noche - le solté.
- Ajá, esta noche...
- Sí, estás genial.
- Eso significa...
- Eso significa que te follaría donde quieras y cuando quieras.
- Ahora? en mi coche? - soltó.
- Por ejemplo - dije, deseando que no me pidiera que la acompañase, porque eso sería perder de vista la oportunidad de irme con Eva y Raúl y que todo se enfriara.
- Bien -dijo-. Porque no me vas a follar en mi coche. Según me ha propuesto Raúl... será de otra forma.
- ¿Raúuuuulll? - pregunté yo fingiendo sorpresa y para que Eva lo distinguiera si me estaba mirando.
- Sí - dijo ella sonriendo y bebiendo de su copa-. Dentro de un rato... iremos a su casa. No sé aún lo que pasará, pero me ha dicho que lo pasaremos bien...
"Joder con raulito" pensé. Miré a Eva y ella me miró con gravedad en su rostro. Igual ella sabía muy bien lo que iba a pasar, los planes de su marido. Tenía que averiguar más, porque como mínimo nos quedaba una hora más allí metidos...
CONTINUARÁ...
1 comentarios - La Tetona ( . )( . ) mujer de mi amigo😈14