Convertí a mi esposa en una amante del semen

Me vengo pajeando desde los nueve años, tengo encima mas de treinta años de muchas pajas en las que he eyaculado litros de semen  y antes de que exista esto de internet, relojeaba revistas porno en los kioscos o del padre de algún amigo que la dejaba a la vista sin darse cuenta que un pendejo pajero como yo podía llegar a leerla y calentarse con sus fotos. 


La primera vez que vi una pelicula porno fué con 16 años  en el cine ya que no existían canales XXX como ahora ni nada parecido, entré de colado porque no era permitido para menores de 18 y recuerdo haber estado a punto de acabar en seco de la calentura madre que me agarré. Volví a mi casa con la pija tan pero tan dura que me dolía el centro de ambos testículos  y no veía la hora de llegar para hacerme una tremenda paja con la cual descargar esa tensión que tenía en los testículos, próstata  y toda mi verga. Por esa época no era muy común ver eyaculaciones faciales en las películas porno y además en mi pueblo del interior, pasaban películas viejísimas  donde como mucho acababan en la espalda o el estómago de la mujer.. Hasta que un día vi una en la que las eyaculaciones iban a parar a la cara de las minas... Ese fué el fundamento de mi vida hasta el día de hoy, mi pasión fué y es llenarle la cara de semen a mis parejas.

La primera vez que ví una eyaculación facial me dió vuelta la cabeza, me subí al pedestal mayor de la exitación y desde ese momento empezé a mirar películas, revistas y todo lo relacionado a bañar la cara y las tetas con semen a una mina, sentía una tremenda envidia por los afortunados que descargaban el contenido de sus huevos en esas caritas hermosas y sonrientes y así estuve por varios años con esa fantasía que me comía por dentro hasta que como conté en mis relatos anteriores, tuve la gran fortuna de ponerme de novio con una ex compañera de colegio y luego de un año y medio de noviazgo poder casarme con ella que era la mas linda del curso y una de las mas hermosas de toda la escuela.

Ya de novios empezamos a tener un buen sexo en el que abundaba mucho sexo oral, muchos petes... Un día se detuvo para tomar aire y agarro mi verga y me empiezo a pajear para tirarle toda mi leche en su hermosa carita y me detuvo .. Que estás por hacer? Me preguntó.. Dejame que te acabe en la cara mi amor, le dije.. Salio con que estaba re loco, que ni en pedo iba a dejarme que le haga eso y bla bla bla me hizo una buena paja y acabé en sus hermosas tetas. Imaginensé como me quedé, teniendo una hermosa cara tan cerca  y a punto de cumplir mi fantasía mayor, me sentí frustrado y así fué el año y medio de novios, nunca me dejó que eyacule en su preciosa cara lo cual resultaba tremendamente frustrante para mi como se han de imaginar.

Finalmente nos casamos y nuestro espectro sexual se amplió, una noche ella estaba acostada boca arriba y yo encima de ella pasandole mi verga por su carita sonriente, me preguntó que es lo que estaba pensando a lo que no respondí nada, solo la miré con una leve sonrisa y ella me preguntó algo que me movió el piso... Querés acabarme en la cara no? Te morís de ganas, dale mi amor hacelo, quiero sentir toda tu leche caliente sobre mi.. Eso fué demasiado, sentí como una erupción volcánica desde mi interior y no pude contener una catarata de semen que salió expulsado de mi durísima e hinchada verga que hacía rato estaba a punto de explotar... Calculo que en ese instante debo haber sido el hombre mas feliz del planeta y sin exagerar nada de lo que digo, me sentí pleno, extasiado y tuve uno de los orgasmos mas placenteros que recuerde tanto a nivel físico como emocional, ver mi leche espesa cubriendo su hermosa carita mientras mi verga todavía seguía escupiendo algo de lechita era lo máximo.

Y a partir de ahí mi esposa empezó a convertirse en una adicta a mi leche, no hay parte de su cuerpo donde no la haya eyaculado al menos una vez en todos estos años, la he cubierto de semen de pies a cabeza por donde se imaginen en diferentes oportunidades  y no se imaginan las pajas que me hace, son mortales. Se acuesta a mi lado y se pone un lubricante en su mano y me agarra la verga en la parte que mas placer me produce, porque yo le enseñé a hacermela para sacarme el máximo placer y ella aprendió como una alumna muy obediente. Mientras me masturba con su mano nos comemos la boca a besos de lengua y lo que mas me calienta es cuando ella se da cuenta que mi respiración cambia  y que estoy por acabar, me besa mas apasionadamente y apura el movimiento de su mano y esa aceleración me recontra calienta porque me pone feliz que le guste hacerme acabar a chorros también el imaginarme su manito llena de mi leche me vuelve loco y que continúe sacudiendomela mientras largo los últimos chorritos es algo que me vuelve loco.

A veces miramos porno en internet y pongo videos de recopilaciones de eyaculaciones faciales, ella se sienta desnuda solo con tanguita en mis piernas pero dandome la espalda y ella mirando el monitor, cuando empiezan los tipos a tirarle la leche en la cara a las minas, yo le paso mis dedos por su clítoris y con la otra mano le acaricio sus pezones y le  pregunto si no el gustaría que yo le haga eso, se pone re loca y empieza a temblar, luego de un par de orgasmos se sale de encima mío, se arrodilla y me pajea desesperada apuntando mi verga a su carita y la baño de leche caliente, así es mi vida matrimonial luego de 12 años, cada vez nos sentimos mas compenetrados y nos calentamos mucho y soy feliz junto a mi querida y bella esposa.