Este relato es resubido de mí anterior cuenta, espero que lo disfruté, aclaro nuevamente que la edad es alterada por las dudad..
Aún con 19 años dónde ya era una chica perversa en varios campos y con el morbo de estar al límite quise intentar algo más arriesgado que la vez que estuve encerrada en el tinglado, como conté en mí anterior relato..
Un par de meses después del día que casi me mato en el tinglado del colegio, seguí yendo, había días que me escapaba de la casa casi a las dos am y entraba por la ventana sin seguro y repetía esa hazaña, pero ya no era lo mismo, no era la misma adrenalina ni nervios así que decidí ir por más, empecé a pensar en "jugar" a la ahorcada en un horario de clases dentro del aula, dónde están todos a metros mío, sabía que tenía que ser una de las aulas vacías o un día que nos retiremos temprano si faltaba algún profe, era cuestión de esperar, total tenía la soga anudada en la mochila siempre. Tuve la oportunidad, un profe falto y todos se retiraron temprano ya que tenían la nota firmada, en ese momento yo salí pero me escondí en el baño hasta que se fueran todos, después me dirigí a mí aula y cerré la puerta, todavía era recreo, por lo que escuchaba a los chicos hablando y riendo cerca de la ventana, estaba nerviosa, seguramente alguien iba a verme y se me armaría un tremendo lío, pensé, asique solo me acerque a la ventana donde se escuchaban las voces y se veían las sombras tras la cortina, solo me límite a cuidadosamente bajarme el jean hasta las rodillas, estaba sin ropa interior así que quedé desnuda de la cintura para abajo, me acerque a la ventana y empecé a apoyarme en la cortina, me temblaba todo el cuerpo de los nervios, esos chicos ahí a lado de la venta y yo dejandome culear por la cortina prácticamente, era lo único que permitia que no me vieran jaja no estaba a metros, estaba centímetros.. en eso sonó el timbre y todos entraron a las aulas, yo seguía con el pantalón a medio bajar y me decidí sacar la soga de la mochila para amarrarla en el ventilador del techo, no sabía si resistiría mí peso pero no me importo, mientras me subía a la mesa para alcanzar a atar la soga escucho pasos en el pasillo, rápidamente me subí el pantalón y mientras estaba guardando la soga entró una portera a limpiar el aula, al verla me quedé en shock, roja, la piel de gallina, nerviosa, no podía hablar con claridad, fue como si se me adormeciera la garganta de los nervios, me preguntó que hacía si ya se habían ido todos, a lo que respondí titubeando que no tenía la nota de retiro firmada, me miró con cara de culo y me dijo que espere, fue a llamar a la preceptora y mientras fue a buscarla aproveché para irme rápido, total la portera no sabía mí nombre ni nada. Me escondi en el baño, fue cuando me di cuenta me subí re mal el pantalón, tenía el botón y cierre abiertos, aunque no se si lo noto porque la chomba me tapaba un poco, le mostré la nota firmada a la portera que estaba en la puerta y dejo que me vaya.
Al otro día volví a intentarlo pero en el turno mañana, fui con la excusa de que iba a biblioteca a terminar una tarea y ya me quedaba hasta el horario de clase, solo tenía que mostrar el Carnet para que me dejaban entrar, pero en vez de ir a la biblioteca fui a las aulas del fondo que ya estaban limpias, por lo que nadie entraría a limpiar, así que entré, cerré la puerta, y podía escuchar la voz de la profe que estaba detrás de la pared en el aula de a lado, está vez pude a anudar la soga y con mucho cuidado baje de la silla, asegurándome de poder apoyarme al menos con la punta de los pies, hice de cuenta que tenía las manos atadas a la espalda y entonces me deje llevar por la adrenalina, el miedo y el placer. Quede colgada, a medida que pasaban los segundos la falta de aire era mayor, comencé a tocarme y trataba de gemir en voz baja, nuevamente la situación era yo, ahorcandome semi desnuda en el aula llena de miedo y adrenalina, mientras escuchaba la voz de la profesora del salón de alado, el piso mojado porque obviamente la situación me estremeció tanto que soltaba fluidos a más no poder.. pero se me escapó un gemido fuerte que era obvio que se escuchó del otro lado, escuché que la profesora dejó de hablar y seguramente vendría al aula para ver qué pasaba, no puedo explicar el terror que sentí, rápidamente subí otra vez a la silla, me saque la soga y como sea me subí el pantalón, escuché la voz de la profe en el pasillo diciendo a sus alumnos que se queden tranquilos que ahora volvía, por suerte no sabía bien de dónde vino el sonido y fue a abrir la puerta de otra aula que también estaba vacia, asi que aproveché para desatar la cuerda hasta que abrió la puerta del aula dónde estába yo ahorcandome, me hice la que entró al aula para llorar porque no entendía una tarea y por suerte era una profe re buena onda que me abrazó y me dijo que si quería después de su clase podía ayudarme, le dije todo que si para sacarmela de encima rápido y para que no sospeche, luego me fui a la biblioteca diciendo que iba a seguir intentando resolver las actividades.
Y así fue como safe de pura suerte una vez más, pensar que después ocuparían esa aula dónde moje el piso y me estaba ahorcando me re calentaba, en biblioteca no había nadie, y el bibliotecario estaba en la suya así que disimuladamente me toque hasta decir basta..
Obviamente seguí buscando nuevas maneras de desafiarme y desfilar los límites.
Gracias por su tiempo y leerme 😊
Aún con 19 años dónde ya era una chica perversa en varios campos y con el morbo de estar al límite quise intentar algo más arriesgado que la vez que estuve encerrada en el tinglado, como conté en mí anterior relato..
Un par de meses después del día que casi me mato en el tinglado del colegio, seguí yendo, había días que me escapaba de la casa casi a las dos am y entraba por la ventana sin seguro y repetía esa hazaña, pero ya no era lo mismo, no era la misma adrenalina ni nervios así que decidí ir por más, empecé a pensar en "jugar" a la ahorcada en un horario de clases dentro del aula, dónde están todos a metros mío, sabía que tenía que ser una de las aulas vacías o un día que nos retiremos temprano si faltaba algún profe, era cuestión de esperar, total tenía la soga anudada en la mochila siempre. Tuve la oportunidad, un profe falto y todos se retiraron temprano ya que tenían la nota firmada, en ese momento yo salí pero me escondí en el baño hasta que se fueran todos, después me dirigí a mí aula y cerré la puerta, todavía era recreo, por lo que escuchaba a los chicos hablando y riendo cerca de la ventana, estaba nerviosa, seguramente alguien iba a verme y se me armaría un tremendo lío, pensé, asique solo me acerque a la ventana donde se escuchaban las voces y se veían las sombras tras la cortina, solo me límite a cuidadosamente bajarme el jean hasta las rodillas, estaba sin ropa interior así que quedé desnuda de la cintura para abajo, me acerque a la ventana y empecé a apoyarme en la cortina, me temblaba todo el cuerpo de los nervios, esos chicos ahí a lado de la venta y yo dejandome culear por la cortina prácticamente, era lo único que permitia que no me vieran jaja no estaba a metros, estaba centímetros.. en eso sonó el timbre y todos entraron a las aulas, yo seguía con el pantalón a medio bajar y me decidí sacar la soga de la mochila para amarrarla en el ventilador del techo, no sabía si resistiría mí peso pero no me importo, mientras me subía a la mesa para alcanzar a atar la soga escucho pasos en el pasillo, rápidamente me subí el pantalón y mientras estaba guardando la soga entró una portera a limpiar el aula, al verla me quedé en shock, roja, la piel de gallina, nerviosa, no podía hablar con claridad, fue como si se me adormeciera la garganta de los nervios, me preguntó que hacía si ya se habían ido todos, a lo que respondí titubeando que no tenía la nota de retiro firmada, me miró con cara de culo y me dijo que espere, fue a llamar a la preceptora y mientras fue a buscarla aproveché para irme rápido, total la portera no sabía mí nombre ni nada. Me escondi en el baño, fue cuando me di cuenta me subí re mal el pantalón, tenía el botón y cierre abiertos, aunque no se si lo noto porque la chomba me tapaba un poco, le mostré la nota firmada a la portera que estaba en la puerta y dejo que me vaya.
Al otro día volví a intentarlo pero en el turno mañana, fui con la excusa de que iba a biblioteca a terminar una tarea y ya me quedaba hasta el horario de clase, solo tenía que mostrar el Carnet para que me dejaban entrar, pero en vez de ir a la biblioteca fui a las aulas del fondo que ya estaban limpias, por lo que nadie entraría a limpiar, así que entré, cerré la puerta, y podía escuchar la voz de la profe que estaba detrás de la pared en el aula de a lado, está vez pude a anudar la soga y con mucho cuidado baje de la silla, asegurándome de poder apoyarme al menos con la punta de los pies, hice de cuenta que tenía las manos atadas a la espalda y entonces me deje llevar por la adrenalina, el miedo y el placer. Quede colgada, a medida que pasaban los segundos la falta de aire era mayor, comencé a tocarme y trataba de gemir en voz baja, nuevamente la situación era yo, ahorcandome semi desnuda en el aula llena de miedo y adrenalina, mientras escuchaba la voz de la profesora del salón de alado, el piso mojado porque obviamente la situación me estremeció tanto que soltaba fluidos a más no poder.. pero se me escapó un gemido fuerte que era obvio que se escuchó del otro lado, escuché que la profesora dejó de hablar y seguramente vendría al aula para ver qué pasaba, no puedo explicar el terror que sentí, rápidamente subí otra vez a la silla, me saque la soga y como sea me subí el pantalón, escuché la voz de la profe en el pasillo diciendo a sus alumnos que se queden tranquilos que ahora volvía, por suerte no sabía bien de dónde vino el sonido y fue a abrir la puerta de otra aula que también estaba vacia, asi que aproveché para desatar la cuerda hasta que abrió la puerta del aula dónde estába yo ahorcandome, me hice la que entró al aula para llorar porque no entendía una tarea y por suerte era una profe re buena onda que me abrazó y me dijo que si quería después de su clase podía ayudarme, le dije todo que si para sacarmela de encima rápido y para que no sospeche, luego me fui a la biblioteca diciendo que iba a seguir intentando resolver las actividades.
Y así fue como safe de pura suerte una vez más, pensar que después ocuparían esa aula dónde moje el piso y me estaba ahorcando me re calentaba, en biblioteca no había nadie, y el bibliotecario estaba en la suya así que disimuladamente me toque hasta decir basta..
Obviamente seguí buscando nuevas maneras de desafiarme y desfilar los límites.
Gracias por su tiempo y leerme 😊
3 comentarios - Jugando en el aula..
me encanta que lo cuentes!