You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Ana María y Lily se bajaron a María Teresa en Mardel

Hace días conté que María Teresa fue cepillada por Ana María, recuerdo vecina de Estela, y su hermana Liliana. La gordota se entrenó bien para todo lo que hizo y viene haciendo este verano 2020. Si hasta cambió y en vez de su propio departamento en Pinamar alquiló en Mar del Plata, cerca de Estela, para darle como conté. Ahora, yo nunca iba a imaginar que también Ana y Lily pararían en Mardel. ¿Para qué? Fácil.

Por si no se imaginaron, les cuento lo que me enteré de María Teresa, que encima no se calla nada. Efectivamente, las locas quisieron seguir la que le hicieron en Buenos Aires. Al punto que averiguaron dónde alquiló Teresa con su marido y reservaron a unas cuadras un piso para las dos. Se hicieron bien las que no sabían nada, Ana llamó a Tere a su celu y se "enteró" (mentira) que estaba en Mardel. Obvio, Ana le dijo de ir a visitarla con Lily, llevarle sandwichitos de miga y tomar el té. Excusa perfecta para cogerla como la primera vez. Qué cuando Tere dijo sí, las hermanas se vistieron finas, se maquillaron y allá fueron bien provistas de drogas, juguetes y demás en sus carteras.

Y encima María Teresa se excitó intuyendo que ambas la deseaban para algo más que té y sandwichitos. Entonces, se vistió ella también fina, con exquisita chaqueta y pollera de cuero negra, medias negras, tacos, mucha pintura en su cara y perfume y lencería fuertes. Por supuesto María Teresa se colocó crema para las manos para estimular más, por si faltaba, a las locas. Que cuando llegaron al coqueto departamento donde Tere para, se enloquecieron con la pinta de la gordota, la besuquearon y tras dejar sus carteras Ana preparó todo y las tres mujeres merendaron té y los de miga bien pegaditas. María Teresa, cuyo marido se había ido al cine, estaba caliente con su cuero, maquillaje y perfume y comía mimada por Ana de un lado y Lily del otro, que le daban sandwichito y piquito en su roja boca con brillito, mientras las otras dos disfrutaban los de miga y empezaban a abrir sus carteras para tomar droga.

María Teresa, que le tomó el gusto a las sustancias fuertes, pidió polvo y mientras comía un sandwich de jamón crudo, queso roquefort y huevo aspiró fuerte. Ana y Lily se dieron duro, las mujeres terminaron de comer y fue Ana quien ordenó y guardó en la heladera los de miga que quedaron. Y enseguidita, la vecinita de Estela se le sentó encima a Teresa, la besuqueó, Tere gustó, se metió Lily, también la besuqueó y por instinto y droga la manoseó. Tere gustó y pidió más, y Ana María fue quien sin dejar de besarle la boca la toqueteó de arriba abajo, incluso en su vagina recubierta por su finísima pollera de cuero, que también Lily acarició en su cola. María Teresa pidió más polvo y las chicas le dieron y se dieron.

Listo. Teresa pidió sexo sin saber que las dos la planeaban coger. Ana la agarró bruta de un brazo, Lily loca del otro y apenas se metieron en su pieza explotaron: María Teresa se quitó su cuero, las hermanas su ropa, Tere les sacó sus corpiños y bombachas y las dos enloquecieron por la gentileza de la gordota, la sujetaron fuerte y tras aplastarla contra un placard la manosearon lindo. Y acto seguido, locas por la mucha droga, Ana y Lily le sacaron el corpiño y la bombacha a María Teresa. Y ahí sí, la ataron, abrieron sus carteras de nuevo, sacaron elementos de plástico y vibradores y la violaron con ganas y sin asco por vagina y cola. María Teresa pegó alaridos y gemidos de absoluto placer mientras las enfurecidas hermanas la cogían, Ana por atrás y Lily por delante, apretujada de tetas, dedos adentro, flujo, chupada de concha de Tere, ella chupó a las mujeres que le ofrecieron su jugo. Filmadas, masturbadas de las tres, más chupadas, la obligaron a ponerse la bombacha, María Teresa se la puso y le dieron con bombacha y todo y se la mojaron bien. Las enloquecidas drogadas hermanas se volvieron a dar y se limpiaron sus vaginas con la pollera de cuero de María Teresa, que luego pasó su lengua por el cuero. Una nutritiva merienda marplatense. Y eso que no hubo leche.

0 comentarios - Ana María y Lily se bajaron a María Teresa en Mardel