Hola, ¿ seguimos con la historia?, como les habia contado, abracé a mamá y besandonos apasionadamente caimos en la cama, obviamente los dos vestidos, yo tratando de meter la mano en todas sus partes, con la calentura lógica del momento, después de un rato de franela, con su voz suave pero exitada escuche a mamá decirme, desnudame y cogeme que no aguanto más, despacito le contesté al oido, dejame que yo sé como volverte loca, dicho esto me fuí incorporando y ya de pié le tomé las manos y la hice pararse delante mío, la dí vuelta quedando de espaldas a mi, la apoyé besandola en la nuca y la fuí llevando contra la pared, la hice apoyar contra la misma y cuando no tenía más espacio para zafar de esa posición fuí acercando mi cuerpo hacia el suyo, hasta hacerle sentir mi erección contra su culo, me dolía la pija de tanta fuerza que hacía contra su raya, ella también sentía la molestia, sacame el vestido y la bombacha y ponémela de una vez pedía, yo creo que sacando el vestido solo, con lo duro que tenía la poronga se la podría poner con bombacha y todo, pero yo había pensado otra cosa. Me bajé el pantalón y el calzoncillo, agarré una silla que habia en la habitación, tomé de la cintura a mamá, ella me dejaba hacer lo que quisiera por primera vez, me senté la dejé parada delante de mí, levanté el vestido hasta su cintura, bajé su bombacha(uds. entenderán que en esa época no se usaban tangas)estaba empapada en sus jugos, acerqué esa bombacha pegajosa a mi nariz, sentí los olores a mujer que emanaba, me la pas{e por la pija como para lubricarla, tomé a mamá por las nalgas, la di vuelta poniendola de espaldas a mí, la hice abrir de piernas para que retrocediera y sus piernas quedaran a cada costado de la silla, tenía su culo contra mi boca, aproveché para besarlo y mordisquear las nalgas y cuando creí que era el momento justo le dije mami sentate despacito y enterrate vos misma mi garcha en tu concha. Me obedeció al pie de la letra, lentamente sentía como su concha se iba tragando toda mi pija hasta llegar a mis huevos, cuando sentí que habia entrado toda volví a decirle despacito, ahora empezá a cabalgar despacio, lo hizo con una suavidad y dulzura sin igual, yo veia su cara de goce a travez del espejo ubicado sobre la cómoda, se mordía los labios con cada subida y bajada de su concha alrededor de mi tronco, yo con mis manos bajé los breteles de su vestido, solté los broches de su corpiño, liberé sus tetas, tenía los pezones duros y parados por la exitación, al verlos en el espejo no resistí a la tentación de apretarlos y retorcerlos, lo hice, mamá gemía de placer, estaba con los ojos cerrados, le dije que los abriera que viera en el espejo como se metía mi pija en lo mas profundo de su vagina, deciá que no , que le daba verguenza, la agarré del pelo, tirando suavemente, abrí los ojos y mirá como te está cogiendo tu macho, con el segundo tirón abrió los ojos y miró hasta que sintió que su concha se llenaba de leche, caliente y espeza, por primera vez sin forro ni otro método anticonceptivo, habiamos cruzado un límite, sin saber que pasaría, tendríamos que esperar un tiempo para saber el resultado, si solo seriamos mamá e hijo, o empesariamos a ser una pareja de padres en secreto, mientras tanto seguiriamos siendo amantes a escondidas, otro día les cuento otra travesura con mamá.
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